A la distancia~ [Cap. 1]
El nuevo siclo comenzaba y un nuevo año amenazaba con su presencia,
El menor llegó al colegio, acompañado por su hermano mayor. El colegio seguía igual a excepción de los nuevos estudiantes; el menor de hebras color azabache sentía una airé de superioridad, aunque no olvidaba que hace una año atrás era aquel quien no sabia nada acerca de el lugar. Muchos alumnos, alumnas y maestros inundaban con su presencia el patio principal, haciéndole un poco difícil llegar a su salón de clases
— ¿Estarás bien? — el hermano mayor se dirigió a su otouto
— Estaré bien Madara ya no soy un niño — hizo un mohín por el trato de infante que aún le daba su hermano, se preocupaba demasiado por el aunque no podía evitar corresponder tal amor
Rodo los ojos sonriendo carismático, como sólo lo hacia a su hermano menor —No tienes que recordádmelo que lloro — abrazándolo revolvió los cabellos del menor para así molestarle un poco más
— ¡Madara! ¡Vas a asfixiarme! — El mayor de los azabaches le soltó, riendo divertido, le gustaba hacer enojar a su hermano menor, lo amaba.
El timbre sonó, siendo señal de que deberían ir a clases, las miles de personas que llenaban los pasillos empezaron a despejarse y a perderse entre los muchos salones. Izuna conocía ya la institución, y llegó con facilidad al salón de clases, algunos de sus compañeros estaba ahí ya, sentándose un tanto atrás les sonrío amable como solo el sabia, aquella sonrisa que estremecía de amor a más de uno. La clase comenzó y su maestra pidió dieran la bienvenida a un nuevo estudiante, todos emocionado por la llegada de un nuevo compañero, preguntaron por tal persona que desconocían, mientras la puerta era llamada la maestra dio la autorización de entrada
— Buenos días, ¿Calculo con Mito Uzumaki — Un imponente joven, de cabellos peliblancos, apuesto y de una tez blanca perfecta, que hizo que toda chica suspirara, deleitándose con aquella persona que entraba al aula, demasiado atractivo era poco para describir que tan apuesto, aunque sus compañeros hombres no les agrado la presencia de alguien superior a ellos, ya tenia suficiente con Izuna, ahora dos seria el colmo; Refiriéndose a ello, los alumnos notaron que el recién llegado era igual de guapo que Izuna, podría ser que hasta más...
— Así es entra. Jóvenes el es su nuevo compañero Tobirama, Senju — ''Senju'' un barullo de comentarios llenaron el salón los Senju eran una de las familias más ricas de todo el lugar eso contando a lo Uchiha, de los que venia el joven Izuna y su hermano Madara. Mientras todos le miraban y suspiraban de amor por él, el peliblanco miraba hacia un punto inexistente prestándoles poca importancia a quienes serian sus nuevos compañeros, se le conocía y caracterizaba por su frialdad e indiferencia, siendo un motivo más de que muchas personas estuvieran detrás de el, más sin en cambio, todos le parecían insignificantes y eran la nada, para el chico del la prestigiosa familia Senju. Mientras el chico de hebras azabache, observaba como todos se embobaban con la presencia y personalidad del nuevo alumno, importándole muy poco, desvió la mirada mientras todos elogiaban al Senju
— Toma asiento Tobirama, junto a Izuna—
El chico nuevo, se sentó junto a quién el ya conocía, mirándole por el rabillo del ojo notó que este le notaba — ¿Sí? —
El pelinegro desvió la mirada de pronto y con incomodidad, realmente no se había dado cuenta de que le estaba mirando ¿por qué?
— Nada — mientras fijaba su mirada al frente en fingida indiferencia
— ¿Por qué me miras? —
— ¿Q-que? No lo hacia, no te creas tan importante Senju —Bufo molesto, ¿que se creía? ¿El mejor del mundo?, molesto, el chico Uchiha estuvo concentrado en la clase aunque no podía evitar mirar de reojo a su compañero, que hasta entonces se había comportado como un grandísimo mezquino
La clase transcurrió y la maestra Mito detuvo a Tobirama y a Izuna antes de que salieran
— Izu, como el mejor de la clase te dejo a cargo de Tobirama, solo mientras conoce la escuela y se acostumbra ella — sonriendo amable no le dio ni tiempo de negarse, Izuna aceptó mirando al albino que le observaba impasible y sin decir palabra alguna. ¿Cómo iba a estar con una persona, que le desagrado con solo con dirigirle la palabra?
— Así que Izu ¿Ah? — interrumpiendo los pensamientos sobre la impresión que le daba el albino
— Izuna — contestó con toda la frialdad que pudo —Izuna Uchiha—
— Izuna... Uchiha, ¿eres hijo de Tajima Uchiha?
