Para aclarar: La historia era congruente, una guerra entre el caos del primer nacido, "Monstruo," de múltiples partes de diferentes animales en su cuerpo, desde pegasos, grifos, cabras, etc. El día que mato al prójimo rey del centro, recibiendo posesión al trono y cazándose con la única hembra de su especie, aun estando su amada embarazada, le pusieron nombre antes que naciera, y le tocaran las primeras brisas del sol amanecer; Si es que lo había. Entonces lo llamaron Discord, el heredaría el trono de su padre cuando muriera. Y seria rey del centro. Su padre o mejor mundialmente conocido como "El sin nombre," dicto sus propias reglas hacia los cuatro reinos; Terrestres, Pegasos, Unicornios y los nuevos Alicornios. Pero se negaron a obedecerla, por lo cual se propago la guerra para matar al heredero; Discord. Y cortarle el estómago a su amada para que el hijo se ahogara en su propio charco de sangre y gritando fuertemente la frase del imperio apenas nombrado Equestria por seis yeguas, nobles:

"El caos es Discordia. Y la Discordia, es caos."

Capítulo 1: Malas Noticias.

2 semanas antes del proclamo del recién nacido Discord…

Sr. Comandante Flaming Iron, o mejor conocido como Iron. Leía un libro sostenido en su regazo, mientras olía el fuerte olor del aserrín, recientemente cortado por uno de sus súbditos en la esquina del cuarto. Se lambisqueó el casco y dio vuelta la página. Entonces un guardia entro por el umbral de la puerta como si nada, trotaba en cuatro patas y llevaba puesta una armadura de cuero, con una espada enfundada y bien escondida por su capa de color rojo. Llevaba una carta en su hocico, Iron dejo el libro en la mesa enfrente suyo, y dirigió la mirada hacia el guardia, que apenas y notaba sus enormes ojos color azul claro.

–¿Sucede algo? –pregunto Iron con la frente en alto.

–Nos han llegado cartas, del centro, señor –le entrego la carta y Iron la leyó en voz alta.

–Ajam… estimado sr. Iron, por una concreta vista de su perspectiva, los pegasos y terrestres se reusaron a nuestras reglas, y planean derrumbar el centro en miles de pedasos, intentan proclamar una guerra, dodne participarían miles y morirían otros miles más. para que así coronen a un nuevo rey, yo me eh ganado la corona de forma justa, mate al desgraciado del antiguo rey y me hice con su trono, y vino. Le digo que pare esto cuanto antes, ya eh mandado una carta al líder de los pegasos pero no ha contestado aun. Usted comandante y sublíder de los terrestres les pido, con una cordial sonrisa que paren esta locura, o de lo contrario enviaría a más de mil soldados a sus respectivas aldeas y sin dudarlo les pediría a mis guardias que les rajaran el cuello, y colgaran sus intestinos como adornos de navidad, ya ha detenido guerras antes, ahora deberá acabar con una, la guerra apenas comienza, y si no me envían respuesta para al amanecer, me temeré que los guardias ya estarían en camino a sus aldeas. Con una enorme sonrisa: "El sin nombre."

–Y qué hay de Aural? Esta carta ya tiene más de un día que fue enviada y el sol salió hace ya más de media hora. Quiero que manden soldados a Aural, ahí vive mi hijo y sus abuelos, además es el pueblo más cercano del norte, "El sin nombre," podría mandar fieras vestías, a devorar a mi hijo, rápido ir y manden a todos los hombres que puedan al pueblo, Ya.

El guardia se retiró después de hacer una reverencia absurda. Iron sentían ganas de romper lo que sea a su alrededor, pero se contuvo apretando con furia los dientes y mordiéndose el labio inferior, maldiciendo una y otra vez dentro de su cabeza al rey "Sin nombre," sentía amargura y además odio, no se podía creer que semental o yegua se unía con él, sinceramente nadie estaría en su mando. Iron pensó por un momento y se mantuvo por un instante.

–Señor y si de una vez construí…

–Ni se te ocurra nombrarlos, esos artefactos costarían caro por construir, y no serviría de nada, los unicornios apenas y saben levitar cosas.

–¿Y los alicornios? Nos podrían ayudar, eh leído, libros que mencionan más hechizos que cualquiera.

–Cualquier tonto puede leer un libro –exclamo Iron, con amargura y se dirigió hacia la puerta, luego siguió hablando: Quiero que dupliquen la guardia por las noches, si notan algo que se mueve por los arbustos, no dudéis en matarlo.

–Sí, señor.

–Mientras más rápido acabe esta guerra mejor, mientras tanto quiero que "Robert," siga respirando en cuando lo encuentren, es mi único hijo y posible heredero para ser comandante cuando el cumpla 18. Esperare información, y espero que sea rápida. "El sin nombre ya ha de haber mandado a docenas de lobos por doquier."

El súbdito se colocó enfrente de él, mientras Iron, se sentaba en la silla con la mesa de madera delante de él. El súbdito hizo una reverencia y se retiró del cuarto, sin decir n una sola palabra.

–Señor –casi grito un guardia quitándose el casco, mostrando su sedoso pelo color café, y sudando como el mar.

–¿Qué sucede?

Malas noticias de Aural…

¿Qué pasara con Aural? ¿Su hijo estará vivo? Continuara...