Dios como pasa el tiempo, pero el dia llegó… hace más de un par de semanas recibí el permiso de Fervesco para traducir, se había cambiado de mail, y leyó el mio de pura casualidad… jajaja.

Bueno han estado esperando y seguro que pensaban que me estaba hacienda la loca con todo esto, porque ya hasta a mi me parecía muy fuerte la historia, pero no! Acá está la traducción, dios, tremendo trabajo que me he venido a hacer de pura pervertida y …compartidora.

Asi que aqui empieza la tercera misión y más popular de Hermione escrita por Fervesco, y si es la primera misión que se leen, entonces advierto:

Mucho, muchisimo, excesivo sexo, y si no es suficiente tambien tiene Slash. No apto para menores.

Diviertanse.

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Misión: ¡En Problemas!

Estoy tan suma-, extremadamente aburrida! Además estoy frustrada – una combinación no muy agradable, sobre todo para la gente a mi alrededor. ¡Cinco horas! Llevo aquí, atrapada en una desolada, infinitamente pequeña cabaña en medio de Merlin sabe donde, con dos maravillosos hombres provocando y torturandome, sabiendo muy, maldita sea, bien que no hay nada que pueda hacer!

Fue la idea de Harry – ¡Maldito sea! Nos arrastro a todos aquí, Ron, Ginny, Lavander, Sirius, Remus y a mí, como una especie de despedida antes de salir al grande y vasto mundo de la adultez.

Desde un principio solo eramos, Ginny, Ron, Harry y yo, pero Ron protesto rápidamente ante el hecho que Harry tendría a su novia consigo y en tal caso debería venir Lavender. Bien, de alguna manera pude haber manejado aquella situación- tal vez con los cuatro ocupados, hubiese tenido tiempo de leer algo. El plan iba de maravilla hasta que la Sra. Weasley se entero del asunto.

"¡De ninguna manera", protesto, las manos en la cintura," te voy a dejar, Ginny Weasley, pasar una semana con tu enamorado en las montañas sin supervisión alguna!" Las protestas de Ginny llegaron a oídos sordos. Harry estaba debastado, sobre todo después de que Lavender había aceptado venir, y la idea de pasar su tiempo conmigo, mientras que su mejor amigo tiraba con su enamorada, no le parecia ser muy seductora. Sirius, como sea, se ha alzado para resolver el problema – maldito sea.

"Sabes Molly, podría necesitar algo de descanso para mí mismo –¿Talvez podria acompañarlos y supervisar?" Sugirio, lanzandome una disimulada sonrisa.

"Bueno…" Respondió Molly, obviamente no tan segura que Sirius, rey de la madurez, fuese el tipo de adulto que deseaba para supervisar a sus hijos.

Remus, quien había estado en el cuarto todo el tiempo y completamente desinteresado en la conversación hasta la propuesta de Sirius, se alzó. "¿Tal vez te sentirías más calmada si yo también los acompañara?"

Lentamente, una aliviada sonrisa se expandio en el rostro de Molly. "¡Si, si! ¡Seria maravilloso, Remus!"

Ginny refunfuñó, Harry suspiró y Ron intentó protestar, pero Molly se quedo con la idea de que Remus y Sirius nos acompañaran. Por supuesto, yo estaba sumamente contenta con aquella conclusión – después de todo, tendría otra cosa más que mis libros para entretenerme.

Nada de eso. La cabaña no tenia más que tres pequeñisimos cuartitos – dos de los cuales se apoderaron rapidamente Ron y Lavender, y Ginny y Harry. Con un suspiro de derrota, les dije a Remus y a Sirius que cogiesen el último cuarto, y yo dormiría sobre el sofá. No obstante, Remus parecía estar tomando muy en serio su puesto de supervisor y deciso la idea de Harry, separando a los chicos de las chicas. Ninguno de los presentes se mostró muy entusiasmado ante aquello.

"Dioses, ¿Como terminamos con ese aburrido?" Enfurruñó Ron, sumergiendose en el sofá cinco minutos después, mientras que Remus estaba en un cuarto compartiendolo con Sirius, ojala que fuera del alcance del oído.

"Le prometió a tu mama…" Comence a protestar, pero Ron me lanzó una mirada que me hizo cortar mi objeción.

"Solo porque el no consigue a ninguna," contribuyo Lavender.

"¡Seguro nunca ha tenido!" Dijo Ginny.

Quería decir algo… pero tenia que seleccionar cuidadosamente mis palabras. "Estoy segura que el profesor Lupin ha tenida mujeres más que suficientes. Es un hombre bastante atractivo…"

"¡Bueno, anda y jodetelo para que podamos tener un momento solos!" Dijo Harry bruscamente, poniendo su brazo alrededor de Ginny.

