Primer Fic de estos libros. Todos los personajes son de Stephenie Meyer, no gano nada más que un par de tendinitis y dolores de cabeza. XD!. Solo algunos personaje son míos.
Ya sé, que el hecho de que Bella estuviera embarazada es un hecho que se plegó por el fandom (nada contra ello), pues yo ahora les doy un punto de vista de parte de los hijos.
Espero que les sea de agrado. De seguro algunos me criticaran por que meto nuevos personajes, pero yo solo deseo entretener con esta idea, y espero criticas constructivas y comentarios.
Capitulo 1.
Bien lo primero es lo primero. Salir corriendo como si mi alma se la llevara el diablo. Y Así lo hice. No me gustaba estar en casa cuando mis padres se volvían empalagosos... hig...
Me encantaba que se amaran... eran algo obsesivos los dos en realidad. Mi padre un sobre-protector algo... maniático, y mi madre la dulzura en persona, que aunque sea un vampiro su sentido de equilibrio aun era algo... peligroso, pero nos amaba y eso era lo que nos hacía sentir bien para ser tan raros.
Pero cuando se empezaban a llamar por los motes... era porque algo se venía y como siempre... salía corriendo, esperando encontrarme con alguien que tan bien hacía lo mismo, escapar. En fin.
Mi familia no era normal, no, claro que no. Yo nunca podría tener una cena familiar, yo nunca podré salir de caza sin comernos allí mismo a los animales, yo nunca podré faltar a clases por una torcedura o por un dolor de estomago. Era lamentable pero era la verdad con una familia como la mía.
Yo soy... bueno, puedo ser... o fui o soy... ¡Ah! La cosa es que soy un "vampiro"... casi. Soy un medio vampiro... o por lo menos así se nos dice. Mi madre, Isabella Swan, ahora Cullen, por milagro de la luna, la primavera y la posición de los planetas –porque realmente no nos han dado otra respuesta a sucedo tan paranormal- nos tuvo a mi y a mi hermana, mellizos, gracias al cielo ya que no soportaría a alguien igual a mi, pero al igual, mi hermana Marine, es lo mejor, no me siento como el único bicho raro del planeta, por lo menos somos dos.
Mi madre, el exacto día en que nos tuvo, mi padre la transformo, porque nuestro nacimiento fue algo... desastroso. Mi madre casi muere dándonos a luz, pero a pesar de ellos nos lo agradecía siempre, si no hubiera sido por ese suceso tan desastroso-milagroso, nuestro padre realmente no la hubiera transformado con una mil excusas. No se de que se queja... parece el ser más feliz de la tierra cuando besa mi madre sin temblar en hacerle daño.
Camine otro poco. Llegando a un frió y alumbrado claro de árboles. Allí estaba recostada contra un árbol, mi hermana. Llevaba su pelo liso caférojizo recogido en un alto moño y me sonrió cuando abrió los ojos verdes remarcados con lápiz negro. Me hizo un ladito en el hueco del árbol y me tendió uno de los audífonos de su música. Lo acepte, por lo menos tendríamos para un buen rato, hasta que uno de nuestros tíos viniera a buscarnos o nos ganara el sueño, sí, tan bien dormíamos, solo unas cuatro a cinco horas diarias. Nuestro lado humano nos la pedía al igual que la comida y los dulces. Teníamos que sustentar nuestro cuerpo más o menos con algo de comida humana al día. Y claro, yo, un poco obsesivo, con una buena barra de chocolate.
Observe el cielo mientras mi hermana levantaba una mano y mostraba una estrella. Orión. Mi nombre. Siempre me pregunte porque me habían puesto aquel nombre, mi madre si fuera colocarse roja lo haría y mascullaba mil cosas antes de decir: "Es una estrella realmente hermosa", y se quedaba callada yo aun esperando una respuesta... más sensata, cosa que nunca he logrado.
Las estrellas, suceso muy extraño en esta parte de Alaska, se ven hermosas en este pequeño claro que ambos hemos tomado desde que nuestros padres o tíos se colocan meloso... y bueno, hasta nuestros abuelos. ¡Ahhh! No recordar.
Bueno, se preguntaran cuantos años tenemos, 128... si, 128 pero no aparentamos más de 16 por alguna razón habíamos dejado de crecer a esta edad, aunque realmente éramos aun muy inmaduros.
-. ¿Cuándo llega Tía Rosalie?- pregunto su hermana suavemente.
-. Creo que mañana en la mañana.- contesto. Tía Rosalie y Tío Emmett se habían ido de... ¿Quinta luna de miel? Sí, parece, a Roma por casi dos semanas.
Nuestro padres estaban siendo agobiados para que se casaran por segunda vez. Pero mi madre se ponía de uñas y dientes hacía nuestra tía cuando le llegaban a insinuar pasar la misma vergüenza de su vida humana al estar vestida de aquella forma tan extravagante para su día de boda. Conclusión: odiaba las ceremonias.
Mi hermana se engrifo cuando sentimos un ruido, miramos hacía un lado y en el segundo tía Alice trataba de pescar a mi hermana que se trataba de subir a un árbol casi a la desesperada. Se me había olvidado decir, que si, mi hermana era la barbie de mi tía y como mi madre, lo odiaba.
