CAPÍTULO 1: "Surgen las Heroínas" Parte 1.

Hace mucho, mucho tiempo, antes de que el hombre dominara la tierra, existía un numeroso grupo de seres vivos con poderes mágicos conocidos como "Equestrianos".

Estos seres que en apariencia parecían iguales a los hombres, eran realmente poderosos, pues poseían un extraño poder que los hacía prácticamente superiores a las demás criaturas de la naturaleza.

Unos tenían el don de una fuerza sobrehumana y capacidad de cultivar la tierra, otros poseían alas que les permitían volar y controlar el clima, y solo algunos tenían cuernos mágicos similares a los de los míticos unicornios, los cuales utilizaban para elaborar poderosos hechizos.

Sin embargo, los seres más poderosos de aquel grupo eran un par de nobles hermanas inmortales y con el don de la juventud eterna, sus nombres: Celestia y Luna.

Cada una tenía que llevar a cabo un propósito aun mayor que los demás: Celestia debía traer el día, mientras que su hermana menor tenía que traer la noche para así mantener el equilibrio de la naturaleza.

Por 300 años, los Equestrianos dominaron la tierra hasta que el hombre apareció y comenzó a fundar grandes ciudades, crear poderosas civilizaciones y enormes imperios en todo el mundo.

En un principio, Equestrianos y Humanos convivieron en un ambiente de paz y armonía, compartiendo cada uno su cultura y sus conocimientos.

Pero con el pasar del tiempo comenzó a hacer a los Humanos cada vez más codiciosos, pues los conocimientos en magia y las habilidades de los Equestrianos generaban en ellos envidia, odio y rencor. Fue entonces que comenzó una larga cacería contra nuestro pueblo.

Las aldeas creadas por Equestrianos comenzaron a ser atacadas por los ejércitos de reyes, emperadores y gobernantes que ambicionaban quitarnos nuestros poderes a través de la fuerza.

Para salvar a los que quedábamos, la Princesa Celestia conjuro un hechizo para que cada uno de nosotros tuviéramos una apariencia similar a la de los humanos y pudiésemos mezclarnos con ellos para así ponernos a salvo de aquella masacre.

No obstante, la propuesta requería también de un sacrificio, pues ambas hermanas deberían renunciar a su encargo de levantar el sol y la luna dejando que ambos astros fueran controlados por la naturaleza misma.

Celestia estaba dispuesta a aceptar dicho sacrificio, pero la Princesa Luna en cambio, no estuvo de acuerdo con esta decisión y por ello decidió hacer algo que para nuestra raza era prohibido y condenable.

La Princesa ofreció su alma a la magia oscura a cambio de que esta le proporcionara los poderes que necesitaba para vengarse de los seres humanos.

La oscuridad acepto su propuesta y fue entonces que la Princesa cambio su nombre a Nightmare Moon, el azote de la oscuridad y Reina de la Noche Eterna. A través de los sueños comenzó a atormentar a la humanidad con pesadillas que los llevaban hasta la muerte, pero su plan más ambicioso era el de sumir al mundo en una noche eterna.

Su hermana la Princesa Celestia se opuso a ella y después de un intenso combate en los cielos, la Princesa del sol utilizo seis extrañas gemas que encerraron a su hermana dentro de un cristal mágico evitando que Nightmare Moon hiciera más daño.

Aquella noche, Celestia lloro el castigo de su hermana y ella misma se encargó de ocultarla dentro de una montaña, donde nadie pudiera encontrarla y liberarla.

Tras esto, Celestia otorgo a la naturaleza su poder de elevar el sol y con ello renunció a la encomienda que había desempeñado durante siglos. La naturaleza compadecida por el sacrificio de la princesa, decidió dejar que su majestad continuara teniendo el don de la juventud eterna y de la inmortalidad.

La leyenda dice: "Que, si Nightmare Moon llegase a ser liberada, volverá a atormentar a todos los seres humanos de la tierra y sumirá al mundo en una noche eterna, y cuando eso suceda, no habrá nada ni nadie que pueda salvarnos".


1000 años después.

Un nuevo día había comenzado, el sol comenzaba a salir en el horizonte tras las montañas que estaban al norte de la ciudad de Los Ángeles, California. El ambiente se hallaba un poco tranquilo, solo el ruido de los automóviles que pertenecían a los habitantes que debían salir temprano a trabajar era lo único que podía escucharse.

En el área Este de la ciudad se encontraba una enorme casa blanca hecha de madera, con dos ventanas en el segundo piso, un pequeño jardín ubicado en la parte de enfrente y una bandera estadounidense colgada de una de las columnas.

