Alpha Witch
By DenilePrincess
Sumary:
Hermione fue mordida y ahora es lícantropo. La bruja castaña sufre cambios irreversibles y notorios, entre los que destacan, su fisionomía, sus actitudes y deseos pero sobre todo, la manera en la que se relaciona con el sexo opuesto. Una Bruja Alfa, buscará un omega?
Hermione/Multipairing.
Disclaimers Generales: el Disclaimer legal de todos mis fics esta en mi profile.
Capítulo uno.
¿ Crees que sabes todo acerca de los licántropos ? Piénsalo de nuevo.
Sucedió en la guerra, aquella noche en la que Harry termino con Voldemort, esa noche, un lícantropo miserable me mordió, ni siquiera era Un lícantropo conocido ...como Greyback, no.
En realidad el chico loco solo me mordió, y aunque fue doloroso, no parecía grave, el se veía...normal es decir, mortífago, loco, y maligno, pero humano. Nunca olvidare sus grandes ojos oliva, de piel nívea y lisa. Un chico mas en la guerra.
Error.
Bueno, continúe con mi vida, lo mejor que pude, cicatrizo de forma horrible, fue en la parte interior de mi mano, muy parecido a donde los mortífagos llevan su marca, fueron realmente las pequeñas cosas, ya sabéis, mi sentido del oído, la vista, mejoro de manera exorbitante, mi cabello creció de forma extraña y continua cada noche, hasta llegar a mi cintura en solo un mes, lucia mucho menos encrespado, por supuesto, todos pensaron que lo hechice, pero yo sabia mejor. Algo estaba ocurriendo conmigo.
Sin duda alguna un largo cabello es atractivo, pero si es con bucles y con el volumen adecuado, honestamente... la cantidad de atención que recibe me parece inadecuada...tal vez podría utilizarla para mis causas sociales. Era iman de miradas, de Slytherins, Hufflepuffs, Ravenclaw y Gryffindors. Un poco apabullante, intentaba actuar casual y natural.
- No te sabia tan vanidosa- se apresuró a hacerme notar Ron, en algún punto en el almuerzo.
Congele mi tenedor, ya no llego a mi boca. Me desubico. No sabia que decirle.
Ginny me salvo.
- Cállate, tu como no tienes remedio, y para colmo no eres tan bueno con la magia, pobre de ti hermano.-
Ron estrecho los ojos y cuando iba a gritarle a Ginny, Harry le interrumpió pidiéndole ir a entrenar Quidditch. Refunfuñando se apresuró a alcanzar a Harry quien ya se había encaminado. Aún no entendía porque Harry Y Ginny no sólo podían estar juntos y evitarse el drama.
- Gracias...- susurre a Ginny
Ella me sonrió de regreso. - Te vez genial-
- Gracias- Murmure sonrojada de nuevo.
- ¿Esta mal si te pido me acompañes a verlos entrenar?...se que es cursi, pero te prometo que Ron no te molestara...-
Le sonreí y me levante para ir al campo de Quidditch, hacia allá nos encaminamos. Volteamos miradas a nuestro paso. Ginny era guapa, pero note, a decir verdad con agrado, que yo también atraía atención masculina como jamás antes.
Y ahí fue que comenzó...la otra parte de mis cambios, no se porque ¡En el nombre de Merlin! Fue tan extraño, como chispazos en el aire, no era la primera vez que lo veía, por supuesto, Oliver Wood era alto y bien parecido, pero ese día, me pareció ciertamente "muy" bien parecido, no podía quitarle los ojos de encima apenas lo vi montar su escoba, dirigir al equipo, estirar sus manos y músculos en el entrenamiento y gritar a todo pulmón, era el capitán del equipo y eso...se sintió bien, es decir, mirarlo, se sentía bien, de pronto, cruzamos miradas y nuestros ojos hablaron su propio lenguaje, me sonrió, y yo le sonreí de regreso. Vaya, es verdad, el cabello largo es mas atractivo para los chicos. Estupidos.
Pude de alguna manera escuchar su corazón acelerarse. Y sonreí de nuevo. ¿Le estaba coqueteando? Al líder del equipo de Quidditch.
Merlin.
Wood hizo sonar el silbato y mis pies cobraron vida propia, Ginny fue hacia Harry, pero yo, yo fui justo en la dirección opuesta.
- Hola- dije casual.
- Hola- dijo el, de pronto sonriente y ¿Sonrojado?, en serio, no puede ser tan fácil, pensé para mis adentros.
A lo lejos ví a Harry, Ron y Ginny observarme como si me hubiera brotado otra cabeza.
- Así, que...- dije de pronto
- Hogsmade? Pasado mañana - propuso el
- Hecho- dije sonriente. Pero era una sonrisa diferente, era una sonrisa...coqueta.
Me volví hacia donde mis amigos y Ron estaba rojo cual cherry. Harry me observaba con asombro mal disimulado y Ginny comenzó a dar Saltitos y me animaba. - Tienes que contármelo todo, Adiós Harry!-
Me tomo del brazo y arrastro hacia la sala común.
Los chicos intercambiaron miradas con Wood pero no se dijeron nada.
Yo, jamás pensé que lo que me ocurriría al día siguiente tuviese algo que ver con la lícantropia, pero sabia los síntomas usuales de memoria. La luna llena se levanto en todo su esplendor aquella noche. Yo me sentía bien, honestamente así era.
Un malestar estomacal o eso pensé me llevo al baño de prefectos. Pero era como si me cuerpo nuevamente actuará sin mi permiso. Apenas mis ojos captaron el halo de luz de la luna sobre el piso, mis pupilas le siguieron, ahí, de pronto la vi.
La luna.
