Como un No muerto has vivido, como un Elegido fuiste seleccionado por tus defectos y virtudes, como Cazador te adaptaste al ambiente y como un Héroe serás recordado por tus acciones desinteresadas a lo largo del trayecto.
Ohayo, bienvenidos todos a este One-Shot de esta pareja tan poco utilizada en el Fandom. En verdad es mi segundo Ship favorito y me parece extraño que más autores no lo hayan explorado más a excepción de unos pocos, la cifra sencillamente no sube por encima de los veinte, por lo que ahora la bautizo como ¡IZUJIRE!... a menos que ya haya sido bautizada antes, como dije no se explora tanto y no sé si tiene un nombre listo. Dejando eso de lado lo mejor será comenzar de una vez… Go.
Disclaimer: Los personajes de Boku no Hero Academia le pertenecen a su creado Kosei Horikoshi, por lo cual escribo sin lucro alguno y solo por diversión.
One-Shot: Preguntas de Felicidad
Nos encontramos en la más prestigiosa escuela de héroes en Japón, U.A siendo el pináculo de academias que educan a los héroes del mañana. Hay una banca al aire libre dentro del gran campus de la escuela, y en esa banca se encontraba Izuku Midoriya, el noveno usuario del One For All y alumno de la clase 1-A que ya estaba cursando sus últimos meses para graduarse y pasar a segundo año.
El peliverde observaba el hermoso y despejado cielo azul y sentía las suaves brisas en su piel, parecía perdido en sus pensamientos mientras que otros estudiantes que estaban por la zona se divertían utilizando sus Quirks para aprovechar ese día libre de escuela.
Estaba allí desde hace varias horas con una mirada angustiada y hasta preocupada tratando de llegar a una conclusión con los promesas que le agobiaban.
Hace días había comenzado a ver más seguido los vestigios del One For All y por consiguiente se enteraba más del gran peso que cargaba al portar el Quirk que era fruto del esfuerzo de los ocho portadores antes que él, siendo su mentor All Might uno de ellos. El problema recaía en que ahora se planteaba la duda de si era realmente digno de tener tal importante poder en sus manos, y eso comenzó una batalla mental contra sí mismo de la cual parecía no estar ganado.
Unas delicadas manos taparon los ojos del peliverde desde atrás poniendo nervioso al chico que había sido tomado por sorpresa.
-¿¡Q-Quién apagó la luz!?-, preguntaba Izuku alterado y con nervios al ver todo negro en un momento.
-Hehe, no te preocupes Izu-kun, soy solo yo-, dijo una voz familiar al peliverde dejándole ver de nuevo para que este se girara a ver a Nejire, la cual portaba esa hermosa sonrisa típica de ella.
-N-Nejire-Senpai, ¿Qué hace aquí?-, le preguntó Izuku a la peliazul mientras que esta rodeaba la banca para luego sentarse al lado del peliverde que tenía su mirada fija en la hermosa chica que tenía bien merecido el ser la reina de belleza de ese año.
La peliazul se giró a verle divertida.
-Pues todavía no me he graduado tontito, aun me quedan unos meses más para disfrutar este lugar-, respondió Nejire mirando al peliverde.
-N-No me refería a que quisiera que se f-fuera o algo así, e-es que yo…-, trataba de aclararse el peliverde con una sonrisa nerviosa y moviendo sus manos al frente de su cara con algo de vergüenza.
Luego Nejire dirigió su mirada al cielo azul interrumpiendo el nerviosismo del peliverde que se calmaba para poner su atención sobre la peliazul que no parecía tan enérgica como siempre.
-Sabes te he estado viendo desde hace unas horas y pude notar que algo te preocupa-, decía Nejire con una leve sonrisa viendo el cielo para después mirar de reojo a Izuku que se tensó viéndose descubierto.
-¿Es correcto?-, le preguntó la peliazul mientras se inclinaba hacia el peliverde para mirarle desde más cerca.
-P-Para nada, solo estaba pensando en algo-, respondía Izuku agachando la mirada y mostrando una sonrisa fingida al recordar el dilema que le agobiaba.
-¿Y qué es eso?, ¿me lo puedes decir?-, preguntó Nejire intrigada y curiosa viendo directamente al peliverde mientras se acercaba más amenazando con invadir su espacio personal.
-Es que es algo que debo mantener en secreto y es delicado-, respondía el chico con un tono algo apagado y triste mirando su regazo, la verdad le encantaría decirle a Nejire pero el asunto de One For All seguía siendo un secreto que mantener oculto.
