Disclaimer: Fringe no me pertenece.

Peter se parecía a su padre.

En un primer momento no les había encontrado mucho parecido, a parte del hecho de que los dos eran unos genios, pero con el paso del tiempo había empezado a notar pequeñas similitudes. Por ejemplo, que los dos eran zurdos, que tenían los ojos del mismo color, que solían tener gustos parecidos o que cuando se ponían a hablar en términos científicos no había quien los entendiera. Nada de esto molestaba a Olivia, al fin y al cabo eran padre e hijo y tenían que parecerse en algo, solo había un problema.

Peter recitaba puntos de ebullición.

La primera vez no le había extrañado, después de todo los dos estaban borrachos y ella no había parado de reírse desde que cayeron en la cama, pero cuando a la semana siguiente la escena volvió a repetirse Olivia comenzó a preocuparse.

No es que le molestara mucho, sabía que había otra gente que intentaba mantener una conversación, e incluso a veces llegaba a encontrarlo erótico, el problema es que Peter los recitaba todo el tiempo.

Helio: 4,2K

Magnesio: 1363K

Cobalto 3143K

A veces lo hacía entre dientes, a veces mientras susurraba su nombre y otras mientras le daba suaves besos por el cuello, pero lo hacía siempre.

Estroncio: 1654K

Fósforo: 553K

Potasio: 1047K

Recordó cuando Peter se quejaba de que su padre no le dejaba dormir porque cantaba la tabla periódica y se preguntó como es que ninguna chica le había comentado que él hacía algo parecido. A veces pensaba que quizás era solo con ella y no sabía como sentirse. ¿Halagada? ¿Enfadada? Sabía que era su forma de concentrarse, pero no dejaba de preocuparle que inconscientemente estuviera pensando en otra cosa.

Cromo: 2945K

Estaño: 2543K

Mercurio: 629,73K

Muchas veces había pensado en contárselo. No podía ser tan difícil, algo como "Peter, ¿Sabes que recitas puntos de ebullición durante el sexo?" Otras veces pensaba que era una tontería y recurría a los besos para callarlo, cada uno tenía sus manías y había algo en su tono de voz cada vez que los decía que le encantaba.

Sodio: 1157K

Hidrógeno: 20,28K

Hierro: 3023K

El único problema era que se le estaba pegando la costumbre y Charlie ya la había encontrado varias veces recitando puntos de ebullición mientras se concentraba en terminar unos informes.