Después de despedirse de sus padres a través de la ventana del tren, Albus y su prima comenzaron a andar por el corredor del tren en busca de un compartimiento vació, lo cual era una misión bastante difícil, ya que todos estaban llenos.

-Al, ¿Por qué no buscamos a James y nos sentamos con el?- pregunto Rose molesta por estar arrastrando el baúl por todo el corredor.

-NO, no quiero pasarme el día con James, me volverá loco con el tema de las casas por favor Rosie ten un poco de paciencia-le pidió Albus.

-Vale, pero si no encontramos un compartimiento en el que nos podamos sentar ya, juro que me iré con James-le contesto Rose.

Albus se quedo mirando como su prima seguía arrastrando el baúl, ella era su prima favorita, como los demás Weasleys era pelirroja y tenia los ojos azules de su padre, con el cual también tenia que reconocer que se parecía mucho, ya que Rose adoraba el quidditch y sentían devoción por el mismo equipo, los Chudley Cannons, también en su personalidad, porque ella era alegre y divertida pero cuando se enfada se vuelve rojísima y no quisieras estar de lado suyo cuando se pone a despotricar, pero debía reconocer que en algo si se parecía a su madre, era estudiosa y una gran trabajadora, que deseaba conocer todo a su alrededor, pero también había heredado el indomable pelo de tía Hermione, para desgracia de Rose.

Siguieron avanzando asta llegar al último compartimiento del último vagón del tren, en el había una chica sentada sola, sin pensarlo Rose abría la puerta.

-¿Te importa que nos sentemos aquí?- pregunto Rose- es que el tren esta lleno…

-Claro, pasar, no se donde se metió mi amigo pero aquí cogemos todos adelante- dijo la chica.

-Por cierto me llamo Rose Hermione Weasley, y este es mi primo Albus Severus Potter- dijo Rose, señalando a Albus, este solo hizo un gesto con la mano- perdónale pero mi primo es muy tímido- añadió mirando a Albus.

-Rosie…- Albus no estaba de humor después de las palabras de James

-No pasa nada-dijo la chica riendo- me llamo Eleine Aldara Prince, encantada de conoceros- tendiendo una mano a Rose y a Albus.

Albus se sentó enfrente de la chica, ella tenia el pelo negro, tanto como el de él, y no lo tenia ni liso, ni rizo, caía por su espalda formando unos tirabuzones perfectos, tenia la tez morena y sus ojos eran de un verde muy distinto de los suyos, por que los de ella eran un verde intenso mientras que los ojos de Albus eran verdes oscuros como los de su padre y por lo que deducía también era su primer año en Hogwarts.

-Y vosotros, ¿en que casa queréis estar? mi compañero me dijo que lo primero que hacían con nosotros al llegar es seleccionarnos para unas casas, ¿no?-pregunto Eleine.

-¿No conoces las cuatro casas de Hogwarts?-pregunto Rose extrañada, Eleine negaba con la cabeza-pues si nos dividen entre las cuatro casas, yo creo que estaré en Gryffindor, porque toda mi familia estuvo allí.

-Yo no se en cual quedare, por que mis padres nunca fueron a Hogwarts y tampoco se las diferencias entre unas casas y otras-le contesto pensativamente Eleine.

-Depende, en Hogwarts te seleccionan de acuerdo con tus habilidades- Eleine la miraba confundida, Rose explicó- por ejemplo a Gryffindor van los valientes y nobles, a Ravenclaw los inteligentes y sabios, a Hufflepuff los leales y trabajadores y a Slytherin van los magos astutos y ambiciosos.

-Pues creo que yo estaré en Slytherin, porque me considero astuta- Eleine rió

-Yo que tu no lo preferiría- dijo por primera vez Albus- de Slytherin es donde más magos oscuros salieron, no te recomiendo esa casa.

-Pues sabiendo eso tengo más ganas de que me seleccionen allí, porque hay que demostrar, que es la persona que se vuelve oscura por decisión propia y no por donde o con quien esta-concluyo Eleine de forma definitiva- ¿y tu donde esperas estar?-añadió, pero su tono de voz seguía firme.

