Capítulo 1 - Viejos personajes tienden a regresar
Era un día normal en el Yorozuya, con Shinpachi haciendo las tareas del hogar y dando un sermón a Kagura, que acababa de venir de compras con un rollo de papel higiénico en lugar de un paquete de ellos y Kagura ignorándolo, diciendo: que la vida era demasiado corta para sermones y papel higiénico cuando Gintoki abrió la puerta de su habitación, aun con los efectos de una resaca.
"Hei, ¡Silencio! No saben que aquí hay una pobre persona sufriendo". Gritó el samurái de pelo plateado enfadado, con enormes ojeras.
"Gin-san, usted es que debería dejar de beber tanto, con eso y la diabetes, no durarás mucho tiempo." Reprendido Shinpachi mientras limpiaba el suelo.
"¡Cállate de una vez, megane maldito! ¡Los personajes principales de anime son inmortales! "Dicho esto tomó su bokuto que estaba apoyada en su escritorio y se dirigió a la puerta. "Voy a caminar si la vieja viene cobrar el alquiler, dile que morí."
Cuando el samurái de permanente natural bajo las escaleras del Yorozuya sintió algo tirando del fondo de su kimono, bajó la cabeza y dijo con cara de asombro. "¿Otra vez tú?"
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En el Yorozuya Kagura estaba tranquilamente sentada en el sofá comiendo sukonbu mientras Sadaharu estaba sentado encima de Shinpachi casi rompiéndole las costillas.
"¡Kagura-chan! Ayúdame, por favor. "Pidió a la pobre chico quejándose del dolor.
"Es fácil Shinpachi. Sólo tienes que liberarte de tu apoyo de gafas. "Dijo la pequeña Yato mientras masticaba su amado sukonbu.
Shinpachi, que estaba a punto de llorar de dolor físico y emocional, dijo. "¿Por qué siguen con esa viejo broma?"
El dúo cómico se vio interrumpido por un niño riendo. Se volvieron hacia la puerta y vieron a su líder con un chico que debería tener alrededor de tres años, con una permanente natural plateada y ojos de pez muerto.
"Son más tontos de lo que recordaba."
"¡Silver J. Fox! ¡Cuánto tiempo! "Dijo la niña se levantando del sofá con entusiasmo. "¡Y encima ya sabes caminar y hablar!"
"¿Qué clase de nombre es ese! No ves que es el bebé que pensamos que era el hijo bastardo de Gin-san, pero en realidad era el nieto de uno de los más grandes empresarios de Edo, el pequeño Kanshichirou-kun. "Regañó el joven de gafas mientras se levantaba del suelo.
"¡Nadie te pidió que hicieras un resumen, Shinpachi!" Gritó Gintoki mientras tomaba un papel doblado de su kimono. "El chico me dio esto."
"Parece ser una carta" Shinpachi tomó la carta y empezó a citarla. "Querido Gin-san, ya que Kanshichirou no se ha olvidado de vuestra aventura decidí pedir que cuiden de él, vuelvo a recogerlo al final del día, firmado Ofusa."
"Vaya, sé que dije que si todavía me recordase, que me podría visitar, pero no esperaba que fuera sólo 3 años más tarde", dijo Gintoki cansado mientras se frotaba la cabeza.
De repente Shinpachi y Kagura ya estaban rodeando al pobre chico.
"¡Oh! ¡El Kanshichirou-kun creció mucho en estos años! "
"Ten, prueba algo sukonbu."
"Hey! No me molesten, he venido aquí sólo para estar con el tío Gintoki "El pequeño aplasto los pies de Kagura y Shinpachi que rápidamente se alejaron con una expresión de dolor. "Tío Gintoki, vamos a dar un paseo."
"¡Oi! ¿Quién te crees que eres para llamarme de tío? ¡Para ti es Gin-san! Y lo más importante, ¿por qué crees que puedes pasar tiempo conmigo? "Dijo el samurái de cabello plateado.
"Si tenemos esto podemos visitar la gente importante, ¿no es así?" El muchacho cogió de la bolsa que traía, una manzana y se la mostró a Gintoki. "Appo."
"Mira Shinpachi, el se convirtió en un mini Gin-chan."
"Supongo que no tengo otra opción, mocoso vamos." Y salieron con el muchacho en los hombros del Samurái.
