Capítulo 1.- A medias.

Cloud entró en el bar, parecía cansado, no era de extrañar tras pasar todo el día de un lado a otro con la moto, con mucha tranquilidad dejó la espada sobre una de las mesas, se sentó y se descalzó, luego se volvió hacia Tifa, sus hermosos ojos azules la miraron con ternura, un instante después una sonrisita pícara apareció en sus labios, caminó hacia ella mientras comenzaba a desvestirse, Tifa sonrojada apartó la vista inmediatamente pero la tentación era demasiado fuerte como para no echar pequeñas miraditas a hurtadillas hacia el musculado pecho del rubio que acababa de quedar al descubierto.

Cloud acercó las manos hacia la bragueta de su pantalón y comenzó a desabrocharlo, el corazón de Tifa iba a mil por hora mientras se preguntaba que se proponía Cloud y algo más importante todavía si llevaría calzoncillos. La segunda de sus preguntas quedó contestada cuando el bajó la cremallera. – No definitivamente no lleva ropa interior – pensó la luchadora asombrada.

El espadachín quedó inmóvil ante ella, con el pecho al descubierto y los pantalones tan abiertos que dejaban muy poco a la imaginación.

- Te he echado de menos – la atrapó por la cintura y la atrajo hacia el.

- Espera, espera ¿Qué haces? – comenzó ella a protestar tratando de apartarlo, no porque le molestara su saludo sino porque sinceramente este no era normal para nada. Tenía que averiguar lo que estaba ocurriendo. Lo empujó con fuerza pero no pudo ni moverlo.

Cloud no pareció notar sus intentos de apartarle y se dedicó a mordisquearle el cuello. La chica siguió resistiéndose, aunque con mucha menos contundencia, puso las manos sobre el pecho de Cloud, para tratar de apartarlo de nuevo pero en el ultimo instante se lo pensó mejor, ya tendría tiempo para descubrir lo que le ocurría después, pensó acalora mientras sus manos se posaban sobre el calido pecho masculino.

- Tifa… Tifa… - la llamó y su voz denotaba urgencia – Tifa… despierta… solo es una pesadilla, despierta – la joven notó como la zarandeaban y abrió los ojos.

Estaba recostada apoyada contra el tronco de un roble, Cloud sentado de cuclillas ante ella la miraba fijamente, todos los recuerdos volvieron a su mente en el momento en que despertó, estaba de vigilancia y se había quedado dormida, por tanto aquello tan maravilloso que le había ocurrido… - Era un sueño – pensó molesta no era la primera vez que soñaba algo así, pero normalmente sabía que estaba soñando y esta vez había creído que era real - y precisamente Cloud tenía que interrumpirlo… no, no – pensó calmando su desilusión – eso había sido lo mejor, tenían trabajo que hacer esa noche, no era el mejor momento para soñar, cuando los relevaran por la mañana ya tendría tiempo de dormir.

Se sirvió un café bien cargado del termo que había traído y le ofreció otro a Cloud – la misión era más importante – se dijo bostezando – aunque llevamos ya dos días esperando a que ese supuesto monstruo que habitaba en la zona apareciera. Vigilaban un bosque cercano a Mideel en el cual se suponía que aparecía el monstruo, Vincent y Yuffie montaban guardia a unos kilómetros de ellos, por la mañana serían relevados por un grupo de soldados que exploraría todo el bosque. Tifa trataba de mantenerse despierta pero la mañana anterior no había dormido nada, estar tanto tiempo a solas con Cloud no le estaba haciendo bien, la noche anterior había estado muy tensa, casi ni habían hablado y por la mañana estaba tan nerviosa que no había podido dormir.

- ¡Que vergonzoso! – se reprendió mentalmente – ya no era una niñita como para comportarse de ese modo, desde ese momento dejaría sus sentimientos a un lado, todo iría mejor si lo hacía – se convenció a sí misma y para probar que no se sentía incomoda con la presencia del espadachín apoyó la cabeza contra el hombro de este y se prometió mantenerse despierta como fuera.

