Almas predestinadas
La academia, lugar del Seireitei donde los jóvenes con poderes espirituales, comienzan su entrenamiento para convertirse en Shinigami y entre los estudiantes, se podía ver a una joven que usaba el uniforme de la academia femenino.
Era de largos cabellos naranjas que tenía la mitad recogido con un pinche y una orquilla a cada lado de su cabello, sus ojos eran grises y sus manos iban llevando un trío de libros algo gordos por lo que le eran muy pesados.
-Ah…Cada ves nos hacen aprender más hechizos para al día siguiente…Pero tengo suerte de que me sepa la mayoría ^^
Noto como la mayoría de estudiantes andaban muy emocionados que corrían hacías las puertas de salida, aquella joven no entendía lo que pasaba, pero al ver a una chica de ojos azules y cabello negro y que vestía igual que ella, se alegra.
-Rukia-chan-La llamo.
-Ah, eres tú Orihime-Sonríe.
-¿Por qué tanto ajetreo?-Curiosa.
-Pues ha venido el capitán comandante de visita…Con el capitán del quinto escuadrón.
-¿El capitán...-Los libros se le cayeron de la sorpresa-…del quinto escuadrón?
-Oh es cierto…-Su sonrisa se vuelve picara-A ti te gusta mucho Ichigo-taicho.
-¡No digas eso!-Apenada y con los ojos cerrados.
-Pero si es verdad, es por él que decidiste ser Shinigami.
-Rukia-chan…No sigas, alguien te puede oír.
-Anda, vamos…-Ayudándola con los libros-¿O tienes miedo?
-Vale, vamos…Además, Kurosaki-taicho de seguro no me recuerda.
Ambas se dirigieron hacía las puertas, como había mucha gente, tuvieron que hacer un gran esfuerzo por cruzar ese mar de estudiantes hasta que finalmente llegaron a primera fila. A 4 metros de ellas, estaban los maestros saludando con una reverencia al capitán comandante que venía con su teniente, también estaban saludando al capitán del quinto escuadrón Kurosaki Ichigo y a su teniente Momo Hinamori.
Inoue Orihime se le encogió el corazón y sus mejillas estaban rojas al verlo. Lucía serio como siempre se veía ante el público, sus ojos color marrones brillaban sabiduría de las peleas y su cabello era corto, alborotado y naranja. Ella sabía que siempre se mostraba así, pero veía que en el fondo era una buena persona que entregaba su vida para proteger a quien necesitase una mano…
Como ella…Aun podía recordar ese día como si fuese ayer.
Flach Back
Hace precisamente 3 años, Inoue sabía que tenía poderes espirituales pero no le animaba mucho ir a la academia, tenía una buena vida con sus amigos a pesar que era huérfana y no quería cambiar eso por nada.
Pero llego ese día, en que andaba sola por el bosque recolectando unas hierbas medicinales, porque su amiga Tatsuki había pescado una gripe y ella, por ser tan buena, fue al bosque a buscarlos. Cuando tenía lo suficiente y pretendía regresar, comenzó a sentirse débil y mareada que termino cayendo al suelo de guata, con su rostro mirando hacía su izquierda.
Al oír un fuerte gruñido, se asusta al ver que era nada menos que un hollow y el miedo la invade, debía salir de allí, pero sus fuerzas la abandonaron en el peor momento, que solo atino con cerrar sus ojos y esperar su final.
No sabía cuanto tiempo paso, pero cuando recobró el sentido, tenía algo de comida en su boca que era sostenida por una mano masculina. Miro un poco más arriba y ve a un hombre que vestía de capitán, de cabello naranja y ojos marrones. Sintió que sus fuerzas regresaban y se levanto de golpe al recordar el hollow.
-Tranquila, no te esfuerces-Le dijo.
-El…El hollow…-Atino a decir.
-Tranquila, ya acabe con él-Le aseguro-Toma, come-Entregándole la comida que era un pastelillo-No es mucho, pero te ayudara a recobrar tus energías.
-Arigato-Recibiéndolo. Cuando su mano hizo contacto con las del capitán, sus mejillas se tiñen de rojo-Etto… ¿Eres un capitán?
-Hai y por tu desmayo por falta de comida, debes poseer poderes espirituales, será un problema sino los controlas y deberías comer correctamente. ¿Puedo saber tu nombre?
-Me llamo Inoue Orihime…
-Mucho gusto Inoue, mi nombre es Kurosaki Ichigo, capitán del quinto escuadrón-Al ver esa leve sonrisa llena de seguridad como sus ojos, se había sorprendido tanto para luego sonrojarse.
Fin Flach Back
-Para mi es un recuerdo muy importante…pero se que Kurosaki-taicho lo debió olvidar-Pensó la joven mientras lo veía hablar con los maestros y el capitán comandante
En eso, por los movimientos bruscos de los demás por poder bien lo que pasaba, uno de ellos accidentalmente le pego en la espalda, empujándola tan fuerte que cayo al suelo y los libros ahora salieron volando (pobres libros XD)
-Orihime, ¿estas bien?
