Mayura solo corría por las calles buscando a Loki desesperada, no podía creer las palabras de Yamino, el no podía irse así, sin siquiera despedirse, sabía que era a veces algo molesta, pero no creía que fuera una razón suficiente para irse así, si lo encontraba le pediría disculpas por las veces que actuó como una tonta, le prometería cambiar si con eso él se quedaba, pero cada minuto más que pasaba, las esperanzas se iban perdiendo, ya no le quedaban sitios donde buscar.

Por otro lado Loki la veía escondido a unos metros de ella, desde que ella rechazo su propuesta de concederle un deseo como dios, había caminado detrás de ella a todos los sitios a los que iba, viendo como seguía buscándolo desesperada, la miraba con mucha tristeza, se sentía culpable de verla así pero que podía hacer él? Lucho mucho por poder regresar al mundo de los dioses y por fin tenía esa oportunidad de regreso, ese no era su lugar, lo sabía bien, sin embargo dudaba de su regreso.

Mayura ya estaba cansada, sus pasos la llevaron nuevamente a la agencia, solo se quedo allí detrás de la reja viéndola con tristeza, empezaba a anochecer y la oscuridad de la casa solo le indicaba que ni siquiera Yamino se encontraba allí, entonces un viento frio soplo haciéndola estremecer… fue en ese momento que por fin lo entendió…. Loki se había marchado y ella estaba sola de nuevo, sola una vez más.

Loki la veía desde la calle siguiente, sosteniendo con fuerza la flor de cristal que había hecho Verdandi a su pedido, el se la había ofrecido a Mayura, le ofreció la oportunidad de olvidar, aun así ella la había rechazado, no quería olvidar, quería seguirlo buscando y el no era capaz de obligarla a algo que él deseaba, sabía bien lo egoísta que era quitarle sus recuerdos, ella le había demostrado que no quería olvidarlo y el respetaría eso, solo dejo caer la pieza al suelo mientras veía como se hacía pedazos

-lo siento…. Mayura….- susurro viéndola por última vez con una tristeza que nunca creyó que podría experimentar, cerro sus ojos y desapareció de la tierra de los humanos antes de que pudiera cambiar de opinión, sabía que si veía sus ojos no dudaría en quedarse

-Loki!- Mayura se giro emocionada con una gran sonrisa al haber escuchado la voz de su querido Loki, solo para encontrar que en ese lugar no había nada, su sonrisa solo se volvió triste al ver que era una mala jugada de su mente, sintió las lagrimas correr por sus mejillas, sus piernas debilitarse mientras caía de rodillas, el dolor en su corazón y el frio de la soledad que de nuevo tocaba su puerta pidiéndole entrar

Los días pasaban lentamente, le parecía que eran aun más largos de lo normal y de alguna forma más oscuros, Mayura nunca imagino de qué forma cambiaria su vida con la partida de Loki, nunca pensó que él era tan importante para ella, se sentía sola, solo quería hablar con alguien, tratar de desahogarse pero no había nadie que la escuchara, Narugami se había marchado también, no regreso mas a la escuela ni tampoco a sus trabajos, Freyr o Kaito como ella lo conocía también había desaparecido y las demás personas de la escuela solo la veían como alguien extraña, solo como la tonta aficionada a los misterios, no se atrevía a hablar con nadie, ni siquiera con Kotaro aunque él se mostraba preocupado por ella, aun así Mayura tenía miedo de que el la tratara como una tonta infantil y llorona.

Pasaba poco tiempo en casa, solo iba a dormir ya que estaba cansada de que su padre todo el día solo repitiera lo bueno que era que Loki se hubiera marchado y que esperaba que con eso dejara ya esa tontería con los misterios, no soportaba eso así que solo salía de la escuela sin rumbo, aunque de una u otra forma sus pasos siempre la llevaban al mismo lugar, la Agencia Enjaku, se quedaba de pie detrás de esas rejas viendo la soledad de la casa, cerrando sus ojos y recordando cuando llegaba y Yamino la saludaba con una sonrisa, como corría al despacho y ahí estaba Loki sentado en su silla, como cargaba a Fenrir y jugaba con él, todo eso ya solo eran recuerdos; cuando ya se sentía suficientemente mal de estar allí corría desesperada, corría al cementerio, nunca pensó que así sería como pasaría las tardes, sentada frente a la tumba de su madre mientras le contaba a la lapida fría de piedra su dolor, como si ella pudiera escucharla, ahora ya era una rutina.

Mientras tanto en el mundo de los dioses, la situación no era mejor, Loki se encontraba en aquel lugar que era su casa, ni siquiera había ido a enfrentar a Odín luego de lo de Hel, es como si todo hubiera carecido de sentido, sus hijos se preocupaban por él, le habían pedido que les dejara conservar la forma que usaban en la tierra de los humanos para poder estar con él y claro que había aceptado, pero aun faltaba algo, todos los días a la misma hora se sentaba mirando la puerta, esperando a que esta se abriera de repente y que Mayura llegara saltando con una sonrisa preguntando si había algún caso, lo esperaba aunque sabía que eso no volvería a ocurrir, aun así cerraba sus ojos y susurraba que no fuera tan escandalosa, aun como si estuviera hablando con ella, la extrañaba, el aun no podía creerlo, pero tanto silencio lo estaba volviendo loco, aun así sabía que no podía vivir en el pasado y ahora Mayura solo era eso, el pasado.

