Vidas entrelazadas.
Capítulo 1.- por Lily de Wakabayashi.
En algún sitio, en algún momento...
Genzo Wakabayashi hace una parada impecable. ¡No está permitiendo que nadie penetre en su portería!
El partido ya está por finalizar y Genzo está contando los minutos. Es la primera vez que desea que un encuentro termine, y no por asegurar la victoria sino porque su esposa está a punto de dar a luz a su primogénito... Durante el medio tiempo Genzo recibió un mensaje de voz a su celular; era de su esposa.
Gen.- decía Lily, con voz angustiada.- El médico dice que el bebé corre peligro y que necesitan operarme de urgencia. Sé que estás ocupado, pero si pudieras venir al hospital en cuanto puedas yo... Bueno, no digo más... Buena suerte...
Genzo trataba de conservar la calma, aunque le estaba costando algo de trabajo concentrarse. Afortunadamente, sus compañeros de equipo se enteraron de las noticias y le facilitaron mucho la defensa. El árbitro al fin pitó el final del encuentro. Genzo se dirigió raudo y veloz hacia la banca de su equipo.
Wakabayashi.- le dijo el asistente.- Me acaban de informar que tu esposa está...
En el hospital, lo sé.- lo cortó Genzo.- Debo irme.
Voy contigo.- ofreció Schneider, capitán del equipo.
Gracias. Pero prefiero ir solo, es más fácil que la prensa no se de cuenta de que se fuga un jugador estrella a si se fugan dos.
Tienes razón.- Schneider sonrió.- Los entretendré por ti. Buena suerte.
Buena suerte. No era él quien necesitaba suerte, sino su esposa.
En el hospital, Lily de Wakabayashi intenta mantenerse serena, aunque le hubiese gustado que su esposo estuviese con ella... Curiosamente, en la sala de a lado se encuentra una vieja amiga de Lily y de Genzo; esa amiga está también a punto de dar a luz...
Señora Wakabayashi, lo sentimos pero ya no podemos seguir esperando más a su esposo.- le informa el obstetra a la joven.- Su bebé está sufriendo y no podemos dejar pasar más tiempo...
Está bien.- acepta Lily.- Solo salven a mi bebé.
El ginecólogo le había informado a Lily que habría la necesidad de hacerle una cesárea de urgencia porque el bebé tenía enredado el cordón umbilical alrededor del cuello y estaba sufriendo. Lily le dejó un mensaje a Genzo en su celular, pero sabía que él no lo oiría sino hasta el medio tiempo, y aun así él no podría acudir al hospital sino hasta el final del partido...
¿Estás lista, corazón?.- le sonrió dulcemente la enfermera.- Pronto tendrás a tu bebé.
Sí, estoy lista, gracias.- Lily sonrió débilmente.
Pero justo antes de que Lily entrara al quirófano Genzo llegó junto a ella.
Esperen un momento, por favor.- pidió Lily, al ver que su esposo se acercaba.
¿Estás bien?.- preguntó Genzo, tomando la mano de su esposa.
Solo un poco preocupada por el bebé.- respondió Lily, tratando de no llorar.- Espero que no sea muy tarde.
Todo saldrá bien.- Genzo besó la frente de su esposa.- Suerte, mi princesa.
Ya en el quirófano, el ginecólogo le sonrió a Lily.
No se preocupe, señora Wakabayashi.- le dijo.- Todo estará bien.
Genzo no tuvo más remedio que ir a la sala de espera. Ahí se encontraba también un hombre joven, más o menos de la misma edad de Genzo. Tenía el cabello negro y largo hasta los hombros y sus ojos tenían un peculiar color rojo. El joven se veía bastante tranquilo, aun cuando se notaba que él también estaba a punto de convertirse en padre.
¿Primer hijo?.- preguntó el joven, cuando Genzo se sentó en un sillón.
Sí.- respondió Genzo, vagamente.
Ya somos dos.- dijo el joven, sentándose a un lado de Genzo.
Van a operar a mi esposa.- comentó Genzo, solo por decir algo.
