Prefacio:
Salte de aquel acantilado, afortunadamente Jacob logro salvarme la vida. Charlie nunca entendería porque lo hice, pero tampoco esperaba que lo hiciera.
Edward, en mi mente solo decía su nombre, el hueco en mi pecho no había sanado y era capaz de lo que sea por al menos escuchar su voz en mi mente, la voz que muchas veces me erizaba la piel, y hacia a que yo cayera en sus redes sin contemplaciones, los extrañaba, a él, a Alice a toda la familia entera... deseaba que ese día, de mi maldito cumpleaños nunca hubiese ocurrido, Edward estaría aquí conmigo!
Se feliz! Fue lo último que escuche de su voz... de aquella voz aterciopelada que quemaba el alma cada vez que resonaba en mi cabeza.
Edward Cullen... mi Edward Cullen...
Sabía que no volvería... yo no era para él, una simple y débil humana que no tiene derecho a la inmortalidad para ser feliz con su amado.
Bella Swan! Decía mi padre detrás de mí.
¿Qué ocurre papa?
¿Cómo te has atrevido, que quieres que muera de un infarto igual que Harry?
¿Qué pasa? volví a preguntarle aun mas desconcertada.
¿Te lanzaste por el acantilado de la Push? y dime la verdad.
Yo me quede muda al instante, ¿quién se lo había dicho?
Papa, solo fue por diversión nada mas... no te preocupes no me ha pasado nada, ¿cierto Jake?
Jacob puso cara de pocos amigos pero asintió.
¿Cuándo dejaras de mentir Bella?
- me pregunto Jake enojado -
No saltaste del acantilado por diversión, es por esa maldita voz de ese chupasangre que escuchas en tu mente.
Jake - dije poniéndole un dedo en sus labios para silenciarlo -
No lo nombres, nunca más. El no existe, nunca existió... no quiero volver a escuchar ese nombre nunca más en lo que me queda de vida.
Ya Jacob se había ido a reunirse con la manada, estaba sola en mi habitación, a decir verdad mi mente estaba bloqueada ante cualquier sentimiento hacia los Cu... hacia ellos.
Pero aun así, lo sueños seguían, unos tras otro, en mis sueños lo veía muerto en mis brazos, sin yo poder hacer nada, pero en que se había convertido mi vida? En una pesadilla constante? lo único que las alejaba era estar con Jake, pero aun así, el hueco en mi pecho no se terminaba de cerrar...
Esa noche decidí cambiar mi vida por completo darme una nueva oportunidad... la nueva oportunidad para salir de este hondo y oscuro pozo en que me dejo Ed... El, cuando se fue.
Esa nueva oportunidad tenía nombre y apellido:
Jacob Black