Ahora cinco años han pasado desde aquel día en el cual Loki decidió marcharse, pero aun así la vida de Mayura no había cambiado para nada desde ese día, cinco años y aun así no había podido superarlo, estaba más sola que nunca, ni la universidad, ni el trabajo podían llenar ese vacío, todos los días eran iguales, la universidad, luego su trabajo de medio tiempo, luego la vieja mansión descuida y olvidada en el tiempo que empezaba a caerse poco a poco a pedazos, luego el cementerio y en la noche de regreso a la casa. Había cambiado de una forma radical, no hablaba mucho con nadie, ni siquiera con su padre, era seria y reservada, muy responsable y un éxito completo en todo lo que hacía, aun así siempre la rodeaba la tristeza, el vacio en sus ojos y la soledad no se apartaban de ella, el mismo Kotaro incluso le reclamaba que su cambio había sido muy radical solo porque un niño pequeño decidía marcharse, pero él no entendía que no era solo un niño pequeño, era su amigo, el único que aun así la soportaba, a pesar de todos sus defectos, cuando estaba con Loki no se sentía sola y ahora que no estaba, se sentía más sola que nunca.

-por favor, acompáñame te aseguro que te divertirás y así al menos yo no me sentiré tan solo ni me aburriré en esas reuniones de negocios- Kotaro intentaba convencer a Mayura de que lo acompañara a una reunión formal de compañías para consolidar algunos negocios y de esa forma que Mayura se distrajera un poco, pero era difícil convencerla

-lo siento Kotaro, tengo que ir a un sitio más tarde- suspiro cansada de sus peticiones, era agradable que él se preocupara por ella, pero no quería su lastima

-todos los días dices lo mismo y desapareces luego del trabajo, te he visto parada frente a esa mansión varias veces a la misma hora, no es algo sano Mayura-

-hoy en día que lo es? Además, no le hago daño a nadie, no le veo el problema- susurro de forma seria deteniéndose, era extraño como su propio cuerpo la traicionaba, sin saber cómo sus pies la llevaron de nuevo a ese lugar, ahí estaba a una calle de la agencia de detectives

-genial, no sé cómo llegamos aquí, bueno ya que viniste ahora si me puedes acompañar a mi reunión, te hará bien salir y cambiar de ambiente, además de que a tu padre no le molestara, el estará de acuerdo en que es lo mejor para ti-

-Kotaro, ya te dije que….- Mayura se quedo estática de repente, no sabía si su mente la estaba traicionando como ya muchas veces lo había hecho pero juraba que acababa de ver a Loki asomado por una de las ventanas de la mansión, sabía que lo más probable es que fuera producto de imaginación, pero y si no lo era?...

Sin pensarlo dos veces si quiera corrió lo más rápido que pudo hacia la mansión, tenía que descubrir si Loki había regresado o solo era una ilusión de las ya muy frecuentes que tenia, iba tan ilusionada por la posibilidad de descubrir si era verdad que no le importo nada y mucho menos se fijo en nada, tanto así que al cruzar la calle que la separaba de la mansión no reparo en el carro que venía normalmente por ahí, Kotaro lo vio y le grito que se detuviera, pero era muy tarde, Mayura solo corría sin despegar la vista de esa ventana y luego todo sucedió muy rápido, el grito de Kotaro, el auto que sonaba la bocina ya a pocos centímetros sin haber podido reaccionar antes y luego un fuerte golpe, Mayura solo sintió el dolor del choque, luego solo su cuerpo liviano flotando por el aire y siendo arrojado a unos metros de distancia por el impacto, sentía tibio, algo muy tibio en su cuerpo, salía de todas partes, pero aun cuando tenía curiosidad por ver que era ese liquido que brotaba de ella, en especial de su cabeza, era incapaz de moverse, dolía, dolía mucho y algunas lagrimas salieron de sus ojos por el dolor que sentía, Kotaro corrió rápidamente aterrado mientras las personas empezaban a reunirse alrededor, Mayura escuchaba como el repetía su nombre aterrado y le pedía que resistiera, ella solo pudo sonreír

-Me… me duele ….Kotaro- susurro sin dejar de sonreír

-resiste, ya viene la ayuda, por favor aguanta…. Te prometo que el dolor se irá pronto, solo resiste- La miraba aterrado, se veía muy mal, Mayura estaba en el suelo sobre un charco de sangre con varias heridas y una horrible en la cabeza que no dejaba de sangrar, cada vez se veía mas pálida y débil -por qué hiciste eso tonta?-

-vi…. Vi a Loki… lo vi Kotaro…. Loki….- otra lagrima mas salió mientras cerraba sus ojos sin dejar de sonreír, aun podía escuchar la voz de Kotaro gritándole que aguantara y que abriera los ojos, que tenía que ser fuerte, sentía su mano tomando la suya con desesperación, pero aunque quisiera no podía abrir los ojos, no podía sostener la mano de Kotaro, cada vez se sentía más débil y escuchaba los gritos más lejanos, sentía que de alguna forma se iba y no quería luchar contra ello, solo quería dejarse ir…. después de eso lo único que paso por su mente fueron las imágenes de aquellos que se fueron hace ya tanto tiempo, incluyendo su madre y al final Loki, con esa última imagen todo se desvaneció en una nube negra, mientras tanto Kotaro aterrado veía como la mano de Mayura caía a un lado inerte y su pecho dejaba de moverse al haber dejado de respirar….

CONTINUARA…..