Tan hermosa, blanca y nívea como...como...aquel chico que...
Y adiós, eso fue todo.
Lo se, puede sonar patético pero desperté en mi cama, en mi ropa regular, y con lodo en las palmas. Había pajillas y hojas en mi cabello.
Sabia que algo había ocurrido, me duche y baje a almorzar. Mi cuerpo estaba distinto, era como si mis huesos hubiesen sido reacomodados, muy ligeramente, es decir, un poco mas de cadera, cintura más estrecha, cosas como esas, sutiles pero conozco mi cuerpo, supuse que era el cambio fisico natural, mi cabello se había vuelto sedoso y brillante. Tuve que revisar mi champú dos veces para saber que era el mismo que usaba desde primer grado.
Mi ropa era la misma, pero me sentaba de forma distinta. Se amoldaba en los sitios adecuados. Cuando baje al gran comedor, George y Fred levantaron sus cabezas al mismo tiempo. Por supuesto que Harry y Ron no lo notaron, y no me importaba. Oliver Wood, no me quitaba la vista de encima, y nuevamente algo dentro de mi vibro. Actúe casual e intercambie miradas con el. Solo algunas. repase cada libro de la biblioteca pero mis síntomas aunque sospechosos, no coincidían con lo descubierto acerca de la lícantropia.
¿ Que me ocurre? ¿Quién podrá ayudarme? Si es grave, ¿podrían expulsarme?, ¿Pondré en peligro a alguien? Tenía miedo, y no sabia a quien recurrir, era algo muy íntimo y al mismo tiempo serio, no podía contarle a todo el mundo.
Esa noche en la sala común, le pedí a Harry su capa de invisibilidad. Me miro extrañado pero no dijo nada extraño. Accedió. Ron por supuesto escucho todo.
-¿ Para que la quieres? ¿Vas a usarla para verte con Wood? -
Iba a réplicar pero de pronto no me pareció mala idea y sonreí. Harry mostró una sonrisa cómplice. Ron me observo indignado.
- ¿quien eres y que has hecho con Hermione?-
- Culpare a las hormonas.- le dije con simpleza. Aún no podía decirles la verdad.
Esa noche visite la sección prohibida y consulte sobre criaturas mágicas. Un libro en especial llamo mi atención. "Lycans El origen de la Lícantropia" era pesado así que tuve que tomarlo prestado.
Lo lleve a mi habitación y consulte la primera mitad. Al terminar lo transfigure en una caja vieja para que nadie lo tomase.
La visita a Hogsmade llego, Oliver Wood tomo mi mano camino al pueblo y conversó sobre temas casuales en el trayecto. Su cabello y ojos avellana eran enternecedoramente atractivos. Yo le sonreía y correspondía a sus gestos. Algo totalmente nuevo para mi. Se sentía agradable, muy bien ser cuidada y mimada por un chico.
Atrás de nosotros escuchaba la conversación de mis amigos.
- De Viktor Krum a Oliver Wood...¿No tiene estandares? -Ron se escuchaba indignado.
- Ron, basta- le dijo Harry muy tranquilo. - Tu y yo también hemos salido con chicas-
Harry grito debido seguramente a algún golpe de Ginny.
Ron hizo algún exabrupto típico de su carácter que escogí no escuchar más.
- ¿Cerveza de mantequilla?- me dijo Oliver
- En realidad prefiero un capuchino.- le respondí, no quería que Ron arruinara mi cita.
- Una bebida Muggle - dijo sonriente. eso me gusto.
El café era pequeño y tenía un aspecto vintage sin ser descuidado. Las mesas eran minusculas y los asientos confortables, pequeños sillones mullidos que parecían sacados de la casa de una abuela snob. Nos sentamos juntos.
- Vale, esto es difícil, pero seré abierto...- dijo él mirándome a los ojos.
Pude escuchar su corazón repicar y las pupilas de sus ojos dilatarse. - Eres preciosa Hermione, me gustas mucho. ¿Te gustaría ser mi bruja?-
Mi corazón se aceleró estúpidamente. - Si.- mi voz salió tranquila y casual, un poco ronca, pero de un ronco sexy, no enfermo. Nuevamente mi cuerpo tomaba sus propias decisiones.
El sonrió ampliamente, se acercó a mi muy despacio, pego sus labios a los míos, sus suaves labios acariciaron mi boca en una danza lenta y placentera, que "Asombrosamente" correspondí debo decir de forma magnifica, nuevamente mi cuerpo me sorprendía. Vaya, eso fue definitivamente mejor que el capuchino.
Al salir, íbamos nuevamente tomados de la mano, pero todo se sentía distinto. Los gemelos Wesley observaron a Oliver con suspicacia y admiración. Pero no hicieron bromas al respecto. Sentí como el viento ondeaba mi ahora largo y sedoso cabello. Mi túnica con el, mi bufanda voló en el aire y en un movimiento tanto certero como toscamente rápido fue capturada por la nívea mano de Draco Malfoy. Sus ojos esmeralda se cruzaron con los míos en un micro momento. Lo que nuestros ojos se dijeron fue tan básico como contundente. Cuando ese momento concluyó, Oliver le extendió la mano pidiéndosela en una forma tan demandante como silenciosa. Draco hizo su media sonrisa y se la dio observándolo de forma suspicaz y cínica.
Oliver lo miro a la cara y le dijo - Nos vemos en el juego Malfoy- y se colocó en el cuello mi bufanda.
Yo no pude evitar sonreír. Para evitar un gesto tan impropio de mi, mordí parcialmente mi labio para intentar ocultar lo inevitable, gire mi rostro para evitar que alguien lo notase. Y Oliver tomo mi mano.
