Entre Apuestas, Celos, Mentiras y Propuestas Indecorosas.
Este fic esta hecho en base a ideas de otros autores, no es una copia ni me lo he robado, solo he tomado lo que he considerado mejor de cada autor que he leído y he creado un fic hecho a mi gusto. Si he molestado a alguien con su publicación, o lo hago en algún momento, por favor les pido me lo hagan saber por medio de un review o a mi correo electrónico y yo con gusto consultare la situación e intentare solucionarlo de la mejor forma posible.
Espero les agrade mi historia y por favor dejen su opinión , se aceptan sugerencias, comentarios y saludos.
Atte: Lilianne Aiko Shiteru
Era un frió día de Diciembre, tal y como a ella le gustaba más… Sin embargo no lo estaba disfrutando del todo…
¡Mi corbata! – grito una chica.
En la silla… – le contesto una voz femenina.
¡Mi cepillo! – grito de nuevo la apurada chica mientras corría de un lado a otro con un bulto de ropa limpia.
Junto al lavabo – contesto de nuevo la compañera de alcoba de la chica.
¡Mi mochila! – grito de nuevo la pelirroja.
Bajo tu cama… – repitió la compañera con una tranquilidad extraña e increíble.
¡Mi tarea! – grito otra vez la pelirroja.
En la sala común… – respondió una chica castaña y también compañera de las otras 2 mientras salía del baño – ¡Libre! – grito.
¡Sigo! – grito la pelirroja y se encerró dentro del baño para no salir sino hasta media hora después.
¡Lily! – Grito la chica castaña y agrego – ¡te quedan cinco minutos!
¡Ya voy! – contesto la pelirroja y después se repitió a si misma – ¡Corre¡Corre!
Te esperamos en la sala común – le dijo la otra chica y después se dijo a si misma en un susurro – como todas las mañanas…
¡Te escuche! – le grito la pelirroja.
Cinco minutos después, Lilianne Evans bajaba las escaleras de la sala común de Griffindor.
Lo siento chicas… - dijo Lily en un suspiro e intento tomar aire para terminar la excusa pero le fue imposible continuar porque fue interrumpida por una de sus compañeras y amigas.
…Me quede dormida… ¡blah¡blah¡blah! – termino de manera irónica y rodando los ojos exageradamente la chica rubia llamada Charlotte Heigman, de complexión atlética y ciertamente fina.
No volverá a suceder – dijo Lils, como solían decirle sus amigos de cariño, con una gran sonrisa.
Si te creyera cada vez que dices eso perdería la cuenta… - contesto la otra chica de Griffindor y amiga de Lily, Helen Fades, una muchacha morena, de cabello lacio, poseedora de unos ojos oscuros y profundos, de invaluable fortuna según palabras de su propio padre, John Fades, poseedor de grandes negocios en el mundo mágico.
Se disponían a bajar cuando…
Miren quien se digno a despertar… "Doña Dormilona Evans"….
Cállate Potter… A ti nadie te pidió opinión…. – contesto Lily agresivamente.
¿Así me das los buenos días? – contesto James Potter con total descaro y arrogancia mientras bajaba las escaleras de la sala común de Griffindor con los brazos abiertos a modo de querer dar un abrazo a la pelirroja.
¿Cómo quieres que te reciba¿con besos y abrazos, o tal vez… - Lily comenzó a pensar - ¡Ya se! – Grito la pelirroja - ¿Con un club de fans? – termino ella burlándose del chico.
Tal vez… - dijo James meditándolo y llevando su mano derecha a su barbilla – La verdad, no estaría del todo mal… - respondió el chico tranquilamente con un aire de arrogancia infinita.
¡Ni en tus más aguados y asquerosos sueños Potter! – le grito Lily para después retirarse con sus amigas al gran comedor.
Parecen un típico matrimonio… - dijo Remus Lupin después de que el retrato de la señora gorda se cerrara tras Helen Fades.
Pero sin saberlo le dio una gran idea a James.
¡Sirius!
Dime Prongs – dijo el aludido.
Te apuesto algo…
¿Que cosa? – contesto Sirius Black mientras se le iluminaban los ojos.
Te apuesto a que conquisto a Evans antes de terminar el año escolar…
¡Hecho!... ¿50 galeones? – dijo Sirius.
¡Que sean 80! – contesto James.
Trato hecho amigo – y dicho esto ambos estrecharon sus manos…
James Potter planeaba como comenzar a conquistar a la pelirroja de ojos verdes y frente a el encontró su primera jugada…
En el gran comedor, las muchachas desayunaban cuando…
Chicas… ¿Qué clase toca primero?
¿Encantamientos, porque Lily? – pregunto Charlotte.
Porque…. – hubo un gran silencio por parte de la pelirroja.
¿Por… que? – le siguió Helen.
¡Chicas!... – grito repentinamente Lilianne Evans mientras se levantaba abruptamente de la mesa – ¡Díganme que no deje la tarea de Herbología en donde creo que la deje!...
¡En donde crees que la dejaste? – pregunto Helen inocentemente, pero después palideció y pregunto muy preocupada – ¿La dejaste en la sala común?
¡Por merlín¡Lily¡tenemos Encantamientos en 15 minutos¡Corre! – grito Charlotte.
