Reflexiones a la luz de la luna
FanFiction Traído a ustedes por: A-Little-Dream
Un pequeño Drabble Dramione basado en mi poema favorito: "Puedo escribir los versos más tristes ésta noche" por el genio Pablo Neruda.
Disclaimer: Nada de esto me pertenece, todo es de JK Rowling.
Read&Review
Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Escribir, por ejemplo: 'La noche está estrellada,
y tiritan, azules, los astros, a lo lejos'.
Pablo Neruda
"Juro Solemnemente que mis intenciones no son buenas"
Se encontraba acostado en el pasto, mirando las estrellas que esa noche resplandecían más bellas que nunca con un suave tono azulado; Su cabello se movía lentamente, al ritmo de la suave brisa de la noche; Su rostro, pálido, parecía brillar con el reflejo de la luna llena y sus ojos, esos ojos plata que no mostraban sentimiento alguno en presencia de otros, estaban llenos de pena.
"Lo siento," había dicho ella "Pero ya no te amo".
Esas palabras habían llegado al fondo de su corazón, e irónicamente, lo había destruido desde ese lugar. Y ahora estaba ahí, tendido, sumergiéndose en un océano de "hubiera" y de lenta desesperación.
Y recordaba. Recordaba cuantas noches como aquella había pasado junto a ella, besándola y susurrándole cuanto la quería. Y ella respondía de igual manera, con sus hermosos orbes chocolate mirándolo fijamente.
Cuanto lo había lastimado. Cuánto dolor había pasado por ella. Le había abierto su corazón y ella lo había rechazado. Y además, aquel hombre se encontraba con el orgullo. Ese maldito orgullo que le recordaba que la había perdido, que no había sido suficiente para ella. Y esa chica lo había pisoteado, inconscientemente, pero lo había hecho. No quedaba nada de su orgullo Malfoy.
Soltó una carcajada. Si su padre volviera de la tumba volvería a morir al verlo en aquel estado, y peor, por una sangre sucia. Y se lo llevaría con él, de eso estaba seguro. Y eso no le desagradaría, ¿Qué tan mala puede ser la muerte? No peor que aquel sufrimiento.
Escuchaba el silencio a su alrededor, ahorcándolo y abriéndole las heridas. Y la infinidad del cielo estrellado parecía aún más inmenso sin la suave voz de ella a su lado.
Y de pronto, dejó de importarle que su amor no pudiera guardarla. Porque al fin y al cabo ella ya no estaba con él. Las estrellas no eran hermosas, ni la brisa calmante.
Sentía que su corazón roto la buscaba. La buscaba a cada momento, al igual que su fría mirada. Buscaba el consuelo que solo ella podía darle. Pero ella ya no estaba, y aún así, su alma no se contentaba con haberla perdido.
Ya no eran los mismos jóvenes que se había prometido amor por toda la eternidad. Que habían superado una guerra para estar juntos. Que había roto todas las reglas para no separarse jamás. No, no eran los mismos, y jamás lo serían.
Ya no quería amarla, y no lo haría. Obligaría a su corazón a olvidarla y a su mente a borrar sus recuerdos. Porque ella ahora era de otro. Otro la tenía entre sus brazos y le decía dulces palabras al oído, cómo él hizo alguna vez.
Ya no la amaría, era verdad, pero cuanto la amaba en esos momentos. Aunque fueran los últimos en los que pensara en ella, y las últimas palabras que le dedicaría.
"Travesura Realizada"