Dentro de una de las habitaciones de la casa se encontraba dormida en una cama de madera color purpura, una adolescente de 16 años, piel clara, de cabello color azul zafiro moderado con rayas de violeta moderado y rosa brillante. La habitación era enorme y poseía varios muebles con libros, un escritorio, una computadora, un telescopio, un armario, así como algunos posters que tenían imágenes relacionadas con la ciencia y la tecnología.

De repente la puerta de la habitación se abrió lentamente y una sombra encapuchada entró dentro del lugar. Este se acercó lentamente y sin hacer ruido hasta la cama, luego de uno de sus bolsillos saco una lata que llevaba una corneta arriba, lo agito para después colocarlo cerca de la cabeza de la chica e inmediatamente un fuerte sonido se escuchó haciendo que la chica brincara de la cama asustada cayendo en el suelo envuelta con su cobija.

- ¡Aaaah! –grito la chica asustada mientras trataba de quitarse la cobija que tenía encima.

La luz de la habitación se encendió y un chico de 13 años de cabello verde, vestido con jeans azules y chamarra purpura se acercó a la joven riendo y diciendo:

- ¡JEJEJEJE! ¡Hubieras visto tu cara Twilight! ¡HAHAHAHAHA!

- ¡Ouch! –exclamo la adolescente sobándose la cabeza para luego gritar enojada - ¡Spike! ¡¿Cuántas veces te he dicho que no me despiertes de esa manera?! ¡Casi me da un infarto!

- ¡Relájate hermanita! –dijo Spike entre risas –Ni que fuera para tanto. Además, tú querías que te levantara a buena hora y eso hice.

-Sí, pero yo dije que me levantaras temprano para ir a la excursión de la escuela –dijo la joven tallándose los ojos.

-De hecho, ya son casi las ocho de la mañana –dijo Spike de forma despreocupada.

- ¡¿Qué?! –grito la adolescente asustada - ¡Ay no! No, no, no, no, ¡Llegare tarde para ir a la excursión de hoy!

-Suerte que a mí me viene a traer el autobús más tarde.

- ¡¿Y tú que haces aquí mientras me visto?! ¡Lárgate! –grito Twilight lanzándole una almohada a Spike en el rostro.

-Está bien enojona, como tú digas –dijo Spike saliendo de la habitación y sosteniendo la almohada en sus manos para demostrar a Twilight que no la veía cambiarse de ropa.

- ¡Rápido! ¡Rápido! –gritaba la joven mientras abría su closet y sacando de este una falda de tablones color morada con cuadros, unas calcetas blancas, una camisa de vestir blanca y un chaleco tipo suéter color morado claro.

La chica comenzó a quitarse el pijama para después vestirse rápidamente con aquella ropa. Por último, se puso unos zapatos escolares negros y salió de la habitación corriendo hacia el baño donde se enjuago la cara y el cabello. Se peinó rápidamente para luego bajar las escaleras y dirigirse a la cocina.

Ahí abrió el refrigerador donde tomo un vaso con jugo de manzana que se encontraba dentro, lo bebió rápidamente y después tomo una manzana que estaba en el frutero de la mesa en el comedor.

Twilight tomo su mochila y salió hacia la calle corriendo rápidamente, pero en cuanto doblo la esquina vio como el autobús de la escuela se alejaba en dirección al sur de la ciudad.

- ¡No! ¡Esperen! ¡Vuelvan! –gritaba la chica tratando de alcanzar el autobús, pero se detuvo en cuanto este se alejó a toda velocidad - ¡Ay no!

De repente un auto blanco con vidrios polarizados se detuvo junto a ella en la calle. Twilight volteo y vio como la ventana de una de las puertas bajaba mostrando a una mujer de piel clara, cabello purpura moderado con rayas blancas, vestida con camisa de vestir blanca, falda negra, medias negras y zapatos de tacón del mismo color.

- ¿M-Mamá? –pregunto Twilight acercándose al auto.

-Perdiste el autobús, ¿no es así? –pregunto la mujer con seriedad.

-Si mamá, pero puedo tomar el…

-No –interrumpió la mujer para luego sonreír y volteando a ver a su hija decirle –Yo te llevo, igual todavía tengo tiempo.

-Gracias mamá –dijo Twilight subiendo al auto que después arranco y se fue en la dirección que siguió el autobús.


Mientras tanto en el interior de un foro de televisión de la cadena CNN ubicado cerca del centro de la ciudad, un conductor de cabellos blancos se encontraba transmitiendo en vivo:

-Terrible la situación en Venezuela y en toda Sudamérica–dijo el conductor con un rostro de preocupación para luego cambiarlo a uno de seriedad y decir –Pero bueno, vamos a otras noticias, hoy CNN Los Ángeles tiene el gusto de entrevistar a un hombre que se ha distinguido por sus buenas obras, un visionario y emprendedor en los negocios, un hombre calificado como "El Rey Midas del Siglo XXI". Con ustedes, el señor Charles Robinson –dijo el presentador dándole la bienvenida al noticiero a un hombre de piel blanca, cabello y bigote café, con lentes oscuros y vestido de forma elegante.

