Secretos de la noche.

Entre las sabanas quedaba siempre su aroma, sus eternas palabras, sus emociones secretas, se habían amado y eso no podía cambiarlo nadie... Era muy tarde, habían vuelto del trabajo con demasiadas cosas encima, se sentían bien juntos, pero era tarde, él se separó de ella con pesar, habían tenido una increíble noche juntos pero era hora de volver a la realidad

-¿Y si te quedas?- dijo ella

-Em...- suspiró con pesar

-Sólo hoy- y lo dijo sinceramente aunque odiaba sonar así de suplicante

-Me matara si no llego-

-Di que fue por trabajo-

-¿No es suficientemente malo y mentiroso lo que estoy haciendo?-

Ella se quedó callada y se dio la vuelta en la cama, él se sintió un idiota, no quería recriminarle las cosas, estaba bien con ella, pero odiaba sentir que engañaba a todo el mundo, incluidos ellos dos hasta en ese momento... Quería quedarse, pero no sabía como manejar la mentira hasta ese punto. Se sintió mal con ella.

-Perdona, no quise decir eso-

-¿No es suficientemente malo que sea la amante de mi jefe casado?-

Él volvió a sentarse en la cama junto a ella, le gustaba sentirla cerca, sentir que se impregnaba de su aroma, le gustaba ser el conocedor de su cuerpo y de los más profundos secretos de su piel, le gustaba que por un rato podían ser inseparables, aunque estuvieran rompiendo tantas reglas, incluyendo las que ellos mismos se habían impuesto al iniciar todo eso casi seis meses atrás.

-¿Cómo pasó esto, Emily?-

-¿Qué?, ¿cómo llegamos a necesitarnos de este modo?, ¿cómo llegamos a involucrar sentimientos?... No sé, Aarón-

Y en realidad no lo sabía, podía sospechar que no podían estar teniendo una aventura, trabajando juntos y siendo amigos sin terminar por involucrarse más de lo necesario, se le ocurría que podía ser porque habían dejado ese acercamiento pendiente diez años atrás, pero no sabía, sólo eran especulaciones. Y él podía intuir que habían empezado todo porque si había sentimientos involucrados entre ellos desde siempre, pero no estaba seguro de nada...

-¿Qué hacemos ahora?-

Ninguno supo la respuesta. Él la beso, ella sabía que era la despedida, que hacía eso antes de irse cada noche, como si prometiera algo, aunque habían establecido que no había promesas para el mañana... él estaba por irse y como le molestaba eso, ojala pudiera quedarse, escogerla y ya no cruzar la puerta de nuevo. Ojala no se quedara todo entre los muchos secretos que escondía la noche.

-Voy a dejarla-

-Sabemos que no va a pasar, sabemos que no es buena idea- dijo ella aun sin voltear a verlo- vete ya, Haley te esta esperando, es tarde-

-Te quiero-

Ella no dijo nada, pero eso no significara que no sintiera lo mismo... Sólo estaba esperando a la noche en que él ya no tuviera que irse.