Sakura & Syaoran

Capitulo 1

HAN PASADO YA CUATRO AÑOS DESDE QUE SYAORAN SE FUE A HONG KONG. AHORA EL Y SAKURA TIENEN 15 Y SE HAN DESARROLLADO DESEÁNDOSE UNO AL OTRO.

Sakura estaba parada en la esquina de su calle, esperando a que Tomoyo llegara para ir al Festival de Primavera. Usaba un bello kimono rojo con flores de cerezo. No había nadie en la calle, todo estaba tranquilo, ni un solo insecto volaba por el aire. Pronto Sakura se impacientó y decidió no esperarla más. Dándose media vuelta, Sakura se dirigió hacia su casa.

Ya había caminado media calle cuando vio que alguien se acercaba a ella. No estaba segura de quien era pero se veía fuerte y alto. Sakura salió corriendo en el momento que hizo contacto visual con el individuo. Corría lo mas que podía pero el extraño le pisaba los talones. No paso mucho tiempo para que Sakura se cansara. Entonces se dejo caer...

El individuo dejó de correr y se paró justo enfrente de ella.

-¿Qué quieres de mi?- dijo Sakura.

-Nada más quería decirte que papá te esta llamando-dijo el extraño.

Sakura reconoció esa voz y se incorporó de inmediato.

-¡Hermano, como te atreves a asustarme así!

-No es mi culpa que los monstruos no vean bien.

-¡No soy un monstruo!¡Llegando a la casa le diré a papá lo que hiciste!

Ella y su hermano se dirigieron a su casa. Al llegar ahí su papa la recibió dándole un gran abrazo y diciéndole:

-Habló Tomoyo, dijo que no le había dado tiempo de venir hasta aquí y que se fue directo al templo Tsukimine.

Sakura se despidió de su padre y salió corriendo de su casa. Estaba ya doblando la esquina cuando chocó con Syaoran. Sakura se llevó una gran sorpresa al verlo pues el ya había regresado de su natal Hong Kong. Syaoran fue el primero en hablar:

-Hola Sakura. ¿Cómo has estado?

-¡Syaoran-gritó Sakura mientras se aventaba a sus brazos-, te extrañé mucho, no esperaba volverte a ver! ¿Por qué has vuelto?

-Bueno, desde que me fui no pude dejar de pensar de lo que me estaba perdiendo, tu amistad y la de mis otros amigos. Pero sobre todo no he podido dejar de pensar en ti Sakura.

-Ay, Syaoran, que tierno.

En ese momento Syaoran se sonrojó mucho; Sakura lo notó pero no quiso decírselo.

-Me dirijo al templo Tsukimine a ver a Tomoyo en el Festival de Primavera. ¿Quieres acompañarnos?

-Por supuesto-dijo Syaoran todavía más sonrojado y moviendo la cabeza.

Partieron enseguida al templo Tsukimine. Caminaron rápido pero disfrutando cada momento de la compañía que se hacían uno al otro.

Pronto llegaron al templo. Tomoyo estaba ahí esperando a Sakura, vestida con otro kimono de seda verde con adornos de pájaros. Pero puso una cara de asombro cuando vio a Syaoran. Tomoyo le tenía gran aprecio a los dos pero en especial le dio mucho gusto ver a Syaoran. Inmediatamente se dirigió a donde estaban sus amigos.

-Hola Sakura. Hola Joven Syaoran, que sorpresa verte aquí.

-Hola Tomoyo- dijeron los dos al unísono.

-Entremos ya que el festival esta empezando.

Todos asintieron con la cabeza y entraron al Templo. El desfile del Cerezo comenzó justo cuando entraron. Tres carros alegóricos giraban en torno al árbol de cerezo, todos adornados con flores de cerezo. También estaban acomodados los juegos de azar alrededor del templo, como pesca de globos, tiro al blanco, etc. Y no podían faltar los puestos de comida y de adivinación de fortuna, los cuales le gustaban tanto a Sakura. Además todo el templo estaba adornado con lámparas de papel de diferentes colores que lo iluminarían de noche.

Primero fueron a que les leyeran su fortuna. La fortuna de Tomoyo estaba relacionada con fama y dinero; la de Syaoran con amor y prosperidad; pero a Sakura le tocó la más extraña de todas:

-Miren lo que dice la mía.

-¿Qué dice?-preguntó Syaoran.

