SKIP BEAT! ME PERTENECE JAJAJAJA mentira! OBVIO QUE LOS PERSONAJES NO ME PERTENECEN XD

Lo siento por los posibles horrores ortográficos o gramaticales que pueda tener la historia, espero que les guste ^^.

Ella estaba apoyada en la puerta de su cuarto pensando en cómo había cambiado desde aquella noche. Hace tres meses que estaba de novia con tsuruga ren o kuon como preferia llamarlo cuando estaban solos, desde el cumpleaños numero 25 de kuon cuando de manera bastante extraña terminaron solo los dos en la que se suponía una fiesta sorpresa para kuon.

Esa noche kuon le abrió su corazón, le conto sobre su pasado, sobre rick y su dolor, sobre el presente y la luz que siempre lo traia de vuelta y sobre su futuro con esa luz, en si con ella, mogami koyko, la única de la que se ha enamorado.

Al principio le costó asimilar todo lo que le decía pero al final solo pudo sonreír, abrazarlo y confesarle que ella era bou, el pollo, que nunca se dio cuenta que ella era esa chica de secundaria y que estaba enamorada de el desde hace tres años.

Desde esa noche empezaron a salir a escondidas, solo lo sabían sus amistades más cercanas, él era solo su sempai en el trabajo y kuon cuando estaban en una cita, hasta hace dos meses cuando después de una entrevista, la periodista se le acerco, casi se le sube encima para ser más exactos, y le pregunto si estaba libre esa noche. En ese momento los celos pudieron más que su juicio, se acercó a kuon mientras este explicaba que ya tenía planes para la noche y lo beso, todo un señor beso, más para mostrarle a la periodista esa que él era suyo que para otra cosa, pero todo un señor beso al final, para luego llevárselo de la mano sin mirar atrás, no fue hasta que llegaron al departamento que lo soltó y se dio cuenta de lo que había hecho.

Desde ese día todo japon sabía de su relación, la foto de su beso salió en la portada de la revista, todos querían saber desde cuando, como y porque, a kyoko para su sorpresa no le importo mucho, por lo menos ya no se preocupaba por otras que se le acercaban a kuon, todas ya sabían que era suyo.

Hace un mes que le ofrecieron realizar un comercial en korea, después de meditarlo mucho con la almohada, la ducha, la taza de café y el mini ren que aún conservaba decidió aceptar, pero este trabajo significaba estar por lo menos tres meses separados y se había acostumbrado tan rápido a estar con el que no sabía si podría estar sin él, especialmente después de anoche.

Y ahí estaba ella, parada en la puerta de su cuarto, mientras más lo pensaba menos entendía como pudo haber cambiado tanto en solo tres meses, antes se hubiera muerto de la vergüenza estar ahí parada con nada más que una camisa mirando a su novio ver la tv, o tal vez no cambio en solo tres meses tal vez el cambio empezó desde más antes, pero ya no le daria mucha vuelta al asunto, ya tendria tiempo para pensar en esos tres meses que estaria lejos de el, ahora solo le importaba estar lo más cerca posible de kuon, de su kuon, suyo, solo de ella.

Después de dar un leve suspiro se acercó al sofa y sin previo aviso salto encima de el para empezar a besarlo, no pudo evitar sonreír cuando él le quito la camisa, al fin y al cabo era su camisa y se la tenía que devolver.