Fanfic: Gaara Se enamora
1° capitulo: el espía.
No había pasado más de dos meses después de la terrible accidente con Akatsuki; aquella noche, Gaara no podía dormir, pues era un habito que anteriormente evitaba (pues el shukaku dominaba su cuerpo), y aun no se acostumbraba a el. Así que decidió tomar un paseo por Sunagakure; se abrigo un poco y salio de su habitación lo más silencioso posible para evitar ser visto.
Estando fuera, se percato que alguien le estaba espiando, pero no le tomo importancia, pues siendo un alto cargo de la villa se había acostumbrado a que de vez en cuando sea acosado, en mayoría por las jóvenes kunoichis de la aldea.
Ya había pasado rato y aquel que le perseguía no se rendía, hasta q la paciencia de Gaara-Sama estaba en sus limites…
Tú, quién eres y porqué me sigues- un fúnebre silesio se presento en el instante, pero nada engañaría a Gaara, así que no dudo en decir: ¿qué, no piezas contestar?-
-Se que estas ahí-
La noche era fría y bastante calmada, estas condiciones hacían que, hasta el ninja más experimentado fuera descubierto con mayor facilidad.
Se que te escondes detrás de ese poste- recalco Gaara y volteando a su lado derecho, apunto hacia un poste de alumbrado público que se encontraba detrás de él, y dijo- ¡ahí!
La persona que se encontraba escondida quedó paralizada del susto, sin embargo no pudo evitar dejar entrar en sus pulmones aire muy rápidamente y eso, había conseguido hacer un pequeño ruido.
Gaara se notó un poco sorprendido, pues aquel pequeño ruidito le hizo notar que era una chica quien le seguía, y aun no comprendía cómo alguien (hablando en general), podía estar despierto a tales horas, sin mencionarse.
Siendo insistente dijo- ¿quién eres? o por lo menos dime: ¿porqué me sigues?-y sin dejar espacio para una respuesta concluyo, expresando su fastidio por la situación- se que tu intención no es atacarme, pues si esa hubiera sido la razón tiempo atrás me hubieras echo una emboscada.
Mientras tanto… detrás del poste… una chica que no aparentaba mayor edad que Gaara, paralizada del cuerpo pero no de la mente, no podía dejar de reprocharse: -soy una tonta… a pasado mucho tiempo desde…, no, no puedo rendirme, yo… yo. Dedo hablar; no puedo dejar esto así, ya estoy en esto lo tengo que hacer. Pero cómo, ¿acaso estoy loca?, no estoy preparada, voy a huir.
En ese momento cualquier otra persona hubiera dicho que el chico había escuchado sus pensamientos, -no huirás- y mientras pronunciaba esas palabras la arena del suelo había tomado la forma de una cuerda, que rápidamente la amarró contra el poste, dejando únicamente libre sus brazos.
Lo… lo siento- al fin la chica logro pronunciar palabra.
En cuestión de segundo Gaara estaba cara a cara con la chica misteriosa, al ver su rostro retrocedió 2 pasos de impresión. Una bella chica de ojos grandes y brillosos, color azul celeste, piel crema, labios rosa y cabello negro estaba justo delante de él.
No por ser una chica muy bella significa que me puede espiar cuando guste- pensó- pero… ese… ese rostro se me hace muy familiar, ese rostro que manaba paz y esos ojos brillosos que nadie puede evitar ver, se que los he visto en otro lugar.
La chica también pensaba en él- estar junto a el, se siente tan bien, pero se que me olvido, ya han pasado casi 10 años, yo… yo no se… no se que hacer.
Él se volvió a acercar a ella, la miro a los ojos, cruzo los brazos y pregunto de manera fría:-¿Cuál es tu nombre?
Los ojos verdes de Gaara brillaban bajo la luz de la luna, eso y su carácter serio lo hacían tan popular en Sunagakure, ninguna chica se resistía y lógicamente todo esto había hecho que la chica levemente se sonrojara y desviara la mirada. La chica estaba muy apenada y evitaba ver el rostro de Gaara-sama pues savia que se pondría tan roja como un tomate.
Miwako- contesto suavemente
Los tímpanos de Gaara retumbaron al oír aquel nombre. –Definitivamente te he visto en otro lugar, talvez no últimamente, pero se que te conozco… ¿porqué? ¿Quién eres?- pensó. Drásticamente el rostro del chico había cambiado, y aun no dejaba de preguntarse ¿Quién era esa chica?
El silencio nuevamente estaba presente. –No puedo contenerme más, si no desahogo mi corazón moriré; esto es… no puedo, no puedo- pensaba Miwako.
-Yo… yo te amo, no puedo evitarlo, talvez no te acuerdes, no… se que no te acuerdas, tengo que ser realistas, y no te voy a obligar a recordar, siento haberte seguido pero mi corazón no pudo esperar más- de sus ojos azules chorreaban lagrimas y sus mejillas estaban rojas.
Estas palabras detuvieron los pensamientos del kazekage, e hicieron que su corazón palpitara cada vez más fuerte, tanto que no pudo evitar que Miwako escuchara sus latidos.
Gaara nuevamente se acercó a la chica, tomo su mentón y levanto su rostro obligándola a verlo directamente a los ojos. -¿por qué me quieres tanto?- su corazón palpitaba tanto que empezó a temblar un poco, se sonrojo un poco y desvió la mirada sin soltar a la chica. Gaara se sentía tan extraño, pues nunca había sentido algo así por alguien, por el contrario se le hacía molesto que las jóvenes de la aldea estuvieran tras el.
Yo te quiero porque… eres lindo… y –
No me refiero a eso- Gaara interrumpió a Miwako- por qué alguien tan linda se fijaría en…-haciendo una pequeña pausa, bajo la mirada y sus ojos se llenaron de lágrimas:
-una bakemono como yo.
El kazekage se dio la vuelta, seco una lagrima que corrió por su rostro, deshizo la técnica que tenía amarrada a la chica contra el poste y pretendió irse cuando…
No te vayas- Miwako lo abrazó lo más fuerte que pudo- note vayas, no por el momento
Gaara-sama la miro, los ojos brillosos de la chica solo lo miraban a el y a nadie más, aquella chica realmente lo amaba. Su rostro se veía como si hubiera un ángel frente a ella.
Por favor, quédate con migo, se que no recuerdas nada pero…
Gaara no pudo controlar sus impulsos, las palabras de la chica habían sido interrumpidas por un beso.
Sus labios son tan suaves, no quiero alejarme de el, quisiera quedarme así por siempre-sonrojada la chica pensó.
Esta sensación es tan… tan diferente, me siento tan bien- al igual sonrojado pensaba el kazekage.
Era una escena tan bella, dos chicos enamorados, besándose apasionadamente bajo la luz de la luna.
¿Esto en un sueño?- se pregunto la chica- no claro que no- y para confirmar los hechos, abrió suavemente los ojos, y si, Gaara le estaba besando dulcemente pero al mirar un poco más haya del suave rostro del chico…
Miwako dio un pequeño salto, empujo al chico y se tapo la boca, sorprendido por la reacción de la chica, Gaara volteo hacia donde ella miraba, estaban tan ocupados en sus propios asuntos que no habían notado que enfrente de ellos se encontraba observándoles nada más y nada menos que…
CoNtINuArA
