Historia de un sueño
Desde que Antonio se había ido hace un mes, las noches se sentían muy frías para Lovino, pero esta vez fue diferente esta era calida o eso sentía la piel de este ya que estaba dormido en la cama de España, era la única forma de poder dormir tranquilo sin tener las horribles pesadilla que le inundaban la cabeza por las noches. De repente la puerta se abrió…
Perdona que entre sin llamar,
no es esta la hora y menos el lugar.
tenía que contarte que en el cielo no se está tan mal.
Antonio entro y camino hasta llegar donde estaba el pequeño italiano, eran las 3 de la mañana, pero tenia ganas de verle, se sentó a su lado y acaricio la mejilla del menor
Mañana ni te acordarás,
" tan sólo fue un sueño" te repetirás.
y en forma de respuesta pasará una estrella fugaz.
El ojiverde empezó a llorar, era la última vez que lo vería, para colmo el menor recordaría su presencia en ese momento como si hubiera sido solo un sueño pero desde lo alto haría que pasara una estrella fugaz para que lo recordara
Y cuando me marche estará mi vida en la tierra en paz.
yo sólo quería despedirme, darte un beso y verte una vez más...
Antonio, en su última voluntad quería ver al menor una vez mas, besarle y despedirse, para que su alma se fuera de la tierra en paz
Promete que serás feliz,
te ponías tan guapa al reír.
y así, sólo así,
quiero recordarte.
así, como antes,
así, adelante,
así, vida mía,
mejor será así.
Se acercó al oído del menor y susurró: "Mi pequeño Lovi, prométeme que cuando yo ya no este, tú serás feliz, como antes, cuando estaba contigo…"
Ahora debes descansar,
deja que te arrope como años atrás.
¿ te acuerdas cuando entonces te cantaba antes de ir a acostar?
Se levantó de la cama y miró como descansaba, lo arropó cuidadosamente para no despertarlo y recordó como cada noche le besaba la frente y le cantaba una canción para que pudiera dormir tranquilo, sin las pesadillas que hacían que el italiano llorara desconsoladamente
Tan sólo me dejan venir
dentro de tus sueños para verte a ti.
y es que aquella triste noche no te di ni un adiós al partir.
Hace un mes, él se había marchado por la noche sin despedirse de Lovino para no preocuparlo y no verlo suplicando para que lo llevara con él, no alcanzó ni a decirle adiós, ya que, tenía que partir en su barco lo mas rápido posible
Y cuando me marche estará mi vida en la tierra en paz.
yo sólo quería despedirme, darte un beso y verte una vez más...
Dejo caer una lágrima antes de irse, volvió a besarle la frente y lo contemplo por última vez…
Promete que serás feliz,
te ponías tan guapa al reír.
y así, sólo así,
quiero recordarte.
así, como antes,
así, adelante,
así, vida mía,
ahora te toca a ti,
sólo a ti,
seguir nuestro viaje.
se está haciendo tarde,
tendré que marcharme.
en unos segundos vas a despertar...
Recordó, por última vez, los buenos momentos junto a él, lo guapo que se veía cuando se reía de buena gana, esos momentos serán imborrables, pero tenia que marcharse porque se estaba haciendo tarde además el italiano se iba a despertar, así que se marchó… Lovino se despertó en el mismo instante en que se fue, corrió en dirección a la oficina del ojiverde, había soñado con él así que creyó que había vuelto, pero al entrar observo al superior de España, este lo miro con lastima y le dijo: "…Romano…España a muerto…" el menor estaba paralizado, sentía como las lagrimas rodaban por sus mejilla antes de caer al suelo...