Bien se me ocurrió esta historia viendo algunas imágenes de comic y uno que otro fan art, y me puse a pensar que nadie nunca había tratado este tema y bueno la idea es traer cosas diferentes no creen espero sea de su agrado y obvio seguiré actualizando todas mis historias
Capítulo 1:
Inesperado
Era una noche muy tranquila. Las gotas de agua golpeaban los grandes vitrales de la gran torre en forma de T, todos sus habitantes dormían placenteramente el único ruido que llenaba la noche era alguno que otro trueno proveniente de la tormenta, pero ni siquiera eso era suficiente para despertar a cualquiera dentro de la torre, hasta que un fuerte estruendo golpeo la pequeña isla donde vivían los cinco jóvenes héroes.
Robin fuel el primero en salir de su sueño ligero y rápidamente se dirigió hacia la sala para averiguar que estaba pasando, casi detrás del chico maravilla lo había seguido Cyborg, pues él no necesitaba el dormir, simplemente necesitaba recargar sus baterías, y al escuchar ese gran estruendo se imaginaba que su líder estaría buscando una explicación, así que decidió en ponerse en marcha.
Él mitad robot alcanzo a su líder en el centro de operación donde rápidamente tomo los controles para verificar que no estuvieran bajo ataque.
— ¿Algún indicio de ataque, Cyborg?— preguntó inquieto el líder mientras revisaba las cámaras de la torre en busca de algún enemigo.
—Negativo Robin, no estamos siendo atacados.
El líder estaba intentando explicarse como un gran ruido como ese habría podido ser nada. Algo andaba mal para el chico maravilla, pero fue sacado de pensamientos por la joven extraterrestre que llegaba a la escena, muy adormilada y con el cabello algo revuelto.
— ¿Qué pasa amigos? –preguntó ella ignorando totalmente la situación.
Robin estuvo a punto de contestar, cuando fue interrumpido por otra voz, una voz muy tranquila, pero algo molesta por haber sido despertada.
—Creo que todos escuchamos esa explosión— dijo Raven.
El cerebro el chico maravilla comenzó a trabajar cuando escuchó la palabras de la hechicera, pues él había catalogado el ruido como algún sujeto intentando entrar a la torre, o como un golpeteo en algún lugar de la torre, pero nunca pensó en una explosión debido a que el ruido fue distorsionado por la distancia de su origen, pero si Raven lo escuchó como una explosión, es probable que fue del lado de la torre dónde se encontraba la habitación de Raven.
—Todos acompáñenme a revisar el perímetro de la isla– Ordenó el líder
—Viejo está lloviendo, además Bestita aún no llega— Contestó él mitad robot ante la petición de su líder.
—No hay tiempo, sea lo que sea que haya ocasionado la explosión esta allá afuera, no hay tiempo que perder tiempo. En marcha titanes— Y todos los titanes se dirigieron hacia lo que era la entrada de la torre para revisar el área de la isla.
Los titanes obedecieron las órdenes de su líder, aunque algunos como Cyborg refunfuñaban por el hecho de tener que salir a buscar cualquier cosa que allá sido la que provocará el ruido o la explosión anterior.
Todos los titanes se separaron en parejas para dirigirse hacia lados opuestos de la isla, para no ser sorprendidos y así tener la ventaja por si encontraba algún villano esperándolos, podrían rodearlo sin problemas, Robin y Starfire se fueron juntos dejando a Cyborg y a Raven como compañeros.
Robin rápidamente se dirigió hacia donde sentía sospechas, el lado izquierdo de la torre era donde se encontraba el dormitorio de Raven.
No tardaron mucho en darle la vuelta a la torre pues la isla era algo pequeña, pero los primeros en llegar al lugar en donde se encontraba un gran cráter fueron Robin y Starfire, que estaban incrédulos de lo que miraban bajo la lluvia de la noche, no quitaban la mirada del cráter cuando los otros dos titanes los encontraron, casi en cuestión de segundos se acercaron preguntando qué era lo que había encontrado.
—Hey Rob ¿Qué es lo que encontraron?— Preguntaba Cyborg mientras se acercaba a donde sus amigos se encontraban.
—Espero que sea algo bueno para haberme sacado con esta lluvia— Agrego la hechicera.
Pero los dos se quedaron callados cuando llegaron al cráter, y lo vieron con sus propios ojos. Frente a ellos había un demonio con grandes garras negras cubiertas de un aura negra que formaba pinchos en sus brazos y en sus pies, su cabello era negro y parecía estar echo de la misma aura negra en forma de pinchos recogidos hacia atrás.
