Disclaimer los personajes no son míos, son de JK Rowlling y de la Warner Bros.

ADVERTENCIAS; esto es un universo alternativo, va haber slash, así que sino te gusta no sigas por favor.

Capítulo primero; El principio

El encapuchado entró con sigilo en la mansión abandonada, desde hacía más de dos años nadie había vuelto a poner un pie en ella decían que estaba maldita, sobretodo desde la muerte en extraña circunstancias del jardinero, el único que no creía en las habladurías del pueblo sobre la mansión Riddle.

La figura envuelta en la capa negra caminaba deprisa por el pasillo, su objetivo era llegar a la habitación principal, allí estaba su objetivo, solamente tenía que subir la escalera de mármol.

- "Alto, ¿quién va?"-

- "Desmaius"- el hombre alto que había salido al encuentro del intruso cayó como un saco de patatas.

- "Te espera"- una mujer desde el piso superior habló a la persona desconocida, que se limitó a subir las escaleras lo más rápido posible, seguía a la mujer de porte distinguido- "Le ha dolido que no vinieras hace un año"- la mujer se volteo a mirarlo, ya que se había detenido - "Venga, no te asustes eres la única persona de este mundo que no dañaría"

- "Déjame dudarlo Narcisa, él ya me ha hecho sufrir más que nadie"-

Se detuvieron ante la puerta de roble, Narcisa la abrió de par en par, la habitación estaba presidida por una enorme cama de matrimonio con dosel, cuatro candelabros se encendieron al mismo tiempo, al lado de la ventana estaba él, Lord Voldemort.

- "Mi querido sobrino"- la voz era siseante y parecía casada- "Quítate esa horrible capucha hace tanto tiempo que no te veo de cerca"- haciendo una señal para que se acercara.

- "Preferiría más no hacerlo"-

- "Remus quiero verte"- eso era una orden.

Lentamente se quitó su capucha, dejo ver su rostro cansado, pero atractivo, estaba muy pálido más de lo normal para un ser vivo, unas enormes ojeras surcaban sus ojos, los cuales estaban enrojecidos, como señal de cansancio o de haber llorado.

- "Lamento verte en tal estado mi adorado sobrino, es por su desaparición, lo lamento por ti"-

- " Por favor no me mientas, tu deseabas verle muerto más que nadie, bueno tal vez Lucius lo deseaba más"- estas palabras las dijo mirando a Narcisa pero la mujer ni se inmutó.

- "Sí es cierto es uno de los que desea su muerte, ocupa el segundo lugar, primero está ese maldito viejo y el tercero el niño que no quiere morirse"-

- "¿Qué quieres decir? Estás hablando en presente"-

- "Mi inteligente sobrino, él no está muerto, está perdido en una dimensión y estoy seguro que pronto tendrás noticias de él" - Lord Voldemort se acercó para acariciar la mejilla pero el joven se apartó del toque, el señor tenebroso apretó sus labios como señal de enfado.

- "He venido a suplicarte que detengas esta locura"-

- "Ya lo intentaste una vez y no conseguiste nada, que hace suponer que en esta ocasión será distinto"-

- "Porque no lucharé como un pobre licántropo sino como uno de ellos, sé que no puedo destruirte, pero puedo hacer que te sientas acorralado, me encargaré de cada uno de tus mortífagos, estarás sólo"

- "No es bueno amenazarme, podría hacerte daño sobrinito"- sujetándole fuertemente de los hombros.

- "Ya no puedes hacerme más daño del que me has hecho"- la mirada dorada del joven se enfrentó a la rojiza del ser más temido en el mundo mágico, sus hombros le dolían ya que nada hacía suponer que el señor tenebroso tenía tanta fuerza a pesar de ese cuerpo de apariencia frágil.

- "Escúchame bien Remus, no va haber tregua, voy a acabar con todos los que se interpongan, tú estarás a mi lado quieras o no. La familia debe estar unida" - Voldemort le soltó - "Siento la brusquedad. Pero no entiendo porque estás con los asesinos de tu madre".

- "Fue un accidente" -

-"El Aveda kedevra no es un accidente" - los ojos de Remus se abrieron desmesuradamente- "Nunca te lo han dicho que murió por eso, qué te han contado. Claro la versión oficial, el accidente de tren, no pequeño, tu madre murió por una maldición lanzada por el mismísimo Dumbledore" .

- "Mientes, estás mintiendo" - el joven temblaba de furia su madre no podía haber muerto a manos de una de las personas que más apreciaba.

- "Nunca mentiría en lo referente a mi prima, ella fue la única persona que me quiso, me mostró algo que nadie más lo había hecho. Pregúntaselo a él o a Alastor, los dos estaban allí, al igual que Cornelius Fudge y por una vez que ese viejo diga la verdad" -

Remus salió de allí lo más rápido que pudo, aquello no podía ser cierto, pero recordaba las palabras de Albus Dumbledore "Un día me odiarás", al mismo tiempo la noticia de que Sirius estaba vivo en algún lugar, le buscaría y le traería de vuelta.

Mientras en la habitación, Lord Voldemort miraba la fotografía mágica de una mujer hermosa que sonreía feliz, con su hijo de pocos días en brazos.

-"Pronto Gabrielle, destruiré el mundo que nos hizo tanto daño, magos y muggles, sólo serán un recuerdo. Una nueva raza de magos será creada, mas fuerte que la anterior, un mundo perfecto que yo gobernaré. "

-"Él no abandonará la Orden del fénix nunca, luchará contra usted"- Narcisa que hasta el momento no había dicho nada le dirigía la palabra a su señor

- "Ya lo sé, es igual que su madre, siempre al lado de los débiles, pero te aseguro que él va a estar a mi lado, sino es por las buenas será por las malas, es hora de reclamarlo que me pertenece. Es hora de llamar a los Desterrados"-

- "La situación es tan desesperada que debemos recurrir a ellos"- Narcisa se acercó a aquel que no debe ser nombrado - "Vladimir no le ayudará sino le da lo que le pide. Mi señor está dispuesto a entregarle"

- "No te preocupes ya me desharé de Vladimir cuando haya conseguido mis objetivos, los Desterrados volverán a su destierro y todo será como está previsto" -

Nota de la autora: esta serie no tiene nada que ver con Secretos, así que no piensen que es la continuación, esto es una idea que tenía en la cabeza hace mucho tiempo. Cualquier comentario será bienvenido.