Hola a todos, esta es una historia ambientada con música.

Ni Zootopia ni sus personajes me pertenecen.

Canción: Stand by me - Ben E. King

Aunque pueden usar el cover que mas les guste, uno que me agrada mucho es el de Imagine Dragons.


Stand by me

Era una noche de otoño, fría, el reflejo azul de la Luna iluminaba las calles de la metrópolis, el viento mecía incesantemente las copas de los árboles, los cuales perdían poco a poco sus hojas cobrizas, cubriendo temporalmente el suelo, emitiendo el su característico sonido cada vez que eran pisoteadas por los caminantes nocturnos que buscaban refugio de aquella ventisca.

When the night has come
And the land is dark
And the moon is the only light we'll see

Todos excepto un zorro de pelaje naranja que deambulaba por las calles sin interés o preocupación por resguardarse del frio, los animales pasaban rodeándolo, era como una roca saliente en el cauce de un rio, todos se movían tan rápido y él solo seguía su andar sin importarle los demás. Estaba distraído, no prestaba atención a quienes lo insultaban por estorbar en su camino, pero él continuaba, su mente se encontraba en la tarde de aquel día, aquella tarde que paso en compañía de su amiga coneja, si aún la seguía considerando su amiga.

No I won't be afraid
Oh, I won't be afraid
Just as long as you stand, stand by me

− ¡Hola Nick! − Se escuchó la alegre y animada voz de Judy mientras bajaba de su pequeño automóvil en el cual transitaba para repartir multas, pues aun después de dos semanas de haber resuelto el caso de los aulladores, el jefe Bogo seguía asignándole los parquímetros para trabajar, ella no estaba del todo conforme, pero trabajo era trabajo.

El zorro, que se encontraba sentado en medio de una banca, con los brazos estirados pasándolos por detrás del respaldo y dejando caer su cabeza hacia atrás, alzó la vista para encontrarse con su amiga quien caminaba muy vivaz mientras llevaba su mano en alto, saludándolo.

− Hola zanahorias − Dijo levantándose de su asiento con su típica sonrisa – Es decir… − Se corrigió para hacer una ligera reverencia – Buenas tardes oficial Hopps – Hablo haciendo énfasis en sus palabras con un pequeño toque de sarcasmo.

− No me digas así… − Dijo mientras se detenía para estar frente a su amigo vulpino – Ahora no estoy en horario de servicio.

− De acuerdo, entonces… ¿Cómo has estado orejas? – Respondió burlonamente.

− ¡OYE…! Tampoco quieras pasarte de listo – Señaló con su dedo mientras la dedicaba una mirada de enojo, aunque sabía que él estaba jugando.

− Ok…– Dijo rodando los ojos y dejando caer sus hombros – Además me la debes llegaste tarde

− ¡Ay! Lo siento Nick, ha sido un día de locos – Trato de sonar cansada, aunque tratándose de una coneja siempre tenía energías para todo.

− Descuida… − Trato de no darle importancia − ¿Y…? ¿A dónde quieres ir?

− No lo sé, tu guíame – Dicho esto Nick comenzó a caminar seguida por Judy, parecía que sería una tarde agradable.

So darling, darling
Stand by me, oh stand by me
Oh stand, stand by me
Stand by me

Durante los últimos días Nick y Judy salían a comer en el descanso de la oficial, como designación y además conocedor de la urbe, Nick se encargaba de escoger los lugares en donde se deleitarían con sus platillos, aunque había días en los que la Judy escogía, ya sea porque lo vio mientras patrullaba o por recomendación de su regordete amigo Garraza.

En este día, Nick había seleccionado un restaurant vegetariano, bueno, siempre escogía uno que solo sirviese comida para su compañera grisácea. Ubicado en el centro de la Comarca de la Sabana, el restaurant "Green salad", era un lugar sencillo y con comensales normales, para el tipo de comida que sirven, por lo que la presencia de cierto animal de pelaje naranja llamaba la atención de todos los presentes.