-Gracias, gracias a todos, gracias –decía el hombre alagado mientras escuchaba el sonido de unos aplausos producidos por el técnico de sonido del programa.

El invitado saludo con un abrazo al presentador del noticiero y posteriormente se sentó en su lugar sonriendo.

-Señor Robinson –dijo el presentador –Nos es un honor tenerlo aquí con nosotros.

-El honor es mío caballero –respondió Robinson alagado -Realmente ser entrevistado por el noticiero más importante del país me es grato y tengo un sentimiento que no sé cómo describirlo.

-Pero platíquenos señor, es cierto ese rumor de que… la Nueva Ley Minera que el Congreso intenta hacer pasar para detener la extracción a gran escala, ¿no lo está afectando?

-En absoluto que no –dijo el empresario sonriendo -Robinson Mineral Company posee una gran cantidad de amparos y un excelente manejo para residuos peligrosos o cualquier sustancia que afecte al medio ambiente. Además, siempre existirán otros lugares para ir a encontrar minerales como México, Chile, China e incluso los países africanos. Prácticamente la industria minera puede continuar con sus proyectos y el propósito de nuestra empresa es generar empleos para todos aquellos pueblos o comunidades que no tienen ni que comer. Además, les llevamos el progreso y la oportunidad de crecer económicamente para mejorar su nivel de vida.

-Um… señor Robinson, muchos periódicos se escandalizaron cuando un grupo de activistas dijo que usted está involucrado en las guerras que hay en Medio Oriente, ¿Qué opina de ello?

-Mentiras, sucias mentiras realizadas por un grupo de hippies asquerosos que solo se dedican a estorbar el progreso del país. El señor presidente Thompson sabe muy bien que hay armas y grupos terroristas que se hacen pasar por civiles para desestabilizar a los gobiernos del mundo. Lo vimos en el 2001 con el atentado al World Trade Center en Nueva York y este año en el Maratón de Boston, por lo que debemos tener cuidado si queremos garantizar la seguridad del país y de sus ciudadanos. Además, todos aquellos que se oponen a la política exterior del país es porque son tontos o son terroristas.

-Otra pregunta, se rumora que usted ha presionado al Congreso y especialmente a los senadores Republicanos para votar en contra de la Ley Minera, ¿Es eso cierto?

-Por supuesto que no, la democracia es libertad, América es libertad y yo, y ningún empresario estamos presionando al senado. Ellos tienen la última palabra y sea cual sea el resultado me encuentro tranquilo y sin sentir que mis negocios son amenazados.

-Una última pregunta: ¿Qué tan cierto es el rumor de que anda buscando vetas mineras en las Montañas de San Gabriel?

-El rumor es cierto, andamos buscando vetas mineras en las montañas, pero lo que pretendemos hacer en ese lugar no es llevar a cabo una minería a gran escala si no hacer una minería sustentable a la antigua y que no contamine.

-Bueno señor Robinson, no me queda más que volverle a agradecer por su presencia a esta entrevista.

-Igualmente les agradezco, que Dios los bendiga a ustedes y a nuestro país –dijo el empresario dándole la mano al presentador para después salir del foro.

-Muchas gracias señor Robinson –dijo el presentador que tomo unas hojas blancas para continuar el noticiero diciendo –En la sección de deportes de hoy…

Charles Robinson camino por uno de los pasillos del foro mientras era seguido por cuatro guardaespaldas vestidos con traje negro y por una joven rubia vestida con traje ejecutivo negro, falda negra, zapatos de tacón del mismo color y que llevaba en sus manos una tabla con hojas blancas.

-Isabella –dijo Robinson a la mujer que lo seguía -Quiero un café llegando a mi oficina y el informe de los avances del Proyecto San Gabriel Mineral Corp.

-Sí señor –dijo la mujer que se fue por otro pasillo dejando al empresario solo con sus guardaespaldas.

El hombre siguió caminando por el foro y antes de salir de este se encontró con un hombre de piel blanca, viejo, vestido con traje café y que estaba en silla de ruedas.

-Realmente lo hizo bien señor Robinson –dijo el anciano poniéndose frente al joven empresario –El consejo estará satisfecho con esta acción y puede que apoye con todo el Proyecto en las Montañas de San Gabriel.