-"Los acontecimientos de este día cambiaran el curso de tu vida para siempre".

-¿Qué querrá decir?-preguntó Tomoyo consternada...

-Lo más probable es que Sakura enfrente otro reto- dijo Syaoran.

-¿Quién podrá estar haciéndole esto a Sakura?

-No sé Tomoyo, pero quien sea lo pagará caro si llega a lastimarla.

-Bueno, ya dejen de discutir de eso y vamos a divertirnos en los puestos.

-La verdad Sakura-dijo Tomoyo-, quería ver si podíamos ir al estanque, necesito enseñarles algo ahí.

-Esta bien, pero no nos tardemos ya que los puestos no cierran tan tarde.

Todos giraron al mismo tiempo para ir al estanque. No se apresuraron pues faltaban 2 horas para el anochecer todavía.

Al llegar al estanque Tomoyo sacó su cámara y les dijo a sus amigos que se acercaran a ver por el lente. Cuando sus amigos ya estaba viendo por el lente apretó el botón de "play" e inmediatamente empezó la película que había filmado. Parecía que había hecho una filmación de unas patinadoras en la pista de patinaje sobre hielo, pero no era así ya que a la mitad de la película se cortaba la grabación y mientras la pantalla estaba en negro empezaba a distinguirse un pequeño resplandor en el centro de esta. Ese resplandor fue creciendo y creciendo, hasta que tomó forma de un demonio. Era alto, con rasgos humanos, pero se lograba distinguir su demoníaca realidad, ya que tenía pezuñas y unas afiladas uñas rojas como la sangre. Llevaba puesto un traje tradicional japonés morado brillante, con el estampado de varios látigos, cadenas y fuetes.

Sakura y Syaoran quedaron sorprendidos, pues no sabían que era eso. Ni siquiera Syaoran sabía que era, y eso que pertenecía a una familia de grandes magos y de gran sabiduría.

-Esto es demasiado extraño-dijo Sakura-, no me esperaba que me fueras a enseñar algo así.

¿Dónde estabas en el momento en que la filmación se paró?

-Estaba en la orilla de la pista... Pero me acuerdo que un extraño me pidió la hora y lo filme un segundo por accidente. Justo en ese momento mi grabación se borró.

"El hombre era extraño, casi igual al demonio, pero con rasgos mas humanos; pero aún así era extraña la forma en que se comportaba. Pareciera que no era de por aquí."

-Esa es la razón por la cual se vio esa imagen demoníaca-dijo Syaoran pensativo-. Ese extraño debió de ser el demonio que vimos, pero disfrazado de una forma no tan convincente.

-No se que mas decir acerca del tema, pero... ¿Porqué no lo discutimos mañana y vamos a divertirnos ahora?

-Esta bien Sakura.

-Perfecto, no hay prisa-dijo alegre Tomoyo.- Por cierto joven Syaoran, ¿cuándo regresarás a Hong Kong?

-Dentro de 8 días. Pero no hablemos más de esto y vayámonos de aquí.

Regresaron al árbol de cerezos, pues estaba el concurso de baile en pareja. Syaoran pensó en invitar a Sakura, pero se vio un poco indeciso. En cambio Sakura lo tomó del brazo y se inscribieron inmediatamente. Como era de esperarse Syaoran se sonrojó mucho. La joven pareja empezó a bailar enseguida. Syaoran seguía sonrojado y un poco nervioso, pero se incorporó muy rápido. Mientras tanto Tomoyo los filmaba desde el público.

Era ya bastante tarde para los tres, pero la pareja seguía bailando y Tomoyo filmando, hasta que acabó el concurso. Como era de esperarse, la pareja ganadora fueron ellos. El premio no era muy grande: cuatro pases gratis para la pista de patinaje sobre hielo de Tomoeda. Se alegraron de haber ganado el concurso y Tomoyo de haber filmado el momento.

Ya no les dio tiempo de hacer mucho en el festival pues ya todo estaba cerrado. Por lo tanto se dirigieron a la puerta donde acordaron verse en la pista de patinaje al día siguiente a las 12:00 para investigar el problema. Se rieron de la coincidencia del triunfo y el premio de los boletos, pero se incorporaron rápidamente pues ya se tenían que ir. Se despidieron y cada uno partió a sus casas con el recuerdo de la imagen de la filmación en sus mentes.