Summary
Bella Swan y Edward Cullen son los mejores amigos. Cada uno desea una cosa diferente. Bella desea que Edward le ame tanto como ella a él.
Edward Cullen desea con fervor a Tanya Denali. ¿A qué punto llegara Edward para conseguir lo que quiere? ¿Bella será capaz de perdonar la traición y las mentiras?
Mentiras & Engaños
Prefacio
Esto no podía ser cierto, quizás había sido mi imaginación, él no había hecho eso, no podía. Escuché como la puerta se cerraba, miré la silla donde él había estado sentado observando lo que ese bastardo me había hecho. Él me había utilizado. Me había dicho mil y un promesas y yo las había creído.
Me senté en la cama y me tapé el cuerpo con el edredón descolorido. Él me había utilizado, las promesas nunca habían significado nada. ¿Cuántas veces me había dicho que me amaba y yo lo había creído? ¿Cuántas veces dijo que estaría a mi lado y que me protegería y así sin más dejó que me hiciera esto? Mi corazón estaba hecho pedazos; el amor, la vida, nada tenía sentido ni significado.
Las lágrimas no tardaron en aparecer, me dolían las piernas y sentía como empezaba a sangrar, pero no me importaba. La persona que yo más había amado, querido y adorado me había traicionado. Todo había sido mentira. Las lágrimas gruesas y tibias caían de mis ojos sin compasión. Me levanté y tomé la ropa tirada en el piso. Me puse vestí, mire por la venta, todo era oscuridad. Hacía mucho frio y el bosque de noche simplemente daba miedo.
Suspiré y me encaminé hacia la puerta, bajé las escaleras en espiral de la casa abandonada en medio del bosque de Tacoma. Un escalofrió recorrió mi cuerpo al observar la puerta abierta y encontrarme con la persona que menos quería ver en estos momentos. El miedo me embargo y tropecé con el primer peldaño de la escalera, caí al suelo estrepitosamente. Él se acercó a mí, mirándome fijamente, yo aparté la mirada. Reuní el poco valor que me quedaba. Las lágrimas volvieron a estar presentes, él intentó acercarse pero quité su mano de un manotazo.
-¡Aléjate de mí!-Grité, la voz se me quebró y sollocé mientras abrazaba mis rodillas y escondía mi cara entre ellas.
-Bella… Deja que te explique, yo no quise…
-Aléjate de mí… Solo aléjate de mí, por favor…-Susurré mientras sollozaba. Me sentía traicionada y herida. Hoy había perdido una de las cosas que nunca en mi vida podría recuperar. Él había sido el causante de esto. Solo él. Yo creía que me quería, amaba, adoraba. Él me había traicionado de la manera más sucia y asquerosa que alguien pudo hacerlo.
Escuché sus pasos alejarse y luego el ruido de la puerta cerrándose, mis sollozos inundaron la habitación mientras mis lágrimas seguían corriendo libremente por mis mejillas, nunca le perdonaría esto. Nunca.