-Jacob –dijo el hombre sonriendo –Soy un hombre de negocios, se lo que hago y a donde voy. Nadie detendrá el gran proyecto que abriremos en las afueras de la ciudad. Solo imagínate: Miles de toneladas de oro en esas montañas y que seamos los primeros en explotarlas.

-Me parece muy bien –respondió Jacob -Con ese proyecto seremos la empresa minera más rica y poderosa del mundo, solo esperemos que el congreso no vote a favor de esa estúpida ley.

-No te preocupes –dijo el empresario sonriendo –Ya di órdenes para que se envíen otros cinco mil millones de dólares al congreso para que esa ley no pase.

-Está bien señor –dijo Jacob sonriendo y dándole la mano al empresario –le deseo suerte.

-Te veo al rato Jacob –dijo el empresario quien salió del foro llegando al estacionamiento.

Ahí se encontraba una multitud de manifestantes que protestaban con pancartas que decían frases como: "¡Sí a la vida! ¡No a la Mina!", "Robinson Ecocida", "¡Fuera Robinson Mineral Company de California!", entre otras frases más.

El empresario solo subió a su auto y cuando estuvo dentro solo sonrió diciendo:

-Bola de simios imbéciles, ni con sus marchas van a detener a mi empresa.

El auto arrancó y se fue del foro en dirección hacia el centro de la ciudad.


Al mismo tiempo en el Museo de Historia Natural de Los Ángeles ubicado en el sur de la ciudad, el auto en el que viajaban Twilight y su madre se estaciono frente a la entrada del lugar.

-Bueno hija –dijo la madre de la adolescente –Llegamos.

-Gracias mamá –dijo la joven sonriendo quien abrió la puerta para bajar.

-Oye –dijo la mujer deteniendo a su hija -Tú padre nos llevara a cenar afuera, así que no llegues tarde si es que piensas irte con tus amigos.

-Pero mamá –dijo Twilight riendo -tú sabes que no tengo amigos.

- ¿Y Moon Dancer?

-Ella se fue a Nueva York hace tiempo mamá y ya casi no me habla ni siquiera por el Facebook.

-Pero Twilight –dijo la mujer preocupada -Necesitas convivir, no siempre vas a estar en los libros o viendo estrellas sola en tu cuarto.

-Lo sé mamá, pero… -en ese momento Twilight volteo a ver a sus compañeros que estaban en las escalinatas y dijo -es muy difícil.

-Está bien hija –dijo la madre sonriendo -De todas maneras, tienes que saber que siempre estaré para lo que necesites.

-Gracias mamá.

-Bueno, te veo después –dijo la mujer cerrando la ventana de la puerta y arrancando el auto en dirección a su trabajo.

Twilight tomo un respiro mientras observaba al resto de sus compañeros de escuela conversando y riendo entre ellos.

- ¿Amigos? ¿Y Para que quererlos? –dijo Twilight triste y caminando cabizbaja mientras una música sonaba en su cabeza y comenzaba a cantar una canción que decía:

La amistad es solo una ilusión,

Un producto de la imaginación,

No existe en este mundo,

Alguien que a mi sea igual,

No existe alguien,

Que mi amistad pueda valorar,

Siempre he sido solo una compañera nada más.

Twilight siguió caminando por las escalinatas del museo mientras veía como sus compañeros de la escuela se encontraban reunidos en grupos y la mayoría solo la veían como una extraña o le hacían gestos para que no se acercara a ellos.

Nadie quiere conmigo platicar,

Nadie me invita a jugar,

Nadie conmigo quiere estudiar,

Solo soy una extraña nada más.

La amistad es solo una ilusión,

Un producto de la imaginación,

Nunca he tenido a alguien con quien charlar,

Solo mi familia me sabe valorar,

Para los chicos soy solo un estorbo,

Para las chicas soy solo una impopular,

Pero ninguno entiende,

Los sentimientos que tengo aquí.

Quisiera algún día tener amigas,

Que me comprendan y me entiendan,

Que siempre estén a mi lado,

Que no me dejen nunca sola,

Que me lleven a grandes aventuras,

Que me alegren cada día y que siempre…. estemos… juntas.

-Ejem… ya termino señorita Sparkle –pregunto una voz masculina detrás de Twilight.

La chica volteo y vio que estaba parada frente a la puerta principal del recinto mientras que sus compañeros solo la observaban confundidos. Pero después de unos segundos todos se soltaron a reír haciendo que la chica se sintiera avergonzada, todos menos cinco chicas que la observaban desde el pie de las escalinatas.

- ¡Bueno ya silencio! –dijo el profesor que era un hombre joven con el pelo pintado de azul, vestido con jeans, camisa blanca, saco negro y que llevaba lentes –Vaya con el grupo señorita –ordeno el profesor a Twilight empujándola hacia el grupo.

