Dos palabras.
Disclaimer: Naruto ni sus personajes me pertenecen, son propiedad de Masashi Kishimoto.
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Gruñó al sentir aquellos brazos sujetar su cintura. El agradable calor que emanaba la persona tras él le provocaba un mar de sensaciones indescifrables. Todo su cuerpo se tensó al instante, el rubor llegó violentamente a su rostro, siendo el motivo principal por el cual el rubio deshizo el cariñoso agarre un tanto brusco, evitando a toda costa el mínimo contacto visual. Cuando él hacía actos tan imprudentes como esos…
… la coroza se rompía a pedazos.
- ¡Déjame en paz, uhn!- ordenó no muy seguro alejándose del causante de su deplorable estado emocional. Le enfadaba tanto que sus sentidos se viesen nublados ante sus caricias. No bien había dado unos cuantos pasos cuando fue apresado nuevamente, siendo envuelto por ese par de fuertes y protectores brazos. Sintió ese cosquilleo en su estómago, tan abrumador, tan característico en quien ama. Los azules ojos se abrieron con sorpresa al notar el cambio tan drástico en la muestra de afecto. Se sentía… posesivo. Sus piernas flaquearon, tragó saliva forzosamente. - Tsk… ¡Te dije que--!
- Mírame.
Lejos de ser una sugerencia fue más bien una orden. El tono no fue osco pero tampoco dulce.
- ¿Q-qué?... uhn.- pronunció desconcertado al tiempo en que aparecía frente a su mirada el hombre de la máscara en espiral. Rojo sangre se encontró con el azul. El negro se arremolinó en su pupila, Deidara tembló ligeramente. El sharingan se esfumó y en su lugar el profundo color negro se abrió paso. Deslizó aquel estorbo naranja hacia a un lado, dejando al descubierto su rostro entero.
Hubo un corto silencio antes de que el Uchiha volviese a hablar.
- Te amo.
Fue intenso. Como una explosión que detonó con fuerza en su interior. Las siempre inoportunas mariposas revolotearon en su estómago sin falta. Su corazón latió aceleradamente. El rubor se mantuvo igual, siendo el calor lo único que incrementó. De inmediato desvió la mirada. ¿Por qué?, ¿por qué siempre lo atacaba cruelmente?
Ni la arcilla en las bolsas de sus costados, ni los kunais, ni todo el ninjutsu o taijutsu que conocía servían contra esas dos simples palabras. No había nada en éste mundo que pudiese hacerlo sentir tan vulnerable, frágil, débil….
… Excepto él y esa estúpida frase.
- Bastardo, uhn…-musitó avergonzado
Madara sonrió travieso. Ya se las arreglaría para que su rubio cediera a pronunciar esas cinco letras, así tuviera que… [Inserte aquí pensamiento perverso]… bueno, igual y lo haría. Oh, por su puesto, esa noche trabajaría en ello.
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Notas: Era mucho más largo pero me ha gustado como quedó así. Amables lectores, estoy escribiendo la actualización –y no es que sea importante pero igual lo hago saber- y va quedando… bien. Sí, eso.
Mmm, quise utilizar 'mientras' pero no quedaba bien (¿¿??).
PD: Quiero más madadei. Li-chan escribe más por favor. De acuerdo, lo he querido decir imperativamente XDD y Shikami... deja de matar ratas y escribe madadei también u_ú
MadaDei RLZ!!! Apoya ésta noble causa :3