Solo Ebony O'Doney, Ahilyn Gingerwell y Nyra Candlefield son mis personajes. Los demás son propiedad de JK Rowling.
Para los adoradores de la pareja James/Lily que sepan que, en esta ocasión, puede que no se de. Quise probar algo distinto.
^^ Espero que lo disfruten. Intentaré que sea más gracioso conforme vaya avanzando la historia. Es muy probable que vaya subiendo de tono conforme vaya subiendo capitulos.
El cabron numero uno
Tener amigos era una absoluta suerte, más lo era tener mejores amigos. Si ese mejor amigo no era Sirius Black y tu una mujer, por supuesto.
Para Sirius Black valían muchas cosas, lo que no valía era una prima, la querida de un amigo o su mejor amiga. Aunque los problemas le caían a Ebony por doble banda.
_ Sirius Black es un capullo, un egocéntrico, un narcisista, un sin vergüenza, un… un… _despotricaba Sonia Dickens, su compañera de habitación, mientras andaba de un lado a otro con nerviosismo.
Desde luego, aquella mañana pintaba muy mal y eso que apenas acababa de empezar.
Al parecer, al principito Sirius se le había ocurrido cortar con Sonia y darle la siguiente explicación "Me he aburrido de tus tonterías"
Si, una frase la mar de agradable y espectacular donde las haya. Con ese tipo de frases, Ebony podía jurar que tenía más de una enemiga entre las paredes de aquel castillo. Pero, por supuesto, la que ahora es enemiga antes fue su amante, excepto su prima Bellatrix que se pasa la vida haciéndole la puñeta por puro y malvado placer.
_ La palabra que estas buscando es "cabrón" _le ayudo.
_ ¡Exactamente! Esa es la dichosa palabra ¡Es un maldito cabrón! Como lo pille en banda le voy a echar una maldición _dijo Sonia echando chispas por la boca.
Si, una maldición ¿Y que más?
¿Cómo podía una mujer llegar a engañarse tan gratuitamente?
De sobra sabía ella, y casi todo el mundo, lo que iba a acontecer.
Sonia iría en busca de Sirius, le diría cuatro cosas, Sirius aguantaría el pastel pensando en la mona de pascua, la contentaría diciéndole que tenía toda la razón del mundo, luego le soltaría una frase marca Black como "Tengo un club de expedorras, deberías apuntarte" o "Si quieres te echo un polvo para quitarte esa mala leche que tienes", Sonia se iría muy disgustada pero orgullosa, Sirius se olvidaría hasta de su nombre y todos tan contentos.
Merlín, había visto y vivido esa escena tantas veces que ya no le sorprendía acertar de pleno.
_ Lo que tu digas _dijo Ebony mientras salía de la habitación y dejaba a Sonia dentro, despotricando más.
La castaña de pelo largo y liso bajo las escaleras, cruzó la sala común y salió por el retrato de la señora gorda con paso firme. Tenía hambre y pocas ganas de aguantar tonterías.
_ ¿Sales de otra reunión antiSirius? _quiso saber Lily con una sonrisa mientras se acercaba a ella.
_ Si, esto parece no tener fin _dijo Ebony, decaída.
_ Míralo por el lado positivo, ya no hay ninguna chica en tu cuarto con la que Sirius no haya salido _observó la pelirroja.
Ebony le dedico una mirada intensa.
_ ¿Y yo que soy? ¿Un armario? _quiso saber.
Lily le sonrió.
La verdad es que nunca había considerado a Ebony como una chica más. Aunque el cuerpo de la joven estaba bastante desarrollado y era una chica muy guapa y femenina, el echo de que jugara al Quidditch y que se pasara casi todo el tiempo rodeada de chicos hacía que Lily la viera como uno de ellos.
_ No es eso, pero es que tu eres la mejor amiga de Sirius. Los chicos no suelen salir con sus mejores amigas _observó la pelirroja con una sonrisa placida.
Porca miseria.
La querida de James tenía toda la razón del mundo. Ella nunca podría aspirar a ser la novia de Sirius por que era su mejor amiga.
Pues se podía meter ese cargo por donde le cupiera, el muy desgraciado.
Ebony entro en el gran comedor acompañada de Lily cosa que hizo que James botara del asiento como si tuviera un muelle y se acercara notablemente a las chicas.
_ Buenos días, Bony. Oh, buenos días Evans, no te había visto _dijo el castaño, haciéndose el interesante.
_ Claro, Potter, lo que tu digas _dijo la pelirroja mientras se alejaba de ellos.
James se volvió hacia Ebony que tenía una ceja enarcada y lo miraba con los ojos entrecerrados.
_ Sabes que eso no ha dado resultado alguno ¿Verdad? _quiso saber ella.
_ ¿No? _pregunto el chico, visiblemente sorprendido.