Lavender le dio a Harry una mirada mordaz como diciendo `Hermione Granger ni sabe lo que significa la palabra joder´.

"Bueno, bueno," interrumpió Sirius y el resto de los otros se dio la vuelta para mirarlo, obviamente habiendo estado totalmente inconscientes de su presencia en la cocina, oyendo nuestra conversación.

"Como Hermione dijo, Ron y Ginny, Remus le hizo una promesa a su madre y tendrán que aguantarse." Miro sobre su hombro al cuarto donde estaba Remus y bajo la voz. "Estoy seguro que el hecho de que las reglas para irse a dormir no fueran como ustedes se las esperaban, no tiene que significarse que este viaje sea completamente en vano."

Harry se quedo reflexionando acerca de la sugerencia de Sirius, Lavender se rió, Ginny sonrió y Ron solo miró confundido. Pobre Lavender, pensé por un segundo, antes de recordar la mirada que me lanzo unos momentos atrás.

Media hora más tarde, estaba parada en la baranda queriendo escapar de la exasperante cantidad de saliva siendo intercambiada adentro, cuando unos brazos cálidos se enlazaron en mi cintura, suaves labios rozaron mi nuca y las subtibles palabras "Estoy hambriento, `Mione," fueron suspiradas en mi oreja.

"Sirius…" Suspire, recostandome en él, pero el momento fue bellamente arruinado por Lavender chillando, "¡Won, Won! ¡El agua está muy fría para ir a nadar desnudos!"

Sirius se separó de mí, justo cuando la puerta fue abierta por Ron, quien visoriamente luchaba para arrastrar a Lavender por la puerta. Pero que delicado.

Y ahora, aquí estoy, sentada frente al fuego, con la preciosa vista de Lavender y Ron que practicamente tienen sexo de no ser porque aun llevan ropa y de Ginny, quien al parecer se pego al cuello de Harry. Le fruño el seño a Remus y el suspira antes de voltearse a Sirius, buscando una respuesta.

"¡Hora de jugar!" Anuncia Sirius, hacienda que Lavender y Ron se contraigan y los labios de Ginny se despeguen sonoramente del cuello de Harry.

"¿Qué?" , pregunta Ron, molesto por la interrupción.

"Hora de jugar", repite Sirius, y tras lanzarme una mirada descarada, añade, "¡Verdad o castigo!"

"¿Estas bromeando?" Lavender resopla literalmente y pone los ojos en blanco. Oh, tan típico.

"¡Naa! ¿Tienes algo que ocultar, Lavender?" Pregunta Sirius. Pienso que debería admirar la seriedad de su mirada, teniéndola dirigida directamente al lugar donde las manos de Ron desaparecen bajo la falda de Lavender.

"No", dice Lavender arrogante, pero es obvio que la provocación de Sirius rindió frutos – ahora está obligada a demostrarlo.

"Como si jugar verdad o castigo vaya a ser divertido, mientras esté ese aquí", refunfuña Ron y cabezea en dirección a Remus.

"Yo no estaría tan seguro, Ron. Remus siempre se presta a un poco de diverción", lo provoca Sirius, y ahora también se ganó la atención de Ron, a pesar de su rostro escéptico. "Hablando de eso, Remus, ¿Por qué no empiezas tu?"

Remus mira letalmente a Sirius por sobre el borde de su libro. "No me parece, Sirius. Me voy a la cama."

"Sabes bien lo que les pasa a los aguafiestas, Remus…"

Remus mira a su mejor amigo, luego cierra su libro."Bueno."

"¿Qué les pasa a los aguafiestas?" interroga Ginny.

Sirius la ve amenazante. "Si lo quieres averiguar, entonces no juegues."

Ahora Ginny está en el juego, y por ende Harry también.

Y aun estoy yo, claro. Como sea, no tengo porque protestar – los juegos de Sirius siempre son divertidos – Solo espero por Merlin, que no me tenga que acercar a Lavender.

"¿Te apuntas,`Mione?" Pregunta Sirius, sonriendome coquetamente.

"¿Por qué no?" Respondo encogiendome en hombros, y tiro el periódico a un lado.

"Genial", oigo susurrar a Lavender a Ron, y Ron suelta una risita como respuesta.

De pronto Sirius se para, y regresa después de un momento con vasos llenos para todos.

"¿Qué es eso?" pregunta Remus desconfiado.

"¡Algo para animar la noche!" Explica Sirius y añade, "¡Ah, relajate, Remus, son todos mayores de edad!"

Remus aun se muestra desconfiado.

"¡Para calentarnos, vamos, a la garganta!" Anuncia Sirius, y seca su vaso de un golpe.

Lentamente el resto se le une. Primero le doy cuidadosamente un pequeño sorbo al mio, y ya que no descubro ningun olor diferente al del alcohol decido tomarmelo todo.