Cloud la agarró por la cintura y la subió a su regazo, las manos masculinas bajaron por su cuerpo, acariciando cada una de sus curvas lentamente, el corazón de Tifa comenzó a latir frenéticamente, la lengua el recorrió su oreja, sus dientes mordisquearon el lóbulo, mientras sus manos se detenían sobre los pechos de Tifa, masajeándolos por encima de la ropa. Ella volvió el rostro hacia el.

- Bésame – le pidió Cloud con la voz llena de pasión, su mirada oscurecida de deseo la hizo estremecerse, una mezcla de temor y anhelo la inundaron cuando empezó a acercar sus labios a los del espadachín.

Una música comenzó a sonar, en un primer momento no le prestó atención, pero era insistente y sonaba cada vez más fuerte hasta que la despertó por completo.

La joven solo tardó un segundo en darse cuenta de que había vuelto a dormirse y la volvió a inundar la rabia de lo que aquello significaba, nada había sido real y lo peor de todo, había vuelto a quedarse en la mejor parte.

Miró alrededor, Cloud estaba de pie, al otro lado del claro hablando por teléfono, por lo que supuso que de allí había venido la música que la había despertado. Lanzó una mirada malhumorada hacia el joven, el no tenía la culpa pero ella tenía que mostrar su frustración de algún modo. Cloud colgó el teléfono y se volvió hacia ella.

- Estás muy cansada – afirmó – deberías haberlo dicho antes de venir, así no eres de mucha ayuda – el tono de su voz no podía haber sido más tranquilo pero eso había sonado sospechosamente como un reproche.

- Lo siento – estaba sorprendida por sus palabras aunque debía de reconocer que al dormirse lo había dejado completamente solo, si algo los atacara no solo no estaría preparada sino que encima sería un estorbo.

- No importa, de todos modos esta es la ultima noche de vigilancia – Tifa lo miró sorprendida – Yuffie me ha llamado, ha hablado con Reeve. Cree que la información acerca de la criatura puede estar equivocada, yo estoy de acuerdo, después de varios días de rastreos y de vigilancia constante es muy raro que no hayamos encontrado ningún rastro.

- Pero entonces ¿Qué pasa con los chocobos desaparecidos?, además de los aldeanos que han visto sombras acechándoles cuando pasaban por este lugar.

- Nadie ha sido atacado, por lo que en principio podría deberse a ladrones de chocobos más que a un monstruo.

- Seguramente tengas razón – si se acababa la vigilancia podría respirar en paz de una vez, a demás llevaba dos días sin abrir el bar. – Entonces, si solo es esta noche – pensó bastante aliviada – tengo que mantenerme serena y despierta – se sirvió otra taza de café y comenzó a beber pequeños sorbitos, esta vez no se dormiría.

Cloud la vió dar cabezadas medio dormida y sonrió con tristeza, podía imaginar por algunas palabras que ella había susurrado lo que ella había estado soñando. Lo estaba matando el saber que Tifa estaba teniendo esa clase de sueños, justo delante de el y encima ni siquiera sabía con quien estaba ella soñando – no eso no es malo – se dijo – es mejor no saberlo – la conocía lo suficientemente bien como para saber que solo soñaría algo semejante con un hombre al que amara y no creía que fuera de las que se enamoraban a primera vista, así que podía descartar a la panda de borrachos que solían frecuentar el séptimo cielo y que babeaban descaradamente al verla, el problema venía de que entonces solo quedaban sus amigos y conocidos, descartando a Barret, al que ella quería como a un hermano y a Cid que estaba con Shera y por tanto Tifa jamás se abría fijado en el, quedaban pocos en la lista, Reeve, Vincent… quizá alguno de los turcos, que últimamente se dejaban ver mucho, Cloud sin duda prefería no enterarse.