Twilight avergonzada camino entre los alumnos y cuando se colocó en un lugar apartado del resto, una chica de piel clara, pelo rosa esponjado, vestida con un vestido rosa y zapatillas del mismo color se acercó a ella y le susurro en voz baja:

-Oye, cantas muy bien.

- ¿Ah? –pregunto Twilight confundida volteando a ver a la chica.

- ¡Oh! Lo siento, soy Pinkie, Pinkie Pie –dijo la chica dándole la mano a Twilight.

-Yo soy Twilight Sparkle –dijo la adolescente dándole la mano a Pinkie.

-Así que tú eres la chica de las buenas notas de la que todos hablan, ¿verdad?

-Pues… sí, puede decirse que sí.

- ¡Señorita Sparkle! –dijo el profesor llamándole la atención a la joven - ¡Guarde silencio!

-Si profesor –dijo Twilight asintiendo con la cabeza.

-Hablamos después –dijo Pinkie sonriendo para igualmente poner atención al profesor.

-Bueno, pues… buenos días alumnos –dijo el profesor que llevaba un cuaderno en sus manos -Como ustedes saben, hoy hemos venido al Museo de Historia Natural de nuestra ciudad para que pongan en práctica todo lo que hemos visto en clase. Las reglas son simples: No se separen del grupo y no toquen nada, ¿entendido?

-Si Profesor Imagination –dijeron al unísono los alumnos.

-Formen grupos de seis por favor –dijo el profesor mientras seguía anotando en su cuaderno con un lapicero.

En ese momento los alumnos comenzaron a juntarse formando sus respectivos grupos de amigos. Twilight (que se encontraba hasta atrás) solo observaba indiferente como el resto de sus compañeros de clase llevaba a cabo las órdenes del profesor mientras que ella estaba aparentemente sola.

-Y… ¿quieres que seamos compañeras? –dijo Pinkie Pie apareciendo detrás de Twilight.

-Pues… si, ¿Por qué no? ¡EJEJEJE! –dijo Twilight riendo nerviosa –Pero… ¿no se supone que debemos ser seis?

-No te preocupes –dijo Pinkie sonriendo –encontraremos a alguien más como… ¡Ella!

Pinkie señalo hacia una chica de piel blanca, cabello color rosa grisáceo claro pálido vestida con blusa amarilla, falda rosa que usaba botas converse color rosa claro y que al parecer no quería hablar con nadie.

-Pues… no creo que hable mucho –dijo Twilight un poco insegura.

- ¡Tonterías! Más vale intentar –dijo Pinkie jalando a Twilight hacia donde estaba la chica.

Ambas se pararon frente a la chica que solamente se tapó con su cabello tratando de ocultar su rostro mientras que Pinkie solo sonreía y Twilight estaba callada sin saber que decir.

-Vamos, dile algo –dijo Pinkie a Twilight.

-Um… ¿Cómo te llamas?

-…

- ¿No te gusta hablar? –pregunto Twilight al ver que la chica no respondía.

-…

Twilight comenzó a examinar a la chica y vio que esta llevaba un cuaderno adornado con estampas de animales junto con una etiqueta que tenía escrito su nombre.

- ¿Fluttershy? ¿Te llamas Fluttershy? –pregunto Twilight.

-Um… si –dijo en voz baja la chica.

-Perdón, ¿Qué dijiste?

-Si –dijo con voz más aguda la chica quien comenzó a agarrar un poco más de confianza.

- ¿Te gustan los animales?

-Pues… sí.

-Bueno… ¿te gustaría formar parte de nuestro grupo?

-Yo… si quieres –dijo Fluttershy de forma insegura.

- ¿Compañeras? –pregunto Twilight dándole la mano a Fluttershy.

-Em… sí –dijo Fluttershy esbozando una leve sonrisa mientras tomaba la mano de Twilight.

- ¡Uy! Parece que alguien ha decidido unirse ¡EJEJEJE! –dijo Pinkie apareciendo en medio de ambas chicas. Pinkie volteo a ver hacia una parte de las escaleras del museo y vio como en una escalinata se encontraba una chica de piel clara, cabello índigo ondulado, con sombras azul cielo en sus ojos vestida con camisa de vestir blanca, falda mitad blanca y mitad color índigo, medias transparentes y zapatos de tacón blancos.

Pinkie se acercó a la chica que se encontraba sola y cabizbaja, se agacho y le dijo:

- ¿Te sientes bien?

