NOTA: Los pingüinos de Madagascar y todos sus personajes no me pertenecen. Disfrútenlo ;)
FELIZ AÑO NUEVO! Con motivo del año nuevo, he decidido subir este fanfic. A mi parecer será un poco largo pero tratare de hacerlo lo más entretenido posible. Disfrútenlo tanto como yo lo hago al escribirlo =3
FELIZ AÑO NUEVO A TODOS.
UNA MENCIÓN ESPECIAL A HAYAME-CHAN, QUE ME AYUDO CON EL NOMBRE DE ESTE FANFIC. ESPERO QUE ESTE FIC SEA DE TU AGRADO…
No olviden dejar reviews, acepto comentarios buenos y malos.
CLOSE THE EYES
CAPÍTULO 1. EN UN ABRIR Y CERRAR DE OJOS…
Durante el ataque del Dr. Espiráculo, Skipper cayó en el centro del aparato que había creado el delfín chiflado, una luz lo cegó, sentía que caía al vacio y lo último que escucho fue el grito del pequeño Cabo diciendo su nombre… se estrelló contra el suelo y quedó inconsciente…
Despertó… desconocía el lugar donde se encontraba y el tiempo que había estado inconsciente. Cuando observo su alrededor, se dio cuenta que todo el laboratorio de Espiráculo se hallaba en ruinas, ese hecho le alegro, significaba que ganaron la batalla… pero algo no estaba bien, el lugar estaba destruido, pero la presencia del polvo y telarañas mostraban el paso del tiempo… en ese instante descubrió que estaba completamente solo…
Esperó unos minutos para que el aturdimiento pasase, se levantó e inspeccionó la zona… todo estaba destruido; encontró una salida y salió de ese lugar; el clima era bueno, estaba soleado… por la posición del sol supuso que faltaba poco para el medio día. Un detalle llamó su atención, alrededor existía pasto, hasta donde recordaba la zona de la nueva base de Espiráculo, era árida.
Se sentó sobre él, tratando de recordar exactamente lo sucedido… recordó una luz, la voz de Cabo y el golpe. Le parecía extraño que su equipo no lo hubiese buscado… ahora que lo pensaba no se encontraban en los alrededores "acaso me abandonaron o creen que estoy muerto" pensó, una idea golpeo su mente por un instante "y si ellos murieron durante la batalla", todos esos pensamientos le provocaron un fuerte dolor de cabeza – ¿cuánto tiempo estuve inconsciente? – se preguntó en voz alta, denotando su desesperación…
Después de varias horas pensando al respecto, finalmente decidió volver al zoológico, ya estaba atardeciendo y tal vez lograría encontrar las respuestas que necesitaba… Eran las 2000 horas (8:00 pm) cuando llegó a la entrada del zoológico, después de día y medio de viaje, estaba cansado y deseaba estar en su cama con su amada taza de café con Robalo…
Sin observar sus alrededores, entró trepando la barda, se dirigió a su habitad y saltó la cerca cayendo en la plataforma de concreto, retiro el tazón de comida y entró a la base… En el instante que piso el suelo sonó la alarma de intrusos iluminando la habitación de color rojo – ALERTA, INTRUSO! CAPTURARLO! – Skipper no pudo reaccionar a tiempo, se encontraba débil, no entendía nada de lo que sucedía y el sonido de la alarma aumento su dolor de su cabeza. En un instante, dos pingüinos desconocidos se lanzaron contra él y lo taclearon, dejándolo inmovilizado… la sorpresa fue tal que no pudo defenderse, finalmente le vendaron los ojos…
– Hemos capturado al intruso! El Capitán se pondrá feliz… al parecer es un pingüino – la voz era de un pingüino joven con un acento extraño y a juzgar por su tono estaba emocionado.
– Eso es obvio, tonto! – le contesto otra voz muy parecida, igual de joven y con el mismo acento. "Son franceses" pensó Skipper.
– No me digas tonto, tonto!