-Entonces si te preocupa algo-, dijo Nejire ensanchando su sonrisa satisfecha al haber confirmado su sospecha, el peliverde por su parte se tensó y se regañó por no haber respondido diferente.
-De cualquier modo puedes contármelo todo y no le diré a nadie, sabes que puedes confiar en mí-, le dijo Nejire al peliverde mientras que se alejaba para darle su espacio al chico.
-E-Eso lo sé Senpai, pero es que esto es algo que puede ser difícil de entender-, decía Izuku con algo de nervios buscando quitarle las ganas a la peliazul de saber lo que le ocurría.
-¿Es qué no confías en mí?-, preguntó Nejire con una hermosa sonrisa enseñando sus blancos dientes, cosa que dejó paralizado a Izuku mientras meditaba en si decirlo o no su secreto a su Senpai.
Ambos eran muy buenos amigos y se compartían toda clase de cosas entre ellos, la verdad es que hasta se juntaban en las horas de receso para conversar resultándole extraño a las clases a las cuales ambos pertenecen. Ahora Izuku se cuestionaba si decirlo o no, en realidad era un secreto muy importante a pesar de que Kacchan se enterara por cuenta propia, pero con que una persona más lo supiera no hacía daño, además era Nejire a quien se refería, ella era la chica en la que más confianza tenía.
Y ante esto Izuku por fin accedió a contarle todo y así lo hizo. Le explicó su estado como Quirkless desde niño y de su encuentro con All Might que lo llevaría a heredar el One For All y por consiguiente explicó todo lo que rodeaba al Quirk y su origen con All For One.
La peliazul escuchaba una frase y preguntaba el doble de lo que escuchaba, y así prosiguieron hasta que ya toda la historia con el One For All fue contada.
-¿Entonces tienes un Quirk que se puede entregar, tu mentor es All Might y tu deber es controlarlo completamente para ser el próximo símbolo de la paz?-, preguntaba Nejire tratando de resumir los puntos más importantes de lo que escuchó.
-E-Es correcto, Senpai-, respondió Izuku con una pequeña sonrisa pensando en que ella se lo estaba tomando con más calma de lo que creía en un principio.
-¡Es asombroso!-, exclamó la peliazul con emoción elevando sus brazos al cielo e inconscientemente disparar ondas de aire no muy potentes que ondularon los rizos del peliverde.
-S-Shhh, no levante tanto la voz-, el decía Izuku a Nejire ya que la voz de la chica casi captaba la atención de los estudiantes que estaban a metros de la banca en la que estaban sentados.
-Lo siento, pero en verdad que eso es increíble, no entiendo que te preocupa entonces-, le dijo Nejire al peliverde con una pequeña sonrisa calmándose para escuchar al chico.
Izuku al oír la pregunta agachó la cabeza con una sonrisa triste.
-Lo que sucede es que One For All es muy poderoso y sin duda es el fruto del trabajo de All Might y los anteriores usuarios, no me siento a la altura para considerarme digno de tenerlo-, respondió el peliverde sintiéndose demasiado pequeño ante la responsabilidad de cargar con su Quirk.
-Pero tu dijiste antes que quisiste ser un héroe desde pequeño y que tu héroe favorito es All Might, ahora tienes un Quirk y tu mentor es el mismísimo All Might que te apoya para lograr tu meta de ser un héroe, ¿entonces cuál es el problema?-, le preguntó Nejire con una sonrisa sin verle el problema al asunto.
-El problema es que tengo que cumplir con las expectativas de alguien que será el símbolo de la paz y no creo que yo pueda cumplir esos estándares-, respondió el peliverde mostrando más de su tristeza e inseguridad al momento de apretar sus puños.
-¡Eso es absurdo Izu-kun!, ¡tú eres increíble y serás el mejor símbolo de la paz!, ¡te lo aseguro!-, exclamó Nejire con una enérgica y alegre sonrisa siendo sincera en cada una de las palabras que decía.
Izuku le sonrió como pudo a la peliazul.
-Gracias por tratar de animarme Senpai, pero considero que si Mirio-Senpai tuviera el One For All sería mejor-, dijo Izuku pensando en que podría darle el One For All a su Senpai que ya no tenía Quirk, o por lo menos hasta el momento.
-Es por qué All Might tenía planeado dárselo a Mirio antes de conocerte, ¿verdad?-, le preguntó Nejire al peliverde recibiendo un asentimiento de él.
-Allí ya tienes tu respuesta Izu-kun, ¿es que no lo ves?-, le dijo la peliazul al peliverde con una gran sonrisa y tomando de los hombros al chico que estaba intrigado ante lo que dijo.