-No –respondió la chica con tono triste –Mis compañeros me dijeron que haríamos el grupo para la excursión, pero de repente me sacaron sin ningún motivo. Y pensar que hice estas pulseras de la amistad durante toda la noche –dijo la chica casi llorando y mostrando unas pulseras de colores.

-Oye tranquila –dijo Pinkie sonriendo - ¿Cómo te llamas?

-R-Rarity –respondió la chica.

- ¿Rarity? ¡Ah sí! Eres la chica que tiene una boutique cerca del centro.

-Un segundo, ¿Cómo lo sabes? –pregunto Rarity dejando de llorar.

-Pues… ¡Duh! Todos te conocen precisamente porque eres la única que tiene un negocio propio y vives sola. Además, sé que tu comida favorita son las ensaladas, que te gustan las cosas brillantes y que fabricas tu propia ropa.

- ¡Wow! Sí que sabes todo de mí, me siento alagada –dijo Rarity sonriendo.

- ¿Te gustaría unirte a nuestro grupo para la excursión?

-Pues yo…

- ¡Ey Rarity! –interrumpió una voz masculina.

Ambas chicas voltearon y vieron a un joven de piel blanca, cabello rubio y que vestía pantalón de vestir blanco, saco y camisa de vestir blanca con una rosa en su pecho.

- ¿Blueblood? ¡¿Qué haces aquí?! –pregunto enojada Rarity.

-Pues… vengo a pedirte una sentida disculpa. Verás… los chicos y yo hemos decidido permitir que regreses –dijo el chico –Creemos que fue un error echarte del grupo y más porqué el pantalón de Joe se ensucio –dijo Blueblood señalando a un chico de traje café que tenía una mancha de café en el pantalón –Por lo que requiere uno nuevo, y quien mejor que tú Rarity para hacer ese trabajo. ¿Qué dices? ¿Regresas con nosotros? –dijo el chico dándole la mano a Rarity.

-Un segundo –dijo Rarity molesta - ¿Estás invitándome a regresar solo porque soy la única de todos ustedes que puede fabricarles su ropa?

- ¡EJEJEJEJE! ¡No! Es una amistad sincera –dijo el chico extendiendo nuevamente su mano.

Rarity se quedó callada durante unos segundos, luego volteo a ver a Pinkie quien tenía una cara de preocupación. La chica de cabello índigo le guiño el ojo a la chica de cabello rosa, después volteo a ver al chico diciéndole con una sonrisa maliciosa:

- ¿Sabes que Blueblood?

- ¿Sí? –pregunto el chico emocionado.

- ¡Esta es mi respuesta! –grito Rarity pegándole con su bolso al chico haciendo que este callera en el suelo mareado por el golpe mientras que los demás chicos que habían presenciado la escena se quedaron sorprendidos por lo sucedido.

- ¡Vamos! –dijo Rarity dándole su mano a Pinkie Pie quien la llevo con las demás chicas.

- ¡Chicas! –grito Pinkie a Twilight y Fluttershy que se habían puesto a charlar un poco.

- ¿Si? –pregunto Twilight.

-Les presento a Rarity, nuestra nueva integrante del grupo.

-Un placer –dijo Rarity con amabilidad.

-Igualmente, yo soy Twilight Sparkle.

- ¡Ah sí! Eres la chica que gano la Competencia Interna de Matemáticas de la escuela –dijo Rarity emocionada.

- ¡JEJEJE! Es la primera vez que alguien lo recuerda –dijo Twilight feliz, pues sentía que finalmente estaba socializando e incluso conociendo a alguien que la conocía.

- ¿En serio? –pregunto Rarity sorprendida - ¿Qué no tienes amigos?

-Pues… no –respondió Twilight un poco avergonzada –no soy muy sociable que digamos.

-Bueno, si lo quieres podemos ser amigas de ahora en adelante.

- ¿En serio?

- ¡Pues claro querida! No puedes estar sola toda la vida, ¿Qué dices?

-Yo… ¡Claro! ¡Con gusto! –respondió Twilight sonriendo.

-Bueno –interrumpió Pinkie Pie –ya somos cuatro, pero aún faltan dos más para que nuestro grupo este completo. Pero creo… –dijo la chica volteando a ver a los demás grupos –que ya no hay nadie más.

-Um… ¿y qué tal ella? –pregunto Fluttershy con timidez señalando hacia la calle.

Las cuatro voltearon hacia la calle y vieron como una moto color azul oscuro con franjas multicolor se acercaba a toda velocidad al lugar frenando en la banqueta. El vehículo era conducido por una joven de piel clara, cabello pintado con los colores del arcoíris y vestida con un short de mezclilla, una blusa azul color gris cerúleo claro, medias de red negras y botas rockeras negras.

