Todos los personajes pertenecen a Naoko Takeuchi, a excepción del nuevo villano que es invensión mia.
Nota de autor: Este fic es un UA de toda la saga Sailor Moon, pero se desarrolla después de Sailor Stars.
Prólogo
La ciudad estaba siendo consumida por la oscuridad del Cristal Oscuro; todas las Sailor Scouts estaban agotadas, pues habían luchado con todas sus fuerzas. Sailor Moon era la única esperanza.
Frente a frente, el Príncipe Diamante y la marinera de la luna se miraban fijamente. Atrás de él, el Gran Sabio lo incitaba a atacar mientras Black Lady tenía en sus garras a Tuxedo Mask, lista para enterrar sus largas y afiladas uñas en la yugular.
- ¡Ríndete Sailor Moon! ¡Entrégame el Cristal de Plata ahora si no quieres que destruya todo!
- ¡Jamás!
- ¡Estás al borde de tus fuerzas! No podrás salvar a ese hombre y al planeta al mismo tiempo.
La guerrera lo miraba en silencio. Diamante tenía razón, estaba exhausta; sus amigas estaban igual o peor que ella y su amado Tuxedo Mask estaba a punto de morir. Pero sin importa lo que ocurriera, tenía que hacer un gran esfuerzo por salvarlos a todos.
Decidida, la rubia levantó el Cristal de Plata, y usando las fuerzas que le quedaban, lo hizo brillar tanto como pudo, pero no fue suficiente.
El Gran Sabio lanzó un rayo que la proyectó a varios metros del lugar, haciendo que ella aullara del dolor. El platinado príncipe se acercó hasta ella con paso firme, mientras Black Lady comenzaba a enterrar sus uñas en el cuello del moreno, haciéndolo sangrar.
- Mi hermosa Sailor Moon – Diamante se agachó y tomó el rostro de la chica por la mandíbula, haciendo que ésta lo mirara – te dije que no podrías acabar con nosotros. Muy pronto nos apoderaremos de todo.
El platinado apretó la mandíbula de la rubia, lastimándola
- Sin embargo, aun puedes salvar al planeta y al hombre que amas, si aceptas hacer un trato.
- ¿Un trato? – la rubia abrió mucho los ojos
- Ven conmigo a cambio de la paz del universo – le susurró él al oído
- ¿Qué?
- Si tú vienes a Némesis conmigo y te conviertes en mi reina, te prometo que dejaré en paz a esta gente. ¿Qué dices?
- ¿Cómo vas a poder convencer al Gran Sabio de esto?
- Haré que incremente tu poder para acabarlo – el platinado le acarició el rostro – al final de cuentas, la verdadera amenaza es él.
Diamante se incorporó y le ordenó a Black Lady que soltara a Tuxedo Mask, mientras Sailor Moon también se ponía de pie y volvía a invocar el poder del Cristal de Plata.
La rubia estaba a punto de desfallecer, pero Diamante reforzó el ataque con sus poderes oscuros, dándole de lleno al Gran Sabio y derrotando a la entidad maligna.
Todos miraban sorprendidos aquel cambio tan repentino de cómo habían pasado las cosas, pero, conociendo a Diamante, era seguro que algo se trajera entre manos.
Sailor Moon corrió hasta donde se encontraba Tuxedo Mask, cayendo a su lado abrazándolo.
- ¡Tuxedo Mask! ¿Estás bien? – preguntó ella llorando
- Si Sailor Moon, no te preocupes, pero, ¿qué está pasando?
- Todo va a estar bien – le dijo ella, acunándolo en sus brazos.
De repente, el grito de las otras scouts hizo que ambos voltearan hacia donde se encontraba Diamante.
- ¡No! ¡Black Lady!
Diamante había tomado a Black Lady por la cintura y el cuello, amenazando ahora con estrangularla.
- ¡Suéltala Diamante! Esto es entre tu y yo – espetó Sailor Moon horrorizada
- ¡Aún no me has respondido! Tú a cambio de la paz del universo.
- ¿De qué está hablando? – la voz de Tuxedo Mask era apenas audible.
- Él me dijo que si me voy a Némesis, iba a dejar todo en paz – dijo ella sollozando mientras acariciaba el rostro del moreno.
- No Serena, no aceptes – le suplicó, incorporándose un poco y tomándola del rostro – juntos podemos derrotarlo
- No Darien, es que tú no entiendes – las lágrimas corrían por las mejillas de la chica – yo ya no tengo fuerzas para seguir luchando
- Sailor Moon…
- Es la única forma de salvarlos. Yo ya no puedo luchar, estoy exhausta.
- Si me dejas, el destino se alterará, ¡Rini no nacerá! – le dijo el moreno con desesperación
- ¡Prefiero que no nazca a verla morir en manos de ese miserable! – la rubia era un mar de llanto – Tuxedo Mask perdóname, te amo demasiado, y por lo mismo, he tomado esta decisión.
- ¡Se te está acabando el tiempo Sailor Moon! – canturreó el platinado, al tiempo que cerraba su engarfiada mano en el cuello de la pelirrosa.
Black Lady lanzó un grito de desesperación, mientras todos veían horrorizados su tormentosa agonía.
- Darien, prométeme que protegerás este mundo
- Por favor, no hables así – las lágrimas lo estaban traicionando – no me dejes Serena.
