Hola este es un nuevo Fic.

Ahora quiero dar a entender algunos puntos de esta historia:

Este fic es para los fans del DAIKARI y VEEGATO aunque la verdad es mas de la primera pareja.

Aquí los humanos han perdido conexión con los digimon ya que algunos humanos intentaron usar a los digimon como armas y por esa razón los dioses del digimundo alejaron a los digimon de los humanos solo algunos niños elegidos conservaron a sus digimon.

Los sucesos de la cuarta película no los tome en cuenta para esta historia.

Y por ultimo este fic lo escribe LADYGATOMON.

Han pasado 6 años desde que MaloMyothismon fue derrotado y ahora los niños elegidos crecieron y continuaron con sus vidas.

Tai ahorra esta en los Estados Unidos estudiando Leyes.

Matt estudia para convertirse en astronauta.

Sora estudia para ser diseñadora.

Izzy investiga el digimundo con la ayuda del papa de Sora y el hermano de Joe.

Mimi estudia repostería y es novia de Michael.

Joe estudia medicina.

TK estudia la preparatoria, es jugador del equipo de basquetbol y tiene una novia.

Kari estudia la preparatoria y es parte del equipo de porrista.

Yolei estudia la preparatoria y es novia de Ken.

Cody estudia la secundaria.

Ken estudia la preparatoria y es novio de Yolei.

Davis se fue a Estados Unidos, volvió a Japón entro a estudiar la preparatoria y no ha visto a sus amigos por un tiempo.

—Veemon ¡no, detente! —Dijo Davis, despertando de golpe, con su cuerpo bañado en sudor y con la respiración agitada— solo fue una pesadilla.

—Davis ¿qué ocurre? ¿Te encuentras bien? —le interrogo Veemon preocupado por el estado en que se encontraba su compañero humano.

—Nada, solo fue una pesadilla —dijo Davis intentado calmar a su compañero digimon.

Después de calmarse se preparo para salir a la escuela. Era su primer día y no podía evitar sentir nervios. Pero también sabía que no había nada que temer, solo era un día en la escuela, después de todo. Caminando por la calle. Colgando sobre su cuello los googles que hace ya mucho tiempo le fueron heredados por Tai.

Por su mente pasa las secuelas de su pesadilla, pero eso era lo de menos. Ya había pasado mucho tiempo desde que vio a sus amigos. ¿Cuánto habrían cambiado? ¿sería capaz de reconocerlos a primer vista? Sería incapaz de hacerlo, todos debieron haber cambiado, es lo más normal del mundo pero ¿ellos aun lo recordaran?

Años atrás, una chica a la que el amaba lo rechazó, pero siguió con su vida, ya había pasado de pagina. Ese era un amor de niño y hubo otras chicas a las que él conoció, quienes posteriormente se fueron de sus vidas. Sus ropas ahora tenían un estilo americano y eso causo que su llegada no pasara desapercibido. Quienes lo veían murmuraba, con la mayor discreción posible, que ese chico había era un americano.

Las modas habían cambiado, eso era algo que no tomo en cuenta. Llego a su casillero y arrojo su mochila tan fuete como pudo— ¡Davis no me aplastes! —se quejo el pequeño DemiVeemon, adolorido, debido a que estaba en el interior de la mochila.

—Demiveemon lo siento —se disculpo el castaño— estoy un poco nervioso por esto del primer día ¿sabes?

— ¿Davis eres tú? —dijo una muchacha con el pelo castaño y hasta la cintura. Davis hizo presión sobre la mochila, evitando que su compañero emitiera quejidos— se nota cómo pasa el tiempo ¿no me digas que de verdad olvidaste a la hermana del que te dio esos goggles?

— ¿Kari? Como pasa el tiempo, has cambiado demasiado que no te reconocía —el castaño observo con admiración como ella había cambiado— veo que decidiste dejarte el pelo largo.

—Así es, muchos hemos cambiado. Cody, Ken, Yolei. Todos hemos cambiado —contesto Kari.

—Y TK —nombro el castaño, concluyendo con la lista de los nombres de sus amigos de la infancia— ¿Qué ocurre? —Pregunto el castaño, notando que su amiga expresaba tristeza en su rostro— si quieres platicamos en otro lugar, DemiVeemon, mejor ve a jugar a algún lado.

—Gatomon está en el techo, si quieres ve a verla— dijo la castaña, mientras escuchaban como un timbre anunciaba que las clases estaban por empezar —Joven nos puede hacer el favor de presentarse— dijo el nuevo profesor del castaño.

—Hola a todos me llamo Davis Motomiya —se presento el castaño— aunque mis ropas digan que soy un extranjero, soy de origen Japonés, como muchos de ustedes —fue esa misma apariencia la que muchas chicas murmuraban sobre el castaño Davis. Esa nueva apariencia hacia que sobresaliera entre otros chico, haciéndolo más atractivo para las estudiantes.

—Bien señoritas dejen de hablar— dijo el profesor.

—Parece que ya tienes admiradoras —dijo Kari, en un ligero tono de enojo. Al darse cuenta de ello decidió no ver a su amigo.