Vaya que tienen suerte.- suspiró el joven.- Yo llevo aquí cerca de diez horas y aun no nace el bebé...
¡Diez horas!
Más o menos...
En la sala de parto contigua al quirófano en donde operarían a Lily, Saki Shadows trae al mundo a su primer bebé.
¡Es un varón, señora Shadows!.- grita el pediatra.- ¡Felicidades!
Unos cuantos minutos después, se escucha el llanto de otro bebé en el quirófano contiguo.
Es una niña.- anuncia el obstetra.- Y está bastante bien. Felicidades, señora Wakabayashi.
Fabuloso, ahora se me han juntado dos bebés.- gruñó el pediatra.- Y ni siquiera tengo dos cunas disponibles... Es el colmo que en este hospital de categoría no tengan ni el espacio mínimo para atender a cada paciente como se debe...
No se queje, doctor, que está usted atendiendo a los herederos de dos famosos: Tess Shadows y Genzo Wakabayashi.- dijo una enfermera.
¿El famoso portero japonés y el famoso compositor suizo?
Los mismos que visten y calzan.
¡Quién lo diría!
Rato después, el pediatra le lleva a Saki a su pequeño hijo.
Aquí está su bebé, señora Shadows.- le dijo, entregándole el pequeño bultito.
Hola, mi amor.- Saki sonríe.- Bienvenido al mundo, Ariel...
Después, el pediatra le entrega a la señora Wakabayashi a su pequeña hija.
Tiene usted una linda niña, señora.- le dice el pediatra.
Hola, corazón.- Lily llora de la felicidad cuando recibe a su hija.
¿Cómo la va a llamar, señora?.- pregunta con curiosidad el pediatra.
Jazmín.- Lily sonríe a pesar de las lágrimas.
Jazmín y Ariel.- murmura el pediatra.- Bonitos nombres para estos chiquitos.
Media hora después, los dos bebés recién traídos al mundo yacen calientitos y bien arropados en una misma cuna. Ni estos pequeños ni sus padres se imaginan que sus vidas están a punto de entrelazarse...
Cinco años después.
Lily baja corriendo las escaleras de su lujosa mansión en Munich, Alemania. Se le está haciendo tarde y aun le falta buscar algunos papeles importantes. Ella se sorprende mucho al ver a su esposo sentado en la mesa de la cocina, tomándose un café, muy tranquilo.
Creí que estarías en el entrenamiento.- le dijo ella a Genzo, al tiempo que él le servía una taza de café.
Más tarde.- respondió Genzo, dándole a Lily la taza de café y un beso.- El clima está pésimo y por eso decidieron retardar el entrenamiento.
Dudo mucho que el clima mejore.- suspiró Lily.- Y tendré que ir a la audición con este clima espantoso...
¿Tienes que ir? Te enfermarás.- susurró Genzo, tomando a su esposa de la cintura y acercándola a él.
Más bien temes que vaya a ver a todos esos guapos actores.- se burló Lily, con una sonrisa coqueta.
Bien dicen que entre broma y broma la verdad se asoma. Era conocido por el mundo entero que Genzo Wakabayashi celaba muchísimo a su bella esposa, una reconocida actriz y cantante, aun tras ocho años de matrimonio.
También estarán ahí Saki y Tess.- comentó Lily.- No seas tan celoso.
No soy celoso.- replicó Genzo.- Aunque me alegra saber que ellos estarán presentes.
Eso me recuerda... Se acerca el cumpleaños de Jaz. Saki quiere saber si este año también le haremos una fiesta junto con Ari.
Ese niño pasa demasiado tiempo con mi pequeña.- gruñó Genzo.- Si no fuera porque es hijo de Saki ya desde hace mucho que le hubiese dicho que se alejara de mi niña.
¡Hello con tu hello!.- exclamó Lily.- ¡Ariel y Jazmín solo tienen cinco años! Además, nadie te dice que vayan a terminar casándose.
Era irremediable. Genzo Wakabayashi celaba en extremo a las dos mujeres más importantes de su vida: su esposa y su hijita.
