De la autora de "La perversión del Uzumaki" les traigo este nuevo fic, tan pronto tenga el segundo capítulo lo subo :D
Tanto Naruto, su historia como sus personajes son propiedad de Masashi Kishimoto.
PERVERSIÓN EN KONOHA
— Podrías quitar esa estúpida cara, me das nauseas— Le recrimino Sasuke a Naruto que parecía estar en otro mundo.
El rubio tenía una cara llena de frustración, cansancio, aburrimiento, derrota y pesimismo total, tanto que provocaba que el Uchiha le tuviese lastima.
— Déjame en paz teme, viejo sírveme otro trago— Pidió mientras miraba su vaso de cerveza vacio.
— ¿Seguirás bebiendo? Es extraño verte en ese modo…—
— Cállate, déjame sufrir en silencio—
— Eres un idiota, mira que sufrir por eso, deberías de poner más empeño y esfuerzo—
— Tú lo dices porque tienes tiempo de pasar a lado de Sakura-chan sin que nadie te moleste—
— Ventajas de no tener un puesto importante, además, ¿Por qué no planeas algo especial?, sufres porque quieres— Le dijo con un toque de burla en su voz.
— ¿Crees que no lo he pensado antes? ¡Lo he hecho pero siempre sale un inconveniente! O Boruto hace de las suyas, ya no se qué hacer…— Se quejo con frustración mientras dejaba caer su rostro de lado sobre la mesa —Incluso le pedí a Hima-chan que se llevara a Boruto a la feria por un par de horas y…— Los ojos del rubio se llenaron de lagrimas— Cuando estábamos a punto de "eso" llego gritando a la casa… teme ¿Qué hago? ¡Quiero un momento de privacidad con Hinata-chan!—
El Uchiha tomo el vaso con Sake y se lo llevo a la boca mientras pensaba una respuesta para Naruto. Miro al techo por un segundo para después bajar su vista hacia su amigo.
— ¿Por qué no se van de vacaciones? Tengo entendido que pronto tendrás un par de días libres y…—
— No puedo, en esos días Hinata-chan estará ocupada con lo de la boda de Hanabi, y tendré menos tiempo para verla—
Sasuke negó con la cabeza sintiendo mucha más lastima por su desafortunado amigo, no solo Naruto se sentía fatal sino que su humor había estado cambiante en los últimos días haciendo que su trabajo como el líder de la aldea.
— Mañana le diré a Boruto que venga conmigo para un entrenamiento de dos días, busca una excusa para que tu hija pase la noche con una de sus amigas—
Naruto miro a Sasuke con los ojos llenos de estrellitas y con gran admiración y respeto, tanto que provoco que el Uchiha sintiera un extraño escalofrió por todo su cuerpo.
— ¡GRACIAS TEME! ¡ALGÚN DÍA TE LO RECOMPENSARE!—Le grito mientras trataba de darle un abrazo.
— Me tocas y te mato— Le dijo deteniendo a Naruto con su mano en la cara.
— Ts, sabía que eran ustedes los escandalosos— Dijo Shikamaru llegando junto con Chouji.
— ¿Qué hacen ustedes aquí?—Pregunto Naruto sabiendo que el Nara debería de estar en su casa en una pequeña cena con su familia.
— Ts, es algo problemático— Se quejo dejándose caer en el asiento del pequeño restaurante.
— Un plato grande de ramen grande— Pidió Chouji con alegría, mientras miraba la atmosfera alegre que tenía Naruto a su alrededor.
— Shikamaru, pareces enojado, ¿Qué paso?—
— Temari lo corrió de la casa— Dijo Chouji sin ningún toque de delicadeza.
— ¿Eh? ¿Qué hiciste para que te botara de la casa?—Pregunto Naruto preocupado por su mano derecha.
— Ts, las mujeres son problemáticas, demasiado, y Temari es la más problemática de todas y más cuando mi madre la apoya— Dijo con total fastidio y un poco de enojo.
— ¿Qué hiciste para que Temari se enojara y tu mamá la apoyara?— Pregunto Naruto recalcando los nuevos datos que tenía.
— Ts, no me dejaran en paz hasta que se los diga, todo empezó hace una hora—
Flashback.
— Nee, papá, ¿No crees que deberíamos de ayudar a mamá con la cena?— Pregunto Shikadai haciendo un asombroso movimiento en el tablero de shogi.
— No, sabes que ella no le gusta que la interrumpan cuando está cocinando, siempre ha sido así—
— Pero, últimamente se ve un poco, no sé, algo distraída—
— Si, lo he notado y le pregunte, pero solo me dijo que no es nada— Respondió mientras se rascaba el cuello.
— Papá, deberías de ser un poco más atento con mamá— Pidió el joven Nara mirando a Shikamaru a los ojos — Sabes que es demasiado problemática cuando se enoja—
El líder de los Nara se cruzo de brazos y suspiro por un segundo.
