Fanfic: Lejanamente Unidos.

Autor: STIFF-Soul, stiff.

Pairing: Sasuhina, Narusaku.

Género: Romance, drama, comedia, etc…

Clasificación: mundo alterno, M por futuro lemon.

Summary: Nacieron lejos del otro, sin imaginarse que desde un principio estaban lejanamente unidos…


Cap. 1

¨Miserable Realidad¨

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- Hinata sama, ya es hora de levantarse -

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Se sentía miserablemente en su vida.

¿Desde cuando tenía este sentimiento? ¿Esta sensación? Desde hace mucho tiempo atrás… Solo que ahora sabía con más exactitud lo que sentía…

Miseria.

En aquel lugar lo tenía todo. Desde sirvientes que le hacían compañía cada mañana, vestimentas de los mejores diseñadores, la última generación tecnológica, manjares de los mejores chefs, los mejores lujos, en fin, todo.

Se levantó de aquella cama cubierta de terciopelo azul en donde dormía, pero aún permanecía ahí, sentada. Se dio cuenta que tenía la mirada gacha en sus piernas cubiertas por su sábana y emitió un suspiro instintivamente, sin saber el motivo en aquellos momentos. Sintió cómo el amplio balcón del frente era invadido por una suave brisa que se filtraba de entre sus blancas cortinas traslúcidas, para luego tocar su ya erizada piel.

Las manos de sus sirvientas la levantaron de costumbre conduciéndola hacia el baño, como si necesitase realmente la ayuda de ellas y pareciese que aquella simple acción no pudiese realizar sola, no obstante, lo necesitaba.

-¨ Rápido Hinata sama, el desayuno estará listo en pocos segundos ¨ –escuchó.

Se apresuró a desvestirse, cerrando la puerta de su exclusivo baño con la motivación de que sería unos minutos más de soledad en la tina. Recogió sus cabellos y se adentró al agua, luego sintió como su mente se relajaba ante el cálido contacto del agua y el invasivo pero ligero olor a vainilla.

Se sentía nuevamente miserable, al estar sola y prestar más atención a lo que sentía. Pensó en su vida, en el amor de sus sueños, en el futuro que le esperaba…

Pasaron varios minutos al asimilar nuevamente que nada de lo que le sucedía cambiará. Quedándose perdida en aquellos momentos.

Después de varios minutos perdidos, una vez asimilado el tiempo en que llevaba ahí, se levantó del agua y se apresuró a vestirse. Caminó a paso rápido fuera de su cuarto hacia las escaleras, que la conducirían hacia la planta baja en donde estaban todos en el comedor.

Bajó tratando de minimizar el sonido de sus tacones, inútilmente.

-¨ Llegas tarde Hinata sama, hace mas de 20 minutos en que debería estar aquí ¨ –escuchó, conforme caminaba cerca de la gran mesa rectangular que medía más de 10metros.

-¨ Bu…buenos días ¨– saludó, para luego sentarse en su lugar sin esperar el mismo saludo de parte de los demás presentes que comían en silencio.

Observó su taza de té verde, un líquido de color verde claro y hermoso que llevó a sus labios, degustándolo. En frente suyo estaban dulces magdalenas y croissant, Yogurt natural a un lado, una fresca ensalada de frutas en un bol de cristal y omelet en el otro.

Comenzó a comer las frutas, dándose cuenta de que los demás estaban terminando de comer. Su hermana menor estaba acabándose lo que parecía ser chocolate caliente, ya que tenía graciosas marcas de bigotes de aquel líquido espeso.

Se echó a reír en silencio, sonriendo ante la imagen.

Después de unos minutos su primo Neji y Hanabi se levantaron de la mesa, dieron gracias por la comida y se marcharon, uno hacia la universidad y otra hacia la preparatoria. Dejándola sola en aquella inmensa mesa junto con su padre que sin darse cuenta, la observaba en aquellos momentos.

-¨ Hinata, tengo algo que decirte ¨ –su padre dejó a un lado el periódico que tenía, observándola con sus penetrantes ojos. Se sintió nerviosa, mas se mostraba quieta y atenta a lo que estaría por escuchar.

-¨ Hanabi y Neji ya lo saben, debido a que se los dí a saber una vez que bajaron...¨ - Aquellas palabras le resultaron extrañas, ya que tenía que ver con todos.

-¨ Sabemos lo distraída que eres, tu falta de interés en la compañía y tu pésima actitud ¨ –

Sintió como en el interior algo se encogía, absteniéndose de aire mientras que las ganas de llorar florecían.

-¨ Debido a que sabemos que no quieres heredar la compañía, he pensado en una solución ¨ –observó como su padre entrelazó sus manos y los apoyó sobre la mesa, teniendo una expresión evidente de que pensaba en como decirle sus siguientes palabras, quizás más crueles que las anteriores.

Se sentía tensa, nerviosa, estática… Esperaba una aprobación en que podría forjar su futuro como diseñadora de modas, tal y como se lo había dicho el año pasado, anhelaba en que su ocupado padre no lo hubiese olvidado… Aunque estaba segura de que él jamás olvidaría esas conversaciones.

-¨ Seguirás estudiando hasta culminar lo que te falta de economía… eres libre de querer trabajar o no en mi compañía.¨ –

Se ilusionó, ¿Significaba que podría ser libre de su dominio?

-¨ Te casarás con el hijo menor de mi nuevo socio ¨ -y en aquel momento sintió que se desbordaba- ¨ Son de una compañía de igual influencia que el de nosotros ¨ –y empezó a desplomarse por dentro.

-¨ He acordado en que te cases con él debido a que eres la más indicada.¨ –Continuó- ¨ Hanabi aún es menor, así que ella podrá heredar la compañía en tu lugar y Neji heredará el 50% de la compañía en el futuro.¨ –Se sintió desvastada al saber sus planes, más al pensar en que los demás nombrados se marcharon sin decir nada, como si estuviesen de acuerdo de lo que le esperaba.

-¨ Hoy, espero que llegues temprano de la universidad, tendremos una cena con ellos y así conocerás a tu prometido ¨ –Se levantó de la mesa, mientras que una sirvienta aparecía a su lado silenciosamente para recoger los platos.

-¨ No llegues tarde ¨ –finalizó, mientras observaba como se iba sin decir nada más.

Asimilaba aquellas palabras, aquel futuro que le describió, y entonces no pudo más que quedarse en su asiento. Quería llorar, gritar, morir, más no se atrevía por aquellos sirvientes que estaban presentes… aunque lo hacía más por sí misma. Se sintió peor al saber que nada cambió…

No tenía futuro, ningún futuro que anhelaba en el cual podía esperar...

To be continued…