Bueno, pues empecemos por el principio. Hacía ya ocho años que Genzo Wakabayashi había contraído matrimonio con Lily Del Valle, una bellísima y talentosa joven mexicana que se dedicaba a la actuación y al canto, quien por cierto, había sido la mejor amiga de Genzo durante su adolescencia. Ellos se habían conocido en Alemania, cuando Lily se instaló en Hamburgo con el fin de prepararse como una gran actriz y cantante del ámbito teatral, y pronto ella y Genzo se convirtieron en muy buenos amigos, después de que Hermann Kaltz los presentó. Lily se enamoró rápidamente de Genzo y, aunque a él le pasó lo mismo, le había costado trabajo darse cuenta de que estaba enamorado, así que cuando por fin se le declaró a Lily prácticamente medio mundo cantó un aleluya.
El día en que Jazmín, su primogénita, nació, Lily y Genzo se reencontraron en el hospital con Saki Aiza, una chica a la que habían conocido en el Mundial Sub-16 que se había llevado a cabo en Francia. Ambos jóvenes le tenían mucho aprecio a Saki, aunque ella desapareció después del mundial sin dejar huella. Sin embargo, el destino los había vuelto a juntar el día en que sus respectivos hijos nacieron. Ese día, Lily y Genzo conocieron a Tess Shadows, un famoso compositor y cantante (tal como Saki lo era), quien se había convertido en el esposo de Saki. A partir de ahí, Saki y Tess se hicieron amigos cercanos de Lily y Genzo y sus hijos crecían juntos.
Jazmín era una preciosa niña idéntica en todo a su madre, menos en el cabello, ya que ella había heredado el grueso y brillante cabello negro de su padre. Lo que más llamaba la atención en Jaz eran sus ojos del color del chocolate derretido, iguales a los de Lily. La niña además era muy dulce y tierna y tenía una enorme curiosidad por conocer el mundo que la rodeaba. Ariel tenía el cabello negro y los ojos de color café rojizo, mezcla del color de ojos de sus padres. Era también un dulce en cuanto al carácter se refiere y siempre cuidaba mucho a la pequeña Jaz. Sobra decir que ambos niños eran inseparables.
Ya es hora de que Jazmín se vaya al kindergarden. ¿En dónde estará?.- preguntó Lily.
Lo más seguro es que esté jugando con Ariel.- respondió Genzo.- ¿En dónde más puede estar?
¡Jazmín!.- llamó Lily a grandes voces.- ¿En dónde estás, corazón?
Voy, mami.- respondió la niña. Pronto se apareció por la cocina, con su largo cabello negro flotando tras ella.
¿En dónde estabas?.- inquirió su madre.
Guardando mis juguetes.- contestó la niña, muy seria.
Lily y Genzo sonrieron. Su hija ya era muy responsable desde los cinco años de edad...
Bueno, preciosa. Por hoy yo te llevaré a la escuela.- dijo Genzo, cargando a la niña.- ¿Ya tienes tu abrigo listo? Hace frío afuera.
¿Tú me llevarás, papi?.- Jazmín sonrió, evidentemente emocionada.- ¡Viva!
Sí. Solo por hoy.- Genzo besó la cabecita de su hija. Ésta se revolvió algo inquieta.- ¿Qué pasa?
¿Mami?.- Jazmín de repente se había asustado mucho al ver a su madre.
Genzo volteó. Lily se había puesto muy pálida y se aferraba a una silla.
¿Qué te pasa, mi amor?.- preguntó Genzo, preocupado. Bajó a Jazmín al suelo con el fin de socorrer a Lily pero fue demasiado tarde: Lily se desmayó.
¡Mami!.- gritó Jazmín, al borde de las lágrimas, al tiempo que Genzo se apresuraba a ayudar a Lily.
Mucho rato después, digamos varias horas, Ariel Shadows regresaba del jardín de niños, solo (bueno, no solo, regresó con su mamá). Jazmín no había asistido a la escuela y eso lo tenía preocupado y algo triste...
¿Estás segura de que Jaz está bien, mami?.- le preguntó Ariel a Saki.
Perfectamente bien, querido.- respondió Saki, sonriente.- Fue su mamá la que se enfermó, no ella.