La adolescente bajo y camino hacia donde estaba el resto del grupo de clases, el profesor Imagination al verla acercarse se dirigió a la joven con un rostro que mostraba enojo y le dijo:

-Señorita Rainbow Dash, supongo.

-Sí –dijo la joven que no temblaba ante la presencia del profesor -Esa soy yo profesor.

-La que siempre falta a mis clases, la que es buena en los deportes, pero no en los libros, la que…

-Sí, sí, sí, sí, lo que diga profe –dijo Rainbow ignorando los regaños del profesor –En fin, ya estoy aquí y dígame que hay que hacer.

-Pues si hubiera llegado temprano tendría la oportunidad de elegir un grupo en el cual integrarse, pero como llego tarde, yo seré el que lo escoja –dijo el profesor para luego voltear a ver al resto de los grupos y preguntar –Bueno muchachos, ¿Quién quiere a Dash en su grupo?

Varios grupos comenzaron a murmurar entre ellos y a negar con la cabeza, pero Pinkie comenzó a saltar y alzando su mano gritaba:

- ¡Aquí! ¡Aquí! ¡Mandela aquí!

- ¡Pinkie no! –dijo Rarity preocupada –Ella es mala, solo mira como viste –decía la chica de cabello índigo señalando a Dash.

-No seas tonta Rarity –dijo Pinkie de forma despreocupada –el hecho de que se vea ruda no quiere decir que sea mala.

-Pues… yo conozco a Dash desde que éramos niñas –dijo Fluttershy con timidez –No es mala, solo que le gusta la rebeldía, el rock y claro los deportes.

- ¿Lo ves Rarity? –dijo Pinkie a su amiga –Fluttershy la conoce, por lo que sería bueno que estuviera aquí con nosotras –la chica de pelo rosa volvió a brincar y grito - ¡Aquí profe! ¡Aquí!

El profesor al ver a Pinkie Pie simplemente asintió con la cabeza y luego viendo a Dash le dijo:

-Ya tiene grupo, órale como va.

-Lo que digas –dijo Dash quien se acercó al grupo donde estaba Pinkie para simplemente quedar sorprendida al encontrarse con Fluttershy - ¿Fluttershy? ¿Qué haces aquí?

-Pues… no tenía grupo y como no llegabas me junte con ellas.

Rainbow volteo a ver a las otras chicas y viéndolas fijamente dijo:

-Hola, soy Rainbow Dash.

-Mucho gusto –respondió Rarity con una sonrisa tímida, pues la apariencia de Dash le asustaba un poco.

-No te preocupes, no golpeo –dijo riendo Dash –Solo a quienes se lo merecen o cuando necesito defenderme.

-Si… claro ¡EJEJEJE! –rio Rarity nerviosa.

-Um… tú te me haces familiar –dijo Dash volteando a ver a Twilight – ¡Ya recordé! Eres la cerebrito de la biblioteca.

-Sí, ¡JEJEJE! –río Twilight nerviosa, aunque estaba un poco molesta por el comentario de Dash.

- ¿Y tú eres…? –preguntaba Dash dándole la mano a Pinkie.

- ¡Pinkie Pie! –respondió gritando la chica de pelo rosa abrazando a Dash con fuerza - ¡Y seremos mejores amigas por siempre!

-S-Sí… claro… pero… podrías no apretarme tan… fuerte –decía Dash quien apenas y podía respirar.

- ¡Oh claro! ¡Lo siento! –dijo Pinkie soltando a la chica quien tomó un respiro para recuperarse.

De repente el sonido de un claxon se escuchó, todos voltearon y vieron una camioneta roja que era conducida por un joven de piel clara y cabello naranja quien viajaba junto con una mujer de edad mayor, de piel clara y cabello gris claro junto con una adolescente de piel clara, cabello rubio que vestía una camisa de vestir naranja con cuadros, falda de mezclilla, botas vaqueras cafés y un sombrero vaquero.

-Entonces… ¿Me van a mandar acá? –pregunto Applejack a la mujer de edad mayor.

-Applejack, ya lo hablamos.

-Pero… no creo que necesite de la escuela abuela, pienso que estoy bien con mi vida en la granja.

-Ay nieta –dijo la anciana riendo –Recuerda que era deseo de tus padres que estudiaras más allá de la granja.

-Entiendo que papá y mamá querían que estudiara, pero… ¿era necesario venir hasta aquí?

-Applejack, tú sabes que en donde vivimos no hay escuela preparatoria. Además, puede que encuentres con quien juntarte.

-Brincos diera abuela Smith –dijo la chica un poco triste –No creo que los chicos de la ciudad quieran socializar con una campirana como yo.

-Tonterías Applejack –respondió la abuela Smith –Eres una chica linda, honesta y dulce como el pastel de manzana, estoy seguro que encontraras a las amigas perfectas.