- Te amo y aunque no esté aquí contigo, mi corazón siempre será tuyo – y dicho esto, Sailor Moon se acercó al rostro de Tuxedo Mask, besándolo con pasión, siendo éste su beso de despedida.
- ¡Sailor Moon! – gritó Diamante, quien había montado en cólera al ver aquella escena de amor – tu destino o la paz del universo, ¡elige!
Resignada, Sailor Moon se levantó y se dirigió hacia donde el platinado príncipe se encontraba, quien la miraba de forma malévola mientras las otras chicas no comprendían del todo aquello.
- ¡No Sailor Moon! ¡No lo hagas! – gritaban ellas
- Perdónenme chicas – las miraba melancólicamente.
Diamante arrojó a Black Lady a los pies de Tuxedo Mask, quien rápidamente la tomó en brazos, mientras miraba con profundo odio al Príncipe Diamante.
- Excelente decisión, mi querida Sailor Moon – le dijo el joven príncipe, mientras la tomaba de la cintura y acariciaba su rostro.
Y antes de que pudieran hacer algo, el Príncipe Diamante y Sailor Moon se marcharon para siempre del planeta Tierra.
- No Serena, ¡No! ¡Te amo! – gritó Tuxedo Mask con dolor, sosteniendo el cuerpo de Black Lady que poco a poco volvía a la normalidad.
- Darien…- escuchó la débil voz de Rini
- Hola – le dijo él, con una melancólica sonrisa. Las chicas se levantaron y corrieron a su lado.
Sin embargo, el cuerpo de Rini poco a poco comenzaba a desaparecer.
- No Rini, no, tu no – sollozaba el moreno
- Darien, sé que Serena lo hizo para salvarnos a todos – las chicas lloraban y acariciaban su cabello – yo lo comprendo y les doy las gracias por haberme amado, gracias por haber sido mi papá.
- Rini – Tuxedo Mask lloraba acunando el cuerpo semitransparente de su hija
- No… llores…. – el habla se le dificultaba a la pelirrosa – todo estará… bien
Y dicho esto, el cuerpo de la Pequeña Dama se desvaneció en los brazos de su padre para nunca más existir.
El moreno comenzó a temblar; eran demasiadas emociones en un solo momento. Perder al amor de su vida, a su hija, saber que su destino jamás se cumpliría y que Rini nunca nacería lo había shockeado. Las scouts lo abrazaron y se unieron a él en un inconsolable llanto.
- El futuro ha sido alterado – escucharon una solemne voz. Sorprendidos, todos voltearon en dirección de la cual provenía.
- Sailor Plut – dijo Sailor Mercury
- Príncipe, no debe darse por vencido, pues aunque el futuro no será como lo conocían, deben seguir adelante… todos.
- Pero, ¿cómo Sailor Plut? – preguntó el joven del antifaz - ¿qué se supone que va a suceder ahora si Tokio de Cristal no existe?
- Tokio de Cristal no existe pero eso no significa que no haya un futuro – dijo la morena guerrera – usted está a la cabeza de un nuevo imperio y no estará solo. Ahora ellas son sus guardianas – dijo señalando a las chicas – y tendrá a una mujer a su lado que lo ayude a gobernar.
- ¿Una mujer? ¿Quién será? – preguntó Sailor Mars
- Eso no se los puedo revelar, pero ella junto con ustedes apoyaran al príncipe y defenderán este planeta de las futuras batallas que se avecinan.
- Pero, sin Sailor Moon, ¿cómo podremos librarlas? – preguntó sollozando Sailor Venus
- Vendrán otras sailors, guerreras de los planetas exteriores, al igual que recibirán ayuda de guardianas de otros confines de la Vía Lactea… - Sailor Plut era muy solemne – a partir de aquí, Sailor Moon se ha convertido en un mito, una leyenda que los ayudará a salir adelante. Recuerde Alteza que le ha encargado este planeta y que nunca dejará de amarlo.
Tuxedo Mask asintió, un poco más tranquilo.
- Hagámoslo por Serena – dijo el moreno
- Con la esperanza que nos ha depositado, podremos seguir adelante – dijo Sailor Jupiter.
- Por ella – afirmaron las demás guardianas.
Y así, todos continuaron con sus vidas, siguiendo el curso de las cosas. Con Tuxedo Mask a la cabeza, derrotaron a todos y cada uno de los enemigos que se fueron presentando, hasta que estuvo frente a frente con la gran Sailor Galaxia, y que, apoyado por las Sailor Starlights, pudo también derrotar.
Siempre con el recuerdo de Serena viviendo en su mente, y en su corazón.
Hola!
Bombones, aquí les traigo una nueva historia. Dirán, "no has terminado con Dulce tentación y ya te estas aventando otro fic?" Bueno, es que con Dulce tentación ya estamos llegando a la mitad aproximadamente, y este proyecto tenía tiempo que quería empezar a publicarlo, así que espero que les guste.
Me despido, y no se olviden pasar por mi página en FB, me encuentran como Gabiusa Kou y los invito a leer St. Valentine's U.S. Army, mi OS de San Valentín MinaxYaten.
Que pasen bonita noche Bombones! Besos estelares! :*
"Si ladran los perros es señal que vamos avanzando"
