Como ya sabeis, me gusta mantener siempre algún fic cómico o ligero de sangre. Así mantengo un poco el equilibrio entre el dramatismo de otros de mis fics. Ya que terminé el de ¿Qué le pasó a mi Bulma, mi espíritu me pide empezar con otro, y no se me ocurrió ninguno mejor que este.

Para quien no haya leido Las garras del destino, pueden considerar que este fic está escrito en Universo Alterno. Para los demás, podeis considerarlo como una secuela de ese fic. ¿Qué paso con Chibi Bra?.

En este Universo alterno. Bra y Goten tienen 6 y 7 años respectivamente. Trunks y Gohan son adolescentes que tienen más o menos la misma edad. Bra no sabe pelear, tan sólo sabe volar y reconocer ki, pero tiene bastante fuerza, rapidez, genio y picardía. Goten en cambio si sabe pelear aunque aún no ha aprendido a transformarse en super Saiyajin. Goku vive con su familia.

Para comprender este primer capítulo, os contaré que la pequeña chibi Bra había salvado a su padre en el fic 'Las garras del destino', llevándole a una cámara de regeneración y casi muriendo al hacerlo. Había pasado un més desde entonces.

Por cierto, debo informaros, que me inspiré para hacer este fic en el de mi buena amiga francesa Thriller Girl. Su Fic está en Fanfiction, y se llama 'La Saga de Bra'. El ritual al que hago referencia en este capítulo está recogido en su propio fic, aunque yo he añadido un toque extra. Si quereis leer algo genial, por favor, no dejeis de leer ese fic. Si no sabeis frances, siempre podeis ayudaros con el traductor google.

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LAS AVENTURAS DE DOS SAIYAJINS MUY ESPECIALES.

Capítulo 1: Un regalo, dos colas y la gran idea.

Era una hermosa mañana de Domingo. Vegeta había ordenado a la familia que se arreglasen con sus mejores trajes y los había citado en el jardín a las 12:00 horas. Bulma, Trunks y Bra se miraban un tanto extrañados esperando la llegada del padre de familia.

Vegeta apareció vestido con su traje de combate de gala. Con una lujosa capa y un medallón colgando en en su pecho, tal y como su padre, el Rey Vegeta vistió en vida. Una sonrisa en el rostro del Príncipe se dibujó al observar el desconcierto en las miradas de su familia.

- Os he citado aquí para conmemorar un gran día. - Bulma le miró como si hubiera perdido la razón pero se contuvo en decir nada, total, él parecía tan feliz. - Era costumbre en Vegetasei, que cuando un Saiyajin de alta alcurnia demostrase su valía, fuera reconocido socialmente como guerrero de primera clase. En la ceremonia pública se le hacía entrega de un medallón con el escudo de la familia y se realizaba un ritual de reconocimiento. - Trunks abrió los ojos emocionado.

Vegeta afirmó el paso hasta ellos situandose frente a su hijo, el cual sonrió. Su sonrisa sin embargo, se descoloró observando como su padre se arrodillaba un tanto para colocar el medallón a su hija Bra.

La boca de Trunks se abrió hasta abajo. - No puedo creer que... -

- CALLA. Tu hermana demostró su valentía sobradamente durante la batalla contra Freezer. Cuando tú demuestres la tuya tendrás tu reconocimiento. - Afirmó solemnemente del Príncipe.

- WoW, papá, es... WoW. - La niña estaba completamente alucinada observando el medallón.

- Lo mandé hacer expresamente. - Sonrió Vegeta.

- Ahora, guerrera Bra, hija de la estirpe Real de Vegetasei, responde esta pregunta. -

- ¿Qué es para tí ser saiyajin?. -

Bra pensó unos instantes. - Ser saiyajin... es... es... luchar siempre para ganar. - Contestó la niña obteniendo una sonrisa de su padre y una mirada celosa de su hermano.

- Ahora extiende tu mano. - Bra hizo caso a su padre.

Vegeta sacó un anillo grande con base redondeada, tipo sello, y calentando con su ki la base, imprimió una quemadura en la muñeca derecha de la niña. - Ayyyyyy. - Dos lagrimones se escaparon de sus ojitos azules y Bulma comenzó a decirle de todo.

