Disclaimer: Los personajes no me pertenecen, son obra de Thomas Astruc, Zag Toons y todo el equipo involucrado en "Miraculous: Tales of Ladybug and Chat Noir
En cada patrulla, en cada batalla, en cada momento se dedicaba a observarla, como si quisiera memorizar hasta el último cabello para reconocerla apenas la viese en su firma de civil. Esa fue su rutina los primeros 2 años y la dejó un poco de lado cuando se dio cuenta de que aún no le servía de nada, y prefirió concentrarse en el aquí y el ahora.
Ya llevaba casi 6 meses yendo a la casa de su Princess, Marinette. Le gustaba hacerle compañía, pasar tiempo con ella, le encantaban las atenciones y mimos que recibía por parte de ella, pero aún más, le gustaba conocerla fuera de los tartamudeos, reconocer esa astucia que podía observar cada vez que ella se enfrentaba a algún problema o las veces que tenía que tomar su puesto de presidenta de la clase -por segundo año consecutivo-, y le fascinaba como era tan distinta con Chat Noir que con Adrien.
Y un día, justo cuando se cumplía el sexto mes, por algún motivo decidió prestar atención, precisa y felina. Su rostro era realmente hermoso, su sonrisa era radiante -y admiraba aún más aquella que le dedicaba solo a él, cuando estaban conversando en el balcón fuera de su cuarto-, su cabellos en adorables coletas y era aún mejor cuando se lo soltaba y este se encargaba de enmarcarle el rostro, las pequeñas pecas en el arco de su nariz, sus largas pestañas y sus ojos color zafiro que eran capaz de expresar el mundo y las emociones más sinceras y puras que él haya visto alguna vez en su vida. Sus labios rosas, moviéndose al ritmo de la historia que le estaba narrando sobre algún nuevo diseño, moviéndose a un ritmo que le gustaría probar…
Ese último pensamiento lo devolvió por un momento a la tierra, a la situación en sí e inevitablemente, algo apareció en su mente, "yo conozco esos ojos, esas coletas, esas pecas… esos labios" y como si una corriente despertara en su cabeza, conectó todo. Como la actitud de su Lady había cambiado hacia él en las últimas semanas, como la heroína trataba de diferente manera a su alter ego -no lo hacía mal, pero ya no estaba ese sonrojo que le parecía tan adorable y nunca supo a qué atribuirle-, como la misma Marinette ya podía hablar de manera fluida con él en la escuela, como es que era que ambos desaparecían y nunca habían sido akumatizados -después de que cada uno de su salón había pasado por aquel fatídico proceso-, y sobre todo, como su corazón latía con la misma fuerza hacía la franco-china como lo hizo en algún momento hacia su compañera de batallas.
"My Lady?" Susurró y vió a la chica palidecer, cortar su relato y quedarse pasmada. Sin esperar mucha más confirmación que aquella -que era más que suficiente para él- se inclinó levemente hacia ella, acunó su rostro entre sus manos enguantadas y depositó un pequeño y casto beso en sus labios que descubrió que sabían a chocolate y cerezas.
"Por fin te encontré, Buginette".
Y bueno, después de estar un tiempo desaparecida, he vuelto con un mini fic/drabble. Estoy intentando hacer algo más largo, pero ahí vamos viendo.
Como siempre, cualquier reclamo, duda, sugerencia, etc., son muy bien recibidos en los reviews. Nos estamos leyendo!
Plagg, claws out!
