Disclaimer: Todos los personajes le pertenecen a Ron Clements, John Musker y Robert Louis Stevenson, a excepción de mis OC's.
Advertencias: Con respecto a cuestiones de piratería tornaré el fic más oscuro. Muertes, riñas, ron y cosas por el estilo (aunque se vea muy levemente, ya que las progresiones del canon Disney me pone una barrera bastante alta con eso). El fic contará con dos partes, esta que se apega al canon y una continuidad luego de que Jim Hawkins se gradúa y se convierte en el capitán de su propia tripulación. Intentaré seguir los guiones que se planificaron para seguir esta historia en una segunda parte.
¡Suban a bordo de la aventura!
Prefacio
Si cuentos marineros en marineros cantos de aventuras, de fríos, calores y tormentas, y de goletas, islas y hombres abandonados, y bucaneros y oro bajo tierra escondido, y toda la emoción antigua recontada exactamente igual que se hacía antiguamente, pueden causar placer, como yo lo sentí, a los muchachos más discretos de hoy en día:
¡Qué bien! ¡Que continúe! Pero si así no fuera y el diligente joven emoción ya no siente, tras haber olvidado sus anhelos antiguos, por Kingston o el valiente entre bravos Ballantyne o Cooper de los bosques y del mar agitado, ¡qué bien eso también! Mas pueda yo con todos mis piratas la tumba compartir donde yacen todas estas historias y las de sus hazañas.
Prólogo
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Quince hombres en el Cofre del Muerto...
¡Yo-ho, Yo-ho!, y una botella de ron!
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Fueron dos proyectiles disparados, uno para saldar cuentas, otro para no dejar testigos. Dos disparos y un acontecimiento que no pasó inadvertido ante las pequeñas almas que habían quedado huérfanas en esos dos segundos de homicidio. El llanto del pequeño Jack amainó cuando su hermana de ocho años, con sumo terror, lo zarandeó levemente entre sus brazos mientras sus lágrimas corrían a través de su rostro. Timothy, el mayor de trece años, logró encontrar la compuerta de la tercera planta que conectaba el final del subsuelo al patio trasero de la casa. El niño había seguido al pie de la letra las indicaciones de su padre, antes de que fuesen emboscados por los piratas.
No tardaron en salir y toparse con una bruma enaltecida por la luna crepuscular meridional, tan tétrica que parecía haber descendido para darles el mal presagio.
La niña no paró de sollozar, provocando que el bebé se asustara aún más y rompiera a llorar.
—Iliana, ¡ya basta! —ordenó su hermano mayor quien intentaba no ceder ante la desesperación. Aunque, no tardó en ser preso de las lágrimas al empezar a entender lo que estaba sucediendo—. Debemos escapar.
Tomó el brazo de su hermana mientras corrían hacia la espesura de los matorrales vrӓleanos* que llevaban a los campos de cultivo de su padre, los cuales, luego de unas horas, quedaron derruidos por el fuego al igual que su hogar. Los piratas no dejaron nada, más que tres vidas sin norte en un planeta atestado de contrabandistas y cuatreros de mala muerte. Vrӓlan*, con el nombre clave de Tortuga para los bucaneros.
De verse sin hogar, mientras lo que más amaban era consumido por las llamas, siendo presos, al mismo tiempo, de truculentas cuentas piratas que no dejaban pendientes; tres niños en los muelles de Tortuga buscaron al pesquero Petts, un antiguo amigo de su padre, para resguardar al pequeño Jack.
La niña caminaba tras su hermano mayor, mientras mantenía abrazado a su pequeño medio hermano, con la barriga que se agravaba ante la hambruna de no tener nada qué comer.
—Tim, tengo hambre —se quejó ella, viendo que su medio hermano de año y medio había conseguido dormirse entre sus brazos, con una mueca de tristeza en su rostro.
—Llegaremos —afirmó su hermano mayor aún con sus ojos entintados de un rojo profundo al haber llorado tantas horas ante la pérdida de sus padres.
No era el lugar que Iliana esperaba, pero fue suficiente para ellos. El marinero Petts los recibió en su precario "bote-hogar" con un plato de comida para ayudarles a pasar el hambre. No hizo preguntas, le bastó con ver el rostro de aquellos pequeños y entender que lo habían perdido todo. Petts era un marino retirado que había trabajado para el Parlamento siendo parte de la Marina Real en la base de Outpost Perseus*. Ahora, solamente, estaba en busca de sus propias aventuras y vivía de la pesca galáctica que, al menos, eso era lo que le daba trabajo y su ración de comida del día.