Robin aparto la mirada y la dirigió hacia Raven, buscando alguna explicación relacionada con ella, pero la hechicera estaba igual mente desconcertada por la demonio que estaba frente a ella.
— ¿Raven?
—No tengo la más mínima idea de quien puede ser esta chica, Robin— contestó rápidamente, pues ya sabía lo que Robin preguntaría debido a su procedencia demoniaca.
—Bien llevémosla dentro y…— pero fue interrumpido por Cyborg.
—Viejo estás loco. No sabes si es buena o es mala, y si esto es un plan para infiltrarse dentro
—No te preocupes Cyborg. La pondremos en la habitación que construimos para proteger a Raven de su padre.
Nadie discutió la idea de su líder, pero Raven no estaba tranquila, sentía una gran incomodidad al ver a otro demonio en la tierra, pues estos no tenían intenciones muy buenas. Ella había sido la excepción, solamente por el simple hecho de que era medio demonio y por lo tanto había tenido la libertad de elegir lo que quería ser, pero alguien como la chica demonio que tenía frente a ellos era imposible.
Cyborg y Starfire se encargaron de llevar a la chica inconsciente al cuarto anti-demonios que existía en la torre, Robin fue directo a su cuarto de investigaciones para averiguar lo más que pudiera de esta chica que habían encontrado inconsciente, los demás titanes se retiraron a sus dormitorios para descansar.
Raven se encontraba tan sumida en sus pensamientos, que no escuchaba la plática que tenían sus dos compañeros mientras se dirigían a sus habitaciones, no hasta que la voz de Cyborg le llamo de pronto.
—Hey Raven ¿Estas con nosotros?— preguntaba algo intrigado el mitad robot.
— ¿A qué te refieres?
—Bueno al amigo Cyborg te ha hecho algunas preguntas, y tú no has contestado ¿Pasa algo amiga Raven?— la preocupación de la extraterrestre siempre era evidente ante sus amigos.
—Si, todo bien ¿Cuál era tu pregunta Cyborg?
—Bueno, yo les decía que no sé cómo es posible que Chico Bestia no escuchara nada, o si quiera se despertara, tomando en cuanta que sus sentidos son cien veces más fuertes que los nuestros.
—Es verdad, tal vez sólo lo ignoro y volvió a dormir. No me sorprendería— Y con eso la hechicera regreso a su dormitorio dejando solos a sus compañeros.
Raven en realidad había revisado la habitación del cambiante telepáticamente, y en efecto lo había encontrado durmiendo, pero el hecho de que no se despertara era porque debido a los oídos ultra sensibles Chico Bestia usaba un tipo de tapones especiales para dormir, en secreto esa era la razón de que siempre despertaba tarde y nada lo despertaba, pero solo ella sabía eso ya que en algunas ocasiones no había podido controlarse ante la necesidad de mirarlo mientras dormía, por muy espelúznate y pervertido que eso fuera, ya hace algún tiempo Raven había aceptado sus sentimientos por el cambiante, pero ella pensaba que Chico Bestia aún no estaba listo para saberlos.
Raven dio un suspiro largo y agotador ante la misión, se dirigió a su armario y nuevamente saco su pijama, que consistía en un uniforme de la Patrulla Condenada, pero sin el cinturón, a ella le fascinaba dormir con ese uniforme y nunca le diría a nadie que lo había tomado la última vez que acompaño a Chico Bestia por los suyos, para su buena suerte, nunca nadie se dio cuenta o si quiera se lo pensaba.
La chica volvió a recostarse en su cama y pensó que mañana sería un agradable día.
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Al día siguiente
El titán verde despertó y miro su despertador que marcaba las doce del día. Odiaba dormir tanto, pero sabía que si retiraba sus protectores sería casi imposible dormir sin ser despertado durante la noche, al levantarse se dirigió hacia el baño y lavo su cara como todos los días. Él pensaba que sería un día como cualquier otro, sin sorpresas y tal vez algún villano de pacotilla, cualquiera intentaría algo y los titanes lo detendrían así que decidió hacer su camino hacia la cocina.
Mientras caminaba hacia la consigna se percató de algo demasiado raro: No había ruido alguno en la cocina, así que apresuro el paso y entró repentinamente, y tal como él lo pensaba la cocina estaba vacía en ese preciso momento.