-¿A qué se refiere, Senpai?-, preguntó Izuku algo confundido por lo que decía la peliazul.
Allí Nejire amplió su sonrisa al momento de responder.
-All Might tenía planeado dárselo a Mirio en un principio, pero consiguió a alguien que consideraba más digno para tenerlo y ese fuiste tú Izu-kun, All Might vio lo que hay dentro de ti y supo que tú eres el indicado-, le dijo Nejire a Izuku con un tono reconfortante y cálido mientras que el peliverde parecía no muy convencido.
-P-Pero Mirio-Senpai podría ser más fuerte aun y llegaría a ser mejor para el papel que yo-, trataba de decir Izuku con un poco de nervios ante la proximidad de su cara con la de la peliazul.
Nejire al escucharle le miró con más seriedad que resulto desconcertante para Izuku.
-Siempre te estas menospreciando, eso es algo que tienes que arreglar Izu-kun-, le dijo Nejire a su amigo mientras negaba con la cabeza, ya que sabía de la actitud del peliverde y no le gustaba que se degradara así mismo o se subestimara.
Allí la peliazul se alejó de Izuku para mirarse las manos concentrada.
-Saltaste a salvar a Bakugou a pesar de que no tenías Quirk, destruiste al cero puntos solo porque viste que Uraraka-chan necesitaba ayuda, luchaste en USJ para salvar a tus amigos y ayudar a All Might, perdiste en el festival deportivo para salvar a Todoroki de su pasado…-, enumeraba Nejire con seriedad mientras levantaba un dedo por cada acción notoria del peliverde.
-N-No hace falta que siga hablando, Senpai-, decía Izuku con algo de vergüenza y nervios tratando de detener a su amiga.
-Aun no termino… Fuiste en ayuda de Lida-kun contra el asesino de héroes, salvaste a Kota-kun de ese villano en el viaje escolar, fuiste a Kamino solo para rescatar a Bakugou de los villanos, salvaste a Eri-chan derrotando a Chisaki donde yo soy testigo, también evitaste que se cancelara el festival cultural al haber impedido que ese tal Gentle atacara la academia, ¿quieres que siga?-, le preguntó Nejire al peliverde con seriedad.
-C-Con eso es suficiente, Senpai-, respondió Izuku con una sonrisa nerviosa.
-Y para colmo todo lo hiciste con un Quirk que tuviste que aprender a controlar de grande mientras que el resto lo tiene desde pequeños, a lo que quiero llegar es a que a mis ojos eres la persona más digna para convertirse en el mejor héroe, Izu-kun-, decía Nejire formando una radiante sonrisa que causó que Izuku abriera los ojos y un sonrojo se forme en sus mejillas.
-Senpai-, fue lo único que pudo decir Izuku ante el impacto que tuvieron las palabras de la peliazul en él.
Allí Nejire tomó de las mejillas al peliverde para acercarle a su cara y verle con una gran sonrisa.
-Así que quiero que dejes de estar preocupado por eso y muestres esa sonrisa que tanto me gusta, ¿está bien?-, le dijo la peliazul inclinando ligeramente la cabeza hacia un lado.
-¡S-Si!, muchas gracias Senpai, creo que ya me siento mejor-, contestaba Izuku formando una sonrisa animada de las suyas sin importarle esta vez la cercanía que tenia del rostro de la peliazul, sencillamente se sentía mucho mejor ante las palabras que recibió y solo le quedaba mostrar su alegría.
-Me alegra saber eso-, le dijo Nejire soltándole de las mejillas con amabilidad para después fijar su vista en el hermoso cielo que ya estaba dando paso al atardecer.
Ambos se quedaron un cálido y cómodo silencio hasta que el peliverde se giró a ver a Nejire.
-Una pregunta Senpai-, dijo Izuku captando la atención de ella que se giró a verle.
-¿Cómo es que se enteró sobre lo de Gentle?, que yo sepa casi nadie lo sabe-, le preguntó el chico intrigado.
-Eso es simple, todo el tiempo me la pasó preguntándoles a la clase 1-A y a los profesores de lo que logras hacer-, respondió Nejire con sencillez y una gran sonrisa que tomó por sorpresa al peliverde junto con sus palabras.
-¿Q-Qué?-, preguntó Izuku con una sonrisa nerviosa pensando que no escuchó bien lo que dijo su amiga, la cual asintió sin quitar su sonrisa para tomar la palabra.