La pelirroja corrió fuera del gran salón en dirección a la sala común de Griffindor.
Estaba a punto de llegar cuando…
¿A dónde cree que va señorita Evans?
La chica se vio obligada a frenar violenta y, valga la rebundancia, frenéticamente, a tal grado que estuvo a punto de darse de bruces contra el suelo…
Yo… este… profesor…. – dijo Evans tomando aire.
10 puntos menos a Griffindor por correr en los pasillos… y más le vale que tenga una buena excusa porque si no perderá 10 más.
Yo… este… olvide mi tarea de Herbología y una poción en mi caldero cocinándose en la sala común.
Bien, solo porque no deseo que esa poción provoque accidentes… pero que no se vuelva a repetir señorita Evans.
Gracias profesor… - dijo Lily y cuando lo vio doblar la esquina continuo con su carrera contra el tiempo, si bien era cierto que buscaba su tarea de Herbología, lo de la poción se lo había inventado para convencer al profesor.
Siguió lo que restaba del camino y en cuanto entró a la sala común comenzó a buscar su tarea… al no encontrarla ahí pensó que tal vez alguna de sus compañeras la había subido a su habitación, así que subió a buscarla.
Desde su escondite en la sala común, un chico de cabello rebelde y ojos azules observaba la situación con total agrado.
La chica estaba sufriendo mientras buscaba el documento que tenia en sus manos.
Creo que esto me servirá más de lo que esperaba… - se dijo el chico a sí mismo cuando la pelirroja había ya salido del lugar decepcionada por no encontrar su tarea.
No la encontré chicas….
¿Quien la puede tener? – pregunto Charlotte.
Desde Tornell, hasta Black… todo aquel que deseara hacerme daño o poseyera poco cerebro como para hacer el mismo sus deberes (con lo último se refería a Black).
Merlín… te dije que debías guardarla en cuanto la terminaras… ¿Porque tienes que ser tan despistada? – le pregunto Helena a modo de reclamo.
Después de esto, entraron al aula de Encantamientos para tomar su clase.
¡RING RING!
(Autora con falta de herramientas de sonido hace una imitación muy corriente U.U)
La campana sonó y cada una de las chicas se dirigió a sus propios talleres….
Charlotte se dirigió a Estudios Muggles, Helen a Adivinación, y Lily a Ruinas Mágicas, pero…
¡Ah! – grito Lily.
Alguien la había tomado por sorpresa y le había tapado la boca.
La había aprisionado en una de las aulas más pequeñas del área.
El atacante soltó a Lily quien estaba muy confundida y asustada.
Rápidamente se volteo y vio a su agresor a quien reconoció perfectamente entre las sombras…
James Potter… debí imaginármelo… solo un idiota como tu puede ser capaz de raptar a alguien sin motivo alguno…
Solo me tome la molestia de "raptarte" para hacerte una oferta.
Y que clase de oferta crees que valga tanto la pena como para perder MI tiempo y el tuyo raptándome.
Pues… me imagino que conoces esto… - dijo James mostrándole los pergaminos que estaba buscando la pelirroja esa mañana.
¡Dame eso estúpido engreído! – grito Lily intentando arrebatárselos sin lograrlo.
¡No¡No¡No! – dijo James arrogantemente y aun jugando con la pelirroja, para después guardarlos en uno de sus bolsillos.
Si deseas recuperarlos deberás encontrarme hoy en la noche en la sala común.
¿A que horas? – pregunto la pelirroja secamente.
¿Que te parece a las 12:50?
Perfecto – dijo ella, y se disponía a marcharse cuando…
¡Y no faltes, o si no los quemare – le dijo el chico ondeando los pergaminos frente a ella.
¡Estate seguro de que ahí estaré idiota! – le grito Lily, y sin más salio rápidamente del aula.
"Cayo redondita en mi trampa" – pensó James en voz alta antes de salir del lugar.
¿Que se cree ese idiota de Potter? – dijo Lily aun exasperada por el tema.
Que suerte que hoy no te tocara Herbología, debes agradecerle a McGonagall por sacarte para una reunión de prefectos – comentó Charlotte a su amiga mientras cenaban en el gran comedor.
Si, pero tuve que soportar al idiota de Potter diciéndome que si no asisto a su reunioncita quemara mi tarea y no se que tantas patrañas más… - contesto Lily rodando los ojos e imitando a Potter, pero después de un rato de hacer reír a sus amigas con las imitaciones pregunto más para si que para sus amigas - ¿Qué tramará ese idiota esta vez?
Solo esperemos que no te hechice de nuevo – les contesto Helen.
Si, es cierto, tuvimos suficiente con lo de la última vez – continuo Charlotte y agrego – el contra hechizo para los pies aguados tardo 2 semanas en estar listo.
¡Creanme, el estar en una silla de ruedas en Hogwarts no es nada placentero, y menos cuando más de la tercera parte de los pasillos de Hogwarts conducen a escalones o escaleras – recordó Lily.
Continuará
Bien , que les ha parecido mi historia?
La continuaré pronto, solo que deseo terminar primero el tercer capitulo para poder comenzar a traspasar el segundo XD, todo esto para estar segura que no dejaré la historia a medias como suelo hacer...
Bien, me despido y espero comentarios.
Gracias.