Se sentó junto a ella, que ya se había quedado completamente dormida. La primera vez que se había dormido esa noche había aprovechado para observarla, no había podido evitarlo, por eso había notado enseguida cuando su sueño la había comenzado a perturbar, inocentemente había creído que ella tenía un mal sueño, pero la mirada molesta que le lanzó al despertar le hizo pensárselo mejor. La segunda vez la tenía apoyada contra el, el rostro de Tifa estaba tan cerca que la tentación de besarla había sido muy fuerte, por eso la había acomodado contra uno de los árboles que tenían tras ellos y se había alejado todo lo posible, pero la escuchó, esos sonidos, esos murmullos, no eran de una pesadilla, a Cloud se le heló la sangre al darse cuenta de que Tifa deseaba a algún idiota afortunado. El no podía evitarlo estaba enfadado, ella lo dejaba solo para soñar con ese imbécil, si estaba cansada no debería haber venido.

Cloud la observó dormir de nuevo, esperando a que ella hiciera algo en sueños, parecía tranquila y el aprovechó para acariciar su cabello – tan suave como la seda – pensó, ella se removió en sueños y Cloud la acomodó contra su costado, pasando un brazo sobre los hombros de Tifa. Jamás se habría atrevido de estar ella despierta, pero ahora estaba tan tranquila, parecía un ángel dulce, pura e inocente. Y de pronto Tifa soltó un poco angelical murmullo.

- Tómame… no puedo…más... – a Cloud le hirvió la sangre de celos, tanto que en un principio no notó que el fuerte sonido que se escuchó a continuación era de un disparo, en cuanto su cerebro lo captó se levantó de inmediato, preocupado por el motivo por el cual Vincent podría haber disparado, tan preocupado estaba que no se acordó de que aún sujetaba a Tifa en sus brazos.

Tifa despertó sobresaltada al escuchar el sonido de un disparo, de algún modo había acabado entre los brazos de su amigo, pero no le dio tiempo a avergonzarse antes de que el espadachín se levantara tan rápidamente que la arrastró con el tirándola al suelo.

Estaba apunto de gritarle cuando se percató de lo que significaba ese disparo y la preocupación por lo que pudiera estar pasando al otro extremo del bosque calmó su furia, apresuradamente siguió a través del bosque a Cloud mientras trataba de llamar a Yuffie, pero su teléfono al parecer estaba desconectado, el tuvo más suerte y comenzó a hablar con Vincent. De improviso Cloud paró de correr y Tifa que corría tras el acabó chocando contra su espalda, el rubio apenas le lanzó una mirada molesta por encima del hombro mientras mantenía la conversación con Vincent y volvía sobre sus pasos con expresión enojada.

- ¿Qué ha pasado? – preguntó preocupada. Cloud puso el manos libres y la voz de Vincent así como los gritos enfurecidos de Yuffie que clamaba venganza contra el pistolero llenaron el silencio.

- No se que me pasó – se excusaba Vincent – llevo dos noches a solas con ella y no está quieta ni un segundo, me vuelve loco…

- ¿Has disparado a Yuffie? – Tifa estaba atónita.

- ¿Qué?, no, claro que no.

- No se atrevería – añadió Yuffie – me ha destrozado el móvil.

- Se supone que tenemos que guardar silencio, ¿Tú haces trabajos de espionaje? – Vincent estaba claramente alterado, Tifa jamás había escuchado al pistolero tan alterado – no paraba de llamar por teléfono.

- Porque el no me hace ni caso – se quejó a gritos para que la escucharan – dame el teléfono quiero hablar con ellos.

Una discusión se escuchó al otro lado de la línea si no estuviera escuchando por ella misma jamás se lo habría creído, estaban peleando por el móvil. Poco después la voz de Yuffie llegó más claramente, signo inequívoco de que había conseguido el teléfono.

- Tifa cámbiamelo, no soporto estar con el ni un minuto más, no me deja hacer nada, todo le molesta… eh, Vincent ¿Qué llevas en el bolsillo una linterna?, sácala me la estas clavando en el muslo.

- ¡Apártate!

- ¡Ay! ¿Por qué narices me has empujado?

- No vuelvas ha subirte sobre mi – dijo furioso.

- ¿Yuffie? – preguntó Tifa preocupada.

