Título: Teardrops everywhere.
Fandom: Twilight.
Disclaimer: Los personajes no me pertenecen, la trama sí.
Claim: Leah/Seth.
Rated: T
Advertencias: Incesto, insinuaciones leves.
Summary: No necesita decir más. No necesita hablar, la verdad. Él entiende (no le sorprende, Seth siempre entiende).
Notas: Participa en el reto Palabras para el recuerdo, del foro lol, (Palabra clave: Necesidad).


Teardrops everywhere.

«La vida es una mierda» es lo único que puede pensar. Viene antes que el dolor, que la ansiedad, que el ¿Qué haremos ahora?; viene antes de que las piernas le fallen, que no sienta sus dedos, que los dientes le castañeen, que el labio le tiemble…

Viene antes de las lágrimas. Corre a su habitación, no queriendo saber más de la situación. No más detalles. Sabe que Seth la sigue, que no la dejará sola, que allí estará (porque así es Seth, siempre está).

No cierra con pestillo cuando entra y se lanza en la cama. No piensa tener que levantarse a abrirle la puerta a su hermano. Él entra segundos después, camina lento (o al menos eso le parece), siente la cama hundirse donde él se sienta.

—Leah.

Sólo eso dice, no necesita decir más. Leah se siente una niña pequeña, la hermana menor de la casa; se siente frágil, rota, sin fuerzas, sin voluntad (como una marioneta). Seth le acaricia el cabello, enrollando los rizos en su dedo índice, le acaricia la espalda; ella se siente un poco mejor, el dolor disminuye un poco. Sólo un poco.

Levanta la cabeza y lo mira fijamente; él sólo le devuelve la mirada, ojos café chocolate contra ojos de ámbar oscuro. Ella se sienta, notando que no ha derramado ni una lágrima.

Seth sí; lo sabe porque tiene los ojos rojos y húmedos, pequeñas líneas como ríos surcan sus mejillas. Ella limpia tiernamente el camino que dejaron. Seth sonríe.

—Seth.

No necesita decir más. No necesita hablar, la verdad. Él entiende (no le sorprende, Seth siempre entiende).

La besa, un inocente roce de labios, y ella siente un fuego arder en su pecho. Lo necesita, más que eso, más que un tierno beso. Lo toma del cuello y lo besa con fiereza (él se deja, Seth siempre se deja). Le despeina los cabellos y siente la adrenalina correr por su cuerpo.

Siente las lágrimas correr libremente por su rostro. (Caen en la cama, en el pecho de Seth, entre sus labios, en su estómago, en su espalda, en el suelo, en todos lados).

Se siente mucho mejor.