"Gin-san debería ser más honesto, es obvio que él también quiere pasar tiempo con Kanshichirou-kun." Pensó Shinpachi mientras regresaba a las tareas domésticas.
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Los dos estaban sentados en silencio en el parque de Edo, con cada uno bebiendo un paquete de leche de fresa.
"Gin-san, ¿podrías enseñarme a usar una espada?" Preguntó el joven mientras tomaba la bokuto de Gintoki.
"Chico, eres un héroe novato que acaba de comenzar el juego y que ahora quiere estar en el nivel 100 para derrotar al Rey Demonio." Dijo Gintoki soltando otro de sus discursos sin sentido. "Aún te falta muchos años para que te pueda enseñar. ¿Hey no me escuchas? "Cuando el samurái giró su cabeza, el niño y su bokuto habían desaparecido. "Estoy muy jodido."
"¡Ah! ¿Qué debo hacer? ¡Perdí mi Toyako! Espera, eso no es tan importante. ¡Pero perdí el niño! Calma Gin-san. Sólo te-tengo que encontrar u-una má-máquina d-del ti-tiempo. "Tartamudeo el samurái mientras se puso bajo de un banco del parque."
Durante este "pequeño" ataque de pánico, Hijikata y Sougo se acercaron debido al ruido excesivo.
"Danna. ¿Qué estás haciendo? "
"No ves Sougo! Este idiota apenas está buscando una máquina del tiempo."
"¿Por qué quieres una máquina del tiempo, Danna? ¿Embarazaste a alguien que no debías? "
Al escuchar sus voces, Gintoki se levantó de inmediato, lanzando el banco a través del aire, aterrizando en príncipe idiota que pasaba y gritó aferrándose al abrigo del subcomandante. "Por favor, señor oficial, yo he perdido a un niño que se no encuentro mi reputación como Yorozuya será aún más baja de lo que ya es y yo necesito el dinero, debido a mi adicción al azúcar! Ha también estoy preocupado por su seguridad. "
"Cálmate un poco Danna. ¿Qué ha pasado? "Preguntó Sougo mientras separaba su superior e el samurái.
Entonces Gintoki les explicó la situación hasta el momento.
"Honestamente, pensé que no podrías ser más tonto." Dijo Hijikata mientras encendía un cigarrillo con su encendedor especial.
"Ustedes son policías, ¿verdad?" Dijo Gintoki hacia los dos miembros del Shinsengumi. "Entonces, busquen el niño desaparecido."
"El Shinsengumi es una fuerza especial de la policía que sirve para cazar y eliminar a los terroristas y rebeldes que están en contra del shogunato." Dijo el subcomandante demoníaco.
"Sí, una fuerza especial que hace excursiones con los niños, prende borrachos y mantiene el control del tráfico." Dijo el samurái de permanente con un tono irónico.
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Mientras que la discusión estaba en curso en el parque, un niño de cabellos plateados caminaba por las entrañas del Distrito Kabuki con una bokuto por encima del hombro. Pero como era el Distrito Kabuki, nadie se importó al ver un niño solo con un arma. Después de caminar bastante, Kanshichirou se sintió cansado y decidió sentarse, pero él no se dio cuenta que estaba sentado encima de un chucho rabioso que luego lo empujó al suelo.
"¡Oi! ¿Por casualidad sabes con quién diablos te estás metiendo? "Gritó el pequeño levantándose y agitando la bokuto con dificultad, debido al peso. "Yo soy el gran samurái, Kanshichirou-sama!"
El chucho se limitó a gruñir.
"Lo digo en serio, ¡te hago daño!" Dijo sudando y temblando de miedo.
Una vez más el perro gruñó.
"N-no me metes miedo."
Esta vez ladró, haciendo Kanshichirou huir con el perro persiguiéndolo. Durante la persecución pisotearon Hasegawa que acaba de salir del pachinko, con los bolsillos vacíos.
"¿No he visto a ese chico antes?" Pensó el madao, todavía en el suelo, con marcas de patas y sandalias de madera en la espalda.
Cuando el joven finalmente se deshizo de su perseguidor, se encontró en un lugar diferente de donde estaba.
"Pero ¿dónde demonios estoy?" Se preguntó Kanshichirou mientras se rascaba la cabeza.
