Hola a todos y gracias por haber venido aquí a leer, se los agradezco ya que es mi primer fic en este site, espero que sea de su agrado. Les digo que me perdonen si ven algún error colado por ahí, es que no estoy acostumbrada a escribir mucho en español ya que francés es mi idioma principal, gracias. La historia se irá desarrollando a según pasan los capítulos.

Hetalia no me pertenece y creo que nunca lo hará por el momento dado.

Itálico, lo que escribe Arthur.

Advertencia: Amor entre un hombre mayor y un chico de menor edad.

All your twisted thoughts free flow
To everlasting memories
Show soul
Kiss the stars with me

~Mi Vecino el Americano~

Un nuevo día, una nueva rutina, una nueva vida llena de esperanzas y oportunidades. Un ciclo sin fin que el ser humano debe seguir… pero Arthur tiene que ser honesto consigo mismo, la vida para el solo transcurre en una simple monotonía que sigue al pie de la letra involuntariamente, así que no sabe porque elogia tanto a la vida si ella no le ha dado nada, solamente desesperos y frustraciones, una tras otra.

—…tendré que comprar más… — murmuro el británico cuando vio que su caja donde tenía sus bolsas de té ya se estaba vaciando. Coloco unas de las ultimas, aunque quedaban como cinco, en la taza de agua caliente para luego salir afuera, tomar asiento junto a una pequeña mesa de patio mientras miraba noticias en su computador, nada fuera de lo normal. Buscando algo que lo inspire para escribir una maldita novela que lo saque de su vida tan miserable.

—Gracias, puede dejarlo ahí— Arthur arqueo la ceja cuando escucho algunas voces al otro lado de su casa, y por mera curiosidad se levanto y miro disimuladamente. Hacia años que esa casa había sido abandonada, pero al parecer alguien decidió venir a vivir en ella. Arthur solo suspiro. Vecinos nuevos cuando pensó estar solo.

…durante la calmada primavera un chico rubio llego a la vecindad…en su rostro travieso se podía ver la pura inocencia de niño pasando a ser joven, yo veía mucho más que eso en el…

El mediodía, más papeles tirados al cesto de basura y otra taza de té sobrecargada de miel para luego pasar a regar sus plantas que con esmero había sembrado al comienzo de la primavera. Sentía algo de orgullo. Se estaban dando. No tiene un corazón negro después de todo.

—… a mi tío le gusta mucho las rosas…— Arthur levanto su mirada, ojos esmeralda encontrándose con ojos color cielo. Era el chico. Estaba masticando una manzana y unos de sus brazos se balanceaba en la cerca. Arthur lo miro detenidamente. Su cara toda sucia, llena de residuos de comida, su camisa blanca, la cual tenía el diseño de la bandera de los Estados Unidos también hacia juego con su cara. Al entender de Arthur, al parecer el chico limpio el suelo. Esto lo molesto.

— ¡No me importa! — grito el hombre. El chico solo dejo de mordisquear la manzana para cambiar su cara de aborrecimiento a disgusto.

—…eres un viejo…— comento el chico para luego bajarse de donde estaba y empezar a correr por todo su patio, tomo unas pequeñas pistolas de agua, para luego desaparecer. Arthur se puso aun más molesto con ese comentario. ¿Qué viejo? ¿Qué se cree ese niño? El solo tiene 25 y nada más.

…Me tomo por sorpresa su manera de actuar, pensé que quizás, con mis años de experiencia, podía juzgar a las persona por solo mirarlas, pero al parecer no…fue todo lo contrario…me equivoque nuevamente…

El sol ya estaba dando sus últimos bostezos, las calles comenzaban a ir más lentas en movimiento, y el volvió a hacer lo mismo de siempre. Otra taza de té, esta vez sin miel, ya ni le hacía mucho efecto. Volvió a sentarse en su mismo lugar, y encender su computador buscando algún artículo o noticia que lo ayude con su escritura.

—Maldita sea. ¿No pueden poner algo que realmente sirva? — murmuro, soplando levemente su te para luego tomar un pequeño sorbo del mismo. Lentamente con su mano libre tomo papel y pluma; inseguro de si mismo comenzó a escribir, pero unas risas le llamaron más la atención.

Se levanto y vio al chico corriendo detrás de un perro blanco mientras se mojaba con la manguera. Arthur solo se fijo involuntariamente al cuerpo del chico, ya que este no tenía camisa puesta, solo un pantalón corto color azul marino. Por una extraña razón sus mejillas se sonrojaron. Rápidamente regreso a lo suyo sacándose ese evento algo embarazoso de un mente.

…desde que mis ojos se posaron en el supe que fue un error, pero no pude evitarlo, era algo que iba más allá de mi propio control, supe que estaba mal…desde que mis ojos lo vieron por primera vez supe que iba a ser un problema…

Bueno… ¿Qué les pareció? ¿Les gusto pese al tema? ¿Debo seguir? Cualquier consejo, crítica o pregunta pueden decirme libremente.

Review, por favor :)

Que tengan bonito día