CALLEJÓN DE LAS ALMAS(4° PARTE)

Mientras mas se adentraba al lugar, se iba poniendo mas y mas oscuro, el edor de los muertos, del sufrimiento se sentia como un ambiente pesado, Juan no le importaba nada de eso, el echo de que volvera a ver a Michel le incitaba a seguir adelante, su mente solo estaba con ella, lo mismo pasaba con su corazon, las escaleras se hacian mas pesadas de bajar, le costaba aun mas respirar y su corazon comenzaba a latir mas fuerte, su vision se tornaba mas borrosa, aun asi seguia avanzando, hasta que encontro una roca, la empujo y entonces lo vio, eran las tierras de la misma muerte, un lugar totalmente montañosa, lava, pero esto no era roja, si no azul, cuervos volando a los alrededores, y gritos de desesperacion por todos lados, como si fuera una fiesta de sufrimiento, era la peor pesadilla de cualquiera, el peor lugar para los muertos. Pero Juan estaba vivo, y estaba decidido a encontrar a Michel, seguia avazando y un viento helado apago la antorcha que le dio el anciano. La lava azul daba una iluminacion al lugar e hizo que Juan pudiera avanzar, ¿Pero a donde?, no sabia a donde diablos ir - Soy un maldito idiota - Se lamentaba, debio preguntarle al anciano o al menos llevar un mapa de ese lugar, si tan solo tuviera su celular con la aplicacion Google Maps, se resolveria todo, aunque pensandolo mejor, no creyo que los autos de dicha compañia se paseara por aqui. Siguio avanzando, el frio se hacia notable pero aun peor, vio algo que lo hizo que se quedara petrificado, una bestia enorme, una clase de perro guardian de tres cabezas, pero este media como unos 50 metros, el chico parecia una hormiga a su lado, era grande, con un collar de puas como los de los metaleros masoquistas, estaba cubierto de hielo y sus colmillos mostraba gran terror para cualquiera, Juan se quedo ahi mirandolo, su muerte estaba cerca, tan solo susurro - Lo siento Michel - Entonces, alguien con caballo blanco vino con una bara e ilumino el lugar, apunto a la cara de la bestia y este retrocedio - Sube rapido muchacho - Entonces Juan se dio cuenta de que era el anciano, pero era diferente, mas joven, con alguna clase de armadura, - Que esperas?! - Gritaba el ex anciano, Juan apresurado sube y al lomo del hermoso caballo blanco y comienza a galopar ferozmente. La bestia de tres cabezas se reincorpora, entonces comienza a perseguir al caballo. La bestia que los perseguia desmoronaba rocas, y cualquier otra cosa que se les cruzara en el camino, el caballo corria muy rapido, pero la bestia era aun mas rapido, se sentia la respiracion de la bestia en los cuellos de Juan y el anciano y es entonces que de un tiron de las cadenas de la bestia, se queda inmovilizado, al parecer, las cadenas que los sostenia, habia llegado al limite, la bestia se queda ahi y entonces da un rugido enorme. Nuestros protagonistas se quedan ahi mirandolo y riendose un rato, hasta que la voz de penumbra se oyen a sus espaldas - Ya era hora de llegaran, mis invitados - Era la muerte, a su lado, estaba Michel, arrodillada y encadenada, pronto acabaria todo.