Albus se quedo impresionado, porque no esperaba esa contestación por parte de la chica, a él le dio la impresión que Eleine era mucho mas madura que el y su prima, después reflexiono un poco en la pregunta que le acababa de hacer y no podía confesarle sus temores a esa "casi" desconocida y menos después de tan afirmación por su parte.

-No lo sé, pero solo espero encontrarme bien en la casa que me toque y aprovechar mis años en el colegio-le dijo a modo de respuesta Albus con ambigüedad.

-Di que si Al-dijo Rose- además no sol…

Rose se cayo de repente al ver que la puerta del compartimiento se abría y por ella aparecía un chico rubio de ojos grises.

-Eli perdona por haber tardado tanto, fue por culpa del pesado de Goyle y sus ami…- el chico también se callo a ver quienes estaban adentro.

-Chicos os presento a Scorpius Hyperion Malfoy, el es mi amigo desde la infancia-les dijo Eleine que había saltado con alegría desde su asiento a la llegada de su amigo y lo presento mirando a los primos-¿pasa algo malo?- añadió al ver las caras de unos y el otro.

Albus y Rose se miraron, lo mismo hicieron Eleine y Malfoy, pero Eleine era la única que no entendía nada de nada.

-No te preocupes Eli vuelve a tu sitio, que yo aun tengo que aclarar unas cosas con Goyle y sus amigos…-añadió Malfoy al ver el ambiente tensarse.

Dicho esto Malfoy se fue por donde había venido dejando muy confusos a Rose y a Albus.

-Eleine, ¿Desde cuando conoces a Malfoy, exactamente?-pregunto con dureza Rose.

-Ya te lo dije, desde la infancia, desde que mi familia y yo vivimos en Inglaterra, pero ¿que os pasa con el? ¿Vosotros también lo consideráis peligroso?-dijo Eleine con brusquedad, dejaba claro que no era la primera vez que eso le pasaba.

-Eleine, Malfoy es peligroso-remarco Rose- acaso… ¿no sabes la historia de su familia?-le pregunto- son mortífagos trabajaron y apoyaron al Innombrable en la guerra-explico Rose con asombro, Albus solo miraba expectante la conversación entre ambas chicas.

-Pues entonces por esa regla de tres… tú eres una heroína sin más, ¿no?-dijo con fastidio Eleine

-No se porque estas diciendo eso- replico Rose que ya se estaba poniendo roja, la verdad Albus lamentaba que las cosas se estuviesen volviendo de esa manera ya que podía notar que su prima y Eleine podrían haber llegado a ser buenas amigas.

-Pues es lo mismo, tu estas juzgando a Scor por algo que ha hecho su padre y sin darle ni una oportunidad a él, él no es su padre-exclamo Eleine, Albus no podía dejar de notar que Eleine era valiente porque ni siquiera sus primos mayores le plantaban cara a Rose de esa manera.

-Pero… pero…-balbuceaba Rose, había que reconocer que los argumentos que dio Eleine era muy poderosos-Eleine mira respecto tu amistad con Malfoy, pero no creo que pueda compartirla, ¿entiendes?, pero tampoco me gustaría que nosotras no lleváramos mal por esto, ¿en paz?-pregunto Rose, pero Albus sabia que no cambiaria de idea con respecto a Malfoy.

-Rose esto no era una guerra y solo te pido que le des una oportunidad te sorprenderá, es muy amable y atento, reconozco que es un poco bromista y desdeñoso, pero tiene un gran corazón-dijo Eleine con cariño- así que voy a ir a buscarle para terminar bien las presentaciones, ¿de acuerdo?-esta vez miraba a Rose que permanecía sin decir nada y luego puso su mirada sobre Albus, este hizo un gesto afirmativo con la cabeza y Eleine se marcho con una sonrisa en los labios.