-H-Hai Rukia-chan-Poniéndose rápidamente de rodillas-¿Ves? Sin ningún rasguño, soy muy fuerte-Riendo algo nerviosa.
-¿Estas bien?-Esa voz preguntando por ella, la hizo reaccionar de inmediato, giro su cabeza y se sorprende al ver quien era.
-Kurosaki…taicho.
-Ah…-Dándose cuenta-Pero si eres tú Inoue…Al final si has venido-Ahora si que estaba sorprendida, ¿Él la recordaba?
-¿Usted…me recuerda taicho?
-Por supuesto que sí, ¿Cómo podría no recordarte?-La chica se sentía demasiado feliz y su corazón latía a gran velocidad-Ven, déjame ayudarte-Tomando su mano.
-Arigato-Algo roja de la vergüenza, ya estaba de pie y sus manos seguían juntas.
-Esfuérzate mucho para ser una gran Shinigami y ojala termines en mi escuadrón.
-¿Eh?-Eso último no se lo esperaba, se sentía feliz y emocionada que tenía ganas de gritar-H-Hai…-Agachando su cabeza.
-Ichigo-taichou, el capitán comandante lo espera para que comience el recorrido por la academia-Le aviso su teniente.
-Gracias Hinamori.
Cuando ya se habían ido los maestros, tenientes y capitanes, todos hablaban emocionados, menos Orihime, quien seguía sonrojada y su mente no paraba de hacerle recordar sus palabras.
-Uhh…eso fue muy interesante Orihime-Le decía Rukia con picardía y dándole leves codazos-Lo tienes enganchado.
-P-Parad Rukia-chan-Más roja aún.
El tiempo paso con la misma velocidad en como las hojas caen hasta tocar el suelo en otoño. Pronto sería el día en que los estudiantes tendrían que ir por 3 meses después de clases a la escuadrón que se resigne por suerte para aprender como son las cosas, como estar preparados para cuando se gradúen y sean oficialmente Shinigami.
-Me ha tocado el décimo tercer escuadrón.
-¿Querías estar con tu hermano y Renji?
-¿Por qué metes a Renji?-Algo roja, por lo que tuvo que mirar hacía otro lado.
-Solo te hice una pregunta Rukia-chan.
-Anda, pues dime tú en que escuadrón de práctica quedaste.
-Pues…Aún no lo abro, tengo muchos nervios.
-Entonces yo lo haré por ti-Arrebatándole el sobre para abrírselo-Uhh…Que suerte.
-¿Q-Qué quieres decir?
-Te ha tocado el quinto escuadrón.
-¡¿E-E-El quinto escuadrón?!
-Estarás por muchas horas cerca de Ichigo-taicho…De seguro que cuando esto termine…Ya serás toda una mujer.
Su comentario provocó que se sonrojase hasta quedar como un tomate-¡Rukia-chan!
En el quinto escuadrón, Ichigo acababa de despertar, se vistió y salio. Mientras caminaba por su "base" era saludado por todos sus subordinados y él les respondía, llego a su oficina y ahí ya estaba Hinamori esperándolo.
-Lo siento Hinamori.
-Descuide, se que anoche estuvo tomando con Kyoraku-taicho.
-Era eso o enfrentar a Kenpachi-Suspiro.
-Ya llego la carpeta con los nombres de los estudiantes que vendrán a practicar en nuestro escuadrón.
-Que bien, ¿Cuántos son?
-Son diez-Y comenzó a nombrarlos uno a uno-Y finalmente Inoue Orihime-san.
-¿Eh? ¿Dijiste Inoue?
-Si taicho… ¿Ocurre algo?
-No, nada. ¿Las clases ya terminaron?
-Pues hace una hora, no tardarán en llegar.
-Pues habrá que recibirlos como corresponde.
Salieron afuera y ya estaban los estudiantes que venían en práctica, algunos estaban emocionados y otros nerviosos, entre ellos la ojigris. Ella tenía la cabeza gacha, mirando el suelo como si fuese lo más emocionante del mundo y él…Pues no le quitaba la vista, como si su reacción fuese divertida.
Después de presentaciones y todo, poco a poco ellos lograron integrarse con los demás como si ya fueran Shinigami y parte del escuadrón e Inoue se hizo muy amiga de Hinamori, lo que provoco que estuviese cerca del capitán, cosa que la hacía feliz y a la vez nerviosa.
Fue todo un mes de toda clase de emociones al máximo para la joven Inoue Orihime, en las mañanas, impresionaba en clases por su rápido avance, progreso e inteligencia a pesar que no lo demostraba tanto y como siempre, no paraban de confesársele, pero ella los rechazaba, claro que no solo allá, en el quinto escuadrón también cuando iba por las tardes y después estar tan cerca de Ichigo por cosas de la vida o cuando lo ayudaba cuando Hinamori se encontraba ausente. Claro que por las noches no se liberaba, porque como tenía tantas emociones acumuladas producidas por el capitán, le era difícil conciliar el suelo.