_ No, James.
_ Mierda _murmuro el chico mientras ambos se acercaban a los demás.
_ Buenos días, Bony _le sonrió Sirius.
_ Buenos días, Ebony _la saludo Remus.
_ Buenos días, chicos _contestó ella.
Sirius se quedó mirando a Remus con extrañeza.
James y él, bueno, y casi todos los chicos siempre la habían llamado Bony, excepto Remus que siempre la llamaba por su nombre entero.
_ Déjate de remilgos, Rem. La conoces desde que empezamos Hogwarts ¿Por qué sigues llamándola Ebony? _quiso saber el moreno.
_ Por que se llama así. Me gusta llamar a las cosas por su nombre. A demás, tus diminutivos son ridículos, Siri _se burló Remus con ese toque de elegancia que le caracterizaba.
A Sirius le recorrió un escalofrío por la espalda.
_ No vuelvas ha decir eso nunca _susurro.
Ebony sonrió a Remus que le devolvió la sonrisa.
_ ¿Cómo llevas Historia de la magia? _quiso saber apoyando los brazos sobre la mesa.
_ Pues bastante bien ¿Y vosotros? _quiso saber ella.
_ Bueno, yo he estado ocupado pensando en la nueva estrategia a llevar a cabo el próximo partido. Ya verás, vas a flipar _sonrió James mientras botaba un tanto encima de su asiento.
Como un niño pequeño.
_ Yo he estado demasiado ocupado repartiendo amor _sonrió Sirius con malicia.
_ ¿Con eso de "repartiendo amor" te refieres a cortar con Sonia Dickens? _quiso saber ella.
Sirius la miró por el rabillo del ojo.
_ Oh, no jodas, ¿Tienes a otra?
Sirius carraspeo.
_ ¿Otras?
La típica sonrisa canina se hizo presente en su rostro de chico malo. Ebony tubo que luchar contra su fuero interno por no girarse hacia el mendrugo aquel y abofetearlo hasta que perdiera el sentido.
_ Desde luego, no tienes consideración _dijo James con fingida voz de disgusto.
_ ¿Y eso por que? _quiso saber Remus mientras le dedicaba una mirada dudosa a su amigo de gafas.
_ Por que si las tiene de dos en dos, o, incluso, de tres en tres, nos quita el genero a los demás. Si se lleva más de una son menos bolas en el bombo _observó el chico.
Remus cerró los ojos con fuerza, casi como si le hubieran pisado en un pie con mucha saña.
_ Pero ¿A ti no te gustaba Lily? _quiso saber.
_ Y me gusta Lily, pero, si en algún momento me deja de gustar y decido que me gusta otra chica, esa chica odiara a mi mejor amigo a este paso _observó el capitán.
_ Eso es verdad, no hay chica que haya pasado por los brazos de Sirius que no lo odie después _dijo Ebony.
_ Eso no es verdad. Tú has estado entre mis brazos y no me odias _dejo caer el aludido.
_ Pero yo nunca he sido tu novia, Black _observó ella mientras se levantaba de la mesa.
Remus y ella se alejaron de los chicos mientras Black los observaba.
_ Me acabo de dar cuenta de una cosa _dijo Sirius.
_ ¿De que cosa? _quiso saber James.
_ De que no he salido con todas las chicas de Hogwarts _observó el moreno.
_ ¿A no? ¿Quién te falta?
_ Ebony O'Doney _contestó Sirius mientras le dedicaba una mirada significativa a su amigo.
_ ¿Estas bien? _quiso saber Remus.
Los chicos estaban en clase de Pociones con el profesor Slurgon.
Como siempre. Remus y ella se pusieron juntos. Más que nada por que ponerse con Sirius o con James era un autentico desastre, aunque siempre acababan sacando buenas notas, los suertudos.
_ Si, ¿Por qué lo preguntas?
_ Por que estas muy despistada esta mañana _observo el chico de ojos miel.
Ebony se quedo un rato en silencio y Remus esperó a que hiciera la pregunta. Siempre se quedaba así antes de hacer una pregunta que a Remus siempre, pero siempre, pillaba por sorpresa.
No sabía como lo conseguía.
Con los demás el Prefecto podía adelantarse a sus actos y hasta saber lo que pensaban, con Ebony era completamente imposible.
_ Remus ¿Me ves como una chica? _quiso saber ella.
El chico, como siempre que le hacía una de aquellas preguntas, se quedó atónito.
_ ¿Acaso no lo eres? _quiso saber él.
_ Si que lo soy pero ¿Tu me ves como una chica?
_ Claro que te veo como una chica ¿Cómo voy a verte si no? Veo lo que eres y tu eres una chica _observó él.
Ebony asintió con la cabeza.