— Veré que hago…—
— ¡Buenas tardes!—Saludo la madre de Shikamaru mientras entraba a la sala.
— ¡Abuela!— Grito Shikadai corriendo a abrazar a la mujer.
— Tenía mucho que no te veía, esa misión a la que fuiste duro mucho tiempo— Se quejo la mujer mientras revolvía el cabello de su nieto.
— Si, teníamos que llevar algunos pergaminos del Raikage…—
— Bueno, no importa, Shikamaru, ¿Dónde está Temari?—
— En la cocina…—
— Y tú ¿Por qué estás aquí de vago? ¡Deberías de ayudar a tu mujer! ¡Eres un desconsiderado!—Lo reprendió mientras se recogía las mangas de su blusa.
El Nara solo rodo los ojos con fastidio, su madre era tan insistente y "metiche" en su vida, por lo que solo se limitaba a ignorarla en varias ocasiones, jamás comprendió por que su padre se había casado con ella, aunque amara a su madre, la mujer siempre hallaba la forma de fastidiarlo.
— Iré a ayudarla, acomoda la mesa— Le ordeno su madre caminando rumbo a la cocina.
Shikadai al ver como su padre era regañado por la abuela volteo rápidamente para tratar de ocultar su evidente risa.
— Deja de burlarte— Le pidió Shikamaru regañándolo con su mirada.
— Te lo dije, esto no hubiera pasado si me hubieras hecho caso—
— Ts, ahora hasta mi hijo me sermonea—
— La cena está lista— Grito Temari desde la cocina.
La cena transcurrió con relativa calma, la madre de Shikamaru contaba sus planes a cerca de sus próximas vacaciones con varias de sus amigas en una ciudad cercana a Suna donde había un complejo de hoteles y casinos muy famosos.
— Por cierto, Shikamaru deberías de llevar a tu familia a ese lugar en las próximas vacaciones que tengas…—
— No, estaré muy ocupado y tengo pensado pedir mis vacaciones para fin de año, Gaara me pidió que lo ayudara con unas cosas y por eso aprovechare mí tiempo para…—
— Deja de pensar en el trabajo por una vez en tu vida, Gaara-san se las podrá arreglar el solo, sé que es tu cuñado pero piensa más en tu familia, ¿Entendiste? Temari-chan necesita de un tiempo con ustedes dos ¡Shikamaru se más consiente con tu familia!—
El Nara apretó su puño contra su regazo para evitar decirle algo a su madre, porque sabía que si replicaba todo se iría al carajo.
— Yoshino-san, Shikamaru tiene muchas responsabilidades, y bueno quiero ir a Suna con mis hermanos, por mi no hay problema— Contesto Temari con una sonrisa algo extraña, era evidente que se estaba sobre esforzando.
— ¿Lo ves madre? No necesitamos ir a un lugar así además, es muy caro y podríamos usar ese dinero para otra cosa…—
— ¡No seas tacaño! Ganas muy bien como ayudante del Hokage, gasta un poco de dinero en tu familia—
— ¿Por qué? No lo necesitamos—
Su madre lo miro con desaprobación para después cruzarse de brazos.
— En serio, ¿Por qué ir a un lugar donde se descansa si podemos hacerlo en cualquier lugar? Además esos lugares tienen piscinas y todas esas cosas, es algo molesto, además Temari a ganado un poco de peso y no creo que quiera mostrarse así en traje de baño…—
Su madre y Temari lo miraron con sorpresa para después tomar una expresión de enojo.
— ¿ESTOY GORDA? ¿ESO DICES?—Grito Temari encolerizada.
— No, yo solo…—
— ¿COMO PUEDES TRATAR A TU ESPOSA ASÍ? ¡TEMARI ES UN MUJER HERMOSA Y NO DEBES HABLAR ASÍ DE ELLA! ¡No puedo creer que seas tan inconsciente!—Le reclamo su madre con total decepción.
— Shikamaru… ¡ERES UN IMBECIL! ¡SIEMPRE TE APOYO EN TODO! Sé que siempre estás ocupado y no me molesto por eso porque es tu trabajo ¡PERO YO TAMBIEN NECESITO UN POCO DE TU CONSIDERACIÓN! ¡No pido mucho, solo un poco de tu tiempo!—Dijo antes de que sus ojos se llenaran de lagrimas.
— ¿Ves? ¡Ya la hiciste llorar!—Le reclamo su madre mirándolo mucho más enojada.
Shikadai recorrió con cuidado su silla y camino a su cuarto sin que nadie lo viera, el pequeño Nara presentía que todo aquello se pondría peor por lo que no quería ser partícipe de todo ese embrollo.