El cambiante decidió utilizar su olfato para saber dónde se encontraba sus compañeros, ya que debía pasar algo sumamente importante como para que Cyborg dejara de lado su desayudo de carnes, entonces empezó a olfatear y los encontró todos se encontraban dentro del cuarto anti demonios. Esto le provocó un ligero escalofrió a Chico Bestia, pero lo más raro para él fue que capto seis diferentes aromas y sus amigos solo eran cuatro así que decidió dirigirse así a donde estaban sus amigos.
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En la habitación anti-demonios
Los titanes estaban reunidos detrás de un vidrio falso, dentro de otra habitación dónde podía ver el interior de la habitación anti-demonios, los cuatro jóvenes miraban a la chica demonio sentada, con la mirada dirigida hacia ellos, pareciera que la chica sabía que la estaban observando desde ahí.
Raven intento leer su mente, pero no podía, le era imposible el leer su mente o sentir algún tipo de emoción viniendo de ella, al parecer la chica demonio había sido entrenada en las artes mentales si podía frenar las capacidades de Raven a esa altura.
De pronto las puertas de la habitación de observación se abrieron dejando ver a Chico Bestia que entraba por ella algo confundido mirando hacia todos lados.
—Hey Chico Bestia ¿Dormiste bien?— preguntó su mejor amigo con un tono de molestia, pues el tuvo que salir a una misión nocturna.
— ¿Qué sucede aquí? ¿Raven está bien?— preguntaba con desconcierto el cambiante.
—Tranquilo Chico Bestia es solo que…— Pero el chico maravilla no termino lo que estaba diciendo, su atención fue atraída por la chica demonio o lo que era ahora.
En el momento justo que Chico Bestia entro nadie de los titanes se dio cuenta de que la chica demonio reacciono y se sorprendió, cambiando su forma completamente a la de una chica pálida de cabello negro y unos grandes ojos rojos, sus garras cambiaron a una especie de guantes hechos de aura que dejaban ver algunos picos en ellos, su cara ya no era aterrorizante, ahora era tierna y triste. Con tal solo mirarla podías ver lo asustada que estaba la chica, pero por alguna razón no podía ser percibida esa sensación.
— ¿Alguien vio lo que sucedió?— Preguntó Robin.
—Esperen ¿Quién es esa chica?— Chico Bestia apenas la noto.
—Si te hubieras levantado más temprano lo sabrías— Respondió Raven tranquilamente.
—Ha cambiado completamente— Cyborg estaba completamente impresionado al igual que Robin.
—La encontramos ayer noqueada, fuera de la torre Chico Bestia— Explicaba su líder.
— ¿Y dónde tienen al otro? ¿O acaso no lo veo desde aquí? — Pregunto curioso
— ¿Al otro? –dijeron todos al unísono.
—Si he olfateado a seis personas aquí en la torre: Cuatro son ustedes, una es esa chica pálida y el otro…— Se detuvo un segundo para olfatear.
— ¿Dónde está el otro?— pregunto rápidamente el líder.
—Se ha estado moviendo, se dirige hacia los controles de la puerta del cuarto anti-demonios.
—La piensa liberar— exclamó Cyborg.
—No si puedo detenerlo— e instintivamente Robin saco su comunicador y tecleo un código dentro del comunicador y las luces de la torre se volvieron rojas al instante, las puertas se bloquearon con una segunda puerta de acero sin manija.
Todos los titanes se pusieron en guardia. Chico Bestia nunca dejo de olfatear y él sabía que a pesar del bloqueo en toda la torre el otro intruso aún se seguía moviendo dentro de la torre, de alguna forma.
—Robin, el aún se mueve— Advirtió rápido a su líder
— ¿Hacia dónde se dirige?— Pregunto el líder sin dejar su posición de combate
—Viene hacia acá.
Y con eso alguien apareció repentinamente de la nada y todos se quedaron perplejos al ver quien había aparecido en medio del cuarto y de pronto todos los titanes dijeron en coro.
— ¡CHICO BESTIA!
— ¿Yo?
—No, yo soy el Changeling y es un gusto volver a verlos pero podrían soltar a mi hija.
Todos quedaron con los ojos cuadrados al escuchar a una versión más madura de Chico Bestia decir la palabra que nunca pensaban que podrían escuchar viniendo de él y una vez más todos al unísono preguntaron.
— ¡¿HIJA?!
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Continuara…