- SERAS DESGRACIADO... MONO ESTÚPIDO, BRUTO, SAIYAJIN INSESIBLE, EXTRETERRESTRE INMUNDO. ¿CÓMO TE HAS ATREVIDO A HACERLE DAÑO A TU PROPIA HIJA? DEBERÍA DARTE VERGUENZA. - Trunks se alegró por unos instantes de no estar en el pellejo de su hermana, eso de ser quemado en la muñeca con el sello real no debía ser demasiado agradable.

- BAAAAASSTAAAAAAAAAAAAAAA. - Gritó la niña frenando la discusión. - Mamá, es un ritual saiyajin y estoy muy contenta. Es un gran honor papá. Gracias. - Sonrió feliz.

Bulma y Trunks la miraron extrañados, Vegeta sonrió maliciosamente alejándose con su hija. - Papiii, ¿puedo enseñarle a Goten el medallón?. - Cantó la pequeña.

- Asshhh. No se por qué andas a todas horas con el estúpido hijo de ese idiota tercera clase... -

- Por favooooooooooorrrr. - Insistió con los ojitos grandes.

Vegeta la miró algo contrariado y luego accedió con un leve asentimiento de cabeza. Realmente se merecía un poco de condescendencia después de la respuesta que había dado antes.

- Biiieeeeennnnnnnnnn. - La chibi voló hacia la montaña Paoz.

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- GOTEN, GOTEN. - El pequeño estaba en ese momento luchando contra su padre, se distrajo y Goku le dió un golpe que lo envió a volar hasta el suelo.

- Ausshh, hijo, disculpa... - Se lamentó haciendo muecas mientras Bra le miraba con una gota de sudor.

Goten aún tenía un arquito de estrellitas y pajaritos alrededor de su cabeza.

- GOTEN. - Gritó la niña sacándolo de su pequeño mareo.

- Jo, papáaaaa, que daño... -

Goku sonrió un poco con una mueca y su mano detrás. - Si no te hubieras distraido con tu novia no hubiera... -

Bra se sonrojó por completo y enmudeció. Goten también estaba rojo como un tomate. Goku abrió la boca como para decir algo más.

- PAPAAA. - Lloró el niño casi suplicando clemencia para no ser avergonzado más aún.

- Bueno. bueno... - Rió su padre dejando de molestarles y decidiendo que mejor se marchaba. - No os alejeis demasiado. - Bra le siguió con la mirada algo enfurruñada observando su partida.

- No me extraña que mi papá le denomine 'el idiota'. -

- OYEEEEE. - Se quejó Goten.

- Mira lo que tennngoooooo... - Cantó ilusionada la niña mostrando el medallón dorado e ignorando el enojo de su mejor amigo por el comentario hacia su papá.

- ¿Qué es eso?. - Goten siguió el trayecto del medallón de un lado a otro, y antes de terminar hipnotizado sacudió su cabeza.

- Es el medallón de la familia real de Vegetasei. Ahora que ha sido reconocida mi valentía y dado que soy la princesa de todos los saiyajins tendrás que arrodillarte ante mi y prometerme solemnemente lealtad. -

Goten arqueó una ceja. - Si... claro... -

Bra frunció el ceño. - He sido reconocida como una guerrera de primera clase. Tu ni siquiera has tenido reconocimiento alguno, eres sólo el hijo de un 'tercera clase'. - Dijo algo engreida.

- Jajajajajjajaja. - Goten rió por el suelo sujetando su barriga.

Bra abrió la boca hasta el suelo. - ¿Cómo te atreves a reirte?. -

- Tú... ¿una guerrera de primera clase?. Jajajajajajajaa. -

- Goten... - Sus ojos comenzaron a chispear rabiosos.

- Tu no sabes pelear, eres una niñaaa. - Aclaró él sin dejar de reir.