— ¿Tiempo? Si siempre salgo a buena hora y vengo a cenar con ustedes— Reclamo sintiéndose fastidiado y un tanto enojado.
— ¡Eso no es suficiente! Una cosa es la rutina y otra el tener un tiempo especial con la familia, ¿No recuerdas los momentos que tuvimos con tu padre? El siempre buscaba la manera de pasar tiempo con nosotros, Shikamaru me decepcionas—
Para el Nara el simple hecho de recordar a su padre lo ponía mal, por lo que tras escuchar el reclamo de su padre se levanto violentamente de su asiento y puso ambas manos con fuerza sobre la mesa.
— Mi padre fue un gran hombre, lamento no ser como él— Dijo dejando heladas a las dos mujeres — Y no me importa lo que digan ustedes dos, no voy a cambiar mis planes—
El rostro de Temari se descompuso en una mueca de furia, y, tras sentir la mano de su suegra en su hombre se dirigió a Shikamaru.
— ¡Pues si tan poco te importa mi opinión pues largo de la casa!—
— ¡OI Temari no me puedes sacar de mi casa!—
Su madre se levanto de su asiento y cuando estuvo a su lado lo tomo de la oreja derecha con fuerza para arrastrarlo hasta la salida.
— ¡Oi suéltame me lastimas!—
— Largo de aquí idiota, regresa cuando hayas recapacitado— Le grito su madre cerrándole la puerta en la cara—
Fin del Flashback.
— Después de eso me encontré con Chouji—
Sasuke y Naruto se miraron por un segundo antes de reírse de Shikamaru, el Uchiha se tomaba el estomago y trataba de ocultar su rostro, tenía mucho que no reía de esa forma.
— Shikamaru, para ser un genio eres bastante idiota— Le dijo Sasuke tratando de calmar su risa.
— Las mujeres son complicadas y más Temari y mi madre—
— ¿Qué harás? Deberías de pedirle una disculpa a Temari, sino no te perdonara jamás— Le sugirió Naruto pensando en lo mal que la pasaría el Nara.
— Ya se le pasara— Contesto tomando un sorbo del Sake que le había dado el tendero.
— La hermana de Gaara parece ser bastante fuerte y decidida, dudo que te perdone tan fácilmente— Dijo Sasuke estando seguro de lo que hablaba.
— Temari, ha estado actuando rara, pero, demonios, será demasiado difícil hablar con ella en estos momentos—
— ¿Estás seguro? Cuando Karui se pone así yo la llevo a algún sitio para que se distraiga y luego me dice lo que pasa, eso es lo que mi madre me aconsejo, y ha dado muy buenos resultados— Respondió Chouji terminando de comer su gran plato de ramen.
— Teme ¿Tu qué haces cuando Sakura-cha está molesta?—
Sasuke miro al suelo por un segundo y cruzando sus brazos sobre la mesa respondió.
— Espero que se tranquilice, aprendí eso después de que rompió la puerta de nuestra habitación con un puñetazo…— Respondió poniéndose ligeramente pálido.
Naruto sonrió burlándose de Sasuke, el rubio sabía que los golpes de Sakura podrían poner en peligro a alguien tan poderoso como el Uchiha.
— ¿Y tú? ¿Qué haces cuando Hinata se enoja contigo?—Pregunto Sasuke sintiendo un poco de curiosidad.
- ¿Yo? Yo jamás he hecho enojar a Hinata-chan, yo soy un buen esposo— Dijo con Orgullo el Uzumaki — Se cuando se siente triste, cansada, enojada con alguien más, yo la escucho en todo, pero…— Su rostro cambio a uno de tristeza— ¡Quiero un tiempo con ella!—
— O si, el esposo perfecto— Dijo con sarcasmo el Uchiha recordando la vez en que Hinata lo había regañado frente a él por haberse casi desmayado por haberse deshidratado durante una reunión con el consejo de la aldea— Y ya te dije lo que tienes que hacer—
— ¡Gracias Teme!—
— Oi Shikamaru, ¿Dónde te quedaras esta noches?—Pregunto Chouji mientras recibía un nuevo platillo de ramen.
— No lo sé—
— Ven a mi casa, Karui y ChouChou no están—
— Gracias Chouji—
— Es tarde, regreso a casa, Hinata-chan y los niños ya deben de haber regresado de la mansión Hyuga— Dijo Naruto levantándose de su asiento — Gracias Teme, nos vemos luego— Dijo antes de desaparecer del lugar.
…..
— ¿Naruto-kun?—Pregunto Hinata abriendo la puerta de la casa.
— ¿Hinata-chan? ¿Y los niños?—Pregunto Naruto viendo que solo ella había llegado.
— Se quedaron con papá, Hanabi los entreno toda la tarde y para compensar su esfuerzo papá les enseñaría unas técnicas especiales del clan que no necesitan el Byakugan para realizarlos—
— Oh bien… un momento ¿Estaremos solos los dos esta noche?— Pregunto con cara de pervertido en la cara.