Error, grave error. Siento el debil, suavemente amargo sabor a nuez del Veritaserum, el cual uno no nota almenos que lo esté esperando.

"Remus, ¿ Verdad o castigo?" pregunta Sirius e ignora mi mirada anonadada. Veritaserum es seriamente controlado por el ministerio… como demonios puede Sirius… da igual… no quiero saberlo!

Remus observa a Sirius, mientras que mide en las posibles consecuencias de su decisión. " Castigo."

"Quitate la camisa."

Casi me rió, cuando veo el intercambio de miradas tras aquella exhortación, los otros cuatro entran en pánico por en lo que esto podría acabar, si es que en la primera ronda ya se empiezan a desnudar.

"Sirius…" dice Lupin en un mal tono de advertencia.

"Remus, no es nada de lo que de todas formas no vayan a ver mañana cuando vayamos a nadar."

Ahora me mira Lupin – casi como si me estuviera preguntando si debería ceder a Sirius. Levanto los hombros. En serio, hasta ahora parece todo bastante inocente. Lentamente se desabotona la camisa, y por más que desearía poder admirar aquella vista, una parte mia está completamente curiosa por la reacción de los demás. Lavender y Ginny estan practicamente babeando, Harry mira molesto a Ginny y Ron parece tener complejos de inferioridad. Logro contenerme la risa… con las justas.

"Tu turno, Remus", dice Sirius y parece estarse divirtiendo.

Remus dice finalmente en tono aburrido, "Ron… ¿Verdad o castigo?"

Los ojos de Ron recorren el pecho de Remus y se estremece. "Verdad."

Remus mira a Sirius antes de preguntar, "¿Cuando es el cumpleaños de Lavender?"

"¿Eso es todo?" pregunta Harry con un suspiro decepcionado.

Pero Ron tiene la boca abierta. Se voltea y mira inseguro a su enamorada. "¿Setiembre?"

"¡El quince de agosto!" La cara de Lavender toma un tono rojo brillante y estoy feliz que a quien mira tan molesta es a Ron y no a mí.

"Okay… tu turno, Ron", añade Sirius divertido.

Ron mira la ronda y se detiene molesto al llegar a Remus.

"Remus", gruñe.

"No vale preguntarle a la misma persona que te acaba de preguntar", recuerda Ginny, la cual mira algo confundida.

"Muy bien." De nuevo recorre con la mirada y se queda mirandome a mí. No me gusta como me mira… "Hemione. ¿Verdad o castigo?"

Dilema… dilema… Si digo verdad, preguntará seguramente por cosas que no quiero contar – por ejemplo, que su amiga, obsesionada por los libros y carente de sexo, no solo ha jugado con el padrino de Harry a `esconder la varita´, sino que tambien con su antiguo profesor, y que Merlin me tenga piedad si es que el nombre de Snape también es involucrado… Con castigo me mantengo en el lado seguro.

"Castigo."

Ron sonríe endemoniadamente. "Besuqueate con Lupin, Hermione."

Harry resopla en su vaso recién llenado, Ginny me mira con lastima y Lavender suelta una carcajada.

"Ron…" advierte Lupin.

"Ron, no la puedes obligar a hacer eso!" protesta Harry.

"¿Por qué no? Dijo castigo…"

Genial – ¡Eso les parece gracioso! Tiempo de demostrarles algo. Me paro, mis piernas tiemblan un poco debido al efecto del alcohol, en el cual Sirius mezclo Veritaserum, entonces me inclino sobre Lupin y le presiono un beso rápido sobre los labios.

Obtengo exactamente la respuesta que esperaba de Ron."Dije besuquear…"

Pero antes de que él pueda terminar la oración, cojo los hombros de Lupin, me siento sobre su regazo y devoro sus labios. Merlin, está bueno. ¿Bueno? Está jodidamente fabuloso! Desde el ataque de Sirius hoy por la tarde en la baranda, me he quedado sentada, sentiendome algo perjudicada, y esto parece disolver algo de mi tensión. Mi lengua se desliza sobre la de Remus y de pronto me devuelve el beso, sus manos se enredan en mis cabellos y me jala mas hacia él. De la nada se sobresaltan sus caderas contra las mías y noto que esto no disuelve en nada la tensión que Remus quizás esté sintiendo. Y como respuesta a mis suposiciones, se ahoga un casi inaudible jadeo en mis labios.

"Oh Merlin…" Oigo a Ginny susurrar. Perfecto – creo que ya se los demostre. Pero ahora debo pensar de que manera salgo de esta situación manteniendo algo de dignidad…

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Bueno, quien no ha jugado ese juego?

Reviews are always welcomed, ojala les haya gustado el comienzo, buenas noches