− ... y desde entonces mis padres han estado preguntando una y otra vez ¿Qué cuando iré? ¿Qué si pueden venir a visitarme? – Decía sosteniendo en una de sus patas un tenedor, con el cual comía sus vegetales al vapor – Y siendo honesta creo que no me sorprendería si un día me los llego a encontrar.

− Enserio te extrañan – Esbozo una sonrisa, mientras mezclaba con su tenedor los frutos que le habían traído, era lo único que podía pedir, pues los vegetales no eran su platillo favorito.

− Y que lo digas, mamá siempre dice que me preparará mi comida favorita cuando vaya.

− Ten cuidado, quizás no quieren que te vuelvas a ir – Dijo señalándola con su cubierto. Judy solo soltó una leve carcajada.

− Si, tal vez tengas razón.

− ¿Tal vez? – Comentó fingiendo asombro y haberse ofendido por las palabas que le dijo su acompañante – Sabes que siempre tengo razón, torpe coneja – Ahora su tono cambio a uno con el que se engrandecía – Sin mí no hubieras resuelto el caso de los aulladores, sin mí no seguirías en el departamento de policía, sin mí no estarías disfrutando de esta deliciosa comida, sin mi… − Pero en ese momento Judy lo detuvo.

− Ok… − La coneja solo rodó los ojos, sabía que ha Nick le gustaba fastidiarla, y hacerle creer que él era mejor – Entonces dígame zorro astuto, ¿Cómo fue que se vio envuelto en el importante caso sobre los aulladores? – Haciendo énfasis en las últimas cinco palabras y arqueando una ceja, Judy espero por alguna respuesta, pero su amigo se había quedado callado por un instante.

− Mmm… coneja astuta.

− Torpe zorro – Judy solo sonrió ante su victoria, para luego volver a deleitarse con su comida – ¡Por dios Nick! Esto esta delicioso, dime ¿Cómo te enteraste de este lugar?

− Bueno, debo de admitir que no fue fácil, pero Flash sabe más de restaurantes que cualquier otro mamífero.

− Vaya… Creí que conocías a todo mundo – Los papeles se habían invertido, ahora Judy molestaba con sarcasmo al zorro.

− Cierto, pero necesitaba consejo de un animal herbívoro – La plática continuaba hasta que ambos animales habían terminado su comida, por lo que pagaron cuentas por separado, aunque Nick tuvo que pedir prestado un poco, pero él sabía que podía haber pagado lo de él y lo de ella sin ningún problema, pues su vida de estafador continuaba. ¿Por qué lo hizo? No quería que Judy se enterara de que aún seguía engañando a la gente.

If the sky that we look upon
Should tumble and fall
Or the mountain should crumble to the sea

− Entonces ¿Fue un día pesado? – Preguntó Nick, mientras caminaba a lado de Judy.

− Si, ya sabes siempre hay quejas con los parquímetros – Respondió la coneja sin muchos ánimos, ya estaba cansada de repartir multas a lo largo de la semana.

− ¿Y no has hablado que el Búfalo… se me olvido su nombre, para que te cambie de puesto?

− Ya lo intenté, pero… − Su voz sonaba cada vez más ahogada, pues los múltiples intentos de hablar con su jefe terminaban en negativas por su parte – Dice estar ocupado y que todos los casos están cubiertos.

− ¿Y por qué no le pides que te asigne a un equipo? Así podrías hacer algo más que repartir multas.

− Todos están completos, además… − Se detuvo un instante, por lo que su amigo también lo hizo quedándose con duda por su repentina acción – Por cierto, Nick ¿Ya encontraste un empleo decente? – La pregunta lo había tomado por sorpresa, con los ojos abiertos como platos, pensó rápido en una excusa creíble.

− Bueno… He estado buscando, pero por ser un zorro no muchos me tienen confianza, si no es que todos – Respondió lo más natural que pudo, pero Judy lo veía con el ceño ligeramente fruncido.

− Nick… Por favor no me mientas – Le contestó un poco triste – Sé que no lo has intentado, y que sigues estafando a la gente − El zorro solo se quedó mudo por un segundo.