Petts era como la vieja chismosa del pueblo. Era longevo, un veterano que ya no se defiende de las riñas o prejuicios de los bucaneros, sino, más bien, huye o camina lejos de ellos. Puede que ya no sea tan ágil y vivaz como antes, pero sabía muchas cosas sobre aquel planeta maltrecho y derruido por la piratería y el contrabandismo. El caldeo del juego sucio que barajó el mismo hecho que acabó con el padre de esos niños, Kilby Hans, siempre fue la vista gorda al momento oportuno del inminente ataque, ya que el hombre nunca tuvo las manos limpias y, aunque intentó hacer una vida tranquila con su esposa e hijos, luego de las malas tretas, los botines hurtados, los contactos con bucaneros de mala muerte, los trabajos de contrabando, entre otros supuestos, el pasado lo encontró y le hizo pagar sus cuentas. Y aunque Hans saldó su deuda, los que pagaron por ella fueron sus hijos.
Petts conoció a Hans cuando ya se había retirado, pero en más de una ocasión lo recordaba colgando de los obenques* o caminando sobre las botavaras*que sostenían las velas, donde se lo podía ver trabajando para piratas de gran prestancia.
Por otro lado, el tiempo hizo de las suyas con Iliana y Timothy, de quienes, luego de unos meses, no se sabría más que la picardía sobre un hurto en los mercaderes, antes de desaparecer. Solamente el clamor de las sirenas estelares encendería la habladuría entre los marinos más supersticiosos, sobre los pequeños niños que se fugaron junto a un grupo de piratas en busca de aventuras, haciéndose a la mar intergaláctica.
El puerto de Tortuga rimbombante de gente se ataviaba de su jolgorio matutino, pestes de ron y mercaderes (de los pocos que aún quedaban) eran acechados por el vandalismo. Ni el más pequeño ser tenía deferencia sobre ello, ni siquiera aquellos dos pillos que se escondían en los embarcaderos. Sus cabecitas se asomaban por debajo de la tela que cubría aquella lancha patrullera, la cual habían usurpado y aprovechado como escondite. Esperaban que la mujer kameliana* del tenderete de las verduras, se distrajera para poder dar con su estrategia de ultraje a algún bien comestible de su mercancía y, así, calmar a la lombriz solitaria que llevaban en el interior de su estómago.
No contaban con que un tunante, mitad máquina mitad ursid*, los observaba desde un callejón decrépito y oscuro, haciendo que su pipa desprendiera alguna que otra chispa, espesa y humeante en la oscuridad de la fachada edilicia derruida y maltrecha por el abandono, escalada con nubes de humedad y un hedor de mil infiernos. Su interés se mostró ineludible cuando reparó la desenvoltura con la que ambos niños trabajaron en equipo para conseguir su alimento del día. Tres purpas importadas desde los campos de Montressor.
Allí fue donde los conoció, en los callejones de Tortuga, jugando con un Morph entusiasmado y encariñado con aquellos dos críos que no volvieron a ver a su medio hermano menor después de enrolarse en la tripulación de Silver "El Ciborg".
Un cuatrero que hasta al mismísimo Nathaniel Flint aterrorizaría.
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El ron y Satanás se llevaron al resto.
¡Yo-ho, Yo-ho! , y una botella de ron.
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Glosario:
➤Vrӓleanos: gentilicio proveniente del sustantivo propio: Vrӓlan.
➤Vrӓlan: es un planeta que había sufrido las consecuencias del conflicto entre los Procyons y el Imperio Terrano. Se había convertido en un lugar difícilmente habitable después del Tratado de Gisane, el cual no aminoró con aquella guerra intergaláctica. La mayoría de sus pobladores habían abandonado el planeta al sentirse amenazados por alguna póstuma guerra que pudiese ponerlos nuevamente en peligro. Asimismo, muchos no contaban con suficientes recursos para sobrevivir.