Un borracho que estaba cerca y oyó la pregunta, respondió. "Mocoso, este sitio no es para alguien de tu edad, esto es Yoshiwara."
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El trío problemático del parque decidió buscar al niño, junto con Kagura y Shinpachi y 3 horas más tarde todos se reunieron en la estatua del parque de Edo
"¡Gin-chan, esto es capaz de engañar a la madre!" Kagura trajo una muñeca en sus brazos con una peluca despeinada y plateada.
"Kagura-chan, no creo que eso engañe a Ofusa-san." Dijo Shinpachi, haciendo su trabajo de chico serio.
"Realmente mocosa sólo alguien retrasado le ocurriría ese plan." Dijo Sougo trayendo cinco mujeres jóvenes con una correa, que ni siquiera estaban molestas. "Tenemos que hacer un nuevo bebé con los genes de ojos de pez muerto y permanente natural plateada de Danna." Bajó una gota de sangre de la nariz de Gintoki.
"¡No eres más que un sádico pervertido!" Dijo Kagura hacia el capitán de la primera división del Shinsengumi.
"¿Quieres pelear?" Cuando los dos estaban casi empezando a luchar, Kagura hecho una mirada fatal para las seguidoras de Sougo, que luego huyeron con miedo. "¿Qué pasa? ¿La mocosa está celosa?" 5 Segundos después el sádico ya estaba en el suelo después de haber tomado un poderoso puñetazo de Kagura que estaba de cabeza baja, para no se notar que se había sonrojado.
"¡Hey! ¡Dejad de hacer tonterías! "Gintoki separó a los dos antes de que se matasen. "Todavía tenemos mucho que buscar."
"Al final, ¿por qué tenemos que ayudarte?" Dijo Hijikata con una muñeca similar a la de Kagura en la espalda, al parecer, tuvo la misma idea. Lo lanzó hacia atrás, golpeando el príncipe Hata que acababa de recuperarse del asiento volador. "No tenemos nada que ver con eso."
"No digas eso Hijikata-san, ¿has pensado en la cantidad de veces que Danna nos ayudó en los momentos difíciles?" Dijo Sougo aún con una hinchazón rojo en la cara, debido al golpe de Kagura.
De pronto, una abertura de anime Shoujo comenzó a sonar y todo el mundo miró a Hijikata que contestó el teléfono. "Aquí Hijikata. Ok, ahora vuelve al trabajo." Cuando Hijikata colgó, todos todavía miraban fijamente. "Bueno Yamazaki dijo que vio a un chico que coincide con la descripción, corriendo hacia Yoshiwara." Y el trío Yorozuya corrió en esa misma dirección.
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El chico andaba por la ciudad que parecía estar en un agujero, cuando alguien le tocó el hombro.
"¿Te has perdido pequeño?" Dijo Seita, que quedó completamente sorprendido cuando Kanshichirou se volvió, revelando una cara idéntica a cierto samurái conocido. El más joven se sorprendió con la reacción del chico que acababa de conocer.
Después de Seita se calmar, acompañó al niño al café donde estaban Tsukuyo Hinowa bebiendo té, que pronto fue expulsado de sus bocas al ver Kanshichirou entrar.
"Seita-kun. ¿Quién es tu amigo? "Preguntado Hinowa después de asfixiar-se con a su té.
"Él dijo que se llama Kanshichirou." Explicación Seita llevando la bokuto. "Lo encontré vagando perdido por la ciudad con la espada de Gin-san."
"Oh, qué extraño. ¿No crees que Tsuky-chan?" Tsukuyo estaba en silencio mirando al recién llegado, ya con una palpitante vena en la frente y con el vaso casi se rompiendo, lo que asustó un poco Hinowa. "Bu-bueno, debes estar cansado, ¿quieres algo de beber?"
"Leche de fresa, por favor." Y con esta respuesta Tsukuyo rompió el vaso por completo.
"Lo siento, ¿pero por casualidad conoce a un samurái llamado Sakata Gintoki?", preguntó Tsukuyo, mientras se limpiaba las manos y trató de calmarse.
"Por supuesto, el me enseñó grandes lecciones de vida y también me enseñará cómo usar la espada." Dijo el niño, lo que sorprendió Hinowa y Seita.
