I can't love you.
Capítulo 1: El expreso de Hogwarts.
Hermione empujaba con fuerza su carrito con todas sus pertenencias, incluido CrookShanks, estaba acompañada de sus dos mejores amigos. Las 11 menos 5 marcaba el gran reloj, "¡Apuraos!" oyó la voz de la señora Weasley, sacudió la cabeza y se adentró a la plataforma 9 y ¾.
Draco miraba a sus padres con aire de preocupación, sostenía como de costumbre su maleta negra mientras que ellos le llevaban el resto del equipaje, todos los vagones estaban llenos por lo que sus cosas llegaron al último vagón.
-No lo olvides.- Le susurró su padre posando su mano sobre el hombro de su hijo.
Unos ojos tristes y brillantes se vislumbraban bajo el flequillo platino del muchacho, se despidió de sus progenitores de la misma manera que hacía 4 años atrás; un leve abrazo a ambos. Colocó su maleta a un lado del asiento y salió hacia los demás vagones para encontrarse con Pansy Parkinson que sonreía maliciosamente y relamiéndose, un gesto inusual en ella, la miró por unos momentos con el cuerpo rígido como una tabla. De pronto un gato de pelo castaño muy abultado maullaba de rabia hacia Pansy, con serias intenciones de arañarla.
-¡CrookShanks!- Hermione regañó suavemente a su mascota, recogiéndola y acariciándola, miró de soslayo a los dos Slytherin y se marchó a su compartimiento.
-Aleja esa cosa de aquí.- Decía Ron frunciendo el ceño al ver entrar a su amiga con el gato entre los brazos.
-No es una cosa, además ya no está Scabbers…- Objetó colocando a CrookShanks al lado de su butaca.
-Me da alergia.- Rebatió el pelirrojo alejándose todo lo posible.
Pansy y Draco permanecían como escondidos en el último vagón, él apoyado contra la puerta y ella sentada con las piernas sobre la mesa como si estuviera en su casa. El corazón del rubio latía nerviosamente, el silencio dejaba sentir los latidos retumbando por toda la habitación, solo interrumpido por el súbito golpecito en la puerta detrás de él.
-¿Desean algún bocadillo, preciosos?-
-No.- Su voz sonó seca y fría, estaba algo más pálido de lo normal por el susto, le cerró la puerta de un golpe y volvió a la posición anterior.
-¿Por qué tan pálido, sobrinito?- Pansy se reincorporó de un salto. -Creo que ya es la hora.- Se lamió los dientes sacando su varita.
Harry y Ron conversaban activamente sobre sus vacaciones pasando luego al Quidditch, mientras Hermione comentaba las asignaturas y libros nuevos del año. De pronto CrookShanks dio un salto y se irguió agresivamente, su dueña le miró extrañada.
-Está presintiendo algo.- Inquirió mirando a sus amigos.
El gato dio un salto y salió a los pasillos velozmente, Hermione salió tras él lo más rápido que pudo. El animal se detuvo alzándose de furia hacia Pansy que avanzaba lentamente, advirtiendo al gato le dedicó una mirada fulminante. La chica se agachó susurrando un regaño cuando subió la vista cayendo en cuenta de a quién le gruñía su mascota, retrocedió entumecida de espanto.
La apariencia de la morena comenzó a cambiar pausadamente, el pelo se alargó junto con sus facciones calavéricas que se acentuaban.
-Hermio…- Harry había salido también por mera curiosidad y llegó precipitadamente a su encuentro, fue interrumpido por la escena que presenciaba. Sacó su varita del jersey azul y apuntó tembloroso.
Hermione corrió a esconderse tras el moreno ante la sonrisa malvada de Bellatrix que les apuntaba, CrookShanks no se inmutó y permanecía gruñendo y lanzando ademanes de arañazos. Draco se abría paso, franqueando a los Gryffindor y llegando hasta su tía, tenía el ceño forzadamente fruncido y apretaba su varita como si quisiera partirla en dos. "Los Aurores" se le pasó por la cabeza a Hermione que trataba de mantenerse serena.
-Corre.- Musitó Harry a su amiga agazapada detrás de él.
-Pero Harry…- Protestó ella.
-¡Ve!-
-No dejes que se escape la Sangre Sucia.- Dijo Bellatrix a su sobrino.