Hinata retrocedió un poco hasta rebotar su espalda en la puerta.
— Naruto-kun ¿En que estas pensando?—Pregunto un tanto nerviosa.
— Jee Hinata-chan deberías de preguntar en que es en lo que no pienso— Dijo antes de quitarse la capa de Hokage.
Lentamente se acerco a Hinata y como si de una fiera salvaje se tratase, la rodeo aun más contra la puerta.
— Ah pasado un tiempo, y me debes muchas cosas Hi-na-ta-chan— Dijo haciendo que la Hyuga tuviera un escalofrió por la espalda.
Sin darle tiempo a replicar, Naruto se posesiono de sus labios, para después tomarla de la cintura y levantarla como si de una muñeca fuera.
— Na… Naruto-kun—
— Sh… no dejare que hables— Le susurro al oído llevándola rápidamente a la cama —Hinata-chan aprovechemos el momento— Le propuso regalándole una sonrisa zorruna.
La Hyuga no podía evitar sentirse excitada, ella también necesitaba un tiempo con su esposo y que más buen momento que ese para estar a solas.
— Creo que es buen momento para hacer crecer la familia— Dijo Naruto acomodándola en la cama.
El rubio se quito la camisa quedando con el torso expuesto, Hinata solo pudo tragar duro al ver al gran prospecto que tenía como esposo.
— Hinata-chan, ¿Te gusta lo que ves?—Pregunto sintiéndose orgulloso de cómo lo miraba su esposa.
La Hyuga solo se puso más roja de lo que estaba, amaba a Naruto pero aun no podía evitar sentirse acalorada cada vez que el rubio estaba tan excitado.
Sin perder más tiempo, Hinata de sentó en la cama y se acerco a Naruto.
—Hinata-chan—
El rubio la beso de nuevo mientras desabrochaba lo botones de la blusa de su mujer, separándose ligeramente de ella le quito la prenda mientras que al mismo tiempo hacia lo mismo con los shorts de ella
— No me gusta perder el tiempo— Le dijo contemplando a la Hyuga en solo ropa interior.
— Naruto-kun, yo…—
— Sh, te dije que no te dejaría hablar, es mejor así— Le pidió mientras se quitaba los pantalones — Solo haz lo que te pido—
La ojiperla recorrió los abdominales de su esposo mientras él tocaba de arriba abajo sus piernas, la Hyuga amaba el toque rasposo pero gentil de su esposo, era algo que le encantaba de Naruto.
El rubio besaba con desesperación el cuello de Hinata, su desesperación era evidente y Hinata lo sabía y más cuando sintió el duro miembro del rubio frotarse contra su pierna.
— Hinata-chan ¿Por qué eres capaz de ponerme así? Parece que me hubieras encerrado en un genjutsu— Le dijo antes de tomar su labios.
La Hyuga tomo el miembro de su esposo y con un poco de timidez comenzó a frotarlo con cuidado haciendo que el rubio dejara escapar un ligero gemido de placer.
— Un poco más fuerte— Pidió sintiendo los pequeños dedos de Hinata a través de sus bóxers, pero pensando que él no sería el único en disfrutar hizo a un lado el sostén de Hinata y con rapidez tomo el pezón izquierdo de ella.
— ¡Naruto-kun!—Dio un pequeño grito al sentir como el succionaba con perversión su pecho.
— Te dije que no hablaras— Le dijo Naruto conteniendo su risa.
Ante la petición del rubio, la Hyuga asintió levemente y sin que él se lo esperara metió su mano en el bóxer para tocar directamente su miembro.
— Hinata…— Gruño sintiendo que su miembro se hacía mucho más grande en las manos de su esposa.
La Hyuga comenzó a frotarse las piernas, el cosquilleo en su vagina se hacía cada vez más fuerte, cosa que el rubio noto de inmediato haciendo que su orgullo se inflamara como todo buen hombre.
— Hinata-chan, te daré lo que quieres— Le susurro usando la voz más seductora que pudo—
La ojiperla se mordió el dedo anular mientras Naruto le quitaba las pantis con cuidado, el rubio con la velocidad del rayo se quito sus bóxers arrojándolo lo más lejos que pudo.
— He esperado mucho por esto— Dijo colocándose en la entrada de su esposa.
Hinata abrió más sus piernas esperando que Naruto se adentrara en ella y facilitarle que entrara.
Naruto se inclino un poco hacia ella y tomando un último impulso comenzó a entrar en ella.
— ¡Aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaahg!—Un grito acompañado de una explosión los asusto a los dos, dejando a Naruto tirado en el suelo.
— ¡Mierda!—Grito enfurecido y aun excitado.
….