− ¿Qué, ahora me espías? – Respondió en tono juguetón, pues quería que su amiga coneja no siguiera cuestionándolo.

− Esto es serio, podrías meterte en problemas... – Pero el zorro la interrumpió, sonando tranquilo.

− No te preocupes, no me pasara nada, de hecho, yo… − Judy, al igual que él, comenzó a hablar un poco molesta.

− Nick, tarde o temprano te van a estar buscando y no podré ayudarte.

− Tranquila zanahorias – Hablaba sereno, buscaba como dar por terminada esa conversación – Ellos no me atraparán, para eso…

− Nicholas Wilde, estoy hablando enserio – Judy se paró frente a él, detenindo su caminar, ahora su voz sonaba más molesta – No quisiera ser yo quien te ponga bajo arresto.

− ¿Qué? ¿Tú? ¿Una reparte-multas? – Nick comenzaba poco a poco a molestarse, pues lo comentarios de su amiga no eran para nada sutiles.

− Al menos tengo un trabajo decente – Ese comentario de su amigo la había hecho enojar, y mucho, pues empezó a levantar más y más la voz − ¡Y no soy un inútil vagabundo que se la pasa robando a la gente inocente del lugar! – No había medido sus palabras, pues la expresión de Nick mostraba que no estaba feliz. Al ver su cara, y darse cuenta de lo que había dicho, se tapó la boca como queriendo no haber dicho eso.

− Así que ¿Soy un inútil vagabundo? hee… − Nick al ver el silencio de la coneja, paso por un lado y siguió su camino.

− Nick, no… Por favor, espera − Salió tras él para tratar de disculparse – No quise decir eso, yo…

− Pero lo hiciste – La coneja sabía que él tenía razón, lo había dicho, lo había herido − ¿Eso es lo que piensas de mí?

− Eso no es cierto – Judy había bajado sus orejas, estaba triste y buscaba remediarlo – Yo solo quería que te unas al departamento de policías y así…

− ¿¡Qué!? ¿¡Trabajar juntos!? – Nick la interrumpió, iba a dar por terminada la conversación – Será mejor que busques a alguien que sea competente para ser tu compañero, y no a un simple ladrón callejero – Judy se detuvo, las palabras de su amigo eran hirientes, viéndolo alejarse sabía que había vuelto a meter la pata, y en grande. Sus ojos comenzaron a cristalizarse, y una lagrima comenzó a descender por su mejilla, humedeciendo su pelaje gris, pues su amigo, su único amigo se había ido.

I won't cry, I won't cry

No, I won't shed a tear

Just as long as you stand, stand by me

Judy lloraba en su pequeño departamento, estaba arrepentida por cómo le había dicho al zorro que le había apoyado en el pasado, y eso era lo que más le dolía, pues no quería perderlo. Ella había intentado llamarlo, le había escrito mensaje, incluso mensajes de voz, en los que se disculpaba y decía ser una tonta por haberlo insultado, por ser una torpe coneja insensible que no comprende a los zorros.

− Nick… No espero que me respondas – Era el quinceavo mensaje de voz que le envía, llorando, pues antes le había enviado unos treinta en los que solo se disculpaba – Mucho menos que me perdones… lamento haberte llamado de esa manera… he sido una terrible amiga contigo – Su mensaje se interrumpía por los hipidos que hacía – Siempre has tenido razón… Siempre tienes razón Nick… Solo soy una torpe coneja – Tras decir esto, envió el mensaje y se tiró en su cama boca abajo.

Tras unos segundos de estar llorando, golpearon a su puerta, haciendo que se levante la cabeza.

− ¿Quién es? – Trató de sonar calmada, pero nadie respondió, entonces volvieron a tocar su puerta, no tuvo otra opción más que levantarse y atender el llamado – Ya voy – Mientras caminaba a la puerta, se limpió las lágrimas, pero su pelaje había quedado empapado, y nuevamente volvieron a llamarla a la puerta, pensando que podía ser alguno de los vecinos que iba a quejarse del posible ruido que hacía, trató de disculparse – Disculpe si lo moleste… − Dijo mientras abría la puerta – Es solo que… − Sus ojos veían una camisa verde hawaiana, poco a poco levanto la mirada para ver a un zorro que tenía dibujada una media sonrisa.