-Todos me cuentan lo que vieron y si se resisten pues les sigo preguntando hasta que por fin me responden-, le explicó la peliazul con alegría recordando los muchos intentos de Aizawa o el director Nezu por tratar de ocultarle información, pero al final siempre cedían.
-¿Y p-por qué pregunta sobre mí, Senpai?-, preguntó Izuku con las mejillas muy sonrojadas y curioso ante las acciones de su Senpai.
Nejire se giró a ver nuevamente el cielo bajo la mirada del chico.
-Pues porque me gustas, Izu-kun-, respondió la chica alegre con una gran sonrisa en su cara mientras que sus mejillas se sonrojaban levemente para completa sorpresa del peliverde que se quedó paralizado por varios segundos.
-¿¡E-EHHH!?-, exclamó Izuku a todo volumen y perdiendo completamente la compostura al momento en que su rostro se volvió completamente rojo y sus ojos giraban en espiral.
-¿¡Y-Y-Yo te g-gusto!?-, preguntaba el peliverde completamente sorprendido y nervioso viendo a la peliazul que se giró a verle con su hermosa sonrisa que la caracterizaba.
-Claro, ¿no te diste cuenta?-, le preguntó Nejire mientras inclinaba un poco su cabeza hacia un lado en un gesto muy lindo.
-P-P-Pues y-yo no, n-nunca pensé que e-estuviera pensando de esa manera en mi…-, respondía a duras penas Izuku a causa de sus nervios y el rápido latido de su corazón que parecía a punto de explotar.
-Fue a causa de Mirio que comenzamos a compartir palabras y después de lo que pasó con los Yakuza nos encontrábamos para visitar a Eri-chan, ¿lo recuerdas?-, le preguntaba Nejire mientras que volvía su vista hacia el hermoso atardecer que se estaba formando al frente de ellos donde ya los demás estudiantes se habían ido dejándolos solos.
-S-Si, a partir de allí comenzábamos a divertirnos con ella para alegrarle y hacerle compañía-, respondía Izuku con más calma y también mirando el panorama al recordar aquellos momentos donde la peliazul y él cuidaban de la pequeña y se divertían juntos.
-Pues creo que desde ese momento me comencé a interesar en ti, Izu-kun-, dijo Nejire con seguridad en su tono que descolocó al peliverde que se giró a verle con los ojos ligeramente abiertos.
Nejire tornaba su sonrisa en una más cálida y gentil y su mirada se mostraba más suave.
-Parecías muy contento cuando hacías sonreír a Eri-chan y siempre que podías ayudar a alguien lo hacías sin esperar nada a cambio, luego fue cuestión de tiempo para que comenzara a descubrir nuevos aspectos de ti que me gustaron también-, decía la peliazul con una cálida sensación creciendo en su pecho a medida que hablaba.
-Eres inteligente, amable, servicial, honesto, confiable, generoso, gentil, además de que cuando el momento lo requiere te vuelves determinado, decidido, seguro y tu cara muestra cierta aura que hace que confíes en que las cosas estarán bien-, proseguía Nejire mientras que la sorpresa en la cara de Izuku aumentaba a la vez que su sonrojo al escuchar esas palabras de la bellísima peliazul.
Luego ella se giró a ver nuevamente al peliverde, pero esta vez con una mirada más firme captando la atención del chico.
-Así que te lo digo de nuevo, Izu-kun-, dijo Nejire tomando de las manos al peliverde que le miraba atentamente a pesar de su sorpresa.
-Me gustas-, declaró Nejire completamente segura y formando una hermosa y despampanante sonrisa que cautivó al peliverde que no podía salir de ese mágico mundo al cual le transportaba la peliazul cuando le veía sonreír.
-¿Y tú?-, le preguntó Nejire mostrándose curiosa, causando que Izuku despierte de su pequeño mundo.
-¿Y-Yo?-, preguntó Izuku sonrojado y un poco nervioso ante la pregunta.
-¿Qué sientes por mí, Izu-kun?-, le preguntó Nejire mientras sonreía divertida ante los nervios del peliverde.
-M-Me siento feliz de que sienta eso por mí, Senpai-, respondía el peliverde con una sonrisa tímida mirando a la peliazul que ensanchó su sonrisa al escuchar eso.
-Pero pienso que alguien como tú se merece a alguien más seguro y extrovertido, no a alguien como yo que tiene estos momentos de inseguridad-, agregaba el chico bajando la mirada con tristeza y con amargura en su boca al decir esas palabras.
Nejire tomó de las mejillas a Izuku con firmeza para acercar sus caras.