Un aura oscura se formó envuelta de Tsukuyo. Y en el peor momento, un cierto samurái de cabello plateado llegó corriendo y dijo cansado. "Han visto por casualidad a... ¡Ha! Estás aquí, maldito mocoso. ¿Sabe lo que tu madre me haría si se enterase de que te perdí? "
"Gin-to-ki" La cortesana de la muerte, con una gran patada, lanzó al samurái contra la pared del café, haciendo que se atascara. "Él es tu hijo, ¿no es así?"
En ese momento Kagura y Shinpachi entraron corriendo en el café.
"Gin-san, ¿ha tenido algo de suerte?"
"Hey, ¿dónde está el Gin-chan?
Entonces todos los que estaban en el café, incluyendo Kanshichirou, señalaron a la pared donde estaba Gintoki. Después de Kagura reírse de la situación de su líder, ayudó a sacarlo de la pared mientras Shinpachi explicaba la situación.
"Lo siento mucho por mi error." Dijo Tsukuyo con total sinceridad.
"No, no hay problema." Dijo Gintoki, que estaba con un inmenso dolor, moretones, un ojo muy hinchado, con una o dos costillas rotas y tosiendo sangre. "Estoy bien."
"No Gin-san, no estás bien, es obvio que tienes de ser hospitalizado."
"No digas estupideces Shinpachi, soy como un hombre de goma, un golpe normal, no me duele." Dijo Gintoki mientras se forzaba para que su dolor no se notará.
"Gin-san. De todos modos, eso no fue un golpe normal, fue sin duda un golpe cargado de Haki." Dijo Shinpachi levantándose. "Ahora tengo que ir a casa si no empezar a hacer la cena temprano, mi hermana va a tener que hacerla."
"Bueno, entonces vamos." Gintoki se iba con Kanshichirou en un brazo y con el otro tiraba de Kagura, que ya estaba en el décimo plato de arroz, cuando fue interrumpido.
"Creo que Gin-san no puede manejar todo solo. Tsuky-chan, ¿por qué no lo acompañas? ", preguntó Hinowa, pero cuando vio que iba a negarse, dijo. "Es una orden." Y con eso ella no pudo rechazar.
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Más tarde en el parque de Edo, Gintoki se sentó en el banco donde estaba Tsukuyo porque estaba cansado de verse obligado a jugar con Kanshichirou, Kagura y Sadaharu.
"No puedo soportarlo más. Dios si me libras de esta maldición prometo que voy a deshacerme de mi adicción a leer Jump.
"No creo que cuidar de niños sea algo tan malo. Después de todo, es una buena práctica para los futuros hijos. "Dijo Tsukuyo quedando un poco sonrojada.
"Tener hijos sólo es bueno cuando crecen y cuidan de nosotros." Dijo Gintoki mientras miraba a los niños jugando en el parque.
"Supongo". Dijo Tsukuyo.
Después de eso, hubo un momento de silencio incómodo, que afortunadamente fue interrumpido por la llegada de Ofusa.
"Gin-san, el Shinpachi-kun me dijo que estaban aquí. He venido a buscarlo para irnos a casa."
"¡No! Quiero estar más tiempo con Gin-san!" Gritó el pequeño Kanshichirou.
Así que el samurái se acercó al muchacho y se agachó. "Mocoso, es el momento de decir adiós." Cuando él vio que estaba a punto de llorar, dijo. "Un verdadero samurái no debe llorar. Y aquí tienes la prueba de que eres un verdadero samurái." Y Gintoki le dio su bokuto.
"Gintoki, ¿estás seguro?" Preguntado Tsukuyo.
"No hay problema, de todos modos puedo comprar otra." Dijo Gintoki mientras frotaba la cabeza del muchacho.
"Kanshichirou. ¿Qué se dice? "Preguntó Ofusa, tomando la mano de su hijo.
"Gracias Gin-san y adiós a todos." El niño se despidió sin soltar una sola lágrima y con una gran sonrisa, como si tuviera la sensación de que se volverían a ver.
De repente, como un rayo, algo recorrió el cerebro de Gintoki. "¡Oh, no!"
"¿Qué pasa?" Preguntó Tsukuyo preocupada.
"¡Mi novela comienza en tres minutos!" Gritó el samurái. "¡Kagura, Sadaharu vamos!" Y con eso se fueron corriendo.
"Honestamente, algunas personas nunca cambian." Dijo Tsukuyo indo en dirección a Yoshiwara.