Bien, es posible que colgar una historia de Navidad en verano sea extraño. Pero la culpa la tiene la tele por pasar un capítulo de Navidad en agosto y darme ideas xD (¿Y la tele que culpa tendrá en realidad...?)

En fin, este es un Drabble (100-500 palabras) de Gilby/Ylvie (y puede que un poco de Gilby/Vicky (?)) basado enteramente en el capítulo "Navidades Vikingas" de la nueva serie 3D (New! Vicky the viking como ha empezado a gustarme llamarla XD)

- UN REGALO PARA GILBY -

A Ylvie siempre le había gustado pasar la Navidad con sus tíos y su querido primo.

Pero notaba que este año estaba mal.

La pequeña giró su vista hacía fuera por la ventana al escuchar un golpe sordo seguido de un grito que aparentemente tan solo ella notó.

Gilby estaba tirado boca arriba en la nieve, obviamente se había golpeado con el árbol que tenía delante. Ante tal visión Ylvie sintió un rastro de culpabilidad. No pensaba que el efecto del "postre" iba a durar tanto tiempo. Sí, Gilby se había pasado esta vez con sus tonterías, pero Vicky y ella ya le habían frenado y dado su merecido. ¿No era suficiente? Ylvie no creía ni de lejos que el niño de cabello castaño fuera tan malo como para merecer tan larga tortura, a pesar de las cosas malas que siempre decía de él.

— ¿Todavía sigue? —la voz de Vicky se presentó a su espalda. Giró para ver la cara un tanto sorprendida de su amigo y compinche— Tal vez me pasé con las cantidades.

Vicky sonrió tan raro como siempre lo hacía últimamente al mirar a Gilby y se encogió de hombros.

Segundos después Ylvie se encontraba con un cuerno lleno de agua entre las manos.

— Pensaba ir yo —dijó Vicky con la misma rara sonrisa—, pero estoy seguro de que prefieres dárselo tú.

La niña de melena rubia no necesitó más para salir de la casa.

Gilby se levantaba torpemente intentando no resbalar con la nieve. El sabor picante de lo que quiera que fuera que le había dado Vicky (estaba seguro de que era cosa de Vicky) había comenzado a irse pero aun era demasiado y le nublaba la razón.

— Bebe.

Y de repente, una hermosa voz que conocía bien lo devolvió a la realidad.

Ylvie, que nunca solía fiarse de las acciones del niño mayor, ahora lo miraba con una linda mirada tranquilizadora mientras le extendía el cuerno. Gilby lo tomó un tanto vacilante, no era normal que fuera agradable con él.

— ¿Mejor? —preguntó una vez él hubo bebido. Suspiró de alivio cuando recibió un asentamiento de respuesta— Lo lamento.

Gilby la miró sorprendido.

— ¿Qué no era cosa de Vicky? Creí que... —se paró al ver el rostro culpable de ella y comprender— Eres su cómplice.

— Lo lamento —repitió.

Gilby sonrió negando.

— Lo merecía.

— ¡No! —negó—. Es Navidad, al menos déjame darte un regalo.

Antes de que pudiera hacer nada, ella juntó sus labios sorpresivamente y luego salió corriendo. Dejando solo a un Gilby sorprendido y sonrojado. Reconocía que lo que pretendía era llamar la atención del pelirrojo, no de su prima, aún así... Volvió a caer sobre la nieve sintiéndose en el Valhalla. No, no tenía ninguna queja al respeto.

Mientras, Vicky lo observava desde la ventana con su sonrisa creciente, aunque no podía negar algo de envidia en sus ojos.

— ¿Qué es lo que miras, hijo? —cuestionó Halvar.

— La magia de la Navidad, papá —mintió sospechosamente.

Sin ninguna duda, Ylvie era afortunada.

Porque Vicky sabe hasta donde y con quien puede llegar la mania de Ylvie de regalar besos porque sí. XD