_ ¿Alguien no te ve como una chica? _quiso saber Remus.
La chica le dedico una mirada por el rabillo del ojo mientras daba vueltas a su caldero con algo de parsimonia.
Ahora si que sabía de quien estaban ablando. Por supuesto, eran muchos años los que había estado con Ebony. Eran amigos desde primaria y sabía de sobra que significaban ese tipo de expresiones aunque no pudiera predecir lo que estaba pensando.
A Ebony, aunque nunca lo había admitido, le gustaba Sirius. Es más, Remus podría decir que estaba colada por él. Pero, claro esta, una cosa era sentir y otra cosa muy distinta era admitirlo.
_ Bueno, Canuto no te ve como una chica por que le es más fácil verte como un amigo que como una amiga ¿Entiendes?
_ Ni papa _contestó Ebony.
No es que a la chica le costara entender las palabras de Remus. Era otra cosa muy distinta.
Ebony tenía un poco de claustrofobia y las mazmorras donde se llevaban a cabo las clases de pociones no eran el mejor sitio para ella. Y el calor que salía de los calderos la ayudaban mucho menos a sobrellevar la situación. Así que su cerebro solía espesarse en estas circunstancias.
_ Me refiero a que a Sirius le es más fácil verte como un chico por que eres su mejor amiga. Si te viera como una chica te perdería el respeto y te trataría como a todas las demás ¿Entiendes ahora?
_ Si, ahora te has explicado de maravilla, Lunático _dijo Ebony, decaída.
Si, no era ningún secreto que Sirius trataba mal a las chicas.
Las utilizaba.
Aunque, claramente, ellas se dejaban utilizar, aunque el chico las engatusaba de una manera asombrosa. Si fuesen más precavidas, saben que es Sirius Black. Si tu eres una chica y se te acerca Sirius Black diciéndote lo hermosa que eres y lo guapa que te pones cuando sonríes ¿Qué crees que quiere? ¿Casarse contigo?
No señor, más bien follarte hasta perder el sentido y, cuando se canse de ti, ir a por la siguiente.
Así de fácil.
Ebony entornó los ojos.
Siempre había sido igual, desde que se conocieron. Siempre la había tratado como uno más de ellos lo que favoreció que ella conociera todos los secretos de los chicos y actuara de tapadera en más de una ocasión, aunque Remus siempre le había pedido que no fuera con ellos cuando era luna llena. Por que Ebony no se transformaba y el Prefecto no quería correr riesgos.
Después de todo, ella también era su mejor amiga.
Aunque en eso estaba equivocado, en más de un sentido.
Por supuesto, Ebony no era tonta, pero nada tonta y tenía más amigos y amigas que no solo ellos.
_ ¿Cómo lo llevas, Reina? _quiso saber Ahilyn mientras se acercaba a ella con paso decidido.
Ahilyn era una de sus mejores amigas, a parte de los chicos que eran sus mejores amigos.
Era la chica más guapa que Ebony hubiera visto nunca. Su cuerpo era alto y bien formado, tenía un pelo rubio dorado que le caía en cascada por detrás de las espalda, formando ondas perfectas, semejando a un campo de avena azotado por el viento. Los ojos de la joven eran de un color verde intenso y era extremadamente atrctiva. Si hubiera que elegir una chica que hiciera la competencia a Sirius sin duda sería ella.
Por suerte, aunque nunca había sabido por que, Canuto nunca le había pedido salir a ella.
_ Pues lo podía llevar mejor, ¿Dónde habéis estado esta mañana? _quiso saber.
_ Hemos arreglado el mapa, ya funciona correctamente _dijo una chica pelirroja, mucho más pelirroja que Lily si es que eso era posible, con una sonrisa en el rostro.
Ella era Nyra, la otra mejor amiga de Ebony, y las tres se habían metido en más líos de los que recordaban. Pero, claro esta, siempre se habían salido con la suya. Nyra también tenía los ojos verdes, pero mucho más claros que los de Ahilyn y también era extremadamente guapa.
_ ¿Le habéis puesto el hechizo chubasquero permanente? _quiso saber Ebony.
Las chicas se las habían ingeniado para hacer un mapa de Hogwarts, pero eso fue mucho antes de que a los Merodeadores se les ocurriera hacerlo. Ellas lo hicieron el primer año que estuvieron en Hogwarts por que estaban más que hartas de perderse constantemente.
En esta ocasión, las chicas habían inventado un ingenioso formato. Su mapa, uno para cada una, se transformaba en pendiente. De esta manera siempre lo podían llevar encima y pasaba completamente desapercibido.
Bastaba decir la contraseña para que el mapa se abriera ante ellas como si se tratara de una tarjeta holográfica. Con los dedos ibas moviendo el mapa, a un costado estaban los distintos niveles del colegio e, incluso, podías verlo en tres dimensiones. Luego se volvía a cerrar y se transformaba de nuevo en el pendiente que había sido antes.