Pero a Davis no le importaba nadie más que ella. Los recuerdos del triste rechazo volvieron a él y mejor decidió prestar atención a la clase. Pero por más que lo intentaba, todos sus pensamientos giraban en torno a ella. Hace años hizo de todo para hacerse notar, pero eso era hace años. Pensó que todo eso era un simple amor juvenil, pero seguía viéndola solo a ella ¿es que eso de verdad era amor?

Al empezar el receso Davis salió intentando evitar a Kari ya que la verdad él pensaba que tal si ella no quería hablarle o tal vez ni le importaba que él había vuelto, pero el también quería que esos recuerdos de que ella lo rechazo ya no le afectaran así que fue a buscar a Kari para hablar.

Mientras tanto Kari, estaba bajo un árbol, pensando en el regreso de Davis. Se sentía feliz porque cuando ella lo rechazo, no creía que le afectaría nada, pero cuando Davis se fue, sintió una tristeza que aun no podía superar, pero siguió con su vida. Pero ese día, al volver a ver a Davis, fue como si él la hubiera llenado de felicidad, aunque no sabía porque, además ¿qué tal si la odia porque ella lo rechazo?

¿Por qué una chica tan linda y dulce como tu está sola? —Dijo Davis sorprendido al ver a Kari alejada de los demás. Y entonces Kari le conto que los demás tienen otras cosas que hacer, pero que ella estaba bien.

—Entonces puedo acompañarte— Dijo Davis con pena.

—Claro cuéntame cómo te fue en los Estados Unidos— Dijo Kari emocionada.

—Bueno no paso nada importante, la verdad —dijo Davis.

—En serio ¿te fuiste unos años y no paso nada importante? además ¿Por qué nunca nos llamaste fue porque yo...? —Kari no pudo terminar de hablar cuando Davis le pidió que parada.

—No, claro que no fue por eso. Además, por favor, no volvamos a hablar sobre eso —dijo Davis triste recordando eso.

—Está bien, prometo no volver a tocar el tema otra vez —dijo Kari pero algo en ella se dio cuenta que Davis aun sentía algo por ella. Entonces toco el timbre y tuvieron que entrar a clases

Ya en la clase el profesor dijo —Les voy a dejar un trabajo en equipo.

—Profesor si quiere el nuevo puede estar en equipo conmigo —dijo una muchacha agarrando del brazo a Davis y esto hizo que Kari se pusiera celosa.

—Eres muy amable —dijo Davis sonrojado —y donde vives para ir después de la escuela.

— ¿Qué rápido te relacionas Davis? pero te tengo una mala noticia, tú no decides con quien estar, además Tomoyo suelta su brazo —dijo Kari molesta y haciendo que su compañera soltara a Davis.

— ¿Porque te molestas así, Kamiya? no me digas que ya lo apartaste, si apenas acaba de llegar hoy —dijo Hitomi burlándose de Kari.

—Que claro que no, ella es una amiga de la infancia, pero puedo ir a tu casa —en eso Davis sintió como algo aplastaba su pie, era Kari— digo, podemos ir los tres a un sitio solitario para hacer la tarea —el castaño volvió a sentir otro punzón en el pie— digo, podemos ir a un lugar a solas —una vez más— quiero decir, estoy ocupado. Y esta vez el castaño no sintió dolor alguno sobre su pie.

—Ya lo oíste —dijo Kari mientras agarraba a Davis y le decía al oído— Es que Hitomi no me agrada —mientras la otra chica veía con recelo a la castaña.

—No te preocupes el próximo trabajo lo hago contigo —dijo Davis intentando tranquilizar a Hitomi.

—Gracias eres un chico agradable —dijo Hitomi mientras le daba un beso en el cachete a Davis.

Entonces Kari volvió a patear el pie a Davis —Lo siento es que no vi donde pisaba— dijo Kari sarcásticamente.

—en serio ¿un beso y luego un pisotón en un minuto? —dijo Davis adolorido.

Al salir de la escuela Davis le dijo a Kari —Oye Kari a qué hora voy a tu casa para hacer el trabajo —dijo Davis esperando que Kari no lo volviera a pisar.

—A las 4:00 solo no te vayas a perder —dijo Kari molesta y viendo a Hitomi.

—Está bien, pero ¿Por qué dices que ella es mala? tiene uno labios tiernos —dijo Davis pero lamentablemente eso hizo que Kari se molestara y se fuera.

—Ve a mi casa a las 4:00— dijo Kari molesta.

Eso dejo a Davis pensando por qué le molestaba tanto a Kari que él fuera así con las muchachas, además, ella no tenía ningún derecho a enojarse si ella lo rechazo, pero a pesar de eso, el por dentro estaba muy emocionado de poder estar con ella una tarde entera.

Entonces Davis empezó a caminar cuando encontró a Veemon y le dijo —¿Que paso contigo pudiste hablar con Gatomon?

—No pude, estaba con Patamon —Dijo Veemon muy deprimido.

—descuida amigo, se que hoy tendrás tu oportunidad.

— ¿Por qué estas tan seguro? —pregunto el digimon azul.

—ya lo veras amigo mío, ya lo veras —Y así termino un buen día para el castaño, un buen y adolorido día.

Fin

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