¿Y la mamá de Jaz está bien?.- volvió a preguntar el pequeño.
Sí. Solo tuvo un pequeño desmayo. No te preocupes, corazón.- Saki trataba de ocultarle a su hijo su preocupación por la salud de su amiga.
Después de que Ariel hubo comido, Saki lo llevó a la casa de los Wakabayashi, con el fin de que él viese a su amiga y ella pudiese preguntar por el estado de salud de Lily. Una vez ahí, Saki inmediatamente se puso a platicar con Lily, quien estaba recostada en su cama sobre unas almohadas. Genzo permanecía a prudente distancia de ellas, con una evidente sonrisa de felicidad en su rostro. Ariel encontró a Jazmín en el jardín, jugando con Wind-Star, su perro Golden Retrevier.
Hola, Jaz.- la saludó Ariel.- ¿Por qué no fuiste a la escuela hoy?
Porque mi mami se puso enferma.- respondió Jazmín, mirando con ternura a su amigo.
¿Y por qué se puso enferma? ¿Comió mucho anoche?.- preguntó Ariel, con inocencia.
No. Mi papi me dijo que mi mami está enferma porque dentro de pronto voy a tener un hermanito.- respondió Jazmín, sonriente.
¿Un hermanito? ¿De veras?.- Ari estaba sorprendido.
Sip. Y pronto iremos al hospital por él.- Jaz abrazó a Wind-Star.
¿Lo van a ir a comprar al hospital?
Yo creo que sí. Me imagino que ahí guardan a los bebés mientras los papás y mamás se preparan para comprar uno.
Ariel no sabía qué significaría el hecho de que Jazmín tuviese un hermanito. Solo sabía que su amiga estaba feliz, y por eso, él también estaba feliz.
Felicidades.- les dijo Saki a Lily y a Genzo.- Creo que a Jazmín le vendrá bien un hermanito.
¿Y no te parece que a Ariel también le vendría bien uno?.- preguntó Genzo, haciendo que Saki se sonrojara.
Uh, Tess y yo no hemos hablado sobre eso... .- murmuró Saki, apenada.
Gen, ya cállate.- lo regañó Lily.- No te metas en sus asuntos personales.
Solo bromeaba.- Genzo se acercó a su mujer y la besó muy tiernamente.
Par de cursis que son los dos.- suspiró Saki.- No cambian. Y por cierto... ¿Eso significa que ya no trabajarás más, Lily?
¿Y por qué no? Apenas tengo dos meses de embarazo.- replicó Lily.- Aun puedo hacer otra obra más antes de que se me empiece a notar.
Si por mí fuera te tendría siempre aquí, para evitar que te agotes.- murmuró Genzo.
Si por ti fuera, la encerrarías en una torre para evitar que cualquier hombre se le acerque.- Saki soltó la carcajada.- Eres extremadamente celoso, Gen-san.
Tess también lo es.- se defendió Genzo.
Sí, pero no tanto como tú.- replicó Lily.
Los tres amigos soltaron la carcajada, al tiempo que observaban como Ariel y Jazmín jugaban juntos. Lily sonrió. Tal parecía que esos niños estaban destinados estar juntos.
Notas:
Lily Del Valle y Jazmín Wakabayashi son personajes creados por Lily de Wakabayashi.
Saki Aiza y Ariel Shadows son personajes creados por Testament Saki.
Tess Shadows es un personaje de un videojuego, no me pregunten cual, eso mejor se lo preguntan a Saki XD. Ella acaba de informarme que el videojuego se llama Gulty Guear o algo así P.
Los personajes de Captain Tsubasa son creación y pertenecen a Yoichi Takahashi y Shueisha ®.
Ni me lo digan, ya sé que la mascota de Jazmín tiene nombre de camioneta... Pero es un nombre bonito.
Bueno, pues ahora Testament Saki y yo nos hemos aliado para hacer un fic juntas, y quién sabe, quizás hasta nos hagamos consuegras, jajaja. Esperamos que la historia sea de su agrado, no diré mucho al respecto, dejaré que ustedes mismos lo vayan descubriendo.
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