La verdad, les había costado mucho esfuerzo conseguir hacerlo y, aún, tenían que mejorar algunas cosas. Suerte que, cuando uno de los tres mapas se mejoraba, se mejoraban todos.
_ Ya decía yo que notaba un cosquilleo en la oreja, eso era que los estabais mejorando _observó Ebony.
_ Si, no se nos volverán a estropear cuando nos bañemos con ellos puestos _dijo Ahilyn con alegría.
Ebony le sonrió a su amiga.
_ ¿Qué ha pasado esta mañana? Me han contado que "El principito" ha cortado con Dickens _dijo Nyra mientras se cogía del brazo de su amiga.
Siempre habían llamado a Sirius "El principito", no por que viniera de una familia noble de pura sangre, si no por que todo el mundo lo trataba como si fuera un príncipe y, de una simple sonrisa cautivadora de las suyas se podía librar de un castigo bastante severo.
Si es que, siempre se acababa haciendo lo que él quería, independientemente de que estuvieras de acuerdo.
_ Ha cortado con ella y Sonia me ha dado la tabarra esta mañana _dijo Ebony mientras las tres amigas salían a los terrenos del colegio.
Ahora les tocaba Cuidados de Criaturas Mágicas.
_ ¿Qué le ha dicho en esta ocasión? _quiso saber Ahilyn.
_ Oh ¿Quieres saber la nueva frase marca Black? Apunta _le dijo.
Ahilyn sacó una libreta pequeña de la mochila y una pluma. Buscó entre las páginas y llegó a la que quería.
_ Estoy lista.
_ "Me he cansado de tus tonterías"
_ Uuh, esa es fuerte _le dijo Nyra mientras fingía que le recorría un escalofrío por la espalda.
_ Si, me ha puesto los pelos de punta. No se como he podido resistirme a lanzarme a sus brazos y hacerle el amor encima de la mesa del desayuno _dijo Ebony con mucha ironía.
Las amigas se rieron.
_ Bueno, ya hace bastante tiempo que me hago la misma pregunta _dijo Ahilyn con las cejas levantadas.
_ ¿A que te refieres? _quiso saber Ebony.
_ Sabes perfectamente a que nos referimos. Puedes engañarlos a ellos, hasta puedes engañarte a ti misma, pero jamás nos engañaras a nosotras _le dijo Nyra con una sonrisa seductora.
_ ¡Esa Nyraaaa! _le chillo James desde la lejanía.
_ ¡Ese Jaaaaames! _le devolvió el chillido.
El capitán corrió hacia ella con energía y ambos chocaron las manos.
_ ¿Cómo va eso? _quiso saber el chico.
_ Pues bien, bastante bien _sonrió ella.
Las otras dos amigas se miraron.
Aunque nadie fuera capaz de decirlo en voz alta por miedo a que la ira de James cayera sobre él, esos dos chicos se gustaban. Si, a James también le gustaba Lily, he ahí el inconveniente.
Sirius tampoco le había pedido salir a Nyra por que, según el chico decía, "Las pelirrojas no son mi tipo" cosa poco verídica dado que, una vez, salió con una chica pelirroja de Ravenclaw llamada Stephanie o algo así.
_ ¿Cómo estas? _quiso saber Remus con una voz tremendamente dulce dirigiéndose hacia Ahilyn,
La chica le sonrió.
_ Bien, ¿Y tu? _quiso saber ella.
Remus se encogió de hombros.
_ He estado mucho peor _dijo Remus con una sonrisa tímida.
_ ¿Cómo que has estado peor? Pero si estas con nosotros _bufo James.
_ Por eso mismo, he estado peor, aunque también he estado mucho mejor _dejo caer el chico.
Luego le dedico una mirada significativa a Ahilyn.
Nyra y Ebony se miraron entre si.
_ ¿Qué puñetas quiere decir eso? _quiso saber James.
_ Tranquilízate, hermano, o vas ha hacer que nos castiguen a todos con tus berridos _le dijo Sirius mientras le daba palmaditas en el hombro a James, para tranquilizarlo.
Potter torció el morro e infló los carrillos mientras se cruzaba de brazos, como el niño pequeño en el que muchas veces se convertía.
_ Que guapo te pones cuando te enfadas _se rió Nyra.
James le sacó la lengua.
_ ¿Nos sentamos? _quiso saber Sirius dirigiéndose a Ebony.
_ ¿Hoy quieres sentarte conmigo? Que honor _dijo ella con ironía mientras ambos chicos se sentaban en la hierba.
Sirius le dedico una sonrisa malévola. No sabía por que, Ebony tenía la sensación de que aquella clase no iba a ser nada normal.