"..Todas las mujeres tienen un lado romántico las flores y los chocolates son el símbolo clásico de esto. Sin embargo cada mujer es completamente un universo y lo que puede funcionar con una con otra seria un desastre y eso es lo que hace una buena relación mágica, al entender lo que el otro quiere decir mas allá de lo que por eso, para ser el mejor amante primero debes ser el mejor amigo…"
James leyó la revista "el quisquilloso" en aloja en la que Sirius la había dejado antes de meterse a bañar era oficial había perdido a su mejor amigo de ahora en adelante los sábados en la noche le tendría que llamar Jazmín.
-Que haces cornamenta- comentó Sirius que había vuelto de bañarse- Con solo una toalla en la cintura, volteo su vista a la revista que tenia James en la mano- Ah eso…- respondió mientras iba a su closet y comenzaba a cambiarse.
-Canuto hay algo que me quieras decir creía que tu no te enamorabas ni te gustaba lo "cursi"- analizó James sonriendo.
-Y claro que no me gusta, pero a ellas si-declaró con toda soltura.
-Supongo con ellas te refieres a todo el genero femenino de la escuela bueno excluyendo a Mcgonagall por supuesto.
-Mi querido Cornamenta incluyendo a Mcgonagall ¿que no leíste bien la pagina? TODAS las mujeres no algunas ni la mitad TODAS tienen un lado romántico.
-Y para darte cuenta de eso tenias que leer una revista afeminada para..- comenzó a decir James acostándose en su cama y sacando su switch dorada siempre hacia eso cuando estaba aburrido es como si todo su cuerpo le reclamara el dejar de moverse y tenia que descargarse de alguna forma.
-Por ejemplo- Canuto ya medio vestido tomando la revista y buscando entre las páginas hasta que encontró una y comenzó a leer- "Es súper sexi que un mago aviente/deje caer su varita antes de besar".
-Eso es ridículo- comentó James riéndose de su amigo.
- Si te parece tan ridículo no te importaría hacer una apuesta- propuso Canuto con una sonrisa traviesa.
James paro de reír- que tienes en mente?- si hay algo que cualquier merodeador amaba eran las apuestas les permitía ganar chocolates y dulces sin gastar una millonada, hacer el ridículo y reírse un rato.
-Si con mis piropos consigo hacer sonrojar a Mcgonagall tu deberás…. Presentarle Lily a tu mamá cuando volvamos a Hogwarts y soportar cualquier burla que ella te de el próximo año.
-¿Estas loco? Mi mama le contara toda clase de historias!-James amaba a su mama pero había veces en la que se madre se pasaba.
-¿Tienes miedo?
-¡No! Claro que acepto- intentando sonar mas firme de lo que se sentía en realidad-pero si no lo logras tendrás que robar todos los dulces a Remus y dármelos (tomen en cuenta que Remus cuida sus dulces mejor que a su abuela).
_-_-_-_-_Al día siguiente_-_-_-_-_
Peter, Remus y James estaban afuera de la clase de transformación esperando con los demás a que empezara la clase cuando de repente llego con un ramo de margaritas.
-Black temo preguntar pero ¿que calderos derretidos estas haciendo ahora?- preguntó Lily más sorprendida que enojada.
-Ganar una puesta- sonrió sujetando un pequeño arreglo de margarita la señorita Sprout se enojaría probablemente era guapa pero algo regordeta y la maestra mas joven.
En ese momento se abrió la puerta del aula y McGonagall los hizo pasar cuando notó a Sirius y se le quedo viendo –Sirius no me haga lamentar preguntarte... ¿Que es eso?
-Un pequeño detalle para mi muy bella profesora favorita- dijo Sirius con una sonrisa enseñándole las margaritas
-(0.0) No.
-(o.0) Dijo.
-¡Eso! (XD).
-Haga el favor de sentarse y convertir su pavoreal en una mesa- declaro McGonagall sin inmutarse pero con el tono de una mas y mueres.
-Pero no tengo un pavo real profesora-añadió Sirius mientras que la maestra sacaba su varita y convertía el ramo de flores en un pavoreal que comenzó a correr- Le recomiendo que se apresure por que su diez se acaba de escapar del salón-.