Siempre has tenido razón… Siempre tienes razón Nick… Solo soy una torpe coneja – Reprodujo el mensaje, el celular ubicado en la pata levantada del vulpino. Judy aún no lo creía.

– Zanahorias, vas a agotar la memoria de mi teléfono – Habló Nick en aquel tono con el que le decía que ya estuviera tranquila.

– Nick… – Judy comenzó a llorar, y sin pensarlo abrazó a Nick por la cintura, pues era a donde sus brazos llegaban – Lo lamento tanto, yo…

– Descuida zanahorias – Interrumpió su discurso, pues ya había escuchado suficiente a través de su teléfono – No pasa nada – Decía tratando de calmarla y correspondiendo el abrazo – No seas tan sentimental – Poco a poco comenzó a llevarla a dentro de su departamento.

– Nick… enserio… discúlpame… yo… – Comenzaba a sonar más tranquila.

– Judy, no hay nada que disculpar – El zorro apartó levemente a su amiga para poder mirarla a los ojos – Aunque me duele admitirlo, tú tienes razón.

– No es cierto – Trataba de enmendar sus palabras – No pienso eso de ti, de hecho…

– Tal vez tu no lo pienses, pero los demás animales si lo hacen – Judy solo escuchaba las palabras de su amigo – Por eso decidí que buscaré un trabajo – La coneja volvió a unir el abrazo, ahora más fuerte, sorprendiendo al zorro.

– ¿¡Enserio!? – Su voz sonaba emocionada.

– Si… – Decía mientras volvía a separar un poco el abrazo – Pero dame un poco de tiempo, no es fácil siendo un zorro.

– Si… toma todo el tiempo que quieras… es más… – La animada coneja fue interrumpida por una voz proveniente del cuarto de al lado.

– ¡Ya cállense! ¡Dejen dormir a los demás animales!

– ¿¡Qué no escuchaste su conversación!? – Le respondió otra voz proveniente del mismo cuarto – ¡Él la esta perdonando por haberlo ofendido!

– ¡Ya cállate!

– ¡Tu cállate!

– ¡Tu cállate! – Nick y Judy solo escuchaban anonadados el pequeño lio que tenían sus dos vecinos ruidosos, pero una vez que se callaron volvieron a fundir su abrazo de reconciliación – Y bien… ¿Qué esperas para besarla? – A este comentario solo abrieron grande los ojos y un leve rubor se presentó en las mejillas de ambos.

And darling, darling

Stand by me, oh stand by me

Oh stand now, stand by me

Stand by me

Era de mañana, el Sol parecía que estaría presente todo el día, ninguna nube tenía la intención de hacer presencia. Judy, que después de haber arreglado las cosas con Nick la noche anterior, había vuelto a su rutina de trabajo es misma mañana, mientras tanto, el zorro, caminaba tranquilamente, pensando en que debía cumplir con lo que le dijo a Judy, que dejaría aquel camino de estafador, que sería un nuevo Wilde.

– Bien… Va por ti Judy – Se dijo así mismo mientras veía la entrada del lugar, una puerta de cristal grande en la que están inscrito las palabras "Departamento de Policías de Zootopia".

So darling, darling

Stand by me, oh stand by me

Oh stand now, stand by me, stand by me

Whenever you're in trouble won't you stand by me

Oh stand by me, won't you stand now, oh, stand

Stand by me


Perdón por las molestias que les cause a algunos, hubo un error al subir el archivo. Espero se haya resuelto.

Ojala les haya gustado, seguiré escribiendo, pero no muy continuamente, debo asistir a la escuela, ya si me presionan tal vez les resulte y actualice.

Cualquier canción que quieran que sea ambientada, es bienvenida.

Saludos y lindo día.

Se aceptan cualquier comentario, positivo y negativo.

Errores ortográficos que vean, bueno me equivoque.