- Ah ¿si?. Y tú, tú... TU ERES UN INSECTO. Yo luché contra Freezer... andá, supera eso. -

- ¿Quien es Freezer?. -

Bra puso sus manos en la cara dándose una palmada. - Es un lagarto malo muy poderoso y yo le dí un puñetazo y lo lancé lejos. - Realmente su mérito como combatiente fue sólo eso, darle un puñetazo, que le pilló de improviso, pero teniendo en cuenta lo terrible que era el lagarto, aquel era un mérito digno de presumir.

- Lo dudo... tú no sabes pelear. -

- Porque mi madre no quiere que pelee, pero si quisiera podría superarte perfectamente. -

- Mentira. -

- Verdad. -

- Mentira. -

- Verdad. -

- MENTIRA. -

- BASTAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA. - Gritó ella exasperada.

- Además, dudo mucho que seas ninguna princesa, seguro que tu padre se inventó todo eso... No creo ni una sola palabra de lo que... -

POOOOMMMMM

Bra lo golpeó lanzándolo contra un árbol. - 'Auusshh, mi mano'. - Se quejó ella mentalmente acercándose a Goten. - ¿Lo ves?. -

- Ehhhhh. - Se quejó rozando su cara.

- ¿Me crees ahora?. -

Goten sonrió. - Oye, podríamos jugar a la peleas... - Dijo emocionado.

Bra pensó un instante. - Mmmmm. Bueno... podríamos intentar... - Goten sin más espera le estampó el puño en la cara lanzándola contra otro árbol.

- GOTEEEEEEEN. - Gritó ella muy enojada. - ¿Cómo te has atrevido a golpearme IDIOTAAAA?. - Dijo con dos lagrimones en sus ojos. - Buaaaaaa. -

- Dijiste que querías que jugasemos a las peleas. -

- Pues ya no quiero. - Dijo ella secándose las lágrimas. Prefiero que juguemos en casa con el juego de hacer pastelitos.

- Ayyyy, SIIIIII. - Contestó emocionado el niño. - Tu los haces y yo me los como. -

Bra frunció el ceño. - Los haremos ambos. Mamá dice que los niños también tienen que saber cocinar. -

- Pues mi mamá dice que las niñas son las que cocinan y cuidan de su esposo y de sus hijos. -

- Eso es porque tu mamá es machista. -

- Mi mamá no es 'chapista'... - Protestó Goten.

Bra le miró como si fuera extraterrestre. - Chapista no... MACHISTA. -

- MAChi... Bra, mi madre se llama Chi-Chi, pensé que ya deberías saberlo. -

- Arrrgggg, GOTEN. - Luego suspiró, no había manera de explicarle cuando se ponía así. - ¿Jugamos al escondite?. -

- Sisiisisiii. - Contestó alegre el niño.

- Vale, cierra los ojos a ver si me encuentras. - Goten comenzó a contar hasta 100 con los ojos cerrados mientras que Bra sigilosamente se escondió en el bosque ocultando su ki por completo.

- 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7, 8, 9, 10... 10... mmm, 11, 12, 13, 14, 15... 16, 17, 18, 19, mmm, veinte... mmmm... 29... veinti... tre... ah si, 30, 31, 32,... -

Bra suspiró y tomó la siguiente nota mental: 'La próxima vez sólo contarían hasta 20'. La niña se quedó dormida esperando a que Goten terminase de contar a 100, hasta que de pronto. - AHHHH TE PILLEEEE. - Gritó Goten haciendo saltar del susto a la Chibi.

- GOTEEEEEENNNN. - Gritó aún encaramada a la rama del árbol al que había saltado por instinto.

- Jajajajaja. Ahora te tocará buscarme a tí. -

- No, ya no quiero jugar más, además... tengo que volver a casa. - Se quejó Bra.

- ¿Por qué no te quedas un rato más?. - Declaró él bajando un poco los ojitos al suelo mientras daba con el pie en el suelo.

Bra se sonrojó un segundo. - Este... no se... -

- Eh, mira eso. - Gritó emocionado él.

- ¿Qué?. -

- Son fresas silvestres. ALLI. -

Bra y Goten corrieron hasta un matorral que tenía frutillas. - An, es verdad. - Susurró Bra emocionada del descubrimiento.