Albus giro inmediatamente su mirada hacia su prima, esta se estaba mordiendo el labio inferior, resultaba extraño observar que por fin, Rose conocía a alguien capaz de plantarle cara y seguir igual de bien momentos después.

-No se si hacemos lo correcto, ya oíste lo que me dijo mi padre antes de subir al tren-le dijo Rose nerviosa-si se entera...

-No te preocupes Rosie, es solo hasta que lleguemos a Hogwarts y después ya se vera, además si Malfoy resulta tal y como Eleine nos contó será un gran compañero de viaje ¿no crees?-dijo Albus para convencerla, el con respecto a Malfoy aun no sabia que pensar-Además este es su compartimiento, ellos nos están haciendo un favor como mínimo le tenemos que agradecer eso, así que debemos ser agradables por lo menos hasta conocerles bien.

Después de las palabras de su primo Rose dejaba de estar colorada, pero seguía sin mostrarse convencida del todo.

Minutos después llegaban Eleine con Malfoy, Eleine se sentó con Rose y Malfoy de lado de Albus, pasaron unos minutos en un incomodo silencio hasta que Eleine decidió romperlo.

-Vosotros ya me imagino que debéis de conocer Hogwarts, estoy muy impaciente por empezar las clases, además me contaron que la Directora del colegio es una bruja muy estricta, ¿será eso verdad?-les pregunto con curiosidad Eleine.

-Si, McGonagall es una profesora muy estricta, pero también es muy buena y tiene palabras amables si las necesitas-le dijo Rose con seguridad.

-Vaya se ve que tu la conoces muy bien Rose-contesto Eleine con un poco de asombro.

-Es porque…-Rose se puso colorada- es mi madrina-concluyo

-Que suerte, es curioso, ya solo me faltaba que me dijeras que un profesor es tu padrino- le dijo Eleine y rió

-Pues…la verdad…-Rose se estaba poniendo mas roja-el profesor Longbottom es mi padrino, da Herbólogia en Hogwarts-explico Rose mientras Eleine reía, Albus y Malfoy no participaban en la conversación solo miraban y de vez en cuando sonreían tímidamente.

-Pues pensé que tus padrinos serian los Potter a decir verdad- después de esta revelación por parte de Eleine, Albus se sintió incomodo, sin saber el porque.

-Pero si no conoces a mi familia como dic…-intento decir Rose.

-Error-atajo rápidamente Eleine-no te reconocí a ti, pero reconocí tus apellidos y los de tu primo, no vivimos en Inglaterra cuando todo paso, pero eso lo saben en todo el mundo mágico, el trío de oro… son leyenda-declaro Eleine

-¡Ah! claro, y la verdad mis tíos si son los padrinos de mi hermano en el fondo no te equivocabas demasiado- Rose rió con complicidad- pero, al final no me lo has dicho…-recordó-¿de donde vienes?-pregunto con curiosidad.

-Venimos de Grecia, la familia de mi madre se mudo a Grecia en la primera guerra contra Voldemort…-en ese momento un escalofrió recorrió los cuerpos de Rose, Albus y Malfoy.

-Eli, te he dicho que no se le nombra o no se le llama por su nombre-dijo Malfoy severamente, Albus no pudo evitar apreciar que Malfoy arrastraba las palabras.

-Scor, no vengas con eso ahora, no sabes acaso que el miedo que inspira un nombre, solo aumenta el temor a lo nombrado-dijo Eleine segura, Albus se quedo alucinado, esas mismas palabras… no era la primera vez que las oía… su padre las repetía, como se las dijo un día el gran Albus Dumbledore, mago por él cual él llevaba su nombre.

-¿Quién te dijo eso, Eleine?-pregunto Albus asombrado

-Mi madre, y a ella se lo dijeron sus padres, es algo importante no debemos olvidarlo-le aseguro con confianza Eleine.

-¿Sabias que esas mismas palabras las dijo un día Albus Dumbledore?-le informo Albus, tanto Rose como Malfoy se limitaban a oírles.