– Ven y dímelo en mi cara grandísimo…
– YA BASTA! – Una voz más madura los interrumpió, sin embargo no se trataba de un adulto – excelente trabajo muchachos, pero háganme el favor de dejarse de comportar como un par de polluelos y lleven al prisionero ante el Capitán.
– Sí – contestaron al unísono. Skipper ya estaba molesto, había sido capturado en su propio cuartel por un par de pingüinos desconocidos y para colmo, más jóvenes que él… "en dónde rayos se encuentran mis hombres!" pensaba "acaso perdieron la batalla con espiráculo y ellos murieron o ganaron pero perdieron sus vidas"…
– Oigan ustedes, no saben con quién están tratando, en cuanto me desate, correrán llorando con sus ma… – Un bofetón lo calló, "cómo es posible que me este pasando esto" pensó al sentir el golpe…
– Cállate! No estás en condiciones de hacer preguntas… nosotros las haremos… ¿eres espía de espiráculo?
– Por supuesto que nooo! – Respondió Skipper ofendido por el cuestionamiento – jamás sería un subordinado de ese delfín loco… ¿quiénes son ustedes? – Otro bofetón lo silencio tumbándolo al suelo – TE DIJE QUE NOSOTROS HARÍAMOS LAS PREGUNTAS! – Dijo gritando…
– ¿Qué es lo que sucede? – Una voz con acento británico interrumpió el interrogatorio del otro pingüino.
– SEÑOR! – Dijeron al unísono los tres pingüinos – Sólo interrogábamos al prisionero – contesto el que lo había golpeado, se podía oír el temor en su voz. Skipper supuso que la figura de su Capitán era verdaderamente imponente para causar el temor de sus subordinados, debía tener cuidado, en estos momentos se encontraba en territorio hostil…
– Butch… ¿cuál fue la orden que di? – Pregunto la voz británica de manera tranquila… muy tranquila.
– Ahhh… Capturar al intruso, Señor… – contesto inseguro el muchacho – y lo hicimos… bueno lo hicieron ellos, pero… – la voz de Capitán lo interrumpió.
– Muy bien muchachos… y te ordene que ejecutaras un interrogatorio de Clase C al prisionero?
– No señor – dijo con tristeza – Entonces por qué lo estas interrogando y además golpeando? – La tranquilidad desapareció y la voz sonó ruda y molesta… pudo escuchar un gemido leve por parte del muchacho, Skipper estaba seguro que su Capitán no era tan condescendiente con los errores de sus soldados… – Lo siento Señor, no volverá suceder.
– Eso espero. Butch debes aprender a seguir órdenes y a tomar decisiones en los momentos adecuados – la voz nuevamente era tranquila pero severa, hubo una pausa… Skipper se sentía observado, seguía tumbado en el piso y desconocía que tipo de tortura ejecutarían en él… pero de algo estaba seguro, no lograrían hacerlo hablar…
– Ustedes dos, lleven al prisionero a mi oficina inmediatamente, tengo curiosidad por saber quién es nuestro invitado… – eso último tranquilizó a Skipper – y Butch, lleva a mi oficina algunos caramelos Winky's, bocaditos de sardina y café bien cargado para nuestro invitado y para mí… – y dicho esto se retiro.
– Sí Señor! – volvieron a contestar al unísono, cuestión que ya había fastidiado a Skipper… "esperen un momento… qué pingüino conozco que come dulces Winky's" pensó "no puede ser… acaso será… no, eso es imposible" pero sus pensamientos fueron interrumpidos cuando el par de pingüinos que lo habían amarrado lo cargaron, dirigiéndose a lo que Skipper suponía, era la oficina de su Capitán…
El pingüino adulto había decidido convertirlo en su invitado después de verlo tumbado en el piso, pero no porque fuera un pingüino (no importaba la especie, su experiencia le había enseñado que cualquiera podía ser un enemigo potencial) sino por el parecido que le encontró de aquel pingüino al que admiraba y le tenía un gran cariño… tal vez encontraría las respuestas que por tanto tiempo había buscado…