Advertencias: Mangaverse/Animeverse. Sin spoilers. En proceso de ver si el rating del fic aumenta o continúa como T. Manténgase alerta. Con probable pero no comprobada tendencia al OOC.
DON'T GO HOME WITHOUT ME
I.
El hogar está donde el corazón duele.
La luz con la que Okita ve a Kagura cambia de una vez y para siempre en una tarde de otoño; las ramas de los árboles se mecen al compás de un fresco y suave viento que no amerita todavía abrigo alguno, y el cielo está teñido en tonos naranjas y escarlatas que combinan con su cabello bermellón.
Ella está tirada sobre una cama de hojas con el estómago al aire y una hilera de saliva resbalándose desde la comisura de sus labios hasta la barbilla. Balbucea cosas ininteligibles que a Sougo le suenan a comida y tiene la cara y el quipao lleno de lodo.
Okita no sabe qué le ha pasado, por qué tiene magullones en su piel blanca o qué hace durmiendo allí en lugar de la Yorozuya. Él sólo tiene ganas de patearla un poco por el puro placer de hacerle daño, pero acaba parándose sobre ella porque se decide por el placer de humillarla. Kagura reacciona de inmediato y él salta fuera de ella antes de que le pueda romper los tobillos; ella se levanta de golpe y le apunta en la cara con el paraguas morado que abrazaba con sus manos cuando dormitaba.
—¡Tú! ¡Bastardo! ¡Mira que tener el atrevimiento de pararte sobre una jovencita, hum!
—Más bien una cerda. De señorita no tienes nada.
—Y tú de poli no llevas más que el uniforme —recarga el cañón de su paraguas contra su frente (una amenaza vana) y le muestra una cara fea llena de arrugas en el entrecejo por lo molesta que se encuentra. Okita tienta su suerte porque, cuando se trata de ella, le encanta hacerlo y de un manotazo se deshace del arma que puede volarle los sesos en una fracción de segundo.
—Vete a dormir a tu clóset. El parque no es un refugio para inmigrantes ilegales.
Ella le muestra el dedo corazón y le golpea en la cadera derecha con poca fuerza para un Yato, pero la suficiente para que él ande rengueando durante un par de horas cuando menos.
—Piérdete. No tengo ganas de sacar a pasear a chihuahuas cuando ni siquiera he llevado a Sadaharu a dar su caminata.
A Okita le dan ganas de poner los ojos en blanco por el tono serio de su respuesta, pero él no pone los ojos en blanco, así que chasquea la lengua en su lugar.
—Hoy estás inusualmente pacífica.
Ella se encoge de hombros y salta el arbusto perenne que separa el pavimento de las áreas verdes con movimientos tranquilos.
Lo dicho, piensa Okita. Está inusualmente calmada hoy.
Kagura sacude su ropa un poco para remover la suciedad más superficial y se paraliza un momento antes de girarse a verlo.
—Quiero comida —le dice mirándolo directo a los ojos con un ritmo pausado y la voz sospechosamente átona.
El azul profundo de sus pupilas chispea durante un segundo y Sougo tiene una especie de revelación ridícula en ese instante: China ha crecido. No es más la niña inmigrante con fuerza monstruosa que llegó hace tanto tiempo a Edo para hacer su vida más difícil e interesante. A pesar de seguir confundiendo palabras, de continuar con toda la violencia que derrocha y de lo bruta que es, China ha madurado.
Ahora mismo sólo parece una chica con el corazón roto. Una que ha subido unos cuantos peldaños de la escalera hacia la adultez.
Eso, claro, no significa que él deba comprarle comida para menguar su dolor.
A ver, a ver, quiero hacerlo corto: se actualizará cuando se me dé la gana, pero la idea es hacerlo muy pronto, así como tampoco habrá notas de autor aparte de esta hasta el capítulo final. Los capítulos varían en extension, unos cortísimos y otros medianamente largos.
El nombre fanfic es el de una canción de Lights, es muy bonita, sería agradable que la escucharan. Tan fácil como ir a Youtube. Se supone que tiene que ver con el fic, pero la verdad es que ya no me acuerdo o no estoy muy segura por lo que sigue. El fanfic, por otra parte, comencé a escribirlo en 2015, antes de que el Shinsengumi se fuera a la versh, y lo estaba olvidando para siempre por motivos que alguna vez expliqué en Tumblr, pero me dio lástima y decidí darle un segundo aire cuando buscaba el archivo de otro fic en mis weas de Scrivener.
Son viejos headcanons y es un oneshot inmensamente largo (que todavía no completo) que choca con el formato de otro oneshot que estoy escribiendo en estos días, así que, para que no se viera que era tan lo mismo en estructura, pues dividí este en capítulos porque al otro le tengo más aprecio. La nota de arriba de que podría cambiar a M depende de las modificaciones que le haga a cierta parte de la historia y no, no lo estoy sometiendo a votación, pero gracias por su interés. Lo dije sólo porque podrían no encontrar la historia en el futuro si no desbloquean el rating M en los filtros, justo como lo tengo bloqueado yo.
Recuerden: las palabras en cursiva en los diálogos de Kagura que están mal escritas son hechas a propósito. Las que estén escritas mal durante el resto del texto es porque me he equivocado y sería muy amable de su parte que me las señalaran.
Como siempre, agradezco de antemano los reviews que pudieran llegarme, se responderán por PM o Facebook, a donde gusten ir, cuando no se entienda cierta parte del fic y eso NO se vaya a explicar después.
En fin, gracias por leer y cómanse unas papas fritas para ser felices (?).
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