Capítulo 1
- Más rápido Chris, más rápido!, Nos están dejando atrás - la voz emocionada de Martin sonaba en los campos abiertos en medio de las montañas de Australia, ahogada en medio del retumbar de cientos de cascos galopantes de una manada de Brumbies (caballos) salvajes. Los caballos recorrían las nevadas colinas en busca de pasto fresco para comer y agua que no estuviera congelada de los riachuelos que atravesaban el valle – Ya casi llegamos… al valle…- responde Chris igual de entusiasmado pero con voz agitada.
- Siempre quise montar al lado de los caballos salvajes en Australia! Esto es fantástico, son tan veloces y el sonido que producen sus cascos, el olor de las montañas. Es un sueño hecho realidad Woooooo Hoooo! - Gritaba Martin eufórico. – Es el mejor regalo de cumpleaños que he recibido!
- Apuesto a que sí hermano - Responde Chris – Desde que éramos niños … cuando montábamos los ponys del abuelo… y jugábamos a arrear a las gallinas…pero… apuesto que no imaginaste nunca que … lo harías montando a tu propio … hermano!
Que mejor regalo de cumpleaños que recorrer Australia en compañía de la persona que te ha acompañado durante toda tu vida y que comparten tanto en común, que han pasado por tantas aventuras, rescates, dificultades y risas, estos dos hermanos son sin duda un mismo espíritu y que mejor mancuerna que la de un jinete y un caballo que lo demuestre, y más aún cuando estos hermanos poseen la tecnología para lograrlo.
Los fabulosos inventos de Aviva les han permitido probar y conocer infinidad de habilidades de las más diversas criaturas del todo el mundo y realizar hazañas que la mayoría sólo sueña.
Como sorpresa para Martin, Chris le ha regalado a su hermano el paseo de su vida – Sobre su propia espalda – al usar su CPS y transformar su cuerpo con los poderes de caballo; el peso de su hermano normalmente mayor que él mismo, es casi nada comparado con su actual tamaño y fuerza.
- Gracias Chris, Gracias Chris, Gracias Chris! Wooooo Hoooo Siiiii!
- Cómo vas bro? No estás muy cansado? – Pregunta Martin mientras palmea el costado del cuello de Chris – Un poco – Responde el Brumby Chris – Aguanta un poco más seguramente los caballos van hacia ese río y se detendrán para comer y beber por un buen rato, aprovecharemos para hacer lo mismo y podrás descansar todo lo que quieras – le dice Martin con entusiasmo mientras van colina abajo dejando atrás la nieve y se acercan cada vez más al verde pasto del valle y el agua fresca del río.
Una vez que la manada se ha detenido a reabastecer sus energías, Martin le quita a su hermano todos los arreos de montar y desactiva su CPS, ya que los cascos de caballo no son precisamente hábiles para manipular botones. El menor de los hermanos cae rendido en medio del suave pasto con una sonrisa de satisfacción al recordar la expresión de su hermano, cuando le dio la sorpresa esta mañana al despertarlo con un fuerte relincho en medio de su habitación transformado en caballo y listo para partir hacia los Alpes Australianos.
- Bebe un poco de agua bro, debes estar sediento – comenta Martin mientras le acerca la cantimplora a su hermano aún recostado en el suelo retomando el aliento.
- Gracias, sí, muero de sed y tú que tal Martin? espero que estés grabando el paseo con tu Creature Pod porque seguramente Aviva, Koki y Jimmy querrán verlo – Le dice Chris a su hermano mientras toma la cantimplora y refresca su garganta.
- No había estado tan emocionado desde que conocimos a esos Pandas silvestres en la reserva natural de China – Responde Martin mientras le da un enorme abrazo a su hermano que casi le corta la respiración y le hace toser un poco mientras sigue bebiendo agua.
- Hoy son las montañas, mañana serán las abiertas planicies del Outback, con sus arenas rojas y manadas de canguros y dingos y por supuesto las serpientes, no puedo esperar para ver a las Taipan – Dice Chris emocionado – Pero por ahora será mejor preparar el campamento para descansar, ya está empezando a oscurecer y yo estoy muy cansado, necesito reponer mi fuerza si voy a cargarte mañana de nuevo – dice Chris mientras se estira y bosteza efusivamente al sacar de la mochila un par de porciones de la comida que les preparó Jimmy.
Después de comer y alistándose para dormir Chris voltea a ver a su hermano quien contempla las estrellas con una amplia sonrisa en su rostro – Feliz Cumpleaños Martin – dice mientras da un gran abrazo a su hermano – Gracias Chris, ya te había dicho que este es el mejor regalo que me han dado? – Responde Martin – Sí, como 20 veces – responde Chris y alborota el cabello de su hermano – A dormir ya, mañana debemos aprovechar las primeras horas de luz para partir, Tortuga vendrá por nosotros temprano para llevarnos hacia las tierras del interior y comenzar a recorrer el desierto.