Corría bajo la fuerte tormenta como si mi vida dependiera de ello, bueno en realidad es que si no lo hacia moriría allí en ese mismo momento…
Al dar la vuelta en la esquina, aumente la velocidad, levante la mirada del suelo y mas adelante divise un cartel luminoso que decía "Cafeteria Anteiku", no lo pensé ni una vez y como una rayo me dirigí al local a refugiarme.
Entre y me incline hacia adelante apoyando mis manos en las rodillas, para recuperar el aire .
-Se encuentra bien señorita?- me pregunto una voz desconocida.
Levante la cabeza y me encontré con un hombre algo mayor con el pelo todo canoso con una expresión de confusión y preocupación al mismo tiempo.
-S-si, lo-lo siento por entrar así- respondí entrecortadamente.
-Espere un segundo y le traeré una toalla para que se seque.
-N-no esta bien, solo voy a pedir una taza de café por favor- le sonreí de medio lado.
-Un café marchando para la señorita entonces – dijo con voz amable yéndose hacer mi pedido.
Me pare derecha de nuevo, me saque la chaqueta negra y me senté en una mesa al lado del gran ventanal *Espero que no entren aquí*.
Estaba algo sumergida viendo como la lluvia caía sin para y no me había dado cuenta de que una chica me había traído el café.
-Gracias- dije mientras me quedaba examinándola por unos segundos, era una hermosísima chica de cabello violeta-azulado con un ojo del mismo color de su cabello y el otro supongo que también ya que no lo podía ver porque parte de su flequillo lo cubría. Ella solo asintió con la cabeza y se retiro de ahí.
Tome la taza entre mis manos y la acerque hasta unos centímetros de mi rostro sintiendo el calor y el aroma que desprendía…tome un pequeño sorbo saboreando el amargo pero al mismo tiempo dulce café.
Mis manos temblaban ligeramente, sabía que me estaban buscando y no tardarían mucho en encontrarme…y esta vez nose si sería capaz de sobrevivir. Me sobresalte un poco al escucharla la campanilla de la puerta al abrirse, me gire disimuladamente para ver quien entraba por la puerta y solté el aire en un largo suspiro de alivio, no eran ellos se trataba solo de un chico pelinaranja con anteojos que al parecer era un empleado de este Café.
*Tengo que irme de aquí*
No quería involucrar a gente inocente asi que deje el dinero en la mesa, me puse la chaqueta y me dispuse a salir de allí.
-Muchas gracias por el café, estaba realmente delicioso- hice una pequeña reverencia, me puse la capucha y salí de allí. Apenas di unos cinco pasos y ya tuve que empezar a correr porque ellos ya estaban ahí …
Ya no podía mas había corrido mas de 20 cuadras y esos dos hombres aun no se cansaban. Entre en un callejón tomando distintos caminos para poder tratar de perderlos, pero lo único que encontré fue un camino sin salida.
Estaba atrapada ya no tenia escapatoria, iba a trepar la pared pero agarraron una de mis pierna jalando de esta y tirándome al piso. Forcejee lo mas que pude pero uno de los tipos de agarraba fuertemente de las muñecas y el otro de mis piernas.
*Van a devorarme*
Cerré los ojos fuertemente esperando lo peor, pero nada sucedió, solo sentí como la presión en mis piernas y muñecas se desvanecía y escuchaba algunos quejidos de dolor.
Abrí mis ojos para ver lo que sucedía y solo pude ver como los dos hombres salían corriendo de allí, mientras otro muchacho me daba la espalda y gritaba.
-Y no se atrevan a aparecer otra vez por aquí!- este se volteo mostrando a un chico de cabello plateado, con el ojo derecho grisáceo y el otro no lo podía ver ya que era cubierto por un parche negro-Te encuentras bien? –me pregunto amablemente mientras daba unos pasos hacia mi pero se detuvo a mitad de camino frunciendo un poco el seño y mirándome un poco mas serio.
Me levante del suelo y camine hasta el chico hasta quedar justo enfrente de el, lo mire fijamente al único ojo descubierto y después desvié la mirada hasta el parche. Lleve mi mano hasta este pero antes de hacer algo que tal vez luego me costaría la vida lo mire de nuevo al otro ojo y este solo me miraba sin ninguna expresión alguna, no di mas vueltas y me dispuse a quitarle el parche, despacio y suavemente como si cualquier movimiento en falso fuera a romperlo. Cuando saque el pequeño "estorbo" del camino pude verlo, ahí estaba ese inconfundible ojo de Ghoul.
*No puede ser al fin lo e encontrado alguien igual a …*
Después de ver esa gran sorpresa todo a mi alrededor se puso negro...
Espero que les guste , es algo loco que se me ocurrió después de tener un sueño re loco ajaajj.