-Pues ojalá –dijo Applejack tomando su mochila –Entonces… ¿me quedare con la tía Orange?

-Sí, ella vive en Beverly Hills –dijo la abuela dándole un mapa a su nieta –Aquí está la dirección.

-Nos vemos abuela –dijo Applejack despidiéndose de su abuela con un abrazo.

-Igualmente mi nieta, cuídate.

La chica de sombrero vaquero bajo del auto caminando hacia el museo mientras que la camioneta arranco alejándose de ahí rápidamente. Applejack se acercó al profesor que ya la esperaba en las escalinatas y le dijo:

-Buenos días profesor.

-Buenos días, supongo que eres la chica nueva de la que me hablo el director.

-Sí, me llamo Applejack o si quiere puede decirme AJ.

-Pues bienvenida AJ, como veras hemos dividido a la clase en grupos de seis y por ende lamento no poder darte la bienvenida que mereces.

-Oh no se preocupe, puedo estar tranquila donde usted quiera.

-Bueno pues… -dijo el profesor viendo hacia los grupos que se habían formado y viendo el de Pinkie Pie le dijo a Applejack –Creo que podrías ir con ellas, son las únicas a las que les falta un miembro.

-Si profesor –dijo Applejack caminando hacia el grupo de chicas. En cuanto llego las saludo diciendo –Hola chicas.

-Hola –saludaron al unísono cuatro de las chicas.

- ¡Hola! ¡¿Cómo estás?! –grito Pinkie Pie emocionada y lanzando confeti de sus manos –Supongo que eres nueva verdad, de dónde vienes: ¿Montana?, ¿Texas?, ¿Arizona?, ¿Nuevo México?

-Soy Applejack y vengo de una granja que está en las afueras de Los Ángeles.

- ¡Uy! ¡Pues es un gusto conocerte! Yo soy Pinkie Pie.

-Mucho gusto.

-Um… Yo soy Rarity –dijo la chica de pelo índigo saludando a Applejack.

-Es un placer.

-Um… tu rostro se me hace conocido –dijo Rainbow acercándose a Applejack examinándola –Pero claro… ¡Eres la nieta de la patrocinadora del Motocross Nitro Cider Racing!

-Este… ¿nos conocemos? –pregunto Applejack confundida.

-Pues nunca hablamos, pero recuerdo que cuando fui a la competencia tú estabas en el palco junto con la Señora Smith, la patrocinadora del encuentro.

- ¡Oh claro! –dijo Applejack haciendo memoria –Eres la que gano la competencia, un placer conocerte.

-Yo soy Twilight Sparkle –saludo la chica de cabello azul zafiro.

-Un placer, por lo que se ve eres alguien muy inteligente.

-Pues… si, lo soy.

-Um… yo… soy… Fluttershy –dijo con timidez la chica de cabello rosa.

-Creo que no eres muy social, ¿verdad compañera?

-Me cuesta hacer amigos –respondió Fluttershy.

-No te preocupes, si quieres puedo darte consejos para que mejores esa actitud.

- ¿E-En serio?

-Claro, yo de pequeña igualmente era muy tímida, pero aprendí a superarlo.

-G-Gracias… creo.

- ¡Ahora sí! ¡Estamos completas! –dijo Pinkie Pie saltando emocionada.

-Bueno clase –dijo el profesor a todos los estudiantes –Ya que los grupos están completos, pasemos al museo. Recuerden: No pueden tocar nada y no se separen.

-Si profesor Imagination –respondieron al unísono todos los jóvenes.

-Bien, pues vamos.

Todos los jóvenes entraron al interior de la edificación, Twilight y sus amigas se vieron entre sí para después entrar al recinto mientras comenzaban a hablar más sobre sus vidas. No obstante, Twilight sentía que quizás aquel día había comenzado bastante bien, ya tenía a Rarity como una amiga, pero ella se preguntaba: ¿Las demás también desearían serlo?

Continuara…

Bueno, espero les haya agradado este primer capítulo que tuve que corregir para hacerlo mas corto :v

Aclaro que este fanfic está inspirado en el mundo de "My Little Pony: Friendship is Magic Humanizado" del artista de Deviantart Racoonkun, a quien le agradezco profundamente por otorgarme su permiso para escribir la historia y usar uno de sus dibujos para la portada.

Sin más que decir recuerden que pueden encontrarme en Facebook en mi pagina ShieldImagination97 donde si quieren enviar su mensaje para alguno de sus mensajes, así como también invitándolos a dejar su Review, ya que eso me motiva y me ayuda en ocasiones a mejorar, sin más nos vemos después :D