— ¿Eh? ¿Realmente conoces a mi padre?— el menor preguntó, ya muchas personas sabia de gran Patriarca Tajima Uchiha, más pocos le conocían de verdad y en personas
— Si, ah ido a los eventos de caridad que mi padre organiza, hmm dudo que hallas estado en alguno... — sonrío con un aire de superioridad mientras se llevaba ala mano a la mandíbula y la sujetaba mientras le observaba divertido
— Hmp he estado en los eventos que tu familia organiza, una pantalla solamente,
La sonrisa que se esbozaba en el rostro de Tobirama decayó volviéndose una gélida mascara de fulminación total
— No tienes idea — ahora su sonría era inescrutable
— ¿Que quieres decir? — El menor trato de indagar en aquella respuesta y en aquella enigmática sonrisa
— Nada. ¿Hacia dónde?—
Molesto el pelinegro miró con en entrecejo fruncido, mientras se dirija hacia la siguiente clase, mientras caminaban por el pasillo Izuna distinguió a lo lejos a su hermano mayor junto a una figura que conocia muy bien además de que era una de las pocas personas que no eran del total agrado del menor
— Hola Izu — rodeándolo con sus brazos, el mayor de los Uchiha le saludó
— Hola nii-san... Hashirama... — mirando al castaño que acompañaba a su hermano
— Izuna — sonreía sin notar el comprometedor saludo que le acaban de dirigir — ¡Tobi! — mientras iba hacia el albino que se notaba no extrañarle la euforia de Hashirama
— Veo que conociste al hermano de Hashi-san — Madara miraba lo gracioso que era Hashirama al abrazar a su hermano menor
— ¿Hermano? —
— Sí, Hashirama y Tobirama son hermanos ¿Qué acaso no lo sabias?
— N-No — mientras dirigía su mirada hacia donde estaba los hermanos Senju
— Izuna te agradezco que ayudes a mi mezquino hermano, el aun no se sabe nada acerca del colegio — El castaño sonrió al pelinegro más chico mientras rodeaba los hombros de su hermano con su brazo
— La maestra me pidió hacerlo, solo es simple amabilidad —
— Madara — Tobirama miró al mayor
— Hola Tobirama ¿Cómo haz estado?
— Hmm — El albino se encogió de hombros mientras seguía hablando con Madara en compañía de su hermano mayor, ver tan cercas de su hermano a Tobirama, le causo una ligera molestia al chico Izuna pero, ¿por qué? además de que prácticamente estaba siendo ignorado por los tres jóvenes
— Ejem*, creo debo ir a mi siguiente clase. Te veo en la salida nii-san — mientras con un corto ademán se despedía Izuna
— ¡Izuna!... Está bien... — extrañándose por la repentina huida de su hermano menor,
— Vamos Tobi te llevaremos a tu siguiente clase
Izuna estaba sumiso en sus pensamientos, ¿por qué le molestaría que su hermano hablara con Tobirama? aun más con tanta confianza, negó con notoria molestia mientras entraba al aula, debería de darle lo mismo al fin y al cabo aquél albino no era más que un arrogante engreído
— ¡Izuna!— un eufórico saludo hizo estremecer al chico
— ¡Obito! ¡Me asustaste!
— ¿Pues en qué pensabas?— el igualmente chico azabache río por su nada planeado susto
— En nada... ¿Dónde estabas? ¿Por qué no viniste a la primera clase?
— Oh por nada en especial, ya sabes cosas del oficio
Izuna frunció el ceño molesto, desde que Obito había entrado a un ''club social'' llamado Akatsuki había esta muy raro, eso sin contar sus inasistencias, su insomnio frecuente y las veces que llegaba a su casa a muy altas horas de la noche sin siquiera saber de si. Mientras Obito e Izuna hablaban, Tobirama llegó acompañado por Madara y Hashirama, creando un murmurar de voces; El nuevo alumno acompañado por dos de los estudiantes de mayor grado más guapos y populares del colegio, Izuna dirijo la mirada a su hermano y a los Senju algo molesto, no olvidaba que hace unos momentos le habían ignorado por completo, notando que Obito iba a saludar a su primo Madara. Notó como el albino saludaba amable a su azabache primo, haciéndole sentir la misma molestia que cuando Madara y Tobirama, ignorando aquellas imágenes se colocó sus auriculares mientras fingía escribir. Sintiendo dos presencias levantó la mirada notando a Obito y Tobirama observándole.
— ¿Qué? —
— Izu por qué no me dijiste que cuidarías de Tobirama — Obito sonrío divertido, notando muy poco la molesta que le ocasionaba a su primo el verles juntos — Así ambos podemos mostrarle el lugar
— ¿Por qué no lo haces solo tu? — Sonriéndole notoriamente sarcástico — Tengo entrenamiento y no estoy como para distraerme, mientras volvía su atención hacia su libreta
— ¿Entrenamiento de qué?
— Oh Izuna, es parte del equipo de natación de la escuela
— ¿Enserio? — El albino sonrío irónico, mientras miraban por el rabillo del ojo al joven que escribía — Entonces creo que seremos compañeros
— ¿Compañeros? —
— Sí, el entrenador me pidió personalmente que formara parte del equipo, he estado en bastantes así que me ah pedido ayuda —
— ¿Escuchaste Izuna? tú y Tobi-san serán compañero olímpicos —
— ¿Escuchar qué? — Quitándose los auriculares, miró a ambos chicos con cierta indiferencia.
Transcurriendo el día Obito se la pasó junto a Tobirama, y algunas veces se les unía Hashirama y Madara, Izuna por su parte dejo al albino con aquellos chicos, fingiendo no molestarle, se iba con cualquier otra persona. ¿Por qué? ¿Qué era esto que sentía? ¿Celos? ¡No! no podía ser ¿Por qué celaría a alguien como Tobirama?, muchas cuestiones se le presentaba al chico Uchiha, más cuando nunca había sentido aquellas horribles molestias como le llama a él
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