- Vamos a comer algunas. -

- SIIIIII. - Gritó emocionada recogiendo un buen puñado.

- Goku, ¿por qué no vas a ver donde está los niños?. Es casi la hora de almorzar y no vienen aún. -

- Oh, pero Chi-Chiiiii. -

- AQUI NO HAY PEROS QUE VALGAN. VAMOS. - Gritó la mujer exaltadamente.

- Vale, bueno... no te pongas así... - Goku hizo muecas para que se tranquilizase su temperal esposa. - Ya voy a por los niños.

Pero cuando logró localizar su ki, se los encontró tendidos en el suelo. Las supuestas fresas eran unas frutas venenosas y los chiquillos llacían inconscientes. Goku, acostumbrado a sobrevivir desde niño en el bosque, reconoció enseguida lo que habían comido y voló rápidamente con los pequeños hasta el hospital más cercano.

El médico salió a informar a las preocupadas familias. - No se preocupen, los niños han salido de peligro. Le hemos limpiado el estómago y ahora están descansando. Aún no entendemos como pudieron sobrevivir ya que ingirieron una cantidad de frutas suficiente como para matar un elefante... pero hemos repetido los análisis y parece ser que no hay rastro de veneno en sus cuerpos. Su sistema inmunológico lo eliminó por completo. - Vegeta sonrió levemente. - Sólo... - El rostro del doctor se puso algo avergonzado... - Es extrañisimo, jamás había visto una reacción alérgica tan... exótica... -

Las familias pasaron a comprobar ellos mismos lo que el médico definía como una 'reacción alérgica exótica', y luego rieron al percatarse de que se trataba de las colitas saiyajins. Por alguna razón las miradas se desviaron en Vegeta para encontrar la explicación.

- Hmp. - El aludido comprendió y se puso a explicar, realmente adoraba eso de alardear acerca de sus bastos conocimientos, obteniendo la admiración adecuada... - El sistema inmunológico saiyajin está íntimamente relacionado con nuestras colas. Es en ellas donde se almacenan y fabrican gran parte de anticuerpos y sustancias regeneradoras. Es por eso, que para eliminar el veneno de las frutas, su cuerpo se vió obligado a regenerar la cola previamente. - Todos dijeron un 'ahhh' asombrado y luego miraron a los niños dormidos. - Lo mejor es que no se les corten las colas al menos hasta dentro de una semana más. - Añadió obteniendo un asentimiento general.

Al día siguiente, ya en casa.

- ¿Y por qué tu cola es azul y la mía marrón?. - Preguntó Goten observando el accesorio peludo de su amiga.

- Papá dice que eso es porque yo soy híbrida de saiyajin y terrícola. Las colas saiyajins normales eran marrones. -

- ¿Ah si?. -

- Si. -

- Mmmm. Cuéntame más cosas sobre Vegetasei. -

- Si ya te he contado todo lo que me dijo mi papá. Lo último que me contó fue eso, que freezer había destruido el planeta y a todos los saiyajins. -

- Ohhh, que pena... Me hubiera encantado ver como era todo aquello. - Contestó apenado Goten.

- A mi también... - Susurró igualmente apenada Bra.

Los niños permanecieron unos instantes sentados en la barandilla de la habitación con sus manos en la barbilla, hasta que de pronto, los ojitos de la chibi brillaron. - ¿Cómo no lo había pensado antes?. - Gritó emocionada.

Goten al salir de su ensimismamiento perdió el equilibrio y se desplomó de cabeza contra el suelo. - Ayy. -

- Goten... - Bra le cogió del cuello con su rostro excitado. - Vamos a convocar al Dragón mágico y pediremos que restaure Vegetasei y a sus habitantes, que mató Freezer. Y luego le pediremos ir de visita al planeta durante un día. -

- Mooooooolaaaaaaaaaaaaaaaa. -

- Mi mamá cuando era joven, fue detrás de las bolas de Dragón utilizando un radar, hace tiempo lo vi en su laboratorio. -

- Si, mi papá me contó acerca de esas aventuras. -

Ambos chiquillos corrieron emocionados al laboratorio de Bulma para conseguir el radar de las Dragon Ball.

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