Note que hay muy pocos escritos del tipo "Friendship" en este fandom, y he decidido cambiar eso. Tras leer un muy recomendable escrito de OP, he decidido crear una serie de drabbles/one-shots basados en la amistad entre los miembros de nuestro loco gremio favorito. :D
Título: Zafiro
Personajes: Erza y Wendy (Las adoro *.*)
Rating: K
Advertencia: Contiene spoilers del OVA "Fairy Hills". Así es, ese especial no fue puro ecchi, habia una historia dando vueltas por ahi tambien.
Disclaimer: No, Fairy Tail no me pertence, ¿ok?
Sientanse libres de sugerir cualquier pareja de magos que les guste para el próximo escrito en sus reviews. Seran tomadas en cuenta, no se preocupen.
La joven de cabello azulino apuró el paso. Aunque aún no se sabía todas las calles de Magnolia, ya comenzaba a manejarse con normalidad en la ciudad, y por lo menos tenía una idea del lugar donde se encontraba su destino. Al doblar a la derecha en la siguiente esquina, finalmente encontró el lugar al que quería llegar, Fairy Hills.
—¡Erza-san! —saludó Wendy al acercarse a la maga de cabellera escarlata.
—Hola Wendy —devolvió ella el saludo con una cálida sonrisa.
—Lucy-san me comentó que querías verme —informó la pequeña dragon slayer— Creí que habías partido en una misión ayer...
—La completé hoy por la mañana —comentó Erza casualmente, volviéndose hacia la casa que todas compartían.
Ambas magas entraron a la residencia y comenzaron a caminar juntas. Erza relataba su última misión en solitario, la cual incluía varios detalles sangrientos y terroríficos que Wendy estaba segura volverían a ella en forma de pesadillas por las noches. A pesar de ello, repuso una sonrisa y le aseguró que le fascinaba la historia.
Erza sonrió complacida, y estuvo a punto de contar otra historia sobre una misión suya cuando se dio cuenta que se encontraban ya en su habitación.
Ingresaron ambas a pedido de la maga guerrera. Wendy no recordaba haber entrado a la habitación de Erza antes. O a las habitaciones, mejor dicho, pues consistía en un largo pasillo que conectaba cinco recamaras, que parecía un desfile de armaduras y disfraces de todo tipo, color y tamaño. Uno en particular llamó su atención... ¿para qué necesitará Erza un disfraz de cisne?
—Em, Erza-san...
—Oh, ese fue un regalo de cumpleaños, de parte de Natsu.
—Ya veo...
—Puedes quedartelo si quieres.
Wendy la miró perpleja, luego de regreso al bizarro traje, y de regreso a la maga de Fairy Tail.
—No gracias —se negó sin duda alguna.
—Es comprensible.
Erza se encontraba buscando algo en un escritorio. Wendy aprovechó para recorrer un poco más la recamara, intrigada acerca de los diferentes objetos que la mujer poseía. Eventualmente, Erza encontró lo que estaba buscando.
—Wendy, ven — la llamó la pelirroja.
La joven se acercó a su amiga mayor, preguntándose ahora el motivo por el que se encontraba allí. Wendy vio entonces el objeto que Erza había hallado y ahora sostenía con triunfo en su mano derecha. Era una brillante piedra preciosa, un zafiro para ser más exactos, color azul intenso, y brillaba como si hubiese sido encendido por el contacto humano.
—Es hermosa —comentó Wendy, fascinada.
—Sí que lo es. Y es tuya —declaró Erza, tendiéndole la pequeña roca a la menor.
—¡¿Qu... qué?
—Hilda-oba-san me dejó sus joyas antes de morir, pero no considero justo que sólo yo las conserve —se explicó la pelirroja con una suave sonrisa— Es por ello que todas las habitantes de Fairy Hills merecen tener una de estas joyas. Y eso incluye a nuestra más reciente inquilina.
El rostro de la dragon slayer se iluminó lentamente con cada palabra que salía de la boca de Titania. Extendió su mano para hacerle entrega del zafiro, pero en vez de eso lo que recibió fue un inesperado abrazo por parte de la joven Marvell, que debido a su corta estatura sólo consiguió atrapar entre sus brazos la zona desde la delgado barriga de Erza hacia abajo.
—Gracias, Erza-san —musitó Wendy, su voz feliz pero al mismo tiempo amenazando con quebrarse en cualquier momento— Gracias a todos por hacerme sentir tan... tan cálida... tan bienvenida...
—Wendy... tú siempre serás bienvenida en la familia de Fairy Tail —susurró la maga, acariciando los cabellos azules de Wendy maternalmente.