-. ¡Baja de allí Marine!- alegó nuestra pequeña tía quien daba saltitos emocionada bajo el árbol- sabes que se me será muy fácil subir allí y bajarte a la fuerza.
-. ¡Me niego rotundamente!- alegó subiendo más arriba.
Yo como mi hermana no teníamos nuestros sentidos tan desarrollados, el olor a la sangre humana solo era el sopor asqueroso se oxido y sal. Nuestras vistas no eran tan desarrollada y nuestro oído no tan fino, pero claro que si escuchábamos los gritos de nuestra madre cuando hacíamos alguna travesura, o cuando le robamos las tarjetas de compra a tía Alice o cuando le rompíamos un taco de algún zapato a tía Rosalie para tratar de atacar a tío Emmett. Bueno, no éramos tan santos como me hago parecer ahora. Pero si teníamos una ventaja, y esa era, una rapidez más desarrollada que todos ellos. Además de eso poseíamos el mismo poder que mi madre, y era el de obstruir el poder de otros, por lo que mi padre se había hecho experto en ver destellos de mentiras en nuestros ojos y tan poco podíamos mentir.
-. ¡Orion ayúdame!- alegó mientras trataba de no matarse mientras tía Alice se colgaba de su pierna.
-. No seas mala- alegaba Alice sonriendo mientras esta trataba de quitársela.
-. O-Ho...
CRACK
Dos golpes al suelo. Mi tía se reía mientras se quitaba las ramitas de su pelo y ropa, y Marine miraba al cielo suplicando un rayo de esperanza. Cuando se levanto de golpe no alcanzo a escapar porque como nuestra buena tía, ya lo sabía y se le colgó al cuello riendo como un pequeño demonio.
-. Por favor- suplico- solo una teñida, te verás hermosa, ¿Si? Y así Jasper podrá sacarte muchas fotos.- musito ilusionada.
La cara de shock de mi hermana me dio mucha risa. Siempre la ocupaban como muñequito si no era a mamá quien tan poco podía negarse a la cara de borreguito a medio morir, era ella.
La mirada furibunda me hizo callar, y seguirlas de regreso a casa. Ambos nos paramos para sentir con nuestros oído, algún ruido "raro" pero todo estaba en silencio por lo que entramos.
Mi apuesto padre tenía entre sus brazos a mi hermosa madre dándole pequeños besos en el cuello mientras esta se reía. Nos miraron en son de disculpa cuando ambos al mismo tiempo le hicimos un ruidito de fingido asco.
Mi padre con sus ya más de doscientos años, era realmente el ser más bipolar del mundo, podía ponerse de pelo y punta si algunos de nosotros tres nos poníamos tan solo en un mínimo peligro, léase subirnos a un árbol. Y que decir... era aun más obsesivos con Marine. Y podía ser el ser más pacifico un segundo después. A veces daba miedo.
-. ¿Dónde habéis estado?- pregunto nuestra madre con una sonrisa mientras mi padre le daba un beso en el cuello y sonreía malévolo.
-. Lejos de vuestra... nube de amor- señalo su hermana aprisionada en un abrazo de Alice, mientras esta la a poco menos que arrastraba escalera arriba.
-. ¿Alice que le vas a ser?- pregunto su padre viendo como Marine se sujetaba un poco de la baranda de la escalera para no subir con uñas incrustada en la lujosa madera de caoba.
-. Papá- gimoteo colocando cara de Emmett cuando se enojaba con tía Rosalie, o sea carita a medio morir.
-. Te prometo Edward que se vera hermosa. Le pondré mucha cintas y colorete y será una muñequita de porcelana- mi hermana estaba lívida mirando horrorizada la cara de mi padre que sonreía bobo cada vez más- le sacara muchas fotos te lo prometo
-. Esta bien- sonrió.
-. ¡Mamá!- grito viendo que nuestro padre poco iba a hacer para ayudarle.
-. ¿Ella o tú, Bella?- pregunto como un verdadero diablillo, mi madre se quedo con la palabra en la boca y sonrió a su hija
-. Lo siento, Marine
-. Jajaja- sonrisa media macabra de parte de tía Alice, quien un poco más de fuerza se llevó a Marine, gimiendo y alegando maltrato familiar.
-. Y tu... – se le crisparon los pelitos cuando escucho a su padre a su lado. Dio un salto cuando lo llevo a una esquina donde estaba el piano de cola- te tocan clases...
-. No se para que me enseñas, llevas más de 50 años y no avanzo nada.- alegó enojado sentándose frente a las teclas. Su madre le miro desde un lado.
-. Tenemos toda la eternidad para aprenderte una canción completa- sonrió de lado y bufe.
Esta es mi familia, este soy yo, Orion Edward Cullen. Lamentablemente no todo puede ser color de rosas. En especial... cuando éramos seres únicos.
Mi primer Fic De Crepúsculo, espero que les haya interesado. Dejad review para ver si lo continuo, tengo varias ideas. La base de enemigos son los Vulturis que quieren a los mellizos para investigarlos, y bueno eso es como la base.
Edward es hiper-sobreprotector con sus hijos, en especial con su hija. Y Bella hará cualquier cosa por su familia, cualquier cosa...
.:PADDY:.