-Te hice una pregunta Izu-kun ¿Qué sientes por mí?-, preguntó Nejire con una mirada llena de gentileza y cariño que hacía sentir a Izuku como si su alma fuera un libro abierto para la peliazul, sencillamente estaba hecho solo y para la peliazul que buscaba respuestas, y la verdad es que le gustaba ese sentimiento.
-Y-Y-Yo…-, respondía Izuku muy sonrojado y preso de los nervios mientras que su corazón latía a mil por segundo y sus ojos no podían despegarse de los preciosos y cautivadores orbes azules de Nejire.
-E-Estoy enamorado de ti, Senpai-, respondió Izuku haciendo su mayor esfuerzo por revelar aquellos sentimientos que tenía guardados en lo más profundo de su ser, pero solo la peliazul era capaz de sacarlos a flote siendo como ella es.
-¿En serio?-, preguntó Nejire con curiosidad recibiendo un asentimiento del sonrojado peliverde.
-¿Por qué?-, preguntó la chica inclinando su cabeza ligeramente hacia un lado mientras que el peliverde hacia todo su esfuerzo para responder a esa pregunta.
-M-Me parece alguien tan radiante que puede alegrarte hasta en los días malos con solo su sonrisa, a-alguien tan amigable que puede hacerse amiga de todos por ser como es-, respondía Izuku con una sonrisa más suave pensando en los aspectos de la peliazul que le fascinaban, sencillamente la podía ver como una chica pura de espíritu libre y gran curiosidad que tiene su mente abierta al mundo.
-Y d-debo decir que su insaciable curiosidad es la punta del pastel que completa lo perfecta que es para mis ojos-, agregó el peliverde rascándose la cabeza con una sonrisa nerviosa, ya que le encantaba también la gran curiosidad de la peliazul que le resultaba adorable y a la vez cautivadora.
-¿Y por qué no me lo dijiste antes?-, le preguntó Nejire aun manteniendo su cara frente a la del peliverde mientras aun le sostenía de las mejillas.
-E-Es que no quería arruinar nuestra amistad si no correspondía a mis sentimientos, p-por lo que solo me dispuse a guardarlos en mi interior-, respondió Izuku con un tono más desanimado al recordar los esfuerzos que hacía por dejar su amor hacia la peliazul en lo más profundo para ver si en algún momento pudieran llegar a desaparecer, o por lo menos a dejar de dolerle tanto.
-¿Y qué harás ahora que sabes que tú también me gustas, Izu-kun?-, le preguntó Nejire con una mirada más atenta y penetrante que despertó nuevamente los nervios en el chico.
-Y-Yo… yo…-, parloteaba el peliverde con nervios sin saber exactamente que responder en ese momento.
En realidad estaba enamorado de ella y de eso estaba seguro, saber que ella siente lo mismo fue como llevarle directamente hasta el cielo, todo podía parecer bien pero en estos momentos pasaba por una odisea para tratar de formular aquellas palabras que por tanto tiempo tuvo que guardar en su interior, aquellas palabras que formaban una pregunta, una sola pregunta que podría hacerle infinitamente feliz o jodidamente desdichado.
Allí Izuku alejó su cara de la peliazul para tomarle de las manos a ella para luego cerrar los ojos con un fuerte sonrojo en sus mejillas.
-¿¡Quiere ser mi novia, Nejire-Senpai!?-, gritó el peliverde con todo el coraje que logró reunir para pronunciar aquella pregunta que cargaba con el destino de sus emociones.
-No-, respondió Nejire con una gran sonrisa de manera inmediata.
En ese mismo momento Izuku abrió los ojos sorprendido y abría un poco la boca sintiendo que su mundo se resquebrajaba poco a poco y perdía color, sencillamente su corazón estaba siendo estrujado dolorosamente por una fuerza invisible que parecía evitar que siguiera latiendo. No podía latir y por lo tanto ya no podía sentir, sencillamente el desenlace aunque siendo el más probable, fue el que menos quería que ocurriera, y fue el que sucedió.
-¿Q-Qué?-, preguntaba Izuku con un tono quebradizo mientras que sus manos comenzaban a temblar.
Había escuchado perfectamente la respuesta y la verdad no la quería volver a escuchar, pero sencillamente no quería darle más esperanzas a su corazón herido, era mejor acabar con todo de una vez a volver a sentir ese dolor con otra chica, pero es que sencillamente no había nadie como Nejire, nadie que hiciera tantas preguntas con inocencia, nadie que sonriera como ella lo hacía, nadie que le alegraba el día como ella lo hacía, sencillamente quería escuchar una última vez esa dolorosa palabra de la armoniosa y hermosa voz de la peliazul.