El rubio miró fugazmente a la Mortífaga y caminó apresuradamente tras Hermione, que al percatarse apretó el paso todo lo que le permitieron sus pies. Llegó al último vagón, ya no había salida, se volteó hacia Draco que acababa de cerrar la puerta. Éste le apuntó con el brazo entumecido, ella le oyó musitar un hechizo pero nada ocurrió, miró su varita anonadado mientras Hermione le lanzaba un Expelliarmus. La varita salió disparada chocando contra la pared y cayendo debajo de uno de los asientos, Draco sobresaltado miro hacia todas direcciones buscando señales de su varita, sin éxito. Una gran sacudida estremeció el vagón haciendo que la chica tropezara, y una sensación eléctrica recorrió instantáneamente el cuerpo de Malfoy cuando Hermione se apoyó sobre él para evitar dar de cara contra el suelo. La separó de él haciendo una mueca de desprecio, ella alzo la vista sorprendida y se levantó a abrir la puerta.
Pero no había nada, el compartimiento se había separado del resto del tren, dio un grito ahogado echándose atrás.
-¿Qué diablos…?- Espetó Draco asomándose por la puerta.
El expreso seguía avanzando y ellos estaban estancados.
-¿Qué ha sido eso?- Dijo Harry incorporándose de la agitación del tren.
-¿Harry?- Ron se largó al pasillo luego de sentir el temblor, palideciendo al ver a Bellatrix.
-Cruciatus.- Harry comenzó a convulsionarse de dolor en el suelo, sin embargo el hechizo no duró demasiado.
-Vendrás conmigo o acabaré con tu insignificante vida yo misma.- Lo amenazó.
Ron ayudó a su amigo a ponerse de pie cambiando ahora su cara de un blanco a rojo furioso.
-¡Dejadlo en paz!- Vociferó armándose de valor apuntándole a Bellatrix.
-¿Cómo lograste entrar?- Harry recobró el aplomo rogando por que la ayuda llegase pronto.
-Pocion multijugos, pequeño idiota.- Contestó irritada.
En ese momento Percy apareció por el otro lado del corredor, algo molesto.
-¿Qué ocurre?- Se detuvo en seco al ver a la mujer.
-¡Expelliarmus!.- El menor de los pelirrojos finalmente atacó, no obstante un simple hechizo como ese fue fácil de desviar, contraatacado y acabando con Ron tirado a un extremo del pasillo.
-¿De quién es eso?- Preguntó Hermione mirando el equipaje.
-Es mi equipaje.- Respondió Draco arrastrando las palabras como de costumbre.
La Nimbus 2001 brillaba en el compartimiento, la castaña tuvo una idea repentina cuando el vagón comenzó a avanzar hacia atrás producto de la altura. La escoba negra resbaló dando al suelo con un sonido sordo y emprendió camino fuera del vagón rodando por el suelo hacia la puerta que aún permanecía abierta, Malfoy logró retenerla antes de que cayera por los rieles.
-¡La escoba!- Exclamó Hermione.- Podemos volver al tren usando la escoba.
Crispó los dedos alrededor del mango, cogió su varita bajo el sillón gris, y se montó sobre la escoba, haciéndole un gesto a la chica para que se subiera también. Ella dudó por un momento, sabiendo que estaba tratando con Draco Malfoy, de familia llena de Mortífagos y ayudaba su tía en aquella emboscada. Aquello podía ser una trampa ¿Qué tal si se la llevaba a otro sitio para matarla ahí? pero más importante, ¿Por qué no la había matado o atacado ya?
-¡Súbete de una vez, Granger!- Bramó algo nervioso "Antes de que me arrepienta" pensó.
Hermione avanzó desganada y subió, Draco dio una patada en el suelo emprendiendo vuelo, ella se aferró a su cintura cerrando los ojos y gritó; casi había olvidado el miedo que le tenía a volar. Segundos después de iniciar el vuelo la castaña sintió como poco a poco se iba calmando su ansiedad, la forma en la que Malfoy maniobraba la tranquilizaba y pareciera que todo el miedo se desvanecía poco a poco. Abrió los ojos lentamente observando el paisaje campestre, la cercanía del rubio metió un agradable aroma a sus narices, su perfume. Soltó un ligero suspiro se sintió los pies de nuevo tocando suelo, bajó de la escoba y se quedó mirando como Draco se adentraba al tren sin voltear apretando la Nimbus 2001 en su mano derecha. Para su suerte, ese vagón estaba vacío y nadie vio la hazaña del chico.
Atravesó la puerta siguiente yendo a unos metros más lejos de Malfoy quien fue obstaculizado por nada más ni nada menos que Nymphadora Tonks, la mujer llevaba al parecer sus pertenencias y se las entregaba sonriente.
-Las recogí por ti, primo.- Le dijo con tono amable.
Él las tomó con un bufido y siguió su camino.
-¡Hermione!- Nymphadora abrazó a la chica dándole palmaditas en la espalda.
-¿Qué sucede?- Consultó Hermione algo preocupada.