En tiempos de paz, había sido un rico país fértil y cultivable. Los minerales de su tierra eran sumamente sustentables para el terreno agrícola, boyantes, y atendían a un gran comercio con otros planetas y puertos en donde se transportaba la mercancía que se cosechaba de sus labrantíos. Pero, tras la guerra, muchas de sus tierras quedaron devastadas y casi exánimes ante la radiación que produjeron las armas de las imponentes Heavy Scouts y Minadores, que habían utilizado a dicho planeta como trinchera en espera de ataques Procyons.
Hoy en día, es un lugar perfecto para los ojos de contrabandistas y piratas, quienes ocupan sus puertos y se aprovechan de la humildad de su gente para saquear. Lo llamaron "Tortuga", el hogar de bucaneros, pendencieros, truhanes y bien malparidos piratas.
Por otro lado, las especies que por mucho tiempo dominaron ese planeta fueron cambiando en la medida que se vieron invadidos y obligados a desertarlo. Pero, se trataba de un notable variopinto de adereces bastante notables. Los que más sobresaltaban entre las razas, eran los aquanogs y los tuskrus, los primeros dedicados a la pesca y los segundos encargados de cultivar la tierra quienes, poco a poco, fueron amainando en su dominio como linajes absolutos.
➤Outpost Perseus: Es una base en donde la Marina Real del Imperio Terrano se había asentado, muy cerca de la base Procyons.
➤Obenques: Cabos gruesos dispuestos en abanico que sujetan un mástil a la mesa de guarnición.
➤Botavara: Palo horizontal que, sosteniendo la cangreja por la parte inferior, pivota con ella sobre un mástil.
➤Kamelian: Es una raza de criaturas reptiles con cabezas en forma de pico y ojos de camaleón.
➤Ursid: Es una raza de criaturas tipo osos y alienígena. Silver es una especie de oso humanoide.
N. de autor:
Sí, lo sé, el glosario es un lío, pero realmente planeo que estén informados en lo que va de la historia.
Quisiera advertirle a usted, lector, que el preludio está sacado del libro: "La isla del tesoro" la edición de Reino de Cordelia, al igual que la canción pirata al inicio y al final del prólogo.
Le advierto que esta no solamente será una historia que seguirá el hilo de la película de Disney "El planeta del tesoro", sino que también tendrá sazón del libro en el que fue inspirado, el cual hace muy buenas referencias a cuestiones de estrategia y manejo náutico que pretendo ampliar aquí siguiendo, aún así, el canon intergaláctico, ya que las goletas no cumplen las mismas funciones que una fragata en el espacio.
Por otro lado, con respecto al pequeño resumen del planeta: "Vrӓlan" es inventado por mí, pero lo que deben saber es que dentro del canon (específicamente en el juego de Treasure Planet) hay una guerra entre los Procyons, una raza de mapaches alienígenas, y el Imperio Terrano (imperio gobernado por una monarquía a la cual sirven la capitana Amelia y Jim Hawkins cuando asciende a capitán). Lo único que deben entender de esto, es que a causa de esa guerra y la destrucción se convirtió en un lugar bastante fiero y tétrico para un oficial de armada (pese a que Petts se adaptó bastante bien xD), ya que es como el planeta que los piratas usurparon para sus propios fines (por decirlo de algún modo). Los aquanogs (raza pez/humanoide) y tuskrus (raza tipo rinoceronte/manatí) son una especie anfibia y acuática, por lo tanto, los vi convenientes para ser parte de un planeta que se dedicaba a trabajar la tierra, vivir de la agricultura y la pesca.
No me vengan con críticas de porqué mis OC's son humanos. O sea, ya me parecía bastante ridículo que Jim, Sarah (su mamá) y su padre fueran los únicos seres humanos en todo el Etherium. Eso ni Pinocho se la cree. Por tanto, sí, mis OC's son todos humanos.
La última frase fue inspirada en el libro, ya que Silver "El Largo" fue parte de la tripulación de Nathaniel Flint y este último le tenía mucho respeto. Silver es un personaje bastante bien puesto en el libro y amenazador.
En fin, me excedí con la nota de autor. Esto no debería pasar pero, considero que las notas de autor son importantísimas para hilar cabos y no dejarlos flotando con nombres raros y cosas que no entienden y que en la película no se molestaron en explicar mejor.
¡Espero enormemente que les haya gustado este prólogo! Sé que no es muy largo, pero es esencial para que vayan pensando en la naturaleza de los peques.
¡Un abrazo enorme! No se olviden de dejar un review, me harían muy feliz.
Nessa