Nejire aferró aún más sus manos a las de Izuku para transmitirle calor mientras que acercaba su rostro al de él para sorpresa de este.
-Si quieres que sea tu novia entonces tendrás que dejar de llamarme Senpai, suena extraño-, respondió Nejire con su hermosa sonrisa mientras miraba divertida al peliverde.
Allí fue el momento en que todo lo que antes pensó fue borrado y reescrito a color, esa extraña fuerza dejaba latir nuevamente su corazón, y no solo eso sino que lo hacía latir mil veces más rápido que antes, las piezas de su mundo se reacomodaron perfectamente y todo volvía a tener color para el chico que recuperó la esperanza en lo que sus ojos mostraban sorpresa ante las palabras dichas por Nejire.
-E-Entonces eso significa que…-, preguntaba Izuku boquiabierto y sintiendo que el desenlace de desdicha se cambiaba por el de infinita felicidad, solo necesitaba unas simples palabras para que su mundo fuera perfecto, no necesitaba nada más, solo necesitaba escuchar esas palabras y se sentiría con la habilidad de activar el One For All al 1.000.000% sin sufrir daños.
-¡Me encantaría ser tu novia, Izu-kun!-, exclamó su respuesta la peliazul mientras que sus mejillas su teñían de rojo nuevamente y su blanca dentadura resplandecía por si sola a ojos del peliverde que se sentía deslumbrado por tanta belleza y alegría.
Y eso fue todo, ya no había nada en ese mundo que pudiera desanimarle, era el chico más feliz de la faz de la tierra y no había nada con el poder para cambiar ese hecho. La hermosa chica de inmenso corazón que estaba al frente de él le estaba haciendo sentir tan dichoso como un dios ante tan simples palabras, pero nada tenían de simples para él que las consideraba sagradas como si fueran las justas para inmortalizarlas a fuego en su cerebro como un perpetuo recordatorio de ese momento.
-¿Esto no es un sueño, verdad?-, fue la tierna pregunta que escapó de los labios de Izuku al querer validar si ese mundo tan maravilloso que veía era todo un simple sueño.
Nejire soltó unas melodiosas y cautivadoras risas ante la tonta pregunta del peliverde, y luego le miró con cariño.
-¿Esto te parece un sueño?-, le preguntó mientras sonreía para luego acercarse a él y darle un simple y cálido beso en la mejilla al peliverde.
Y allí todo se volvió mil veces mejor que antes, ahora estaba el agregado de sentir los suaves y finos labios de la peliazul en su mejilla, pudiendo sentir su calor y su textura tan cautivadora, pero no era solo eso, sino que sentía el cariño que transmitían con tan corto tacto.
Luego del beso el peliverde tomó coraje y apresó a Nejire en sus brazos en un cariñoso y protector abrazo que fue gustosamente recibido por la peliazul.
-S-Si en realidad es un sueño entonces no me quiero despertar nunca-, respondió Izuku con una pequeña sonrisa boba ante la infinita felicidad que estaba sintiendo en su interior.
-Pareces muy feliz, Izu-kun-, comentó Nejire divertida cuando internamente estaba exactamente sintiendo lo mismo que el peliverde, sumándole a chillidos internos de felicidad junto con un pensamiento de inundar a besos al peliverde hasta que sus labios comenzaran a sangrar.
-Lo estoy Nejire-chan, de verdad que lo estoy-, respondió Izuku con una sonrisa cariñosa en su cara mientras que se sentía en el paraíso ante las sensaciones que estaba sintiendo en ese momento, agregando el poder sentir el calor de la chica y su cautivadora fragancia a moras.
Se quedaron así por varios segundos, ¿o fueron minutos?, en realidad hasta para ellos podían considerarlo horas y aun así sería insuficiente para quedar satisfechos del contacto del otro.
-¿Puedo hacerte una pregunta, Izu-kun?-, preguntó Nejire sonriendo mientras que aún tenía su cabeza sobre el hombro del peliverde.
-Sabes que puedes, Nejire-chan-, le respondió Izuku con una sonrisa alegre y un pequeño sonrojo en sus mejillas al sentir su corazón latir apresuradamente por la nueva forma en la que llamaría a la peliazul que gobernaba y regia en su corazón sin ninguna resistencia por parte de él.
-¿No hay problema en que le haya dicho a todas tus amigas que ya éramos novios desde hace unas semanas, verdad?-, preguntó Nejire con una sonrisa algo nerviosa y viendo en distintas direcciones.