Hoy era como siempre, causando sensación en la academia, luego llega al quinto escuadrón y aquí viene lo diferente…repentinamente comenzó a llover. La lluvia era muy fuerte por lo que no se tardo en quedar completamente empapada. Al llegar al escuadrón, fue recibida por el capitán, quien al verla en ese estado, se sorprende.
-Te ha pillado la lluvia, ven, te llevaré a mi cuarto.
-¿Su…?-Sonrojada-¡N-No es necesario taicho!
-Claro que si, si no te doy algo con que secarte, pescaras un resfriado, anda, vamos-Llevándosela de la manos.
Inoue estaba roja como nunca al ver su mano unida con la de Ichigo, pero no tardo en estornudar. Entraron al cuarto del capitán y este le dio de inmediato una toalla y una bata blanca y larga. Luego abre la puerta que lo llevaba a su baño.
-Sécate aquí y ponte esto.
-H-Hai-Apenada, entra al baño.
Estuvo un buen rato allí, primero se seco el cabello y se recogió completamente en su pinche, luego se fue desvistiendo para secarse el cuerpo y finalmente se pone la bata. Deja estirando la toalla para que se secase y luego estira su uniforme de la academia, deseando que se secase pronto que era el único que tenía y mañana debía hacer un examen. Lanzo un suspiro y sale algo avergonzada, después de todo, la bata que usaba era nada menos que la del capitán.
-Anno…-Algo roja.
-Ah, ya terminaste…Lamento si te incomoda usar mi bata, es que bueno…mi ropa te quedaría algo grande y…
-N-No se preocupe taicho-Agachando la cabeza-Solo esta tratando de ayudarme por lo que lamento mucho los problemas que le eh causado.
-No debes hacerlo, no podía permitir que te quedarás así de mojada.
-Arigato-Con la cabeza gacha, realmente estaba apenada, especialmente porque la bata tenía el aroma del capitán-¿En que estoy pensando?
La lluvia seguía sin descanso, ellos estaban sentados esperando a que cesase, aunque la chica mantenía una distancia prudente porque si se acercaba un poco más, él escucharía con claridad sus latidos tan acelerados y tan fuertes que sentía que le golpeaba el pecho. Repentinamente comenzó a temblar por causa del frío.
-¿Estas bien?
-H-Hai…solo sentí algo de frío-Y se sorprende al sentir como el capitán le rodea los hombros con su brazo derecho y la trae hacía él-¡¿K-Kurosaki-taicho?!
-Así no sentirás frío-Fue todo lo que dijo mirando hacía otro lado, ¿Era su imaginación o lo había visto algo sonrojado?
No tenía tiempo para descifrar eso, esta cercanía la estaba poniendo demasiado nerviosa, muy roja, oía como sus latidos aceleraban cada vez más y sentía que se estaba quedando sin aire. Lo único que podía hacer era cerrar sus ojos y rogar que la lluvia terminase pronto.
Ichigo había sentido como temblaba y decide verla, al ver en ese estado de sonrojada y con sus ojos cerrados, para luego ver como la bata se abrió un poco para que viese la iniciativa de sus enormes pechos, tuvo que tragar saliva e intentar de no verla, pero era algo imposible.
-Inoue…
La joven abrió sus ojos al oír su nombre en ese tono suave y luego se sorprende al ver como el rostro de Ichigo estaba cerca del suyo, cada vez más cerca hasta el punto que sus labios se juntaron. Estaba paralizada y sin poder moverse, solo sus labios sentían aquel beso que aumentaba el ritmo a cada segundo y como su cuerpo se hacía prisionero de sus brazos. Ichigo se separo por falta de aire y miraba como la joven recuperaba el aliento y como su pecho subía y bajaba.
-Kurosaki…taicho…
-Te quiero-Fue todo lo que le dijo, sorprendiendo a la estudiante y mucho más por decirlo con esa mirada tan seria y segura que lo caracterizaba y…hechizo.
-Watashi…watashi…
Su cuerpo comenzó a moverse nuevamente y lo primero que hizo fue alzar sus brazos, sin darle importancia que la bata se le había corrido hasta el punto de verse como esas chicas atrevidas hasta el punto que rodeo el cuello de Kurosaki Ichigo y se fue apegando un poco más a él, claro que lo hacía toda roja y apenada.
-Te quiero taicho…desde la vez que me salvaste…-Y ahora fue ella la encargada de unir sus labios.
Por un momento, él se había sorprendido, pero no tardo en corresponderle el beso, convirtiéndolo en uno apasionado. La tomo de la cintura e hizo que se tendiese de espalda con él encima sin perder contacto de labios, luego su mano izquierda se atrevió a introducirlo bajo la bata y comenzó a acariciar las formadas piernas de la chica, subiendo hasta su cintura y desarmo el lazo, dejando la bata completamente abierta, viendo el curveado y atrevido cuerpo de Inoue, quien estaba algo apenada por eso.
Dieron gracias a la lluvia porque así pudieron estar solos, se pudieron confesar y porque los ayudo a ocultarlos los gemidos y gritos por su juegos de caricias, perfectos movimientos suaves y un poco violentos y besos.
Fin.
Esperen que aun queda la segunda parte ^^