- Estoy bien, ese idiota se ha puesto hecho una furia por nada. Yo solo quería ver lo que llevaba guardado, pero esta bien si no quiere prestarme sus cosas que se las quede. Olvida lo que te he pedido antes Tifa, no pienso darle el gustazo de librarse de mí.

Tras esa palabras Yuffie colgó, Tifa miró a Cloud sonrojada, ¿realmente había ocurrido lo que ella pensaba?

Volvieron al lugar asignado para la vigilancia, el espadachín refunfuñaba en voz baja, seguía molesto y Tifa se sentía responsable, no dejaba de dormirse, seguro que el estaba cansado de estar solo.

- Lo siento mucho – se disculpó sinceramente apenada. La expresión de Cloud cambió inmediatamente, dejó de fruncir el ceño y de refunfuñar.

- No has hecho nada malo – empezó a decir, parecía incomodo y desvió la vista de ella – son cosas mías.

- No puedo evitar dormirme cada vez que me relajo, estoy exhausta – se justificó ella - y además empiezo a anhelar esos sueños – pensó.

- No me importa que te duermas, es verdad – añadió al ver su expresión incrédula – pero si no soñaras… - Cloud se sonrojó y dos segundos después el rostro de Tifa estaba tan blanco como la cal – el no puede saber lo que estoy soñando ¿O sí? – se preguntó tan avergonzada que incluso le hubiera gustado que los atacaran en ese momento para evitar esta conversación.

- Yo…

- No, no me hagas caso – dijo el – no he dicho nada – no quería explicaciones de ella, prefería no saber más de lo que ya sabía.

Después de eso, Tifa consiguió mantenerse despierta durante dos horas enteras, habló un poco con el durante ese tiempo, cosas irrelevantes, pero no lo miró, estaba muy avergonzada, al final Cloud harto de su incomodidad le dijo:

- Duérmete Tifa, seguro que estarás más cómoda con el que conmigo.

Ella lo miró sonrojada - ¿Realmente Cloud estaba dándole permiso para soñar con el?

- Pero… - empezó a decir pero el la interrumpió.

- Ambos somos adultos, tienes que dormir y si sueñas… pues sueña. Yo estoy aquí para protegerte si alguien nos atacara mientras duermes.

Tifa avergonzada se dio la vuelta dándole la espalda, apoyó el costado contra un tronco, estaba tan cansada que seguramente se dormiría en cuanto cerrara los ojos, por eso aceptó la oferta de el y antes de dormirse le dijo:

- Trataré de no soñar contigo esta vez.

Cloud abrió la boca de par en par, asombrado, por suerte Tifa no podía verlo desde la posición en la que estaba, porque inmediatamente se habría dado cuenta de su fallo, el sabía lo que estaba soñando ella pero jamás se le habría pasado por la cabeza ser el protagonista de sus sueños.

El espadachín se sentó a unos metros de ella, su cerebro aún estaba atontado por esta información. En su mente solo podía escucharse una y otra vez el mismo pensamiento – Tifa sueña conmigo….Tifa sueña conmigo….

Ella se movió en sueños y Cloud se quedó estático, expectante ante lo que ella estuviera soñando.

No supo como pasó, solo que estaba mirándola dormir y un minuto después la tenía en sus brazos y sus labios rozaban los de ella. Tifa entreabrió los ojos, aún adormilada lo miró con sorpresa.

- ¿Cloud?

- Lo-lo siento, no volverá a ocurrir – se apartó inmediatamente de ella y comenzó a hablar nerviosamente – se que el hecho de que tengas sueños conmigo no me da derecho a besarte, pro-prometo que no volveré ha hacerlo.

- ¿No lo harás? – su voz sonó un poco extraña pero Cloud entendía que ella estuviera afectada por su atrevimiento, al fin y al cabo los sueños eran solo eso, sueños y ese beso había sido real. Asintió con la cabeza y le aseguró que lo más importante para el era su amistad y que no la pondría en peligro por algo así.

