Ich Liebe Dich
Recordaba la noche anterior con toda claridad, aun podía escuchar las dulces palabras que el le decía al oído. Todo era perfecto.
Abrió los ojos imaginando que estaría a su lado, pero mayor su sorpresa al verse sola en aquella habitación. Un arrepentimiento y unas enormes ganas de llorar se apoderaron de ella mientras pensaba; como era posible que ella se hubiera entregado por primera vez a alguien que seguramente la olvidaría en minutos.
Se recostó de la cabecera de la cama, cubriendo la desnudez de su cuerpo con una sábana mientras miraba un punto fijo de la habitación y se perdía en sus pensamientos.
El entró sin hacer mucho ruido con una sonrisa en los labios acordándose de todo lo ocurrido entre ellos dos la noche anterior, se quedo parado en la puerta observando el rostro perdido de la chiquilla que estaba en su cama, aquella que prometió no compartir con nadie que no valiera la pena y solo hasta ahora tuvo el coraje de hacerlo ya que esa chiquilla era lo que el más quería.
Ella giró su cara al sentirse
observada y hay se dio cuenta de que no estaba sola, de que el estaba
prácticamente a su lado.
Se levanto de la cama tomado la sábana
a duras penas y acercándose a él hasta quedar pegada a su
cuerpo.
-Creí que te habías ido.
-Yo jamás podría irme
y dejarte sola
-Eso no lo creería
-Pues hazlo porque es
verdad, todo lo que te dije anoche es verdad, Te Quiero y deseo
permanecer a tu lado el resto de mis días.
Ella no dijo nada solo se pegó mas a su cuerpo sintiendo el dulce olor que el desprendía.
El le enrolló la sábana alrededor del cuerpo y la abrazó lo más que pudo acariciándole el cabello y aspirando el olor floral que es desprendía. Le tomo la barbilla e hizo que lo mirara directamente mientras le decía
-Te amo y eso es lo
único que me importa
-Eso lo se Tom... además yo también te
amo
Se miraron expectante para luego fundirse en un dulce beso, se abrazaron nuevamente mientras él le decía en su idioma materno lo mucho que la amaba.
-Sthefania, Ich Liebe Dich