- Bellatrix se ha escapado… pero no te preocupes, lo importante es que estáis todos bien.- Sonrió picaronamente.
Hermione abrió la boca pero ninguna palabra salió de ella, en cambio regreso por sus talones y abrió la puerta, el vagón perdido estaba de vuelta. Avanzaron juntas al encuentro de los demás.
Ron tenía a Draco del cuello amenazándolo con romperle la cara ahí mismo diciendo que él estaba tras la treta de Bellatrix.
-Déjalo.- Dijo Hermione acercándose ceñuda.
-Pero él…- Se opuso mirando a su amiga.
-No vale la pena.- Mencionó ella colocando una mano sobre el hombro del pelirrojo.
Le soltó violentamente, Draco hizo una mueca ofensiva y continuó su camino con sus maletas y la escoba en las manos.
-Hermione.- Harry la abrazó al verla.
-Harry, ¿estás bien?-
-Sí.- Asintió con la cabeza. –Llegaron los Aurores y Bellatrix escapó. ¿Dónde estabas?
-El último vagón… se había separado del tren.- Se interrumpió un momento recordando lo sucedido.- Tonks me sacó de ahí.
Tonks le guiño el ojo a Hermione, se despidió y desapareció en una estela blanca.
-¿No crees que fue un poco tonto venir ella sola a intentar capturarte?- Comentó Ron una vez volvieron a su compartimiento.
-Lo hubiese logrado si no fuera por Kingsley.- Dijo Harry seriamente.
-¿Qué pasó exactamente?- Hermione frunció el entrecejo.
-Kingsley logró desarmar a Bellatrix antes de que ella me llevara.- Explicó brevemente el moreno.
CrookShanks apareció por la ventana del compartimiento ronroneándole a Hermione y sentándose en su falda, ella lo acaricio sonriéndole.
-Entonces ella desapareció después de contraatacarlo.- Continuó después de probar una gragea Bertie Bott.
-Estoy seguro de que ese rubito de Malfoy planeó esto.- Farfulló Ron gesticulando.
-Fue Tu-Sabes-Quien.- Afirmó Hermione. –Quería llevarte con él para acabar contigo.- Se dirigió a Harry.
-Lo sé.-
Malfoy se dejó caer sobre la butaca, mirando al techo. Su varita le había fallado, no pudo matar a la Sangre Sucia aunque sus primeras intenciones eran solo herirla. Nunca sería capaz de matar a nadie, ni siquiera por su familia y su varita lo sabía perfectamente. Se maldijo internamente, hacia un buen par de años que sentía cosas por la sabelotodo y no se atrevería a aceptarlo nunca, no se atrevería a manchar su nombre metiéndose con alguien como ella, ¿una hija de muggles con un Sangre Limpia? vaya estupidez. No admitiría esa sensación cálida en su cuerpo cuando ella se aferró a él mientras volaban, el leve aroma que calaba en lo más hondo de su nariz le estremecía cada vez que estaba cerca, ni las ganas que tenia de acariciar el abundante y desordenado pelo color cobrizo y menos lo que le costaba mantener sus brazos quietos para evitar que la abrazaran.
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El banquete había finalizado y todos se dirigían hacia sus respectivas Salas Comunes rebosantes de comida en sus estómagos. Una vez en su habitación, Hermione meditó la escena en el vagón perdido del expreso, recordando el vuelo en escoba. Era la primera vez que no estaba asustada de volar, y era con Draco Malfoy. ¿Por qué? ¿Era su forma de manejar? como si fuese buen jugador de Quidditch… además del olor, aquel olor. Nunca un perfume le había hecho sentir de esa manera, su corazón latió a mil por hora y un cosquilleo le recorrió desde la punta del pelo a la punta de los pies ¿Atracción Química? no podía estarle sucediendo, no a ella, se revolvió entre las sábanas, no podía dormir. Se puso de pie y caminó a la Sala Común para recostarse en el sillón rojo frente a la chimenea, tratando de concentrarse en las llamas que comenzaban a apagarse deliberadamente, como si ellas fuesen a ayudarla en su pequeño dilema.
No pasaron más de 15 minutos, Hermione decidió dar un paseo nocturno. Salió por el retrato de la señora gorda, quien refunfuñaba al haber sido despertada.
-Lumos.- Alzó la varita ante las protestas de los cuadros a su alrededor.
Bajaba por unas escaleras cuando vio a la Señora Norris, la gata de Filch. Se petrificó a mitad del camino frente al animal, la habían descubierto merodeando por los pasillos a altas horas de la noche. Reacciono corriendo escaleras arriba, podía oír los pasos de Filch acercándose mientras balbuceaba. Debía volver a la Torre cuanto antes, camino lo más rápido que pudo intentando no hacer demasiado ruido cuando vio una figura de pie mirando a la pared, más específicamente a un retrato. Esta persona le susurraba cosas a uno de los cuadros, se volteó de golpe al sentir la presencia de Hermione.