- ¡Eres un idiota! – gritó, esa había sido la gota que colmaba el baso, la tensión acumulada durante la noche había sido demasiada y ya le daba igual todo, el monstruo, la vigilancia, la amistad, todo, estaba caliente, frustrada, cansada y muy cabreada. – Me has despertado otra vez – Cloud la miró atónito y no pudo evitar encogerse un poco ante su tono – cuatro veces, he soñado contigo. Cuatro veces me has dejado en la mejor parte del sueño, ¡¿Sabes lo frustrante que es eso?!

- Tifa… solo era un sueño… - dijo tratando de razonar con ella ya que obviamente estaba alterada por el cansancio.

- Muy bien Cloud, pues esta vez no lo es y ahora mismo me vas ha pagar las cuatro veces que me has dejado a medias.

- ¡¿CÓMO?!... … estas bromeando, claro.

Tifa saltó sobre el y los dos cayeron al suelo de golpe. Ella lo besó con toda la pasión que sentía por el, Cloud se sintió mareado pero detuvo el beso.

- No estas pensando con claridad – las manos de la luchadora comenzaron a explorar el cuerpo de Cloud por encima de la ropa, mientras este hablaba rápida y nerviosamente – cuandotecalmescomprenderásqueestoesunerroresobvioque… ¡oh, Dios!... – exclamó con placer cuando Tifa metió las manos por dentro de su camiseta y comenzó a acariciarlo.

Aún con su buena intención de hacerla razonar, el cerebro de Cloud por alguna razón (seguramente debido a que la mayor parte de su sangre ya estaba acumulándose muy lejos del cerebro) no pensó que podía detenerla fácilmente apartándose de ella y la dejó acariciarlo mientras hablaba, cada vez con menos coherencia.

- Nuestra amistad es importante y… no me toques ahí… mis sentimientos están confusos, no quiero equivocarme… sabes lo que siento por Aeris… ¡AY! – protestó cuando Tifa le mordió el hombro como castigo por nombrar a Aeris, aunque enseguida volvió a besarle – si esto sale mal… no puedo perderte a ti también… - Cloud ni siquiera sabía bien que estaba diciendo, pero de algún modo consiguió que Tifa se detuviera, sonrojada y triste.

Así que Cloud se encontró de pronto excitado, medio desnudo y con la mujer a la que amaba al borde de las lagrimas sentada ahorcajadas sobre el.

Lo primero que pensó con un poco de claridad fue que era un completo imbecil. Alargó la mano y acarició la mejilla de Tifa, esta lo abrazó alterada.

- Lo siento, yo no pretendía obligarte, perdóname.

- ¿Obligarme?, Tifa no tienes ni idea de lo mucho que te deseo.

- Entonces, ¿Por qué?

- Mis sentimientos por ti no están claros, te amo, pero temo que no seas tú la mujer a la que más amo, no puedo estar contigo, no sería justo porque también amo a Aeris.

Tifa se apartó un poco de el para poder mirarlo a la cara.

- Si Aeris estuviera aquí… ¿estarías con ella?

- … quizá, no lo sé, con ella era más fácil – a Tifa le dolieron sus palabras pero no dijo nada, ahora que el hablaba por fin acerca de sus sentimientos no sería ella quien lo detuviera. – todo era… normal, me sentía cómodo, cuando estoy contigo me siento inquieto, tenso, si se que me estás mirando, suelo tropezarme, siempre hago alguna estupidez si estás cerca, además siempre he sentido que no soy lo suficientemente bueno para ti.

- Pero sí para Aeris…

- …

- ¿Cuándo ella te miraba no te ponías nervioso? - le planteó confusa.

- No.

- ¿Quieres decir que tu corazón no latía frenéticamente cuando la veías llegar?, ¿Cuando ella te sonreía no sentías que las rodillas se te hacían gelatina, cuando mirabas sus ojos el calor no recorría tu pecho?

- La quería mucho, muchísimo, habría muerto en su lugar sin dudarlo, pero mis sentimientos por ella eran más tranquilos, calmados… lo que has descrito… es más parecido a lo que tú me haces sentir. – Cloud estaba avergonzado, si pudiera cortaría aquella conversación ahora mismo, pero Tifa necesitaba saberlo.

