Prologo

La respiración era agitada, sentía que ya las piernas no soportaban su propio peso, el demonio que tenía al frente , los ojos rojos de aquel demonio estaban llenos de arrogancia, una sonrisa de medio lado se jactaba de lo débiles que él y su equipo estaban, su gran espada Tessaiga parecía demasiado pesada, ¿tan patético lucía?, miró al frente y allí estaba su amada sacerdotisa, arriesgaría lo que fuese necesario para poder salvarla de su cruel destino, lucharía para que por fin pudieran estar juntos. Agito su brazo y vió en su traje rojo sangre y tierra, lo único que bastaba para que todos estuvieran tranquilos era un esfuerzo más.

Kukukukuku que mal te ves Inuyasha, pensabas que tú y tu grupito ¿podrían aniquilarme? ESTUPIDOS – sostuvo la perla de Shikon en sus manos –

Esta totalmente maldecida- gritó la joven escolar- hay que hacer algo rápido.

El demonio lanzo un ataque el en el cual se había clonado, cada uno de esos demonios era poderoso como él ahora era todo o morir.

"Si ustedes creen que esta joya es mi objetivo final están equivocados"- observó como kikyo disparaba las flechas y destruia al clon que el mismo le había enviado solo en cuestión de segundos estaba hecho polvo. – solo era una distracción kikyo.

El demonio envió un poderoso ataque parecido al viento cortante, con una media sonrisa se dio la media vuelta para caminar con la joya pero no vio venir una flecha que venia desde un costado, luego todo fue oscuro para el sintió como la joya salio volando por los aires.

¡KIKYO! – el hanyou corrió con todas sus fuerzas para rescatarla pero solo vio una luz enorme que envio a todos hacia atrás, en ese momento le importaba que kikyo estuviera bien, habían descubierto la forma de volverla cada vez mas humana, esta vez no dejaría pasar la oportunidad, lo sentía por kagome, pero era lo que el mas deseaba. Una vez que la luz se difumino corrió hacia el cuerpo que yacia en la tierra, el horror se apodero de su rostro dejándolo inmóvil.

Sango paso corriendo por delante de él miroku la imito a nadie le importo joya que yacia en el suelo, solo querían salvar a la mujer que estaba sobre su estómago con una gran herida en su espalda, inconsciente.

-¡Inuyasha reacciona! – le grito shippou.

Kikyo estaba a salvo pero kagome se encontraba muy mal.

Recibió el ataque por mi… chiquilla estúpida… RAPIDO A LA ALDEA…

CONTINUARA