Dicha pregunta confundió a Izuku y se separó del abrazo teniendo sus manos sobre los hombros de ella para mirarle intrigado.
-¿P-Por qué me estas preguntando eso?-, preguntaba Izuku sinceramente confundido ante la extraña pregunta de su ahora novia.
-Puueeeeeees, puede que quisiera asegurarme de que nadie se te confesara y por eso dije una "pequeña" mentirita-, respondió Nejire con una sonrisa entre nerviosa y divertida mientras que jugaba con sus dedos hasta que enfatizó en la palabra "pequeña" con dedos haciendo de comillas.
Y allí fue cuando Izuku recordó varios acontecimientos que han estado sucediendo últimamente a su alrededor, ya casi Uraraka no se juntaba con él y le miraba desde lejos con cierta decepción. Tsuyu por su parte ya no intercambiaba palabras con él tan seguido como antes, tan solo hacia respuestas cortas para después retirarse. Momo ya no parecía querer hablar hasta tarde de temas científicos y se volvía a referir a él como "Midoriya". Mina por su parte fue la más evidente al llevar el ceño fruncido siempre que le observaba y casi no hablaba tan alegre como antes.
-¿Entonces esa es la razón por la cual todas me miran extraño ahora?-, preguntaba Izuku algo preocupado al pensar en lo mal que deben estar sintiéndose sus compañeras, las cuales apreciaba mucho pero solo como amigas, nada más que eso.
-¿Te molesta?-, preguntó Nejire preocupada y algo desanimada al notar el cambio en la expresión del peliverde.
Allí Izuku entró en razón y volvió a ver directamente a los ojos a Nejire con una sonrisa cariñosa.
-P-Por supuesto que no, l-la verdad me hace un poco feliz-, respondió Izuku con sinceridad y con las mejillas algo sonrojadas.
-¿Feliz?, ¿Por qué?-, preguntó Nejire genuinamente interesada e intrigada viendo a su ahora novio.
Izuku sonrió al oír las preguntas de la peliazul que le encantaba escuchar y prosiguió a acariciar suavemente una de sus suaves mejillas.
-Pues no tengo que decirles a ellas que no puedo corresponderles, dado que mi corazón ya te pertenece a ti, Nejire-chan-, respondió Izuku con una penetrante mirada de sus orbes verdes y con una sonrisa que hizo que los interiores de la peliazul ardieran en llamas de felicidad ante esas palabras, haciendo que su sangre comenzara a hervir y subiera hasta su cara donde sus mejillas obtuvieron un rojo perfecto.
-Te tengo otra pregunta, Izu-kun-, dijo Nejire con las mejillas sonrojadas mientras que Izuku asentía con la cabeza.
-¿Te casarías conmigo?-, preguntó Nejire con unos ojos anhelantes y una expresión tan linda que no podía ser descrita en palabras al momento de posar una mano sobre la del chico que la tenía sobre su mejilla sonrojada.
Un latido más fuerte que el resto azotó el corazón de Izuku, fue como si fuera un latido tan cargado de sentimientos que le fue difícil de digerir al órgano esencial, como si hubiera tragado en seco ante la escena ante sus ojos y las palabras que vocalizó Nejire con su tono vulnerable fueran las causantes de esa repentina descarga de dicha y gozo.
Pero claro que su cerebro tenía que venir a analizar bien las palabras dichas y en consecuencia reaccionar a eso.
-¿¡Q-Queeee!?-, preguntaba un exaltado y ruborizado Izuku mientras que sus ojos se volvían espirales por los nervios alejando su mano de Nejire para comenzar a moverla frente a su cara tratando de tapar su vergüenza.
-¿P-P-Por qué me preguntas eso tan de repente?-, preguntó Izuku muy sonrojado enfocándose en su novia.
-Para que nadie te lo proponga antes que yo-, respondió Nejire con sencillez y un rostro inocente sin entender la reacción del peliverde.
-A-Aun así es demasiado pronto para eso-, dijo Izuku aun nervioso tratando de hacerle entender a la peliazul el dilema principal de eso, aunque claro que quería, joder que si quería, pero debía seguir siendo realista y hacer las cosas bien.
-¿Por qué?-, preguntó Nejire mostrando de nuevo su adorable faceta curiosa.
-P-Pues yo apenas ingresaré en segundo año y tu pronto vas a comenzar a trabajar como heroína, s-seguimos siendo demasiado jóvenes-, explicaba el peliverde con una sonrisa nerviosa.