- Y es exactamente lo que yo siento por ti – aseguró conmovida, ya no le importaba que el sintiera algo por Aeris. Ahora estaba segura de que Cloud la amaba a ella. – además me provocas muchos otros sentimientos, preocupación, confusión y furia sobre todo.

El espadachín la miró con sorpresa, Tifa nunca había dado muestras ante el más que de su fortaleza y el siempre había sabido que podía apoyarse en ella de ser necesario.

- Cloud tu me amas – tanteó.

- Sí.

- Y me deseas – afirmó esta vez.

- Si – el se sonrojó intensamente, Tifa estaba sobre el, ya debía conocer la respuesta a esa pregunta.

- Nuestra amistad ya no será la misma después de esto. – le aseguró y Cloud la miró preocupado, ella sonreía con timidez, no parecía molesta en absoluto.

- ¿Eso piensas? – si a ella no le importaba arriesgarse ¿Por qué seguir conteniendo lo que sentía?, ni siquiera sabía como había conseguido aguantarse antes – entonces ¿Ya hemos estropeado nuestra amistad?

- No hay duda – Tifa jamás creyó que perder la amistad de Cloud la podría hacer tan feliz.

- En ese caso… si tú quieres… - propuso tímidamente.

Tifa lo besó en los labios y Cloud respondió al beso con ardor.

- Espera – lo detuvo Tifa preocupada de repente – No volverás ha dejarme a medias ¿Verdad?

- Nunca más – prometió seguro.

Cloud pasó mucho tiempo compensándola por todas y cada una de las veces en que los sueños de la chica habían sido interrumpidos esa noche.

Horas después Tifa estaba profundamente dormida, Cloud completamente despierto y extrañamente en el, relajado y tranquilo, la miraba dormir, su maliciosa mente pensaba despertarla en cuanto ella diera muestras de estar soñando con el.

Un sonido entre los arbustos cercanos lo hizo ponerse alerta, cogió su arma y esperó a que lo que fuese llegara al claro, tenso y a la espera de batalla se sorprendió visiblemente cuando un chocobo enormemente gordo surgió entre los árboles, este lo miró con indiferencia pero soltó un graznido de advertencia antes de seguir su camino, este no estaba solo, tras el un grupo de cuatro chocobos lo siguió , dos dorados, uno verde y otro blanco, extrañamente los mismos colores que los chocobos desaparecidos, estos pasaron ante Cloud sin prestarle ni la más mínima atención y siguieron su camino sin más.

- Entonces ese enorme chocobo era el que había estado robando chocobos… bueno más bien liberándolos ya que al parecer estos lo seguían por voluntad propia – pensó Cloud más tranquilo y volvió junto a Tifa, al final incluso habían completado la misión, pensando en esto recordó que debía informar a Vincent y Reeve sobre lo descubierto pero lo pensó mejor, en lugar de mandarle el mensaje de que había descubierto al culpable, escribió otra cosa, un consejo para Vincent y lo mandó, prefería dejar que Vincent y Yuffie pasaran el resto de la noche a solas, así quizás… - los pensamientos de Cloud fueron interrumpido por un murmullo de Tifa y una sonrisa maliciosa apareció en sus labios mientras se inclinaba hacia ella.

Al otro lado del bosque era Yuffie la que sostenía en sus manos el teléfono de Vincent, desde el "incidente" anterior el pistolero se había mantenido a distancia de ella, subido a un árbol se dedicaba a contemplar el cielo estrellado de pie sobre una rama.

Cuando el móvil sonó Yuffie se dirigió a el.

- Tienes un mensaje – aún estaba molesta con el pero podía ser algo importante.

- Léelo tú.

Yuffie así lo hizo sin embargo el mensaje de Cloud no leyó lo que esperaba:

Dile a Yuffie lo que sientes por ella, quizá podrías empezar por explicarle lo que realmente tenías apretado contra su muslo.


Mi intención es hacer un capítulo más, este sobre Yuffie y Vincent.
Por eso no os priveis de enviarme vuestras criticas, aunque sean muy malas, acepto sugerencias, es más las agradezco mucho.