-... presentado por nuestro nuevo patrocinador: Industrias Blakk.- dijo uno de los presentadores mientras su compañero mostraba a la cámara una de las bebidas de la marca.- Industrias Blakk le trae el futuro de ayer en el día de hoy. Soy Bob Johnson. Como siempre, señores, me acompaña...
-¡Agh!
-¡Corte! ¿Y a él qué le pasa?- preguntó el director señalanado al exjugador de BabosaBol, quien tenía sus manos a ambos lados de su cabeza.
-Cerebro... congelado...
-¿Otra vez? Te dije que no te tomaras esa cosa tan rápido.
-¡Agh!- El capitán de los Shock and Rollers se quejaba de dolor en los camerinos.- ¡Aléjense! No me toquen.
-Amigo, nadie te tocará.- explicó Trixie.
-Bien. Sigan sin tocarme. Ouch...
-Yo creía que siendo deportista profesional toleraba mejor el dolor.- comentó en voz baja la chica a su amigo topoide.
-No lo creas. No demasiado. El universo está...
-¡Me muero! Veo la luz. Les juro que veo la luz.
-¡Corte! Por favor.- detuvo el director.- El guión dice que debes fingir dolor, si, pero no te estás muriendo, Brian.
-Jeje, lo siento.
-Entonces les hablaré más fuerte.- retó Eli al jugador de BabosaBol.
-Oye, ¿qué te crees?- dijo este apuntando su puño hacia el chico.
-¡Hey, tranquilo!- lo detuvo de repente una chica con su lanzadora en frente. Por desgracia, estaba más preocupada en evitar que golpearan a su amigo que hacia donde apuntaba su arma. Esto se vió claro al darle por accidente una bofetada al jugador con la misma.
-¡Ouch!
-¡Corte! Shannon, ¿por qué hiciste eso?
-De verdad lo siento, no fué mi intención.- respondió apenada tratando de acercarse al lastimado actor.
-Parace que la distracción ya no es una cualidad exclusiva de Samuel...
-Si los Shock and Rollers abandonan, las bestias ganarán. ¿Acaso los intimida la idea? Este juego, chicos, consiste en disparar babosas. Es lo que hacemos cada día. Es algo muy simple para nosotros. Solo que televisado... y en el aire... y con cuarenta mil fans gritando... ¿Chicos?
-¡Corte!- dijo el director.- ¿Dónde están los demás?
-Yo los ví.- dijo uno de los asistentes.- A la mitad de la escena del discurso, salieron corriendo por la puerta de atrás.
-Muy bien, esta vez no fué mi culpa. Fué el guión.- Exclamó Samuel.
Literalmente los termino de redactar y los subo. Estoy mareada de tanto ver letras.