-¿Entonces cuando nos casaremos?-, preguntó Nejire con brillos de ilusión en sus ojos y con una gran sonrisa mientras que invadía nuevamente el espacio personal de su novio peliverde.
Izuku sintió una apuñalada de felicidad en su corazón al ver a la peliazul tan feliz por dicho tema, y no pudo evitar sonreírle con cariño al momento de tomarla nuevamente por los hombros.
-C-Cuando yo sea el héroe número 1 y sea merecedor de poder pedírtelo adecuadamente-, respondió Izuku con una mirada segura y decidida acompañada de esa sonrisa característica suya que emanaba esa aura que decía que todo va a salir bien, y eso fue suficiente para Nejire.
-Entonces estaré esperando con ansias ese momento, Izu-kun-, respondió Nejire cerrando los ojos con una gran sonrisa mientras inclinaba ligeramente su cabeza hacia un lado.
Eso a ojos de Izuku fue el límite al cual podía llegar.
Era perfecta, es perfecta y siempre será perfecta a sus ojos.
Con una simple sonrisa le hacia el día.
Con dirigirle la palabra podía sentirse confiado para continuar a pesar de sus preocupaciones.
Al oír una risa suya se sentía completo como persona.
Al responder una de sus preguntas se sentía el chico más listo del mundo.
Y ahora que pudo hacer todo eso el mismo día con un agregado de compartir sentimientos, sencillamente ya no podía aguantar más algo que quería hacer desde hace tiempo.
Un beso, eso fue lo que sucedió, pero no fue como el anterior de Nejire, sino que el peliverde fundió sus labios con los de la peliazul en un acto impulsivo que ordenó su corazón apoyado de su cerebro que en ese momento deseaban lo mismo: demostrarle su amor a Nejire.
Las sensaciones que se sintieron por parte de ambos eran indescriptibles para ser rebajadas a simples palabras, ni siquiera el mejor de los escritores y poetas podría redactar una frase que hiciera honor al amor que ambos sintieron mediante ese beso.
Lo más cercano a ser aceptable era decir que ese beso fue el puente de sus corazones que latieron al mismo ritmo y sus sentimientos llegaron al otro lado para encontrarse con sus semejantes que respondían mutuamente a ellos.
Como deseaban que el momento fuera eterno, pero por desgracia tenían cuerpos humanos que ansiaban oxígeno para subsistir, y por esa razón se vieron obligados a separar sus labios liberándolos a ambos de su pequeño mundo.
-¿I-Izu-kun?-, preguntaba Nejire con un tono suave, los ojos ligeramente abiertos con sorpresa grabada en ellos y sus labios entreabiertos y brillosos al aun mantenerse lubricados por el amoroso beso.
Ahora la peliazul era la sorprendida mientras que sus mejillas se sonrojaban y miraba incrédula al peliverde que había tomado la iniciativa de darle su primer beso, el cual para ella fue el mejor que jamás pudo haber tenido en toda su vida.
-E-En verdad me gustas, Nejire-chan-, le dijo Izuku a la peliazul con una leve sonrisa que reflejaba todo el cariño que querían transmitir esas palabras.
-¡Tú también me gustas, Izu-kun!-, respondió Nejire con una gran sonrisa sin poder ocultar su creciente alegría para abrazar al peliverde con fuerza, provocando que el chico cayera acostado en la banca con la peliazul aferrada a su torso sin intenciones de separarse pronto, a lo cual el corresponde con una pequeña sonrisa y devolviendo el abrazo.
-¿No tienes alguna otra pregunta, Nejire-chan?-, le preguntó Izuku a su novia con una pequeña sonrisa esperando alguna otra pregunta de la peliazul que amaba con todo su ser.
-No, ya tengo todas las respuestas que necesito-, respondió Nejire con total sinceridad y sin quitar en ningún momento esa hermosa sonrisa.
*Fin del Capitulo*
Y eso fue todo amigos. En realidad que me inspiré muchísimo escribiendo este capítulo de esta pareja tan poco utilizada, se pueden contar a los autores que escriben de ella y me pareció que puedo hacer mi aporte con el Ship de IZUJIRE, la verdad es que es mi segundo Ship favorito después del Izumo por alguna razón, pero lo que importa es que tengo planeado muchos proyectos con esta pareja así que para los que gusten de esta, pues les notifico que habrá más de donde vino.
Espero que les haya gustado y si es así entonces por favor comenten en los Reviews. Sin nada más que decir me despido hasta la siguiente… Sayonara.