-¿Malfoy?- Musitó ella advirtiendo la platina cabeza.
Draco contorsiono la cara en señal de irritación y volvió a mirar hacia el retrato.
-¿Qué estás haciendo aquí?- Se aproximó, iluminándole la nuca.
-Déjame solo.- Dijo él arrastrando las sílabas.
Hermione se detuvo súbitamente, ¿Malfoy hablándole a los retratos?
-Lo siento yo… gracias.- Masculló manteniendo la imagen de ella volando sobre la escoba con él en su mente.
-¿Gracias por qué?- Parecía más molesto aún.
-Tú sabes… sacarme de ahí.- Dijo con un hilo de voz.
-No necesito tu gratitud, sangre sucia.- Soltó Draco sin voltearse.
Hermione enfadada se retiró de su lado sin articular palabra, regresando a la torre de Gryffindor, olvidando que la podían encontrar ahí y castigarla. Peeves paseaba malignamente cerca de ahí, percibiendo a la castaña.
-Oh mira que tenemos aquí, un estudiante merodeador.- Prorrumpió con una risita.
-Peeves… quédate callado.- Dijo Hermione en tono nervioso.
-¡Estudiante fuera de la cama!- Gritó.- ¡Hay un estudiante fuera de la cama!
Durante una exhalación, la Señora Norris acompañada de su dueño aparecieron trotando.
-¡Tu!- Vociferó Filch.
La chica se movió en señal de haberle reconocido y pensó rápidamente.
-Eh… tenía ganas de usar el servicio.- Mintio apresuradamente.
-Excusas…- Barbulló.- ¡castigada! Mañana vendrás a mi oficina después de la cena.- Sonrió con una mueca. Hacía mucho tiempo que no castigaba a nadie, el primer día, eso podría ser un nuevo record.
Pensó que su estupidez había traspasado los límites al querer agradecerle a alguien como él, y más salir a pasear a esas horas. Ya de regreso a su cama, estaba completamente decidida, lo que ocurrió en pleno vuelo fue solo pasajero puesto no había manera de que le gustase un arrogante, altivo y vanidoso chico.
¡Hola de nuevo!
Esta vez traigo un nuevo Dramione. Sí, mi musa ha vuelto y esta vez recargada! (risas) Me gustó mucho escribirlo y no dudéis que daré mi mejor esfuerzo por continuar.
Crookshanks es muy listo y perceptivo, sé que es inteligente y no un gato común y corriente, no me agradan demasiado los gatos pero éste se da todas las de ganar! me encanta este gatito. Tal vez la idea de que Bella haya ido casi por su cuenta es un poco tonta (como dijo Ron) no obstante todos sabemos lo que devota que es al Señor Oscuro (para mí la mas pegadita a él) por lo tanto no es de extrañar que se arriesgara así con tal de llevarle a Harry a su señor, además los Mafoy eran al parecen los únicos enterados del "plan". Como se esperaba, Draco no estaba muy feliz junto a su tía y su varita actuó por su corazón; es sabido que su varita tiene núcleo de unicornio lo que significa inocencia. Él nunca tendría los cojones para asesinar y yo creo que su varita no lo dejaría tampoco, es una forma de mostrar las nulas posibilidades de elegir que tuvo durante su vida. Por cierto lo de hablar con los retratos es totalmente verdadero (supongo), lo leí por ahí... eso traerá cola así que atentos!
Ya sé que no soy muy buena usando a Harry y Ron, menos a Bella y la mayoría de los demás personajes pero hago lo que puedo y he aprendido leyendo otros fics. Me he basado en lo que he leído sobre Draco y su amor oculto por Hermione, como escribí ahí está loquito por ella de hace un buen tiempo y ha reprimido sus sentimientos, propio de un Malfoy. De todas formas, algo va a nacer de todo esto que ha ocurrido el primer día en Hogwarts (sonido de suspenso). Como veís trato de no centrarme 100% en el romance porque pienso que hacer eso aburre también y hay que estar enterado de otras cosas igual, intentaré este fic sea largo a las peticiones de algunas personas sobre el Dramione anterior: "Not the last time" así que espero mi musa no se me vaya a medio camino! Otra cosa... la historia está ubicada en el 5to año de Harry aunque no estoy completamente segura.
Ojalá os guste e intentaré actualizar pronto! Si queréis estar al tanto de mí, visitad mi Twitter; h t t p: / twitter. com / #! / yerawizardbarry (sin espacios).
Con amor, Nathu.