-No, no lo sabia, pero eso también lo decía mi abuelo que se lo había dicho su madre, no creo que lo sepáis pero mi bisabuela lucho en la primera guerra contra Voldemort, apoyando a la orden del fénix bajo las ordenes de Dumbledore-después de esa declaración Albus y Rose se miraron mas sorprendidos aún- mi bisabuela era Marlene McKinnon, después de que la mataran, mataron a toda nuestra familia-Eleine hizo una pausa, antes de continuar-solo mis abuelos lograron escapar, simplemente porque ellos no estaban allí en el momento del ataque, después de eso se mudaron a Grecia, y supongo que ya te imaginas lo posterior-les confeso Eleine con confianza.

-Lo siento Eleine no teníamos ni idea de lo que paso-le dijo Albus con cuidado.

-No te preocupes, crecí tanto como vosotros oyendo los crímenes de ese maldito, pero gracias a Harry Potter y sus amigos-Eleine miraba divertida a Rose y Albus que se habían puesto colorados- no tenemos que temerle por que el ya esta muerto.

Eleine sonreía al igual que Albus y Rose, pero en cambio Malfoy seguía mirando si participar en la conversación, pero a Albus no noto que la historia de Eleine le sorprendiera de la misma forma que a Rose y a él, se imagino que él ya lo sabía. Eleine parecía una de esas personas que no guardan secretos, era abierta y sincera, pero a Albus su aura le trasmitía confianza y por el rostro de Rose, ella pensaba lo mismo que el sobre Eleine.

Paso el carrito de la comida, todos compraron todo tipo de chulerías, pasteles y caramelos, conversaron sobre quidditch, el colegio, sus mascotas (Eleine tenía una lechuza negra llamada Enaire) y pequeñas anécdotas sin importancia, en las que Malfoy no participaba, a Albus le empezaba a ganar simpatía, era muy respetuoso cuando hablaba y correcto, pero su aura transmitía elegancia y sofisticación, que nadie podía igualar, bueno tal vez Eleine…

-Eli-dijo de pronto Rose pasadas unas horas-¿puedo saber donde estudiaron tus padres? si dices que en Hogwarts no…

-Mis padres estudiaron en la Academia de Magia de Ankara, no es una escuela tan prestigiosa como Hogwarts, pero ellos son grandes magos, con el tiempo ya les iras conociendo…-dijo Eleine con una sonrisita.

Las chicas se fueron a cambiarse, Rose no lo necesitaba, pero fue con Eleine, para seguir conversando, además por su actitud evitaba por todos los medios cualquier mirada de Malfoy.

Albus se puso la túnica en el compartimiento con Malfoy, el no había hablado mucho, pero una vez que Rose se había ido parecía mas relajado, por la actitud de su prima Malfoy ha debido de deducir que no le caía bien.

-¿En que casa crees que estarás?-se atrevió a preguntarle Albus a Malfoy mientras se ponían las nuevas túnicas, negras del todo porque aun no habían sido seleccionados a ninguna.

-No me preocupa, supongo que en Slytherin como mi padre o mi madre, pero no descarto a las otras casas y ¿tu?-le contesto Malfoy de forma distendida como minutos antes había echo Eleine, incluso Albus se sorprendió de ese cambio repentino.

-En cualquiera, siempre que mi hermano James este lejos-contesto Albus con confianza a Albus no le parecía un chico desagradable, al menos por el momento.

-No será para tanto…-le rió Malfoy por su comentario.

-Eso lo dices ahora, ya veras cuando lo conozcas…-le dijo Albus y los dos se rieron mientras sentían que el tren estaba parando, las chicas no tardarían.

Por primera vez en el día, veía a Malfoy reírse ante alguna ocurrencia, y eso le hacia sentirse tranquilo, ya le daba igual quedarse en Slytherin, como no. El tren empezaba a aminorar el paso y junto con las chicas bajaron del tren y Albus escuchó a una voz conocida a sus espaldas.

Sonrió y sintió que por fin había llegado a Hogwarts.