LA CHARLA.
Comencé a reírme al recordar una de las cosas que me pasó cuando aún era una humana, y una humana de catorce años. Edward se giró en la cama extrañado al verme reír sin ningún motivo en particular.
Aún recuerdo cuando Charlie intentó hacer lo mismo que mi madre, pero mi madre era caso aparte. En ese momento no me hizo ni pizca de gracia, pero ahora me tronchaba de risa. Incluso pensaba en usar algunas cosas que ella me había dicho en ese momento.
-¿De qué te ríes?- Me preguntó mi esposo.
-De un recuerdo, sucedió hace bastante tiempo. ¿Quieres que te lo enseñe?- Le pregunté, tocando su mejilla con mi mano en un intento de imitar a mi hija.
-Sí, claro.
Me esforcé en apartar lo máximo posible mi escudo mental. Quería enseñarle aquel recuerdo tan peculiar sobre mi vida humana, uno de los poco recuerdos que aún mantenía.
FLASH BACK
Entré por la puerta a mi casa, acababa de llegar del instituto y tenía un mal presentimiento para esta tarde. Mi madre estaba haciendo mi comida, lo más seguro es que mi cocina explotase en el intento. Me acerqué a ella y la saludé con un simple ´´hola´´.
Mi madre estaba muy seria, algo que no era muy normal en ella. Normalmente me estaría saltando encima para que le contase todo lo que me había pasado en toda la mañana.
-¿Estás bien, mamá?- Le pregunté al rato.
-Sí, cariño. Lo que pasa es que quiero hablar contigo sobre un tema en particular.
Dejé la cuchara a medio camino de mi boca para mirar fijamente a mi madre.
-Mira hija, estás en una edad en la que las hormonas controlan por completo tu cuerpo. No quisiera que un día de estos me dijeses que estás embarazada.
No estaba segura de si me había puesto muy pálida o muy roja. No esperaba que mi madre me diese esa charla justo ahora.
-Y cuando comienzas tu sexualidad no hay quien la pare, dímelo a mi, cuando empecé con tu padre parecíamos dos conejos en celos. Lo hacíamos por todas partes, mis padres nos pillaron un par de veces. No quiero decirte que te vuelvas una mojigata, solo que lo hagas con cabeza. Siempre condón hija, siempre. Espero que no tengas novio ahora, porque los chicos con tu edad estás obsesionados con el sexo. No sé que siente en el momento, ¿la gloria infinita? No se sabe. Y...
-Mamá, puedes estar tranquila. Nada de lo que has dicho se atribuye a mi.- La interrumpí cuando vi que esto iba para largo.- No me interesa lo que Charlie y tú hicieseis para traerme al mundo.
-Charlie no, Bella. Papá.- Me corrigió.
Comencé a correr hacia las escaleras para subir a mi cuarto cuando mi madre gritó:
-¡ Tienes un regalo en la cama de mi parte!
Cuando entré a mi habitación me encontré con una caja de condones encima de mi cama. ¿De sabores?¿ Qué se pensaba que iba a hacer con ellos?
Mejor no saberlo.
Fin Del Flash Back.
Edward estaba riendo a más no poder.
-Reneé me mataría.- Dijo de repente.
-¿Por qué?
-Porque, desde que tuvimos relaciones, nunca hemos usado protección.
Tenía razón, era una experiencia. ¿Cómo sería hacerlo con protección?
-Tenemos que usar protección en algún momento, solo para experimentar.- Le dije.
Nos quedamos callados un rato. No sabíamos que pensar, bueno, él sabía lo que yo estaba pensando porque no había activado mi escudo. Lo hice al momento.
-¿Sabes? Creo que es hora de que le des la charla a Renesmee.- Le dije.
Él solo me miró como si estuviera loca.
Todos los personajes pertenecen a Meyer. Me aburría y comencé a escribir esta locura, solo espero que os haya gustado. Una curiosidad, ¿hay algún chico en ? Pura curiosidad.
Dejadme vuestro comentarios.
